Antes que nada, anteriormente ya había publicado un capítulo con el mismo título que este, la razón por la cual no es el mismo es la siguiente:
Wattpad ha hecho de las suyas y me ha eliminado ese único capítulo al igual que otros de otros libros.
No podré publicar ese capítulo de nuevo ya que lo redacté aquí mismo...todo, eso quiere decir que no tenía ningún respaldo.
Y ahora solo vivirá en nuestra memoria, ya intente contactar con el equipo de soporte de la plataforma pero aún no me dan solución.
Esperemos puedan hacer algo.
Bueno, cambiando de tema:
Este capítulo podría ser confuso...
¿Por qué?, bueno... es narrado por ambos, pero no existe una separación de diálogos, solo cambia de uno a otro en determinado momento, por lo que deben tener cuidado al leer o terminarán enredándose como yo 😂
Para evitar dichas confusiones cada que se realice ese cambio encontrarán este símbolo ( 🟣 ) al principio de los párrafos, los demás creo que si se entiende quién dice qué.
Esa es la única advertencia, bueno eso y que las cosas se ponen mucho más intensas a comparación de los capítulos anteriores.
En fin, sin más que agregar, espero disfruten de este capítulo, tanto como lo hice yo 😉
¡Nos leemos al final!
-¡Ah!...- solté un gemido mientras mordía mi labio para evitar dejar escapar más muestras de lo que nos encontrábamos haciendo.
-Shhh, van a escucharnos.- dijo él a modo de respuesta en voz baja.
Asentí, algunos mechones de cabello habían abandonado mi estilizado peinado y ahora me hacían cosquillas sobre la piel de mi cuello.
-¿Crees que puedan escucharnos?.- pregunte en un susurro.
-Podría ser, las paredes son demasiado delgadas, ah...- respondió él aferrándose a mi espalda para al igual que yo intentar guardar silencio.
Y es que todo había sucedido demasiado rápido.
Hace algo así como un cuarto de hora estábamos discutiendo respecto a la poca higiene que había en mi habitación, y luego pasamos a lo mismo de siempre, el pelear porque no comía lo suficiente, fue ahí cuando los ánimos comenzaron a tornarse más pesados.
Nuestras peleas regularmente involucraban esos temas, pero en aquel momento en el que me hallaba sentada con la espalda pegada a la pared y las piernas estiradas sobre la cama de Levi me encontraba segura de mis argumentos, él a la vez acercándose de forma certera hasta donde me encontraba y sonando bastante enojado fue que comenzó todo esto.
-¡No puedes continuar ignorando las cosas!.- dijo y en su voz era notorio el reproche por mis acciones.
Yo me encogí de hombros, crucé mis brazos y giré el rostro para ignorar lo que sea que quisiera seguir diciendo.
Aún más molesto por mi actitud, lo observé de soslayo acercarse hasta el lugar vacío sobre la cama hasta quedar arrodillado a un costado mío, y sorpresivamente me tomó por los hombros, agitándome un poco.
De esa forma fue que consiguió que lo mirara de nuevo, y ahora también me encontraba molesta.
-¡Suéltame, idiota!.- dije intentando quitar sus manos de mis hombros.
-¡No!, es que acaso piensas evadir todo lo que la gente dice, ¿hasta que no tengas nada más que dar?.- dijo con un tono más alto.
Nos observamos, ambos con semblantes furiosos.
-¿Y si así fuera que?, no tienes derecho a opinar sobre mis decisiones, si quiero permanecer despierta por días puedo hacerlo, si esos mismos días quiero concentrarme únicamente en mis investigaciones e ignorar la comida es mi problema, no tienes porque hacerte cargo de mi, somos compañeros... más bien amigos, pero eso no te da derecho a entrometerte en mi vida.- dije sacudiéndome intentando zafarme de su agarre.
Decir que estaba por enloquecer y hacer que todo se saliera de control era una mera suposición, podía sentir el enojo superarme, era tal mi molestia que comencé a soltar golpes de forma aleatoria con la esperanza de poder darle en su feo rostro para que así aprendiera a no meterse conmigo.
Mi cambio de actitud, así como mis palabras parecieron calar en Levi, por lo que continuo sujetando mis hombros e intentando esquivar los puñetazos que le lanzaba de forma ocasional.
