Los Tesoros Del Mar /- Harem...

By azar_loup

103K 7.9K 2.1K

Zoro, Ace, Sanji, Sabo, Shanks, Law X Lector (One Piece) - - Se podrán añadir o no personajes conforme avance... More

Tu personaje
Fruta Hiri Hiri
Aclaraciones
Prólogo I / IV
Prólogo III / IV
Prólogo IV / IV
1. El paciente del reno
2. Lazos de sangre
3. Plumas mensajeras

Prólogo II / IV

12K 995 467
By azar_loup

No me morí por no tener órganos durante un tiempo (ya que, al parecer, se regeneraron por sí solos en cuestión de días), así que terminé viajando junto a Ace por una tiempo.
Días que rápidamente se convirtieron en semanas, y semanas que casi sin darme cuenta se volvieron meses.

Ace era... un idiota glotón, bueno, un poco idiota nada más.
Pero también era extrañamente adorable por eso mismo, era bastante atento a su manera... Y era la única persona que yo tenía en un mundo que me resultaba familiar pero a la vez desconocido.

A pesar de que por su culpa terminé decapitado o sin alguna extremidad en más de una ocasión, fue terriblemente obvio para mí que, con el tiempo, mi corazón parecía comenzar a latir no solo para mí, si no también como respuesta a sus sonrisas, cercanía o gestos gentiles hacia mí.
Incluso si me sacaba el corazón del pecho, la sensación seguía ahí, ahogándome con una calidez vergonzosa.

No recordaba a personas anteriores en mi vida, no sabía si antes tenía una pareja o estaba enamorado de algún chico o chica.

Mi amnesia se mantuvo desde el día en que él me rescató, tan solo logré recuperar recuerdos vagos y nada concretos con el tiempo, no eran muy útiles pero al menos me servían para saber que realmente yo tenía alguna clase de vida antes... Y no que simplemente había aparecido de la nada en un naufragio, que era como normalmente me sentía si me perdía demasiado en mis pensamientos borrosos y confusos.

De alguna forma, el estar con Ace me mantuvo a flote en medio de toda esa confusión, así que supongo que era de esperarse que algo así pasara.
Aunque no sé si sea del todo correcto para mí pensar de esa forma hacia él, ¿Alguien se puede enamorar sin recordar nada del amor?

No lo sé para los demás, pero al menos para mí... La respuesta probablemente era un si rotundo y grande, y si dudaba tan solo tenía que ver la sonrisa de Ace para confirmar mi sentir.

Sé que no podré viajar con él para siempre, a pesar de que me gustaría, y por eso mismo no espero que corresponda mis sentimientos de ninguna forma.
Pero aún así... no hace daño fantasear un poco acerca de eso, ¿No?

- ¡Otro plato más! ¡Y otra cerveza también! ¡Esto está tan rico...!

Ace parecía estar bastante feliz con su comida mientras alzaba su jarra vacía en mano, hasta que de repente noté como sus ojos se cerraron y su cabeza se inclinó hacia adelante. Suspiré y lo sostuve por el cuello de la camiseta que había logrado que usara, apenas sosteniendolo a tiempo antes de que su cabeza cayera sobre el plato de comida a medio acabar que tenía frente a él, aunque la jarra metálica sí que sonó contra el suelo.

Espero que no se haya roto, apenas si tenemos suficiente para pagar su comida sin daños a la propiedad incluidos.

- Y ni siquiera sueltas el tenedor, ¿Puedes ser más idiota?

Ace tan sólo me respondió con un ronquido. Intenté disimular una sonrisa, pero era difícil, al inicio se me hacia algo fastidioso que se durmiera de la nada en ocasiones, pero ahora me parece incluso algo un poco lindo.

Voltee a ver al hombre que atendía el local donde habíamos ido a cenar algo antes de abandonar la isla que estábamos visitando de momento.
Él se sobresaltó un poco y señaló a Ace con algo de duda.

- Uh, ¿tu amigo está bien?

