|| DIECISÉIS ||

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ASHTON🍂

Me encontraba en la barra de un bar, eran aproximadamente las 2 de la mañana y mi mente no dejaba de pensar en ella, recordando cada parte de su rostro, pero a la vez el alcohol quería hacerme olvidar su aroma. No sé hasta qué punto llegaré de sentirme así, solo era una simple chica que me beso estando ebria, solo fue un contacto, solo fueron mis sentimientos que alteraron todo y desordenaron más.

Una mujer me abraza por detrás y solo la ignoro hasta que se va, voy el quinto vaso de ron y los ojos me pesan, sé que nadie me espera en casa porque mi madre fue a la casa de mi abuela y mi padre fue de viaje con unos amigos. Desde niño sentí que crecía solo, sentía que mis padres hicieron su vida de lo más normal como si no tuvieran un hijo, como si fuera una carga para ellos, aunque a veces me hacían sentir querido, eso no era suficiente para un niño.

Siempre hice lo que ellos decían, como mi padre diciéndome que mejor cambiara de universidad a la que estoy ahora, solo porque el no pudo hacer eso, y yo solo lo hago por complacerlo, pero en el fondo no me sentía mal, porque a la vez cumplía con mis sueños, como formar parte de una banda, tocar la guitarra y expresar lo que siento con la música, pero a veces hasta eso no era suficiente, no me sentía suficiente, tenía miedo de que un día mis sueños se acabaran, tenía miedo de rendirme.

Y creo que eso fue una de las razones por la cual cuando cumplí la mayoría de edad, salía con chicas, pero sin ningún interés, no me importaba si buscaban algo duradero, yo solo disfrutaba el momento, por dentro me sentía la peor persona, pero por fuera sentía que me hacía fuerte, yo mismo me mentía y tampoco había alguien que me hiciera dar cuenta.

Creo que, en un momento de nuestras vidas, hemos utilizado máscaras, ya sea para ocultar nuestro verdadero rostro por miedo a no ser aceptado por el resto o querer ser como el resto, fingiendo ser alguien que no eres y que jamás serás, sentía que no podía encontrar mi verdadero yo en medio de tantas mascaras que había tenido y sigo teniendo.

No encontraba la razón de mis sueños, de mis metas, del verdadero propósito que tenemos en nuestras vidas.

Salí del bar casi al amanecer y tome un taxi directo a casa, ya en camino mi móvil vibro, era Joe diciendo que hoy tendríamos ensayo y que necesitaba ya la canción que estaba escribiendo. No sé porque se le ocurre escribirme a las 5 de la mañana y recordarme sobre la canción que ni siquiera tenía una idea de lo que quería escribir.

Cuando llegue a casa, deje a un costado mis cosas y subí a mi habitación con la guitarra en el hombro, el silencio se había vuelto mi peor enemigo y por eso solía tocar la guitarra cuando estaba a solas.

Deje la guitarra a un lado y me saque la camiseta para ir hacia mi cama, las sabanas frías mientras veía de reojo aquella libreta en mi mesa de noche, la cogí y la abrí, buscando el dibujo que me había hipnotizado como la primera vez que lo vi.

Me preguntaba por dentro, ¿Qué paso por la cabeza de la persona para poder dibujarme?

Era extraña la sensación, pensar que, entre tanta gente, esa persona te vio y te dibujo, creo que por primera vez en mi vida me sentí afortunado.

Y fue así como una llama se encendió dentro de Ashton, en una vida llena de oscuridad un simple dibujo hizo que creciera la esperanza dentro de él. Sé que el amor un día tocará su puerta, pero que él no sabrá cómo hacer para que permanezca a su lado.

¿Serán las inseguridades o la negación?

PRIMAVERA [1]Where stories live. Discover now