XII.

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Al día siguiente. Gremio de Fairy Tail.

La libertad era algo hermoso.

O por lo menos eso gritaba Natsu tras salir de la celda del consejo al haber sido encarcelado por un día entero.

- Se tendría que haber quedado más tiempo encerrado...- musitó Lucy viendo al dragon slayer correr por todo el gremio mientras gritaba sobre libertad y pájaros-. Yo preocupándome por Erza, y solo era por una formalidad- exclamo dando un suspiro cansador.

A veces el Consejo Mágico podría llevar las leyes a su favor actuando con corrupción. Bueno, nada fuera de lo común por parte de un sistema de poder. De solo pensar cuantos reyes, abogados, funcionarios, ministros, y empresarios corruptos había allá afuera le daba jaqueca a Lucy.

- Por mi esa tomate se hubiera quedado más tiempo en prisión- mencionó Naruto.

¡Fush!

El ex-ninja de la hoja tuvo que inclinar su cabeza hacía un costado esquivando una silla voladora.

A metros de distancia, Erza de pie, se encontraba con sus brazos extendidos mostrando quien había lanzado el objeto.

- ¡Bastarda, ¿acaso quieres pelear?!- retó Naruto doblando las mangas de su chamarra hasta los codos.

- ¡Mocoso ya me tienes cansada!- gritó Erza invocando un mazo enorme en su mano derecha.

La mayoría suspiro nuevamente ante el inicio de una décima pelea el día de hoy entre aquellos.

- (Oh mierda... Aquí vamos de nuevo)- pensó Mirajane saliendo de la barra yendo a detener al par.

- ¡Ah, lo había olvidado!- gritó Natsu deteniéndose en seco-. ¡Erza, me debes una pelea!- mencionó el dragon slayer lanzándose hacía su adversario.

La condición impuesta por Natsu para ayudar a la pelirroja en la misión de Erigor, era una batalla.

- ¡Ahí vooooy!-

¡Swiiiiish!

El cuerpo de Natsu salió catapultado hacia atrás ante un demoledor martillazo chocando contra una de las paredes del gremio. El pelirrosa quedo incrustado entre los ladrillos completamente noqueado.

Las risas de Gray y Elfman resonaron con intensidad en el gremio.

- ¡Eres un tonto, Natsu!-

- ¡Erza es demasiado para ti!-

La pelirroja fijo su atención en el ninja tensando a este.

- ¡Te lo advierto, tomate! ¡Puedo derrotarlos a todos sin ni siquiera mover un dedo!- mencionó Naruto tragando saliva nervioso.

¡Pump!

Apenas las palabras del ninja salieron de su boca, las personas dentro del gremio comenzaron a caer al suelo inconscientes.

- (¡No me jodas! ¡Realmente lo hice!)- pensó Naruto viendo sus manos fascinados-. ¡Soy genial!-

- No fuiste tú...-

El ninja volteó viendo hacía la barra observando a Makarov luchar contra un pequeño cabeceo.

- Él está aqui-

¡Tap!

¡Tap!

Unos pasos captaron la atención de Naruto desviando su mirada hacia la puerta de entrada.

El nuevo invitado llevaba un manto negro, y vendas que cubrían la mayoría de su cuerpo. Su rostro se hallaba cubierto por una máscara de color verde que cubría la mitad inferior de su cara. Su frente era tapada por un pañuelo oscuro con una placa ocultando por completo su apariencia.

Hada con dientes de sable.Where stories live. Discover now