Eran pocas las ocasiones en las que las cosas escalaban así de rápido y terminábamos peleando, así tal cual, como si estuviéramos en un entrenamiento, con el afán de hacernos daño, bueno en este caso yo quería hacerle daño para poder sacar toda mi frustración.
-¡SUÉLTAME!.- volví a gritar, mientras podía sentir mi puño dar de lleno contra su costado derecho.
Aquel había sido un buen golpe, ya que se quedó sin aliento un instante, pero aún así no me soltó.
Estuve a segundos de comenzar a utilizar mis piernas, una clara ventaja para mi cuando él sorpresivamente soltó mis hombros y me empujó hasta que mi pecho chocó con su torso.
El movimiento me tomó desprevenida y únicamente me vi obligada a bajar mis brazos, dejándolos descansar a los costados de mi cuerpo mientras sentía a Levi abrazarme con fuerza, sus brazos rodeando mi espalda mientras respiraba con dificultad.
-Dame un momento quieres.- dijo.
Yo no sabía que hacer, miraba en todas direcciones intentando comprender que había pasado, y como es que ahora estaba siendo abrazada por mi compañero.
-¿¡Qué!?.- pregunte confundida al sentir su mentón descansar sobre mi hombro derecho.
-Sabes que me encanta pelear contigo, es divertido... pero no así.- dijo en voz baja.
De inmediato el enojo que había acumulado comenzó a esfumarse, notando lo que intentaba decirme.
Hice una mueca al caer en cuenta lo que le había hecho, por primera vez en mucho tiempo no estaba orgullosa de mis acciones, pelear con él y golpearlo era divertido, justo como él mencionó, pero no cuando lo hacía con el afán de lastimarlo y que no fuera con fines de capacitación para los soldados.
-Ese golpe tuyo casi me rompe algo.- volvió a repetir ahora con su tono de voz regular.
Se alejó de mi, terminando con aquel abrazo improvisado y de esta forma quedando frente a frente.
En cuanto se incorporó y compartimos miradas lo noté incómodo, y enseguida se llevó una mano al costado en donde había recibido el golpe.
-¿Cómo es que te subestiman por ser mujer?, eres un peligro, en tu laboratorio o fuera de el...- dijo pasando su mano por el área afectada y haciendo una mueca de desagrado.
-No era mi intención.- dije aún impresionada por aquel repentino desenlace de eventos, mientras levantaba ambas manos en señal de rendición.
-Por supuesto que fue tu intención, querías dejar en claro tus opiniones, pero creo que no había necesidad de ser tan violentos.- y bueno, tenía razón.
-Bueno sí, pero... ¡es que todo el tiempo me hablan de lo mismo y estoy harta!, y supongo que explote aunque no quería lastimarte.- dije ahora en voz baja colocando mi mano sobre su hombro.
-Tienes que entender que si lo escuchas muchas veces y no haces nada puede terminar dañando tu salud, y de nada habrá servido que te pases semanas enteras durmiendo una hora y sobreviviendo a base de agua y bocadillos si vas a terminar en cama sin poder hacer lo que tanto te gusta.- terminó su comentario retirando su mano de su costado.
-¡Lo entiendo!, pero siempre hay alguien vigilándome, es como si no confiaran en que puedo lograrlo yo sola.- dije sintiéndome exasperada.
-No es que no confiemos en ti, es solo que nos damos cuenta que no es tu prioridad, y eso es algo que si deberías tomar en cuenta.- repitió.
Me crucé de brazos, estaba irritada más no molesta, lo entendía, sabía que estaba preocupado por mi, pero también entendía que lo que decía era cierto.
-Hange.- me llamo.
Lo ignore, no quería que lo de hace un momento se repitiera.
-Hange...- volvió a mencionar mi nombre.
Y ahora que notó que mi intención era seguir ignorándolo, cambio de estrategia nuevamente.
~Hange...~ dijo con voz cantarina, un tono que nunca lo había escuchado emplear, acercándose a mi y abrazándome.
De forma que mis brazos aún cruzados se quedaron en medio de ambos.
-Si lo repetimos una y otra vez es para que lo tengas en cuenta, no queremos verte enferma, puedes dudarlo de los demás pero nunca de mi, solo quiero que estes bien, ¿acaso es mucho pedir?.- preguntó tocando con la punta de su nariz el contorno de mi oído derecho.
