Para Kay McCartney, la vida en definitiva no es un campo de rosas. La vida de Kay es una constante balacera y muerte gracias a su padre. Pero Kay sabe que si la vida te da limones, debes exprimirselos en la cara a aquellos que no te agradan, así que cuando su padre la envia fuera del país para su propia seguridad, Kay aprovecha la situación al máximo y se da a sí misma la oportunidad de reinventar su vida en un internado donde conoce a gente tan peculiar como lo es ella. Particularmente Jayden Thompson. Siendo los dos, completamente opuestos, a menudo se encuentran atrapados en situaciones incómodas y humillantes. Pero para la sorpresa de ambos, terminan el uno, loco por el otro, y a la vez, desesperados por ocultar sus sentimientos. Pero Jayden no es buen chico, y a pesar de lo que Kay cree sentir por él, se ve atraída por el chico perfecto del internado: Zack Bynes. Parece un sueño cuando están juntos, parece estar flotando. La confusión en el corazón de Kay crece con cada segundo que pasa con cualquiera de estos dos chicos. Zack es dulce y caballeroso, lo que Kay siempre soñó en un chico. Jayden es rebelde e impulsivo, algo que inesperadamente, le llama la atención a Kay. ¿Podrá Kay encontrar una forma de saber con exactitud lo que siente y tomar una decisión que además de correcta, sea lo que ella quiere?