- Tan sólo está dormido, a menos que le haya echado algo malo a la comida

Miré de mala manera al hombre, con lo último que quería lidiar hoy era con un cocinero asesino. Él se asustó y negó de inmediato con la cabeza.

Sonreí y me puse de pie, diciendo que solo estaba bromeando. Lo cual era una verdad a medias.
Sé que hay recompensa por la cabeza de Ace, he perdido mi propia cabeza por esa fama suya. No suele traernos muchos problemas, pero cuando los trae vaya que son problemas molestos.

- Aunque por tu reacción casi pareciera que acerte

- ¡Yo nunca haría algo así!

- Pues no sé si eso sea cierto, pero sé que la comida no está envenenada, si fuera así yo me estaría muriendo de una indigestión

Recargué la cabeza inerte de Ace en una parte libre de la barra mientras con mi mano libre me encargaba de buscar dinero en una pequeña bolsa de piel que llevaba colgando del cinturón.
Tengo que asegurarme de conseguir más dinero pronto, ya casi no nos queda y no quiero huir de los restaurantes que Ace deje en quiebra.

- ¿Con eso es suficiente?

Arrojé el dinero sobre el mostrador, el hombre asintió y se apresuró a recoger las monedas. Me puse de pie y tomé a Ace del hombro para sacudirlo un poco.
Él se sobresaltó y levantó la vista, aparentemente desconcertado por un instante antes de voltearme a ver con una sonrisa que me hizo sentir algo avergonzado.

- Ah, ¿En qué me quedé?

- Espero que terminando tu comida, ya quiero volver al bote

- Vaya que no aguantas nada, apenas si hicimos algo en todo el día

Es fácil para ti decirlo cuando no tuviste que arrastrarte fuera de cada lugar en el que te quedabas dormido, lindo idiota.
Miré disimuladamente a Ace mientras él terminaba de comer, lo cual no duró mucho ya que terminó con su décimo plato de comida en tan sólo un par de minutos.

En cuanto terminó nos dirigimos a la salida del local, él ni siquiera se molestó en preguntar cuánto teníamos que pagar.
Llevo rato sospechando que muchos de los lugares de los que me contó que lo persiguieron por no pagar fue simplemente porque se olvidó, no porque no llevara dinero.

- Oye, ¿Sabes qué día es hoy?

- Eh, no sé, ¿Jueves? ¿Debería de saberlo?

- ¡Por supuesto! Se cumple un año desde que empezaste a viajar conmigo

Miré a Ace con algo de incredulidad, deteniendo mi paso por un momento. Él sonrió ampliamente y me pasó un brazo por los hombros mientras me revolvía el cabello. Él siempre aprovechaba para hacer eso cuando no llevaba mis gafas en la cabeza, en este caso las llevaba colgando del cuello.
Es un tanto molesto, pero no puedo evitar disfrutarlo... solo un poco.

- ¿En serio estuviste al pendiente de eso? Que sentimental eres

Le saqué la lengua, burlándome un poco de él. Ace me regresó una breve mueca que hizo que se me calentaran un poco las mejillas.

- Claro que estuve al pendiente... O algo así, estoy casi seguro de que ha pasado un año. Tal vez me pasé por algunas semanas... o meses

En lo que nos tomó llegar hasta el bote en el que habíamos estado viajando todo este tiempo, Ace me contó que me tenía una sorpresa preparada.
A pesar de que insistí en que no necesitaba nada él no me escuchó, y cuando, varios minutos después, nuestro bote con nosotros en él ya se alejaba de la costa de la isla finalmente me mostró su sorpresa.

- Aquí, mira

Ace se puso a buscar en la bolsa con cosas que habíamos conseguido mientras yo me ocupaba de encender una lámpara que llevábamos con nosotros.

Me senté y me recargué en un lateral del bote mientras veía a Ace sacar tres botellas de la bolsa.

- ¿Eso es... alcohol?

