TRUE and LOVE: La Amante del Diablo 4 (Justin Bieber y Tu)

Capitulo 33.-

Mis manos estaban entumecidas y dolían de apretarlas, mis uñas se clavaban en mis palmas mientras traba de no llorar mas, no al menos hasta estar sola. Era mucho, yo no podía soportarlo, sentía el nudo en mi garganta crecer mientras un dolor me traspasaba... rompiéndome, rompiendo todo lo bueno que creía que había tenido en mi infancia. La imagen de mi mama había tenido un duro golpe después de conocer a Will pero ahora lo poco que conocía de ella... se había ido.

Mi cabeza se inclino a la ventana mientras escuchaba a Chris y Jay revisar que nadie nos siguiera. Jay estaba marcando a Justin y yo trate de alejar mi mente de cada palabra que había escuchado en el día, en la maldita semana, quería regresar a Croacia, quería a Justin feliz y conmigo.

-El quiere hablar conmigo.

Yo solo negué sin verlo, realmente no creía poder hablar sin empezar a sollozar y llorar.

-El quiere saber que estas bien.

Yo no lo estaba. Ni siquiera hable ni negué solo cerré los ojos esperando que ellos se movieran rápido para llegar a la casa. Jay comenzó a pelear con Justin en el teléfono pero no me importo. Al menos había salido algo bueno hoy, Justin estaba a salvo de todo, de la CIA y de ese idiota.

Chris me ayudo a bajar mientras Jay revisaba cada detalle en la calle, me sorprendía que no buscara hasta en los botes de basura.

-¿Estarás bien?- Chris abrió la puerta de la casa.

Lo mire un segundo mientras trataba de hablar a través del nudo en mi garganta.

-No lo sé- di un suspiro y talle mis ojos- si mi mama está viva... solo quiero que sufra.

El llevo su mano a mi hombro pero yo me aleje, ahora mismo cualquier muestra de cariño haría que me desmoronara.

-Te das cuenta de que si ella está viva permitió que mataran a su nieta.

-Lo siento mucho ____- Jay entro en la casa cerrándola y asegurándola.

Ya no quise hablar, deje que Jay me guiara de regreso a la otra casa, caminando a través del túnel y después saliendo. La sala estaba llena con todos, algo que yo realmente odie no quería preguntas.

-¿Que paso?- Jake fue el primero en hablar.

Yo deje salir un gran suspiro mientras veía a Justin acercase a mí con el ceño fruncido.

-Yo- todos me veía pero yo solo podía ver a Will, que tan jodida familia teníamos- realmente necesito estar sola y no hablar de esto- mire a Jay y el asintió.

-Sube yo les explicare.

-No hables del trato por Justin- susurre acercándome a él.

Quería decirle también que me dejara hablar con Will a solas pero no podía... no quería decirle quien era su papa. Me gire para caminar a las escaleras pero Justin me siguió. Al llegar arriba lo pare.

-Sola Justin.

-Soy tu esposo- el toco mi brazo.

-De verdad... solo déjame- intente ver a través de las lagrimas- por favor.

El me miro un segundo y se acerco para besar mi frente.

-Te amo. Regresare en un rato, después de hablar con Jay.

Yo ya no quise hablar, abrí la puerta entre y la cerré tras mi espalda, siquiera podía reclamarle sus mentiras... no podía decir nada sin llorar y eso no era tan importante comparado con lo demás. Camine a la cama, quite mis zapatos y después limpie las lagrimas, me metí en la cama y deje que las lagrimas salieran sin callarme. Jamás había pensado ni por un segundo que él seria quien me amenazara, recordé a mi tío antes de morir, él había hablado sobre eso... había dicho que mi papa no era Arturo; pero lo era. Las pruebas con Will lo confirmaban, solo esperaba que mi madre no hubiera tenido a alguien más, porque si lo tenía y era mi papa... no quería saberlo. Pero aun cuando él no fuera mi papa ya no me sentía con la suficiente fuerza, no sabía si podría matarlo ni siquiera podría hacerlo con mi mama si ella estaba ayudándolo, yo si tenía un poco de humanidad no como ellos. Cuando decidí venir aquí había pensado que sería fácil dispararlas pero ahora... ahora ya no sabía que sentía; en un segundo estaba segura de que podría matarlo y al siguiente no, pero yo estaba segura que él no tendría esa duda al tener que matarme.