Relato corto. Adela es partera chiapaneca. Antes de perder a una de sus pacientes, descendía segura y poderosa desde la montaña para atender a las mujeres menos privilegiadas de un país que pretende ignorarlas por completo. Desde aquel horrible incidente no es capaz de concentrarse en sus tareas, por eso decidió abandonar su vocación. Sin embargo su comunidad la necesita, porque allá, en los poblados indígenas del sureste mexicano no hay nadie más, son ellas, las parteras, las únicas que procurarán el bienestar de las mujeres embarazadas y sus hijos recién nacidos. Adela tendrá que dominar el terror que paraliza sus manos y lanzarse sin miedo a ayudar a quienes más la necesitan.