- Si, no sabemos si has bebido antes o no, pero al menos conmigo no ha sido así. Traje sake y vino, y también una menos fuerte para comenzar...

Ace hablaba mientras me mostraba las botellas, yo me limitaba a asentir mientras lo miraba atentamente y pensaba de dónde diablos consiguió dinero para comprar las botellas.
Preferí no perder energía en ese pensamiento inútil y mejor me centré en otra cosa más productiva: admirar su atractivo.

Su cabello ha crecido un poco desde que nos conocimos, se le ve muy bien de esa forma.
Sonríe de una manera hermosa, me encanta como lucen sus pecas cuando lo hace. Realmente no me interesa demasiado beber algo, pero si él lo ha preparado para mi... claramente no me puedo negar.

Comenzamos con la botella menos fuerte, parecía una especie de sidra o algo así, no se sentía demasiado el sabor del alcohol y de hecho era dulce.
Dejamos la botella un poco antes de llegar a la mitad y pasamos al sake, este no tenía un sabor del todo agradable para mí pero no estaba mal, aunque si era notablemente más fuerte.

- Mira, tus mejillas se están comenzando a poner rojas

Ace me pico con un dedo la mejilla en la que yo tenía un lunar. Hice un ligero puchero mientras apartaba su mano, para después acercarme a él y agarrarlo de ambas mejillas sonrojadas.

- Cállate, tú tienes las pecas rojas... O algo así

Él se rió y me tomó de las manos para alejarme un poco.
Hmm, aún no me siento mareado aún pero si más relajado.

Ace echó un poco la cabeza hacia atrás y se terminó de un trago lo poco que quedaba de la botella de sake.
Un hilo del líquido resbaló por la comisura de su labio para después deslizarse por su mandíbula.
Pasé saliva con un poco de dificultad mientras seguía con la mirada el rastro de la gota sobre su piel.
No me di cuenta de que me le había quedado viendo hasta que él me volteó a ver de manera divertida.

- ¿Tengo algo en la cara?

Unos brillantes ojos oscuros, un adorable sonrojo debajo de unas lindas pecas, una hermosa melena oscura enmarcando un rostro increíblemente atractivo, y esos labios...

- ... No, solo un poco de... justo aquí...

Señalé mi propia mandíbula.
Ace llevó su mano a su labio y se secó el líquido con el dorso de esta, pasé saliva de nuevo lo más disimuladamente que pude mientras tomaba la última botella para intentar disimular.

- ¿Seguro que quieres tomar más? Es tu primera vez... O algo así

- Estoy bien, ni siquiera estoy mareado

- Si tú lo dices

Ace me quitó la botella de las manos y la abrió, estuvimos conversando y bromeando brevemente mientras nos turnabamos para beber tragos de la botella.
El vino era mínimamente agradable respecto al sabor, pero no tuve que tomar mucho antes de comenzar a sentirme mareado.
Supongo que debo agradecer que el mar esté tranquilo hoy, probablemente habría terminado vomitando si el barco se balanceara demasiado por las pequeñas olas.

- Bueno, parece que eso fue todo para ti. Tienes buen aguante

Ace sonrió y bebió un último trago largo antes de hacer la botella a un lado.
Balbucee una breve respuesta y me recargué en su hombro desnudo.
Me giré un poco para poder ver su torso mejor, sin pensarlo mucho recargué un dedo en la piel de su pecho mientras fruncía un poco el ceño.

- ¿Cómo es que estás así si comes tanto? Ni siquiera tienes un poco de panza, ¿A dónde se va todo lo que comes?

Bajé mi dedo a su abdomen y lo piqué. No está ni un poco aguado, el mío si, aunque solo poquito...
Ace se empezó a reír y me sostuvo la mano, sentí que mi piel se ponía caliente al tacto con la suya

- Deja de hacer eso, da un poco de cosquillas

- ¿Cosquillas?

Intenté picarlo con mi mano libre pero él me agarró la otra mano también. Después de un breve forcejeo ambos terminamos cayendo acostados y haciendo que el bote se balanceara levemente.

