Extraños poemas escritos por una adolescente melodramática, deprimida y frustrada. Noches de insomnio, en los que aún la música se vuelve insuficiente para saciar los pensamientos negativos que se apoderan de su cabeza; es entonces cuando las palabras, que han sido arrebatadas y selladas de su boca, después de tanto tiempo contenidas, salen disparadas de entre sus dedos.