BEST YEARS | Luke Hemmings

Від Lukeslutzz

12.5K 705 135

Segunda parte de LOVER OF MINE. Pequeños trozos de la nueva vida que comparten Abi y Luke. [Debes leer la p... Більше

1. memories, petunia and french fries
2. si no quieres hacerlo, solo dímelo
3. puedes engañar a Luke pero a mí no
4. amelia amelia...
5. all i want for xmas is you
6. no preguntes tanto abi, déjate sorprender
8. ¿qué huele tan mal?
9. are those baby boots?
10. my purpose

7. abigail hemmings... i like that

1.2K 60 7
Від Lukeslutzz

12 de mayo.

—Mamá no —suspiré por décima vez —No es una buena idea y punto, sabes cómo se ponen.

—Y ya te dije que lo se hija, pero son familia —volvió a repetir al otro lado del teléfono —¿Cómo crees que se sentirían?

—¡No les va a importar! Hace años que no los veo, ni si quiera deben recordarse de mi —argumenté ya molesta —Ni si quiera hemos definido dónde va a ser la boda mamá.

—Mira te dejo porque estoy ocupada, pero piénsalo ¿okay?

—Si mamá —rodé los ojos —Hablamos luego, te quiero.

—Yo mas bebé —después de eso colgamos.

—¿Problemas de la boda? —se rió Luke mordiendo una tostada.

Para salir un poco de la rutina (y por qué honestamente nos daba bastante fastidio a los dos cocinar algo) fuimos a un restaurante a desayunar, Luke estaba libre de trabajo y yo por suerte no tenía turno en el hospital hasta dentro de 3 días.

—Si, que raro ¿no? —respondí sarcásticamente —¿Por qué no se podía casar antes Ronnie? Así mi mamá saciaba sus ganas de ser wedding planner.

Luke soltó una carcajada —¿Qué pasó?

—Le parece una buena idea invitar a mis tíos de Italia a la boda.

—¿Qué tiene de malo?

—¡Qué también quiere invitar a mis tíos de Francia!

—Bebé, necesitas explicarme mas porque no entiendo el problema —dijo intentando contener la risa.

—Mis tíos de Francia no se llevan bien con mis tíos de Italia porque son bastante pesados, hacen bromas a cada rato y siempre los molestan, se pelean en todos los eventos en los que coinciden —suspiré frustrada —En la boda de una de mis tías se comenzaron a tirar vasos... ¡vasos! No quiero que eso pase en nuestra boda —lloriqueé.

Para este punto Luke estaba casi llorando de la risa y yo solo lo veía feo —Vamos, tienes que admitir que da risa —se justificó.

—No la da —rodé los ojos —Ya le dije que son o los de Francia o los de Italia, ella que se decida, además aún ni si quiera sabemos dónde será, ella sólo asume que va a ser en Madrid.

—Hablando de eso, sería bueno decidirnos de una vez donde será, llevamos casi un año posponiendo la boda porque no nos ponemos de acuerdo.

Tomé un sorbo de jugo —Tienes razón, aunque no le eches la culpa a eso nada más —lo señalé —También la hemos pospuesto porque tú has estado de tour.

—Está bien —soltó una risa y levantó ambas manos en señal de rendición —Ha sido 50/50.

—Muy buen, así me gusta —sonreí satisfecha —Ahora, ¿dónde la haremos?

—Mis papás quieren que sea en Australia, no hay manera de sacarles de la cabeza eso.

—Los míos quieren que sea en Madrid, o en su defecto en Venezuela, no hace falta decir que esa última es una locura —volví a rodar los ojos.

—¿Por?

—Número uno, demasiado peligroso y número dos, prácticamente ya no queda nadie de mi familia ahí, y aunque admito que me encantaría porque desde pequeña lo soñaba, seria un disparate —me encogí de hombros.

—Vale entonces descartado... ¿qué hacemos? Creo que ninguno de nuestros papás está dispuesto a dar su brazo a torcer.