Ace me sostuvo sujetando mis manos por encima de mí cabeza mientras yo pataleaba débilmente. Parecía divertido, ya que se estaba riendo un poco.

- Bien, retiro lo dicho de tu aguante. Debimos habernos quedado en tierra otra noche si te ibas a poner así

- No es verdad, estoy bien

- Si, claro. Ten más cuidado al moverte o vas a terminar volteando el bote

- Como si mi peso pudiera ganarle al tuyo, la única vez que el bote se volteó fue tu culpa

Sonreí burlones y levanté la vista en su dirección, Ace me sonrió sorpresivamente de vuelta y se quitó un momento su sombrero para ponermelo de manera que cubriera mis ojos.
Dejó que me incorporara levemente, tan solo apoyándome en los brazos para verlo mejor. Aunque cuando levanté el sombrero lo suficiente para verlo no me esperaba tenerlo tan cerca.

Él parecía también algo sorprendido, pero no se apartó. Yo tampoco me moví, ambos nos quedamos mirándonos a los ojos por unos segundos que parecían preciosamente eternos.

- O-oye, Ace...

No supe ni por qué empecé a hablar, fue sin quererlo realmente.
Él me miró atentamente, esperando a que yo comtinuara con lo que estaba diciendo. En su lugar, lo que terminé haciendo fue inclinarme un poco hacia adelante y unir suavemente mis labios contra los suyos.

Me moví sin pensarlo, y apenas me di cuenta de lo que había hecho me alejé de inmediato, dispuesto a morir de la vergüenza y tal vez a tirarme por la borda del bote para acelerar el proceso.

- Ah, eh... Yo... Perdona, no sé que estaba pensando, el alcohol y... N-no puedo pensar...

El alcohol y mi corazón no me dejan pensar bien, soy idiota.
Retrocedí torpemente, intentando alejarme lo suficiente de Ace como para poder ponerme de pie e intentar huir a alguna lugar que no había en este pequeño bote.
Maldición, acabo de arruinarlo todo.
Ni siquiera sé si a él le gusten los chicos o algo así, ni siquiera sé si acaso... le gusto yo.

- Oye, ______

La voz de Ace me llamó, e instintivamente lo voltee a ver a pesar de que no era precisamente lo que yo quería en ese momento.
Sin embargo, terminé quedándome completamente paralizado cuando Ace tomó firmemente mi mandíbula con su mano, atrayendome a él y estampando sus labios contra los míos.

Una solitaria lágrima rápida se me escapó por la comisura del ojo, Ace no pareció darse cuenta ya que aflojó un poco el agarre de su mano y continuó con lo suyo, comenzando a mover sus labios con suavidad y dulzura para aflojar los míos.
Sentí un vuelco raro en el pecho, y comencé a intentar corresponderle muy tímidamente, temiendo hacerlo mal.

No sé si me costaba tanto porque no recordaba como hacer esto, o porque realmente nunca antes había tenido una experiencia así, pero en un inicio Ace fue quien tomó todo el control en el beso, guiando mis labios inexpertos con los suyos mientras mis brazos comenzaban a cansarse de sostenerme durante todo el rato que duró ese beso inicial.

Nos separamos después de unos segundos, pero después de una breve mirada volvimos a juntar nuestros labios. Esta vez Ace me pasó una mano por la cintura y me hizo acostarme en el suelo del bote con cuidado mientras él se colocaba encima de mí.
Su boca era atrevida pero gentil, tratando mis labios con rudeza mientras al mismo tiempo los acariciaba con suavidad.

Su sombrero se me cayó pero apenas si me di cuenta de eso. Mi respiración comenzaba a acelerarse por los nervios, y me sentía extrañamente acalorado, tal vez hasta un poco sofocado.

Debo estar soñando, ¿Es un efecto del alcohol...? Pero se siente tan real...
Los labios de Ace son tan suaves, saben un poco a alcohol pero eso sólo lo hace mejor. Tan cálidos...

