Cole Sprouse,un joven famoso cirujano plástico de los angeles, creará una retorcida mentira para que pueda enganchar a una chica. Una mentira la cual lo llevará a enamorarse de quién menos lo espera.
Cole con ayuda de su asistente de trabajo fingira...
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- OH, QUE HORROR ¿Por qué me despertaste Lili? - dije a la rubia a un lado de mi mientras yo sobaba mi espalda.
- Para esto abuelo. Reserve un lugar de aventura, caminaremos por el río, remaremos por el rio y nadaremos en las cataratas - explicoientras caminaba frente a mi.
- ¡Ay en las cataratas! Espero lo hagamos desnudos - le sonreí coqueto y me acerque a ella pero una tercera voz interrumpió.
- Vamos a nadar nada más - me miro sería la pelinegra frente a mi, quien peinaba a su hija mayor.
- Yo digo que nademos desnudos - nos señalo Dylan para después ver a Lu, ella rodó los ojos.
- Así que... La pesadilla de la familia nos acompaña para...convivir - Lili hizo un sonido de afirmación - ¡Genial!
★
- Jolines, que hermoso es esto - dijo Laila quien caminaba detrás de mi.
- ¿Aquí es donde viven los avatares azules?- afirme bromeando con la menor
- Si, los avatares azules y también el cerdo negro - señale a un cerdo que pasaba por ahí.
- Oh, que lindo, es identico a babe - comentó y sonreí por inercia al verla querer acercarce al animal pero derreñente el cerdo empezó a correr hacia nosotros haciendo un chillido muy fuerte, tome a Lu y las niñas, las pasé frente a mi para que corrieran hasta que vi a a Dylan y lo tomé del hombro para tirarlo al suelo para que nosotros pudiéramos escapar de ahí.
- AY!,¡AY!,¡AY!,¡SE ESTA COMIENDO MI CUERPO - Grito mi hermano cuando el cerdo estaba arriba de él. Todos al ver esa escena reímos.
★
Lucy
Decidimos hacer un poco de canotaje. En un bote iban Cole y Alex en otro Lili y Dylan, en el último estaba yo con Laila.
Estaba muy tranquila viendo los árboles, hasta que ví que Dylan le estaba viendo el trasero a Lili.
-Aceleremos un poco - pedí a laila y ella asintio.
Cuando llegue al lado del rubio, saque mi remo del agua y le di un golpe ocacionando que casi se le caigan los lentes.
- No apartes la vista del río - le dije con una sonrisa.
- No,no - me sonrió - Estoy viendo el cañón del sumidero - se rio.