—¡Me parece tan tonta la discusión! Es nuestra boda, deberíamos poder hacerla donde queramos.

—Ahí te doy la razón, que se pongan así me parece absurdo.

—Ni me lo digas —bufé —¿Dónde quieres que sea?

—Bebé, si fuese por mi te llevaría ya mismo al registro civil y nos casaríamos —se rió.

—¿Por qué no lo hacemos? —pregunté emocionada.

Luke se rió y negó —Aunque suena tentadora la idea y nos ahorraríamos bastante dinero, sé lo mucho que deseas una boda, y no pienso darte menos que eso, además, a mí también me hace ilusión hacer algo lindo.

—Uy quien te viera Luke Hemmings, ¿quieres usar en vestido de novia también? —me burlé.

—Anda no fastidies —se rió —Seguimos sin tener lugar.

—¿Y sí la hacemos aquí? Al final aquí está nuestra casa, y así no complacemos ni a los míos ni a los tuyos.

—Me parece buena idea, además siempre vienen para LA, con que vengan una vez más —se encogió de hombros.

—¡Perfecto! En cuanto lleguemos a la casa se lo decimos.

—Lo más seguro es que estén de acuerdo, es un punto medio.

(...)

—Nosotros no estamos de acuerdo —negó con la cabeza Liz a través de la pantalla.

—Nosotros tampoco —culminó mi mamá.

Estábamos los 6 haciendo una llamada por Skype para proponerles la idea de hacer la boda en LA.

—¡Mamá! —grité frustrada —¿Por qué no?

—¡Porque tu casa es en Madrid! Bueno teóricamente es Venezuela.

—Mamá ya sabes que Caracas no es viable, y mi casa ahora es el L.A.

—Mamá, necesito que me apoyes aquí, llevamos un año deseando casarnos, ¿pueden estar de acuerdo y ya? —suspiró Luke.

—Toda tu familia se ha casado aquí en Australia, ¿por qué tú no? —defendió su punto Liz.

—Emm... porque ya no vivo en Australia —respondió como si fuera lo más lógico del mundo.

—Escuchen, los amamos mucho a los 4, ustedes dos son mis papás, Liz y Andrew son mi familia, los adoro, pero esta es nuestra boda, tenemos derecho a decidir.

—Abi cariño, por mi parte puede ser donde sea —se rió Andrew —El negocio es con Liz.

—Lo mismo por aquí cariño —intervino mi papá —¡Auch! Ele no me pegues —se quejó.

Luke y yo nos reímos por lo bajo.

—Digo lo mismo de Abi, quiero darle la mejor boda del mundo, y ya decidimos que será en LA.

—No —respondieron Liz y mi mamá al mismo tiempo.

Rodé los ojos, esto iba a ser imposible.

—Luke, hijo —llamó la atención de Luke mi papá —Entiendo que quieres darle la mejor boda a mi hija, pero yo correré con todos los gastos, es tradición que sea el papá de la novia el que pague todo.

—No Alberto, no podría dejar que hagas eso —negó rápidamente Luke.

—¿Cómo crees eso Alberto? Nosotros tampoco te vamos a dejar —exclamó Liz —Es bastante dinero.

—Nada de eso, es tradición y punto —se rió —Además por los vientos que soplan lo mas probable es que Abi sea nuestra única hija mujer que se case.

Todos nos reímos —Como te escuche Ronnie te mata.

—Saben qué es verdad, ahora sí me disculpan debo salir al trabajo —dijo observando su reloj —Ya los dejo poniéndose de acuerdo.

—Chao papi —me despedí.

—Adiós Alberto.

—Esa es mi señal para irme también —se rió Andrew.

—¿Entonces L.A? —sonreí esperando escuchar lo que quería.

—No —volvieron a decir las dos al mismo tiempo.

—Son imposibles —rodé los ojos.

—Miren, piénsenlo y hablamos luego ¿si? —propuso Luke cansado.

—Vale, pero creo que seguiremos igual —se encogió de hombros mi mamá.

