Hasta que comience a arder [EN PAUSA]

Capítulo 11: El último suspiro de Eleanor.

La campanita suena cuando abrimos la puerta y unas pocas personas voltean para ver de quién se trata.

— Por allá —señalo una de las mesas que están cerca de la barra.

Al principio el bar de West era únicamente para mayores de edad porque solo vendían alcohol y algunas nueces, pero con el tiempo fue transformándose en una cafetería y los adolescentes lo convertimos en nuestro lugar de reuniones. Port Belmont no es precisamente el pueblo más grande y carece de diversión, así que es normal encontrar rostros conocidos por aquí.

— Es un lindo lugar —dice Eleanor mirando alrededor.

— Lo es.

Las paredes color terracota están cubiertas con discos de vinilo y las que no, tienen cuadros bastante extravagantes, los cuales hizo una ex novia artista que tuvo West hace algunos años. Las ventanas que van desde el techo hasta el suelo permiten a los que estamos dentro tener una vista de la plaza principal, aunque aquello no sea tan entretenido se ve agradable.

Cuando salgo con mis amigas usualmente nos dividimos; Holly cruza la plaza para ir a la tienda de Sienna a comprarse ropa o accesorios, Brid va a la vuelta, a una tienda donde venden cosas de segunda mano y se dirige a la sección de libros para ver si alguno llama su atención, y yo vengo al bar de West para ver a Blake.

Ah sí, lo que hace que este sea uno de mis lugares favoritos es que Blake trabaja aquí.

Charly, el otro chico que trabaja aquí viene a tomar nuestra orden y aunque me cae bien, verlo me decepciona. Esperaba ver a Blake porque no lo veo desde la fiesta y fue apenas.

Necesito mi dosis diaria de Blake.

En cuanto Charly toma nuestra orden vuelvo a buscar a Blake con la mirada, pero no lo encuentro. Tal vez es su día de descanso aunque no lo creo, él no suele tomar esos días.

— ¿A quién buscas? —me pregunta Eleanor, captando mi atención.

— A nadie.

Aprieta los labios y frunce la nariz, divertida.

— Así no es como no buscas a nadie —dice— Ya dime. ¿A quién buscas? Prometo guardar el secreto.

— No busco a nadie —vuelvo a decir— Solo estoy preocupada.

Estoy mintiendo un 50%. Sí, estoy un poco preocupada pero no es todo lo que tengo en la mente en estos momentos.

— ¿Por?

Le miro con obviedad.

— ¿Porque bloquearon mis recuerdos, quizá?

La sonrisa de Eleanor se borra, mostrándose algo preocupada, pero antes de decir en voz alta lo que cruza por su mente, decide apretar los labios una vez más.

Aquella expresión no se me pasa por alto, pero cuando estoy por decir algo, soy interrumpida.

— ¡Hasta que por fin te encuentro! —Holly se acerca hasta nuestra mesa viéndome con ojos casi furiosos— ¿Hay que sacar turno para verte ahora? —me pregunta sentándose con nosotras.

— Nos vimos ayer en el partido y luego en la fiesta... —contesto divertida.

— Sí y hablamos unos cuantos minutos, los cuales fueron pocos si tenemos en cuenta que estuviste fuera por dos semanas —espeta.

Oh ¿Cómo olvidar la semana que pasé en cama consecuencia de heredar los poderes de una bruja y la siguiente semana que pasé inconsciente por aceptarlos?