Cap 34. 🌜

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Mateo

—¡Me voy!.— grite desde el living para que mi familia me oyera

Pero sabía que eso no iba a pasar.

Cada quien estaba en la suya, y dudaba mucho que notarán, que mi presencia ya no estaría en la casa.

Haci era un día más, en mi casa, con mi familia, que por ahora está más que peleada.

Según me iría a la facultad, pero la realidad es que iba a ranchear con los pibes, no tenía nada que hacer, pero si muchas cosas que pesar.

Sin más que esperar salí de mi casa, con la llaves del auto, en las manos y mi cartera.

Corri hasta la cochera, y adentrarme en esta misma, hasta llegar en mi auto, Ford que ya todos conocen.

Para después, subir al auto, y arrancar con dirección a la casa de Camilo.

Mientras conducía, revisaba cada uno de mis correos, y mensajes de mi celular.

Pero uno de los correos en especial llamo mi atención…

Para: Mateo Palacios Corazzina

De: Junta de directores, Hospital Sheipend de ginecología

Buen día señor Palacios, mediante este correo se le declara y avisa, sobre el redimiendo de la Doctora Pia Palacios, quien mediante su carrera ha tenido varios errores, que afortunadamente su familia y usted, han logrado solucionar, por esa misma razón usted se postuló para ser su tutor legal, en esta compañía.

Pero lamentablemente en las últimas juntas de directivos, se ha especulado y debatido, el rendimiento de su hermana, la cual no le genera la satisfacción que se merece a los directores, por esto mismo, todos en la junta, han decidido poner sobre advertencia a la Doctora Palacios.

Está advertido, que si la doctora Palacios, comenté una equivocacion más, o ponga en riesgo la imagen de la compañía, su licencia médica será retirada.

Gracias por su atención, de ante mano buenas tardes y hasta pronto.

Con estimo: Director de la compañía Julián Torres Estrada.

¡Lo que faltaba!

Era más que obvio que en cuanto las Lindoro hicieran su demanda, mi hermana caería casi instantáneamente.

Lo cual no debe importarme, pero lamentablemente, si ella cae yo también, ella tiene como seguro, toda mi plata.

Y bien dicen que la plata no lo es todo, pero eso es obviamente falso, por qué si no tenes plata, no tenes comida, una casa y esas boludeces.

Pero lamentablemente en mi cabeza la plata no era lo importante en estos momentos.

Me odiaba ahora mismo, por preocuparme por Pia, apesar de que ahora mismo, la quiero mil metros bajo tierra, pero me preocupaba el hecho de que perdiera su licencia.

Pia ama con su vida su oficio, la manera en que lo emprende no es la mejor, pero cuando recién se graduó se veía tan contenta y tan plena.

Que me da un poco de lastima por ella, ahora que todo esto paso.

Suspire pesadamente en signo de frustración, no podía ser tan sentimental.

¡Me odio!

Sin darme cuenta ya había llegado a casa de Camilo, con el cuerpo tenso, estacione el auto, por la vereda.

Y una vez listo, baje de mi auto, para después comenzar a caminar hacia la puerta de mi amigo.

Pero está acción fue interrumpida por mis amigos, quienes estaban justamente saliendo de la casa.

Cᴏɴᴛɪɢᴏ / Tʀᴜᴇɴᴏ 🌜Donde viven las historias. Descúbrelo ahora