- A-ace...

Lo empujé un poco cuando comencé a marearme por la falta de aire, temía que se molestara o algo cuando lo aparté pero el simplemente continuó besando el borde de mis labios mientras yo jadeaba, bajando sus besos por mi mandíbula hacia mi cuello.

Me aferré a sus brazos cuando sentí como sus dientes mordían mi piel, y me estremecí cuando sentí el cálido tacto húmedo de su lengua sobre el mismo sitio.

- Siempre me gustó esta cicatriz, se ve bien en ti... Desde hace un tiempo tenía ganas de probarla

Ace besó un poco más la piel de mi cuello, adiviné fácilmente que se refería a esa marca que rodeaba mi cuello como si se tratara de un collar. No recuerdo por qué la tengo, pero me hace un poco feliz saber que a Ace le gusta.

Me comenzaba a sentir bastante acalorado entre los efectos del alcohol y las acciones de mi enamorado, así que no opuse demasiada resistencia cuando Ace llevó una de sus manos debajo de mi corta camiseta y la comenzó a levantar.
Su tacto directamente sobre la piel de mi pecho se sentía... extraño, y era vergonzoso pensar que pudiera sentir lo rápido que latía mi corazón ahora mismo.

Inicialmente se limitó a alzarla lo suficiente como para besar mi pecho, acción que me provocó unos curiosos estremecimientos placenteros por toda la columna, pero no tardó mucho en quitarmela por completo y dejarla a un lado.
Hace frío, no sé si es por eso o por Ace que mis pezones están duros. Que vergüenza.

- ¿Estás incómodo?

Lo pensé un poco, pero terminé negando con la cabeza, aunque la madera del bote contra mi espalda desnuda era un poco incómoda.
Ace pareció suponerlo sin necesidad de que yo lo dijera, así que me rodeó brevemente con uno de sus brazos para alzarme con una facilidad casi insultante mientras ponía mi gabardina sobre el barco para poder recostarme sobre ella.
Estaba algo cálida después de haber estado bajo el sol todo el día, así que fue mucho mejor que estar acostado sobre la madera.

Después de dejarme ahí, Ace se incorporó apenas lo suficiente como para tomar una de mis manos y morder el borde de uno de los guantes. Tragué saliva al ver la mirada que me dirigió mientras me despojaba del guante con los dientes.

Se deshizo del otro con un gesto similar y los dejó a un lado, de inmediato se colocó de nuevo sobre mí, teniendo cuidado de no cargarme demasiado con su peso, y continuo besándome con más insistencia.
Ahogué un jadeo contra sus labios y le correspondí el demandante beso lo mejor que pude, incluso cuando la lengua de Ace se sumó al gesto.

Podría haber pensado que era algo desagradable, pero después de haber visto mis propios intestinos en más de una ocasión esto no era nada.
Los roces de su lengua contra la mía me provocaban una sensación similar a una descarga eléctrica por todo mi cuerpo, que me hacía sentir una inquietud extraña y remover un poco las piernas.
Se sentía increíblemente bien, y el que fuera Ace quien lo hacía era mucho mejor.

El intenso morreo que dirigía su boca me estaba dejando sin aliento de nuevo, provocándome unos jadeos terriblemente humillantes que me hicieron agradecer que estuviéramos solos en medio del mar.
Él parecía disfrutar de acariciar mi pecho mientras nuestros labios se ocupaban mutuamente, algo que no era del todo desagradable.

- Ah, ya le estás agarrando el truco a esto

Me hubiera gustado sonreírle a Ace cuando nos tomamos un pequeño momento para recuperar el aliento, pero estaba más ocupado intentando respirar con normalidad.

- ¿Voy demasiado rápido? Puedes decírmelo, si es demasiado para ti...

