Capitulo 12

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Regresaron a casa justo antes de que su hija despertara, fingiendo seguir en su rutina habitual, salvo por que en cuando Vivien bajo las escaleras con Martha, vio a sus padres hablando con una mujer

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Regresaron a casa justo antes de que su hija despertara, fingiendo seguir en su rutina habitual, salvo por que en cuando Vivien bajo las escaleras con Martha, vio a sus padres hablando con una mujer.

- Si, es un buen precio, lo tomó _afirma Beatrice, tomando el dinero y contándolo junto a su esposo.

- Buenos días _saluda la pequeña.

- Buenos días, hija, te presento a la señora Midge _presenta mientras carga a su pequeña.

- Buenos días _saluda aun algo somnolienta.

- Que niña más mona, si que te pareces a tu madre _comenta como amabilidad_ Volveré en una hora con el camión, señora Rosellini.

- Esta bien _asiente antes de despedirse.

La familia desayunó tranquilamente, Beatrice peinaba el cabello de su hija hasta que su esposo entró en la habitación, era hora.

- Vivien, tenemos que hablar contigo, mi amor _habla la madre.

- ¿Que pasa? _pregunta inocentemente.

- Bueno... nosotros ya te hemos contado que somos de Europa, ¿recuerdas?

La pequeña asintio.

- Pues... ahora, mi familia desea que vuelva a vivir con ellos, y a papá le ha salido una gran oportunidad de trabajo, pero la habíamos rechazado por que teníamos asuntos aquí en Japón... pero tenemos que irnos, y como comprenderás, debes venir con nosotros _anuncia la mujer, temiendo la reacción de su hija.

- Pero y si Jude viene cuando no estemos, se sentirá muy triste si me voy sin despedirnos _niega comenzando a agitarse, llorando en los brazos de su madre por que temía no volver a ver a su querido hermano.

Más en el fondo ya tenía edad para asimilar aquello, entendió que sus padres estaban hablando con alguien a quien le venderían la casa con todos los muebles, empacaron todo lo demás y esa misma tarde se montaron en el avión que los llevaría fuera del país.

¿Por que no la llevaron a despedirse si sabían que el hermano de ella aun estaba en el horfanato? Porque sabían que la noticia de que Jude no había sido adoptado como le dijo antes de irse, literalmente mataría a la pobre niña. 

Beatrice no soltó la mano de su pequeña en todo el vuelo, limpiaba sus lágrimas con un pañuelo y le dio un beso en la cabeza, sabía que esa separación era dolorosa para ella. 

Siempre fantaseo con volar en un avión, pero lamentablemente no pudo disfrutar del todo la experiencia.

Horas después, se oyó el altavoz. 

- Estamos a punto de aterrizar en nuestro destino, favor de abrochar sus cinturones de seguridad _indica antes de comenzar a decir lo mismo en otro idioma.

- ¿Donde estamos? _pregunta la pequeña mientras su madre abrocha el cinturón.

- En París _responde con dulzura. 

- Mi hermanito me enseñó que París en la capital de Francia _indica con una leve sonrisa.

- Así es _felicita_ Y mira, esa es la Torre Eiffel _indica mientras señala por la ventana.

Bajaron del avión, Beatrice llevo a su hija por un aperitivo mientras su esposo se hacia cargo del papeleo necesario para recoger la gran cantidad de cosas que habían traído de Japón.

Finalmente llegaron junto al camión de la mudanza a su nuevo hogar, el cuál compartirían con sus parientes.

La puerta de la enorme casa se abrió, dejando ver a una elegante mujer.

- Hija mía, no sabes cuanto te he extrañado _saluda con una cálido abrazo.

- Es un gusto volver a verte, mamá... mira, ella es Vivien, mi hija _presenta mientras pone las manos sobre los hombros de la nombrada. 

Mientras la pequeña estaba más confundida de una pluma en un molino de viento, no entendía ni una palabra de aquel idioma que estaban usando.

- ¿Es que no le has enseñado nuestra lengua a esta criatura? _pregunta la mujer, muy asombrada.

- Es una larga historia, mamá... Vivien, ella es mi madre, tu abuela _presenta esta vez en japonés.

- ¿Como se hice "Hola"? _pregunta en el oído de su madre.

Aquella ternura hizo a la mujer adorar de inmediato a la pequeña.

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Dolor en la Sangre [Inazuma Eleven]Where stories live. Discover now