Sincerely, yours » h.s

By -smellycat

94.3K 5.9K 2.5K

"Y aunque el tiempo no lo quiera de esa manera, y la distancia lo acompaña, quiero que sepas que fui tuyo, so... More

Prólogo
Capítulo 1
Capítulo 2
Capítulo 3
Capítulo 4
Capítulo 5
Capítulo 6
Capítulo 7
Capítulo 8
Capítulo 9
Capítulo 10
Capítulo 11
Capítulo 12
Capítulo 13
Capítulo 14
Capítulo 15
Capítulo 16, pt 1
Capítulo 16, pt 2
Capítulo 16, pt 3
Capítulo 17
Capítulo 18
Capítulo 19
Capítulo 20
Capítulo 21
Capítulo 22
Capítulo 23
Capítulo 24
Capítulo 25
Capítulo 26
Capítulo 27
Capítulo 28
Capítulo 29
Capítulo 30
Capítulo 31
Capítulo 32
Capítulo 33
Capítulo 34, pt 2
Capítulo 34, pt 3
Capítulo 34, pt 4
Capítulo 35
Capítulo 36
Capítulo 37
Capítulo 38
Capítulo 39
Capítulo 40
Capítulo 41
Capítulo 42
Capítulo 43
Epílogo
Agradecimientos + anuncio importante
SEGUNDA PARTE: A LITTLE BIT YOURS

Capítulo 34, pt 1

1.8K 98 26
By -smellycat

N/a: sorpresa! leyeron bien, esta es la parte number one del capítulo #34 (increíble todo lo que hemos avanzado!!) La parte dos espero subirla mañana yyyy no sé si habrá parte tres, esto fue espontáneo :) Espero que les gusteee y gracias por sus votos y comentarioos las amo xxxx


Londres, ocho de junio, 2020.

Solté un suspiro mientras miraba por quinta vez a cada lado de la calle, a la espera del auto de Harry. Me había mandado un mensaje en el que decía que me pusiera linda y que bajara con Piper. Nada más.

Me había abrigado más de lo habitual porque el cielo y el clima lo ameritaba. Podríamos estar en plena primavera, pero, aun así, Londres nos encantaba con el frío de siempre. Había nubes oscuras en el cielo, casi podía asegurar que se iba a poner a llover en cualquier minuto, pero los espacios que había entre éstas mostrando el claro cielo me hacía pensar lo contrario. De todas maneras, era temprano, casi las nueve de la mañana y aun no me lograba explicar el por qué Harry me tenía esperándolo afuera de mi edificio a estas horas.

Piper a mi lado esperaba pacientemente, sentado en sus patas traseras y analizando su alrededor. A diferencia de mí, se veía bastante tranquilo, hasta podría decir que se estaba aburriendo de tanto esperar.

—¿Dónde crees que iremos, amigo? —le pregunté y él elevó su hocico para mirarme, segundos después volvió su vista hacia al frente—. Claro, eres un perro, no te debe importar en lo más mínimo.

El sonido de una bocina a mi derecha hizo que me sobresaltara ligeramente del susto, llevándome una mano al pecho para calmarme. Giré mi cabeza y vi el auto de Harry bajando la velocidad hasta estacionarse en la acera. La puerta se abrió y se bajó con una sonrisa.

—Buenos días —canturreó, bajando su cabeza para besarme en los labios brevemente.

—Buenos días —lo saludé de vuelta al mismo tiempo que se agachaba para acariciar el cuello de Piper, quien se volvió bastante emocionado por ver al rizado de nuevo.

—¿Estás lista? —me preguntó, tomando mi mano para llevarme al lado del copiloto.

Asentí con la cabeza y Harry abrió la puerta de los pasajeros para que Piper entrara. Iba a quejarme de que el pelaje de mi perro iba a ser la perdición de sus asientos, pero Harry simplemente me chistó y dejó que entrara, sus patas pisando la tela de cuero, haciéndome estremecer.

—Te aspiraré el coche apenas volvamos —recalqué y él rodeó los ojos, esta vez abriéndome la puerta del copiloto para entrar.

—No te preocupes. Ahora, sube.

Se veía bastante emocionado a mi parecer. Me subí al asiento y Harry cerró la puerta, rodeando con rapidez hasta llegar a su lado y posicionándose tras el volante. Lo que más me llamaba la atención era que se encontraba tarareando una melodía sin sentido mientras encendía el motor y comenzaba la marcha hacia quién sabe dónde, sin borrar la sonrisa en su rostro.

—¿A dónde vamos? —inquirí de inmediato, la curiosidad carcomiéndome. El rizado simplemente me miró de reojo y uno de sus párpados cayó en un guiño, respondiéndome con solo el silencio.

En ese entonces, me di cuenta en que si insistía no iba a lograr nada, por lo que simplemente me dediqué a mirar el exterior. Quizás iba a llevarnos al parque o a alguna otra parte de la ciudad para pasear con Piper. No obstante, apenas me percaté de que estábamos saliendo de Londres y entrando a la autopista hacia el este, giré mi cabeza hacia Harry.

—Harry, ¿a dónde vamos? —volví a preguntar y comencé a juguetear con mis manos, nerviosa.

Él simplemente sacó su teléfono del posavasos y me lo tendió. Lo tomé con duda y lo mantuve entre mis manos por varios segundos, esperando a que me dijera algo. Quizás la respuesta de mis interrogativas estaba en el aparato.

—Mi código es 0102. Pon algo de música —indicó sin quitar su vista de la carretera.

—¿Tu contraseña es la fecha de tu cumpleaños? —inquirí divertida mientras presionaba los números, desbloqueando su teléfono y yendo inmediatamente a la aplicación de música—. Vaya, pensé que iba a ser algo más significativo.

Él simplemente sonrió y negó con la cabeza mientras que yo buscaba una de mis canciones favoritas para poner en el coche: Piano Man por Billy Joel.

—Excelente elección, cariño —Harry asintió lentamente con la cabeza mientras posaba una de sus manos en mi pierna, tamborileando el inicio de la canción con su pulgar sobre mi rodilla, sus otros dedos serpenteando hasta quedar en la parte interna de ésta.

Dejé que la mezcla del piano y la harmónica nos envolviera por unos momentos, tratando de recuperar el aire que perdí por el gesto que hizo el rizado en mí. Era impresionante cómo cualquier cosa que hacía me ponía nerviosa, a tal punto que mi corazón palpitaba frenéticamente contra mi pecho y hacía que mi garganta se secara.

Ya cuando me di cuenta que definitivamente habíamos salido de la ciudad, volví a insistir.

—Harryyyy, ¿dónde vamos? —me quejé como una niña pequeña, palmeando su mano con rapidez.

Una carcajada escapó de sus labios y despegó su mano para dirigirla a la consola de su coche, subiendo el volumen de forma exagerada.

—Harry... —me crucé de brazos.

"He says, 'son, can you play me a memory? I'm not really sure how it goes!" —gritó a todo pulmón la letra de la canción, llevando su mano empuñada a sus labios mientras simulaba un micrófono, haciéndome reír.

—¡Harry Edward Styles! —exclamé entre risas mientras trataba de agarrar su antebrazo libre para que me pusiera atención, mas él estaba muy dedicado a seguir cantando apasionadamente las siguientes líneas, inclinando su cabeza hacia atrás y entre cerrando sus ojos de vez en cuando.

—Vamos nena, debes acompañarme en el coro —posicionó su mano sobre mis labios mientras yo lo empujaba juguetonamente lejos de mí, sólo para que rebotara a la misma posición, esperando a que cantara.

Una vez que las primeras palabras del coro empezaron a sonar por los parlantes, ni siquiera intenté en aguantarme. Tomé su muñeca con mi mano y canté la letra con la misma intensidad que él, ambos dándolo todo en el pequeño espacio, como si estuviéramos compitiendo por ser más fuertes que el volumen del coche, haciendo gestos de piano con mi mano libre mientras él se balanceaba al ritmo de la música, jamás quitando la sonrisa de nuestros rostros. Y para agregarle más alegría a la situación, Piper comenzó a aullar, tratando de seguirnos y haciendo que ambos soltáramos sonoras carcajadas.

Empezó el segundo estribillo y Harry volvió a colocar su mano en mi pierna luego de haber bajado el volumen a la radio, soltando un suspiro de cansancio mientras se concentraba cien por ciento en el camino. Me di el lujo de acariciar el dorso de su mano con mis dedos, pasándolos por las líneas de los pocos tatuajes que tenía en la zona y jugueteando con sus anillos al mismo tiempo que mis ojos inspeccionaban la manera en la que conducía.

Siempre que me subía a un auto donde Harry era el que manejaba, quedaba maravillada con su aspecto. Su ceño se fruncía ligeramente, la línea entre sus cejas siendo apenas notoria. Algunas veces arrugaba su recta nariz por hábito y siempre mantenía una pequeña sonrisa con los labios juntos, haciendo aparecer el hoyuelo que tanto me fascinaba. Jamás me aburriré de decir que Harry era un hombre bastante apuesto, y me sentía bastante afortunada al compartir momentos tan únicos como este: un viaje en coche por la autopista, cantando canciones y haciendo el ridículo.

—¿Qué me miras tanto? —me preguntó, su voz sacándome del trance en el que estaba sumida.

Entrelacé su mano con la mía y la llevé a mi rostro para besar suavemente el dorso de ésta.

—Eres lindo —murmuré y pude jurar que lo hice sonrojar.

—Gracias, mi mamá me dice lo mismo —respondió con burla y me miró brevemente para dedicarme una sonrisa—. Hablando de ella, quedó obsesionada contigo.

—¿En serio?

—Sip, y en tu tiramisú también —rio ligeramente y me dio un ligero apretón—. Le prometí que iríamos a visitarla antes de...

Se detuvo en seco y sacudió la cabeza, confundiéndome.

—¿Antes de qué?

—Antes del matrimonio de tu hermana —contestó no tan convencido y supe de inmediato que esa no era la verdadera respuesta, pero decidí dejarlo pasar.

—Me encantaría volver a ver a tu mamá —sonreí mientras dejaba nuestras manos entrelazadas sobre mi regazo y jugueteaba un poco con ellas—. Ahora, ¿podrías decirme por favor a dónde me estás llevando?

Él bufó y ladeó un poco la cabeza, sin quitar la vista de su camino.

—Ya verás.

***

Luego de una hora cantando y hablando de temas sin importancia, llegamos a un pueblo sacado de un libro de historia. Mis ojos se vieron maravillados ante la belleza del lugar; las casas tenían ese toque de época, las aceras estaban compuestas de adoquines y había un pequeño puerto con muchos veleros y botes. Harry continuó manejando por las calles prácticamente vacías hasta salir del pueblo, confundiéndome. Siguió por el asfalto, con praderas verdes envolviéndonos y cosechas de campo que hacían contraste con el cielo aun nublado. Me pregunté cómo se vería este lugar con un día soleado...

Dobló hacia un camino de tierra en donde nos sacudimos ligeramente. Lo primero que pensé fue en cómo era capaz de meter su Audi en un lugar como este, pero al ver la sonrisa emocionada en sus facciones, decidí no hacer comentarios al respecto. Anduvo un par de kilómetros hasta que frenó el auto y apagó el motor.

—Hemos llegado —dijo y ante de siquiera responderle, se apeó del auto y lo rodeó hasta llegar a mi lado para abrirme la puerta.

Salí y lo primero que sentí fue el viento helado chocar en mi rostro, haciendo que tiritara ligeramente. Menos mal me había abrigado o si no lo habría pasado muy mal con el clima. Entreabrí mis labios al ver la panorámica frente a mis ojos; un sendero que se alargaba hasta unos buenos kilómetros más delante de nosotros, los pastizales amarillos mezclándose con el verde césped. A un lado estaba la costa de lo que parecía ser un río, ya que apenas se veía los cerros del otro lado con algunas edificaciones. Era un lugar muy lindo, y el hecho que estuviera en medio de la nada me fascinaba.

—¿Y esto? —elevé mi vista al rizado con sorpresa en mi voz, al mismo tiempo que trataba de controlar mi cabello que estaba siendo víctima del viento.

—Bueno... —se rascó la parte trasera de su nuca para después entrelazar mi mano con la suya, la calidez de su cuerpo envolviéndome—. La otra vez me puse a pensar en que nunca te llevé a una cita, así que decidí cambiar eso.

—Oh, Harry... —alargué conmovida—. No debis...

—Sí, Lens —me cortó de inmediato y me atrajo a él, acomodando algunos mechones de mi cabello tras mi oreja. Inspeccionó mi rostro y suspiró pesadamente—. Sé que nunca podré llevarte a cenar a un lugar lindo o a pasear por la ciudad tomados de la mano porque seremos interrumpidos y odiaría que te sintieras incómoda ante tanta atención por mi culpa... Has sido tan buena y comprensiva conmigo últimamente con mi mundo de locos, y has trabajado tan duro que pensé que sería buena idea respirar un poco y descansar sin la necesidad de estar en cuatro paredes... solo nosotros dos.

Sonreí ante sus palabras y hundí mi rostro en su pecho, mis brazos rodeando con fuerza su cuerpo mientras sentía cómo el corazón se me iba a salir de la felicidad. Sentí sus labios en la parte superior de mi cabeza al mismo tiempo que me abrazaba de vuelta y pude escuchar con claridad los latidos de su corazón contra mi oreja. El hecho de que Harry se preocupara tanto por mí y por mis intereses antes que los suyos, me hacía sentir en las nubes y lograba que cada vez me enamorara más de él.

—Te amo —las palabras salieron ahogadas contra su pecho—. Pero no vuelvas a decir que es tu culpa... Nadie la tiene, ¿vale?

—Siento que has renunciado a tanto por mí —me dijo con el ceño ligeramente arrugado, su mano acariciando mi mejilla.

—Ni que Instagram fuera algo elemental en mi vida —rodeé los ojos divertida y alcé mis ojos para verlo—. Además, tengo a Tess que es mi fuente de noticias.

Efectivamente, luego del suceso con estos nuevos seguidores que solicitaban seguirme, decidí simplemente borrar la aplicación y mantenerme alejada en lo posible de todo tipo de prensa. Tess me había contado que el mundo se volvió loco al saber de mi existencia, y que había tanto comentarios buenos como malos. Sin embargo, había acordado con ella que sólo me contara aspectos realmente importantes y no meros rumores o comentarios insignificantes hacia a mí. Sabía que había un gran porcentaje de personas que no me estimaban y que quizás estarían escribiendo cosas horribles sobre mí, pero la verdad era que no me importaba. Tenía al hombre más maravilloso del mundo abrazándome y susurrándome lo mucho que me adoraba y con eso me daba más que por pagada. No quería sofocarme con cosas que no valían la pena.

—Estoy tan feliz —Harry dijo de la nada, ganando toda mi atención. Volví a alzar mi vista y me encuentro con sus ojos verdes viendo al horizonte, sus rizos bailando con el viento y mostrando sus dientes con una amplia sonrisa.

—¿En serio?

—Claro —dejó caer sus brazos para entrelazar nuestras manos—. Eres una mujer única, que cualquiera quisiera tener... gracias.

—Yo debería agradecerte por haberme traído a este hermoso lugar y por existir —hablé divertida y él sacudió ligeramente la cabeza.

—Gracias por estar en mi vida.

Como por instinto, agarré sus mejillas entre mis manos y me coloqué en puntillas para besarlo con fuerza. Él inspiró y me siguió el beso, sus labios sintiéndose como la tela más suave del universo sobre los míos, su exquisito aroma casi mareándome. No importaba cuántas veces lo besaba o por cuánto tiempo, siempre Harry Styles lograba que todos mis sistemas dejaran de funcionar ante su cercanía y su toque, a tal punto que sentía mis piernas flaquear siempre que nuestros labios se encontraban y mi corazón latir siempre que me sostenía como si su vida dependiera de mí.

Y la verdad de las cosas, era que mi vida también dependía de él... y por una extraña razón eso me aterró. 

***

N/a: yeah yeah, me againnn jeje aquí les dejaré algunas fotos del pueblo al que fueron! Para que se hagan una idea :)

Continue Reading

You'll Also Like

336K 17.9K 63
Esta es la segunda parte de London Love, si no la has leído aún, la puedes encontrar en mi perfil
194K 6.7K 82
"Puedo sentir que tienes el control de todo lo que soy y lo que he conocido, amarte es mi antídoto" 🏅 #1 golden ➖ 15/11/2020✨ - 15/07/2021✨ 🏅#2 sty...
286K 21.7K 59
𝐀𝐔 𝐌𝐚𝐫𝐯𝐞𝐥 +𝟏𝟖 La vida de fiestas, alcohol y aventuras de una noche termina para Darcy el día en que sus padres anuncian su compromiso con J...
693K 74K 127
1era y 2da temporada ♥️ Sinopsis: En donde Jimin es un Omega mimado y Jungkook un Alfa amargado, los dos se casan por sus propias conveniencias. ⚠️...