- N-no, está... bien así. Muy bien de hecho, ahora tú solo... acércate

Tiré de él hacia mí, ansioso por continuar besándolo.
Ace correspondió con gusto, incluso acomodandose mejor entre mis piernas para poder estar más cerca de mí.
Sin embargo, al poco rato de estar así sentí un tacto duro en mi parte baja que me hizo pegar un respingo y terminar el beso.

- ¿A-ace...?

- Ah, lo siento. Llevo mucho sin hacer estas cosas, y tú solo... Eres demasiado lindo. Tú también estás bastante emocionado, puedo sentirlo

Ace sonrió dulcemente con las mejillas sonrojadas, moviendo un poco su cadera y haciendo que su erección se frotara contra mi propia entrepierna despierta.
Por amor a... Él bastante duro ahí abajo...

Sabía lo que era estar excitado, sabía lo que era masturbarse y tener sexo (al menos en la parte técnica).
Pero era la primera vez que recordaba que me sentí de esa forma tan rara.
Se me escapó un humillante gimoteo de entre los labios como consecuencia del movimiento de Ace, mi cadera se arqueó un poco de manera instintiva para pegarme un poco más contra la erección de Ace, mientras me estremecía por el momentáneo placer que ese movimiento me había dado.

Esto es ridículo, estoy siendo demasiado sensible.
Fue por encima de la ropa, ni siquiera es para tanto.
Y aún así yo... quiero que se mueva de nuevo, quiero sentir eso más.
Me siento tan... desesperado de alguna forma.

- Ace... Tú... ¿P-podrías moverte de nuevo...?

Qué vergüenza, pero qué vergüenza.
Aparté la mirada mientras hacía esa petición, no vi la expresión de Ace pero parecía extrañamente feliz al responder.

- Por supuesto

No perdió ni un momento antes de mover su cadera de nuevo.
Se me arqueó ligeramente la cadera de nuevo, y mis piernas sufrieron de un pequeño temblor ante ese roce.
Hice mi mejor esfuerzo para contener mis gimoteos, pero no tardaron en finalmente escaparse de mi boca y terminando por convertirse en unos gemidos ahogados cada vez que Ace se frotaba contra mí.

- U-uhm... Ace... A-ace...

Me siento mojado, que vergüenza. Se siente tan caliente, incluso a través de la ropa, se siente tan bien...
Mis piernas terminaron por tensarse alrededor de su cintura casi sin quererlo, pegándolo más cerca de mí mientras el continuaba.

- Ah, esto... En verdad te gusta, ¿No? Entonces... esto te encantará

Ace se detuvo un momento, dejándome tembloroso y confundido.
Su mano acarició mi vientre suavemente, sacándome un gimoteo involuntario, antes de detenerse en el borde de mi pantalón.

Me cubrí el rostro con las manos al adivinar lo que pensaba hacer, intentando disimular los nervios que sentía mientras Ace sacaba mi chorreante erección de entre mi ropa.
Como si el tacto masaje de su mano caliente no fuera suficiente para hacerme temblar las piernas, no tardé en sentir el contacto duro y caliente de su propia erección desnuda contra mi miembro.

Me destapé un momento los ojos para intentar ver qué estaba sucediendo, pero al ver lo que pasaba ahí abajo simplemente no pude con la vergüenza y me cubrí los ojos de nuevo.

- A-ace, eso no...

- ¿No te gusta? Ah, ya sé. Espera un segundo...

Escuché movimiento por parte de Ace, el sonido de una tapa al abrirse y al cabo de unos segundos sentí algo frío y resbaladizo cubrir nuestras erecciones.
Solté un pequeño respingo por el tacto repentino, y me animé a descubrir mis ojos de nuevo.

- ¿Lubricante? ¿Por qué lo tienes...?

- Eh, e-eso no importa. Ahora de esta forma será mejor

Ace atrapó nuestras erecciones juntas con su mano, y comenzó a frotarlas una contra la otra mientras usaba su mano libre para estimular más en la punta.
Gracias al lubricante se escuchaban eróticos sonidos húmedos con el movimiento de su mano, y eso me hacía más fácil en perderme en el placer que me estaba proporcionando de esa forma.