—Adiós mis amores, adiós Ele, hablamos luego —se despidió con una sonrisa Liz y se desconectó.

—¿Pensaste lo de tus tíos? —enarcó una ceja mi mamá.

—¡Agh! —grité y me paré del sofá —Chao —dije colgando la llamada.

—Se va a molestar —advirtió Luke riéndose.

—No me importa, ¿yo si tengo que acceder a algo que no quiero pero ella no? Es injusto.

—Ven —me abrió los brazos de par en par y me acosté encima de él —Vamos a tener la mejor boda del mundo, va a ser hermosa y todo se va a arreglar —susurró acariciándome el pelo.

—Promételo.

—Te lo prometo bebé —me dio un beso en la cabeza —Pero aún está por discutir eso que dijo tu papá.

Me reí —Eso es con él, pero sabes lo terco que es.

—¿En Venezuela el papá de la novia en serio paga todo?

—Sip, usualmente el novio es un invitado más y ya —me reí —Lo principal es la novia.

—Ya, como en todas las bodas —se unió a mi risa —¿Ya estás mejor?

Asentí —Mucho mejor, gracias.

—Cuando quieras bebé —sonrió —Ahora solo nos queda escoger el lugar en L.A, y planear todo lo demás.

—¿Te parece poco? —me reí —Ahora es que viene lo difícil.

—¿Lo difícil no era convencer a nuestros papás?

—Bebé, en tal caso eso sería lo fácil —me reí —Y teóricamente no los hemos convencido aun.

—Cambio de idea, vamos al registro civil y terminemos con esto.

Me carcajeé —Eres un idiota Lucas.

—Más respeto enana.

Nos quedamos en esa misma posición a ver películas y pasar el resto del día, no teníamos más nada que hacer y era la mejor forma de pasar un sábado por la tarde si les soy honesta. No sé en que punto de la película quedé muerta pero me desperté por el sonido de mi teléfono. Abrí los ojos poco a poco y vi que Luke estaba roncando y con la boca abierta. Me reí y procedí a buscar mi teléfono para responderlo, quien fuera el que estuviera llamando no tenía intenciones de colgar.

—Hola mamá —respondí con la voz ronca una vez que encontré el teléfono.

—Hola cariño, ¿te desperté?

—Un poquito, ¿qué pasó?

—A ver, decidí hablar con Liz, porque queremos que puedan comenzar a planear su boda y porque tú papá se puso particularmente fastidioso, y las dos estuvimos de acuerdo en que tienen derecho a escoger donde será la boda, estuvo mal de nuestra parte tomarnos el derecho de opinar en algo que no nos corresponde, así que lo siento cariño.

Sonreí ampliamente —¡Gracias mami! Por fin vamos a poder comenzar con los preparativos, va a quedar todo perfecto.

—¡Pero! —me interrumpió, sabía que había un pero —Mi única condición es que invites a tus tíos de Francia —sabía que estaba sonriendo maliciosamente.

Bufé —Está bien mamá, pero si se ponen a pelear vas a ser tú quien los separe ¿okay?

—¡Okay! Voy a llamar ahora mismo a tu tía Rosalinda, son los únicos que no saben aún que te vas a casar —exclamó emocionada y después de colgó, ni si quiera me dio tiempo a despedirme.

Me reí, mi mamá es un personaje, pero así la amamos.

(...)

23 de julio.

—Bebé —llamé su atención —¿Blanco o beige? —le pregunté sosteniendo en cada mano una pequeña cartulina de los dos colores mencionados.

—¿No son iguales? —preguntó rascándose la nuca confundido.

—¿Cómo van a ser iguales Lucas? —preguntó ofendida Crystal —¡Se nota la diferencia claramente!

—¿En qué momento escogiste a Crystal como tu wedding planner? —la molestó Luke.

—No empiecen otra vez, y no le digas así, ahora solo escoge un color.

—Mmm —comenzó a inspeccionarlos —Beige —sonrió.

—¡Bien! —exclamamos Crystal y yo al mismo tiempo y chocamos las manos.

Luke soltó una carcajada —Si ya sabían que querían el beige ¿para qué me preguntan?

—Porque quiero que te sientas incluido y que participes bebé —hice un puchero —No quiero ser de esas típicas novias maniáticas que hacen todo sin preguntarle a su novio y nunca los dejan opinar.

—Yo fui así —dijo Crystal.

—Exactamente —me reí —Quiero evitar eso.

—¿Para qué eran las muestras de colores?

—Las invitaciones, ahora ¿la letra dorada o plateada?

—Mmm... plateada —Crys y yo hicimos una mueca enseguida —No no, dorada —cambió rápidamente.

—¡Excelente Luke! Como un buen novio —le guiñó el ojo Crystal y escribió en su agenda.

—Están locas —negó con la cabeza riéndose.

—Por cierto, deberíamos ir ya a la cita con el diseñador —dijo Crystal observando su reloj —¿Ya sabes más o menos qué quieres?

—La verdad no, esperaba ir y que él me aconsejara un poco —me encogí de hombros.

—Eres un desastre, yo sabía que vestido de novia quería desde que tenía 10 años —negó con la cabeza.

—Ya, pero no todas están locas como tu Crys —se burló Luke.

—Desde ya te lo aviso, como siga así te vas a tener que conseguir otro novio para la boda —me advirtió rodando los ojos y provocando las risas de Luke —Anda, vámonos, ya las demás van en camino.

Asentí y me puse de pie.

—¿Van todas?

—Si, también va a diseñar los vestidos de las damas de honor.

—¿Las damas de honor no pueden ir con el vestido que quieran?

—Dios, que poco sabes de bodas —lloriqueó Crystal.

—Chao bebé, te amo —me despedí del chico dándole un casto beso en los labios.

—Yo mas, que les vaya bien.

Las dos salimos de la casa y emprendimos nuestro camino hasta el taller del diseñador, había escogido al mismo chico libanés al que le había comprado el vestido en Australia, su técnica y diseños eran preciosos, sería un poco elevado de dinero pero valía cada dólar que costaba.

Llegamos a los pocos minutos y ya adentro nos estaban esperando las otras 2 chicas.

—Al fin, se tardaron una eternidad.

—Fueron solo 10 minutos Marie, no seas exagerada —se quejó Crystal.

—¿Y mi sobrina? —pregunté haciendo un puchero, tenía ya varios días sin verla. Amelia estaba enorme, ya habla y camina, es una dulzura de niña, cada vez que me veía me decía tía y les juro que siento cómo el corazón se me agranda tres veces más.

—La dejé con Ash, quería llevarla a no se que parque, si la vieras, ayer me preguntó por su tía Abi, te extraña mucho, y eso que la viste el fin de semana.

—¡Es mucho tiempo! Amo esa niña, ya la quiero cuando este caminando en el cortejo llevando los anillos.

—Se va a ver preciosa, deberíamos preguntarle al diseñador si puede hacerle un vestido, y va combinada con todas nosotras —propuso Marie.

—Por favor, se vería tan tierna —exclamó Bea emocionada —Aún no puedo creer que te vayas a casar Abi, que emoción.

—Si, la verdad es que yo tampoco me lo creo —me reí —A veces pienso que es mentira, hace un año al último que veíamos casado era a Luke, y sin embargo aquí estamos.

—Lo sé, lo juro que pensaba que antes se casaba Marie —se rió Crystal.

—¡Qué dices! A Calum lo veremos frente a un altar cuando tenga 40 años —rodó los ojos la chica — ¡Mis papás no ven la hora de que me lo pida, no sé en qué idioma decirles que primero se va a casar Zara.

—Créeme, entre Calum y mi hermano, primero te lo propone Calum —me reí —Nadie le tiene más miedo al compromiso que Tomás.

—Pueden pasar —nos interrumpió con una sonrisa una de las chicas que trabajaba en el taller.

Las dos chicas se pusieron de pie y entramos a la oficina.

—¡Srta. Abi Fontaine! Que placer tenerte aquí —sonrió un chico de no mas de 30 años parándose de la silla que estaba detrás del enorme escritorio —Soy Max Michaels, el representante de Zuhair Murad en L.A.

—El placer es mío —sonreí estrechando su mano —Gracias por hacer un hueco en su agenda y podernos recibir hoy.

—Oh no, nada de eso, las conozco a las 4 —se rió —Mi hermana menor es fan 5SOS por decir poco, y también he tenido el placer de leer algunos de los estudios que ha publicado.

—Gracias —me reí también.

—Es un placer conocerlo también —sonrió Crystal.

—Muy bien, una vez hecha las presentaciones, entremos en materia, lo que más me gusta —exclamó emocionado sentándose nuevamente en su silla —Por favor, tomen asiento —señaló los sillones que estaban enfrente del escritorio —Y cuéntenme.

—Pues queremos hacer con su firma tanto mi vestido de novia como los vestidos del cortejo, que son mis tres amigas aquí presentes —sonreí.

—¡Magnífico! No digo esto porque trabaje aquí, pero Zuhair diseña los mejores vestidos, no se equivocaron en la elección.

—Estamos totalmente de acuerdo, hace un año visitamos su tienda en Sydney y pudimos ver algunos de sus diseños —comentó Marie.

—Y eso que lo que va a las tiendas no es lo mas exclusivo, la verdadera magia se hace en privado para nuestros clientes detrás de estas puertas —se rió —¿Tienen alguna idea de corte del vestido, o algún diseño?

—La verdad es que venimos un poco en blanco —solté una risa nerviosa —Soy una pésima novia, no sirvo mucho para estas cosas —arrugué la nariz.

—Oh querida no eres la única, créeme, empecemos entonces por las damas de honor, serían 3 vestidos ¿correcto?

—Si, y el de su hermana —comentó Bea —Será la madrina de la boda, pero está en Madrid actualmente ¿eso es un problema?

—Para nada, puedo concertar desde aquí una cita con nuestros talleres de Madrid para que vaya y le tomen las medidas una vez logremos diseñar el vestido que les gustaría llevar a las chicas del cortejo.

—Perfecto —sonreí emocionada —También queríamos ver si podrían diseñar uno para mi pequeña sobrina, tiene apenas dos años, llevará los anillos.

—¡Qué ternura! Sería un honor, definitivamente la modelo más linda que tendremos en la historia de Zuhair Murad —dijo provocando las risas de todas.

—Que nervios —me mordí el labio inferior.

—No tienes por qué, estoy seguro de que podremos hacer algo que te encante para tu noche especial —me guiñó el ojo —¿Cuándo será la boda? —preguntó abriendo su agenda.

—Tenemos de fecha tentativa el viernes 15 de diciembre.

—Mmm, poco tiempo entonces —murmuró anotando.

—¿Poco? —pregunté sorprendida.

—Usualmente las novias vienen al menos un año antes, pero no te preocupes, 5 meses es más que suficiente para nosotros —sonrió —Ahora, les voy a explicar un poco la dinámica antes de mostrarles los diseños, esto es para que sepan cómo es el procedimiento y así piensan si les conviene o no.

Todas asentimos.

—Vale, el vestido se confeccionará en París que es donde se encuentra ubicado Zuhair, se harán tres pruebas de cada vestido, la base, luego cuando tenga todos los detalles y por último la prueba final con el vestido completamente confeccionado, si vivieran en París podríamos hacer más pruebas pero entiendo que viven aquí, los vestidos volarán desde Francia hasta Los Ángeles, a menos que ustedes se quisieran desplazar hasta París, es más complicado, pero es su elección, así que cada vez que tengamos las pruebas deben decir lo que les gusta o lo cambios que quieren hacer.

Era bastante información para procesar pero valía completamente la pena, no me quedaba dudas de que iban a ser vestidos perfectos.

—Creo que todas estamos de acuerdo —dije viéndolas a las tres y asintieron —Sabemos que valdrá la pena.

—¡Perfecto! —aplaudió —Ahora les voy a mostrar algunos diseños genéricos recientes, tengamos en cuenta que la base de los vestidos casi siempre son iguales, lo que realmente los hace especiales, son los bordados, colores, detalles, etc. Así que no se asusten cuando les digo "genéricos" —hizo comillas en aire —Los vestidos serán únicos y se les puede hacer cualquier modificación que no les guste.

—Está bien, ¿primero los del cortejo? —pregunté.

Así fue como poco a poco nos fue enseñando todos los bocetos que tenía, si en papel se veían preciosos no me puedo imaginar como se verían una vez que estuviesen materializados, tardamos un par de horas como era de esperarse pero logramos escoger uno para el cortejo y para la madrina, que fueron los más rápidos, también habíamos decidido que rosa viejo sería en color y con bastantes bordados, que es con lo que se caracteriza la firma del diseñador. En cuanto a mi vestido si fue mucho más difícil, sin embargo en cuanto vi el que quizá fue el décimo u onceavo boceto sabía que no quería ver más ningún otro, ese sería mi vestido.

—Entonces creo que eso sería todo por hoy —comentó con una sonrisa después de tomar las medidas de cada una —Las muestras de telas, encajes y bordados de los colores que escogieron si las pido hoy mismo, que es lo que haré, llegan en tres días, así que podemos concertar de una vez esa cita para que vengan escojan los que más les gusta y se comiencen a confeccionar los vestidos.

—Suena magnífico —aplaudí emocionada —Muchas gracias, creo que hablo por todas cuando digo que no podemos estar más felices de que ustedes hagan los vestidos.

—¡Sí! Todo se ve qué quedará espectacular —me apoyó Bea.

—El placer es nuestro —nos guiñó el ojo —Hasta el lunes entonces —sonrió.

Nos despedimos del chico y salimos de la oficina con una sonrisa de oreja a oreja, aunque aún faltaban 5 meses, estaba casi que saltando en una pierna de la emoción, no podía esperar a que llegara el gran día.

(...)

17 de septiembre.

—Mi vida —llamé a Luke entrando al estudio que teníamos en le casa, el chico se encontraba sentado en el escritorio con la mirada fija en su computadora —Uy perdón, debí tocar antes de entrar, si quieres sigue con eso bebé.

—No no, tranquila —sonrió —Pasa —se giró sobre la silla de escritorio, cerró la pantalla de su computadora y puso su atención totalmente en mí.

—¿Estabas buscando vuelos? —pregunté confundida.

—No seas chismosa —se rió —Pero sí, ya que tu papá no me deja poner ni un solo dólar para la boda, estoy organizando la luna de miel más espectacular que vayas a ver en tu vida —sonrió con autosuficiencia.

—¡Uy! ¿A dónde vamos? —pregunté emocionada acercándome e intenta abrir la computadora.

—¡No! Nada de eso, será sorpresa, ahora ¿qué me querías preguntar?

—Ah sí, eso —solté una risa —Quería preguntarte si ya habías ido junto con los chicos a lo del traje —le dije leyendo las cosas que tenía apuntadas en mi agenda sobre lo que faltaba de la boda.

—Mierda —chocó la palma de la mano contra su frente —Sabía que olvidaba algo.

—Gordo, tienes que hacer eso, recuerda que no es solo el tuyo si no también el de Michael, Calum, Ashton y Ben.

—Lo se bebé, lo siento, lo olvidé por completo —bufó —¿Cuando era la cita?

—La tenías ayer por la tarde, puedo volver a llamar y ver cuándo tienen otra —dije sacando mi teléfono del bolsillo.

—No, fue mi culpa, yo llamó, tengo el número de la firma.

—Vale, que no se te olvide —advertí sonriendo.

—Lo prometo —se rió —Ven aquí —pidió palmeando sus piernas, en señal de que fuera y me sentara sobre ellas, eso fue justo lo que hice —Ya falta mucho menos ¿estás feliz? —preguntó repartiendo besos por mi nuca y costado del cuello.

—Para, me haces cosquillas —dije entre risitas y escalofríos —Demasiado, no puedo creer aún que pronto seremos esposos, ¿sabes el enorme paso que es eso? —me mordí el labio inferior con emoción.

—Si —se rió —La verdad es que da nervios, pero nervios lindos, creo que es más emoción por poder compartir el resto de mi vida contigo.

—Serás el mejor esposo del mundo —sonreí ampliamente —No tengo dudas.

—Y tú serás la mejor esposa, pero eso no es de sorprenderse, porque eres la mejor en todo —ambos nos carcajeamos.

—Eres un idiota —negué aún riéndome.

—Oye, quería hacerte una pregunta importante —comentó algo nervioso, tenía sus brazos pasados sobre mi cintura y jugueteaba con mi mano izquierda, ambos admirábamos en el enorme anillo que reposaba en mi dedo.

—Dispara Hemmings —dije algo preocupada, se había puesto serio en cuestión de minutos.

—Es que no sé como preguntarte la verdad —tartamudeó un poco —No quiero que pienses que digo esto de manera machista ni nada, es solo que quiero preguntarlo igual, porque sería tierno, pero si no quieres no pasa nada, en seri...

Lo interrumpí —Bebé, puedas preguntarme lo que sea, no te tienes que poner tan nervioso —dije soltando una risita.

El chico tomó una bocanada de aire y la soltó —Te juro que ni preguntarte si querías casarte conmigo me había costado tanto —se rió —El punto es que, quería preguntarte si cambiarías tu apellido por Hemmings —susurró lo último con algo de miedo.

Este rubio no podía ser más tierno en serio, sin embargo, sus nervios por una pregunta tan tierna e inocente me habían dado un ataque de risa.

—Vale vale, no tienes que reírte —rodó los ojos —Ya sé que no vas a querer.

—¿Cuándo dije eso? —pregunté calmando mis risas y parándome de sus piernas para sentarme sobre mis rodillas en el piso y entre sus piernas.

—Creo que tu pequeño ataque de risa lo dice todo —dijo obvio.

—Bebé —tomé sus cachetes —Nada me haría más feliz que llevar tu apellido, si no lo había mencionado antes es porque no sabía si tu querías, no es muy común en esta época, pero claro que quiero.

Al rubio se le formó la sonrisa más grande que haya visto en su cara y se acercó para darme un largo beso cargado de amor y emoción.

Abigail Hemmings —murmuró sobre mis labios después de separarnos —Me gusta cómo suena.

(...)

a/n: un poco aburrido, lo sé, pero quería hacer un capítulo dedicado a los preparativos para poder centrarme solo en la boda en el próximo y no perder tanto tiempo con los detalles.

Solo quiero decir dos cosas, la primera es que escribir esto me hace daño psicológicamente, quiero un Luke en mi vida :'(

Y la segunda es que me faltan 174 días para ver el concierto de los chicos, estoy demasiado emocionada, es la segunda vez que los voy a ver en vivo, pero fucking coronavirus, si no fuera por eso ya los hubiese visto 🥺.

Espero que les haya gustado! Espero ver sus comentarios, no saben lo mucho que me gustan y me hacen reír!

Las quiero.

Продовжити читання

Вам також сподобається

608K 81.4K 46
Una sola noche. Dos mujeres lesbianas. ¿Un embarazo? ¡Imposible!
26.1K 665 11
Donde Sara y Jaden se odian o es lo que todos piensan incluso ellos mismos
518K 53.2K 133
La verdad esta idea es pervertida al comienzo, pero si le ves más a fondo en vastante tierno más que perverso. nop, no hay Lemon, ecchi obviamente, p...
691K 89.7K 63
"Y si no eres el amor de mi vida diré que me equivoque de vida y no de amor" Cuando Izuku observó como Kacchan le decía que sería padre, supo que en...