3.

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Había aparecido alguien y estaba dispuesto a ayudarla.No todo estaba perdido.
El chico en cuestión era bastante alto, no tanto como los extraños hombres que la estaban atacando , pero facilmente debía medir 1,80 metros.
Su pelo se encontraba desordenadamente peinado hacia arriba, sus ojos grises la miraban con desconcierto y admiración.¿Acaso usaba lentillas? Ese gris mercurio era lo más hermoso que había visto.
Él le dedicó una sonrisa tranquilizadora y antes de que pudiese darse cuenta él ya había noqueado a uno de ellos y empujado a otro. Cuando hicieron ademán de volver a atacar él los miró y ellos salieron corriendo.
Ella le dió su segunda mirada de desconcierto en la noche.

Aquí gente que me lee les dejo el tercer capítulo, espero que les guste, perdonen mis faltas en la edición y sobretodo no olviden comentar y votar.
Quiero ver más vida en esta historia. ;)
Bsss su escritora Lynn.

Alas NegrasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora