Samuel y Guillermo, dos personas, un hilo rojo, mentes conectadas, y un destino. ¿Quién dice que los deseos no se cumplen? Se dice que cuando son dichos con tanta esperanza y tantas ganas simplemente ocurren. Aunque los deseos nunca son tan fuertes para romper un hilo rojo... *La historia utiliza fechas falsas, es decir, no son fechas que exactamente cuentan lo que paso en la vida real. Aunque si es importante que les presten atención para poder entender mejor*