Una Dulce Tentación [Yaoi/Gay] (Finalizada)

Cap 6: Casualidad

Narrado por escritora

Al día siguiente de lo ocurrido con Akashi, Kuroko decidió salir un poco del hotel ya que no era una persona del todo paciente en cuanto se trataba de estar aislado pero tenia que tener cuidado con el hecho de que en cualquier momento podría encontrarse con aquel emperador absoluto, cosa que tal vez para la expectativa de kuroko era imposible ya que el debería estar demasiado ocupado con su trabajo como para estar pendiente de el, pero no debería subestimarlo del todo ya que cuando Akashi se proponía algo lo lograba aunque hubiese obstáculos en su camino, así que kuroko se puso a pensar que tal vez el pelirrojo heterocromatico no había cambiado del todo.

En cuanto kuroko se dio una ducha y se cambio de ropa, bajo a tomar el desayuno y después de eso salio del hotel, quería ir a ver como había cambiado Japón, y a pasarse por varios lugares a los que le gustaba ir cuando aun vivía ahí.

En cuanto salio del hotel pudo darse cuenta que apenas estaba por salir el sol, así que decidió ir a caminar por un buen rato, su caminata no tenia una dirección el caminaba por donde sus pasos lo llevaban, y estos lo llevaron a donde era su antigua calle en donde creció y vivió, en su anterior casa pudo ver a varios niños en el patio jugando, cosa que le recordó un poco a el en su infancia. Estando ahí pensó pasar por la vieja cancha de baloncesto donde jugaba todas las tardes con su anterior luz Aomine Daiki por el cual tuvo ligeros sentimientos cuando estaban en teiko, los cuales nunca le confeso al moreno por miedo a que este le rechazara.

Antes de llegar a esa cancha y si es que esta todavía existía, pudo ver a lo lejos que su antiguo restaurante favorita seguía en pie con su gran letrero el Maji Burger se lleno de felicidad al saber que por una vez mas tendría la grandiosa sensación de tomar de nuevo su famosa malteada de vainilla, que aunque el ya fuese mayor aun tenia aquel pequeño aspecto de tener gran gusto por los dulces y bebidas sabor vainilla, de adentro en aquel restaurante formándose para esperar su turno, estando en la fila regreso su vista hacia la mesa a un lado de las ventanas en donde anteriormente se sentaba con su luz y ex-compañero de Seirin Kagami Taiga al cual era al que le debía muchas mas explicaciones del por que se fue.

En cuanto lo atendieron salio de aquel lugar muy satisfecho por su compra, a la cual le dio el primer sorbo y la saboreó como lo hacia anteriormente, se dijo mentalmente que nunca dejarían de perder su sabor no importa cuando tiempo pasara. Después siguió su camino hacia su destino la cual pudo ver desde dos calles antes, ahí seguía aquella cancha la que fue testigo de tantos partidos jugados con Daiki y muchas derrotas por parte del peli-celeste en cuanto estuvo a punto de llegar sintió como una balón se detenía justo en sus pies y como un moreno el cual se le hacia conocido estaba detrás del mismo, en cuanto vio quien era no pudo evitar ahogarse con su malteada, al igual que el moreno no pudo evitar poner una cara de sorpresa al ver a su pequeño ángel peli-celeste.

Aomine se quedo parado impresionado por lo que estaba viendo ya que pensaba que tal vez solamente era imaginación, pero solo se quedo observando unos segundos y después abrazo al mas pequeño, el cual se sintió confundido ya que pensaba que estaría enojado con el algo que tal vez Daiki ni lo pensaría, ya que aquel ángel con orbes celestes y cabello de igual color fue su primer amor, cosa que al principio Aomine negaba se daba de golpes en la cabeza de solo pensar que estaba enamorado de un chico.

Aomine soltó a kuroko y le dio una sonrisa cálida solo como el moreno sabia, este le invito a jugar al mas pequeño y este acepto sin refutar

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Pasaron mínimo 3 horas jugando en las cuales kuroko casi siempre perdía pero era obvio ya que el no había practicado ese deporte en años, cuando terminaron de jugar decidieron ir a una tienda a la cual siempre iban cuando estaban en teiko, compraron paletas heladas como solían hacerlo y caminaron por las calles demasiado iluminadas, en cierto momento solo kuroko sintió que Aomine entrelazo su mano con la de el, el pequeño peli-celeste no refuto ante aquella acción ya que desde que estaban en teiko y el es jugador fantasma estaba enamorado de aquel chico con espíritu de un puma, se preguntaba muchas cosas como a que sabrían sus labios, como se sentiría estar tomado con el de la mano y todo tipo de cosas que el de orbes celestes se imaginaba que hacia una pareja de enamorados. Y en ese mismo instante se respondió una de sus tantas preguntas, las manos del mas alto se sentían un poco rasposas por el contacto del balón pero a la vez eran cálidas y emanaban cariño y confianza.

Algo saco a kuroko de sus pensamientos y eso fue que estaba sonando el celular de Daiki el cual soltó la mano de kuroko y contestó la llamada, el moreno se fue a unos cuantos metros para poder hablar mas tranquilamente, en cuanto volvió le comento a kuroko

-Oye Tetsu me tengo que ir surgió algo en la oficina central de policía, me encanto verte de nuevo, espero que vuelva a suceder- dijo entre sonrisas

Después de eso el moreno tomo de la cintura a kuroko el cual se tenso un poco por que estaba a unos segundos de tener otra de las respuestas a su pregunta "como se sentirían sus labios" y ahora lo descubriría Aomine se quedo unos segundos viendo aquellos labios que alguna vez deseo tenerlos como los tenia en ese instante, cuantas veces nos soñó con un momento así con su anterior sombra.

Aomine se apresuro para unir sus labios, empezaron con un beso tierno y acabaron con un beso que demostraba pasión y lo que sentían cada uno por el otro, Aomine cortó el beso por falta de respiración y aunque el quería seguir en esta posición se tenia que ir, a lo cual soltó al pequeño y se despidió de el mientras corría y movía a la mano y le dedicaba una sonrisa cálida al menor el cual respondió de la misma forma lo cual hizo que Aomine se sonrojara ligeramente por aquella acción del peli-celeste (imagen multimedia) . Mientras este solo movía la mano de una lado a otro.

En cuanto Daiki desapareció de su campo visual, el solo se dedico a buscar algún taxi para que lo llevase a casa ya que estaba oscureciendo.

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En cuanto llego a su habitación tomo su celular y vio demasiados mensajes de su editora los cuales decidió ignorar por un rato, solo se tiro un poco cansado en su cama viendo hacia el techo, a la vez que tocaba sus labios con sus dedos recordando aquel beso que le dio el moreno y aquella ultima sonrisa. La cual causo que al menor se le saliera una risilla inocente por aquel recuerdo.

#Ya regrese con nuevo capitulo el negromine tiene una oportunidad para enamorar a nuestro pequeño uke:3 espero que disfruten el capitulo