Wolfram decide que ya ha intentado lo suficiente y que, por fin, es hora de dejar ir a Yuuri. El problema es que cuando estás tan acostumbrado a tener algo, no te das cuenta de lo importante que es para ti hasta que ya no está.
Wolfram decide que ya ha intentado lo suficiente y que, por fin, es hora de dejar ir a Yuuri. El problema es que cuando estás tan acostumbrado a tener algo, no te das cuenta de lo importante que es para ti hasta que ya no está.