En los últimos años, el Partido de las Palabras ha estado trabajando en un prototipo de microchip de implantación que "ayudaría" con la afinidad de los micrófonos de hipnosis. Un primer arquetipo fue lanzado y comercializado a nivel internacional, intentando expandir su influencia a gran escala. Pero este proyecto falló gravemente, fallo que nos trae a nuestra grotesca actualidad.