Se siente tan bien, el que Ace me toque de esta forma... contra él...

Un jadeo se escapó de mi garganta sin que yo pudiera hacer nada para contenerlo cuando sentí un placentero espasmo fuerte por todo mi cuerpo, junto con una tensión involuntaria en mis piernas.

No me corrí, pero aún así quedé un poco agotado mientras recuperaba el aliento.
Ace soltó una suave risa mientras acariciaba dulcemente mi miembro chorreante.

- Hmm, eso fue bastante adorable

- C-calla, no es verdad

Me incorporé con un poco de esfuerzo para poder sentarme de frente a Ace.
Él me miró con curiosidad, lo cual solo me hizo sentir más avergonzado cuando le pregunté lo que tenía en mente.

- ¿Puedo... tocarte?

También quiero hacerlo sentir bien... Y no quiero terminar tan pronto.
Ace se sonrojó un poco, pero asintió y se acomodó mejor en su sitio.
Agaché la vista hacia su erección, pasando saliva ante la vista mientras extendida mi mano para tocarla.

Es algo más grande que la mía, y es... gruesa.
Si la toco de esta forma, puedo sentir el relieve de sus venas... casi la puedo sentir palpitar. Está tan caliente...

- Ah, ________... Intenta tocar un poco más abajo

Asentí, bajando un poco las caricias y masajes de mi mano por lo largo y ancho de su tronco.
Ace suspiró cuando estaba por llegar a la base, así que lo tomé como una buena señal.

Moví un poco más animadamente mi mano y mis dedos, Ace soltó un jadeo y agachó la cabeza para poder poder apoyarla contra mi pecho. Por un momento se me hizo algo lindo... hasta que comenzó a lamer y mordisquear uno de mis pezones, de inmediato un ruido bastante extraño se escapó de entre mis labios, haciéndome sentir extremadamente avergonzado.

- Ja, e-eso fue lindo

Intenté ignorar la molestia que me provocó esa burla, y en cambio me concentré más en el trabajo manual que estaba haciendo.
Podía sentirlo estremeciéndose un poco, algo que resultaba bastante satisfactorio para mí.

- ______ yo... detente, un momento...

Ace me interrumpió de la nada, sosteniendo mi mano.
Lo miré con confusión, él me dirigió una sonrisa ligeramente cansada.

- No quiero terminar tan pronto... Y de esta forma. Además, quiero que tú te corras primero

- Pero... Uhm, de acuerdo. Solo no digas nada vergonzoso

- Hecho

Ace me sorprendió con un beso bastante tierno en la mejilla, antes de empujarme y recostarme de nuevo sobre la gabardina.
Intercambiamos un breve beso antes de que él comenzará a deslizar sus labios hacia abajo, pasando por mi cuello y vientre, aprovechando para besar la cicatriz alargada que tenía ahí mismo.

- A-ace...

Me puse bastante nervioso cuando noté que acercaba su cara ahí abajo, él me sonrió y depósito un pequeño beso en la punta húmeda de mi erección antes de mirarme con un brillo inusual en los ojos.

- Tranquilo, yo me haré cargo













Continue Reading

You'll Also Like

1.7M 234K 58
El amor puede llegar de manera impredecible... Para aquel Omega que por mucho tiempo creyó que lo había encontrado, vendrá en su demandante e impone...
103K 10.7K 32
El líder de la roja, cabeza de una de las organizaciones más peligrosas, temidas y respetadas del mundo, queda cautivado por un peculiar doctor de ca...
561K 40.4K 73
Lara pensaba que Toni era el amor de su vida, pero dejó de serlo hace mucho, después del primer golpe que recibió por su parte cuando estaba embaraza...
377K 9.4K 42
la tipica historia de universos viendo otros universos atraves de pantallas flotantes que aparecerán en sus mundos aunque también agregare otras cosa...