El mal humor se estaba desvaneciendo tan pronto podía sentir a Levi propiciándome dichas caricias de forma continua, era muy raro que él siendo como era se animara a demostrar afecto, me daba gusto que así fuera pero sentía que debía poner algo de resistencia.
Sabía que perdería pero nada me costaba intentarlo.
-No es mucho pedir.- respondí a lo que anteriormente había preguntado, al finalizar tome mi labio inferior entre mis dientes evitando así que un suspiro me traicionara al abandonar mis labios.
-Hablaré con los demás, intentaré que no te mencionen nada al respecto, para que entonces así puedas demostrar que estás comprometida a cuidar de tu salud.- mencionó ahora pasando sus labios muy cerca del costado de mi cuello, aunque sin tocar la piel expuesta.
Aquello era una tortura que seguramente él estaba disfrutando, yo también lo hacía pero no podía ceder así como así, por lo menos no tan pronto.
-Eso suena bien.- respondí girando mi rostro a un lado para que Levi tuviera mejor acceso a mi cuello.
Él soltó una risa ligera sobre mi piel, y luego sin más dejo un beso en el área.
-Perfecto.- finalizó una vez retiró sus labios de mi piel.
Y se volvió a retirar, deshaciendo el abrazo y privándome de su cercanía.
-¡Oye...!.- me quejé una vez que el se alejó.
-¿Qué?.- preguntó con fingida inocencia.
-No me vengas con eso...- dije mirándolo de forma acusadora.
Él se cruzó de brazos y giró el rostro, justo como yo había hecho.
Bien, él ganaba.
Tan pronto como quite mis brazos de mi pecho me abalancé sobre él, ahora vería ese enano.
-No es justo que me dejes así.- dije abrazándome a su torso.
Mientras dejaba pequeños besos sobre su cuello y costado de su rostro.
Podía ver la leve sonrisa que se formaba de a poco sobre sus labios, a la par que yo continuaba dejando esos besos sobre toda área de piel visible a mi alcance.
-No deberíamos estar haciendo esto.- mencionó él en su siempre impasible tono.
-¿Y qué sugieres que hagamos entonces?.- pregunte levantando sugestivamente las cejas y separándome un poco para poder observarlo.
-Yo no me refería a lo que estás pensando, si no a dormir, pero tu tienes la última palabra.- dijo jalando la banda elástica de mi cabello con la cual lo sujetaba, provocando así que algunos mechones de este cayeran en todas direcciones.
Levi se dedico a intentar darle orden mientras esperaba que le diera mi respuesta en cuanto a las actividades que realizaríamos a continuación.
-Pues ya que lo mencionas... me gustaría por fin intentar tener sexo, ¿qué dices?.- cuestione pasando mis brazos sobre sus hombros.
-Ya te lo dije, la decisión es toda tuya.- dijo acomodando un mechón de mi cabello detrás de mi oído.
-Pero tú también debes opinar, así que dime.- pregunte.
-Sí, ¿por qué no?.- dijo encogiéndose de hombros.
-¡Hay qué hacerlo entonces!.- le dije emocionada.
-Pero debemos ser discretos esta vez.- dijo a modo de advertencia, ya que si bien no era lo que llamaríamos tarde algunos reclutas seguramente ya se encontraban en sus respectivas habitaciones realizando cosas, volviendo de la cena o bien preparándose para dormir.
-Podemos hacerlo.- respondí con seguridad.
-Eso espero...- dijo con dramatismo poniendo una cara de fingida preocupación.
De la cual comencé a burlarme unos momentos después, él me siguió el juego y comenzó a reír conmigo.
-¿Cómo haremos esto?.- finalmente preguntó.
Me lo pensé por un momento, ya sabíamos lo que le gustaba al otro, y contábamos con la suficiente confianza como para decir si algo era o no de nuestro agrado por lo que me pareció una buena idea el hacerle saber lo que tenía en mente.
🟣
-¿Qué te parece si por el momento nos dejamos la ropa tal cual?, ya veremos cómo se desarrolla todo poco a poco, ¿qué dices?.- la escuche mencionar entre los sonoros besos que estaba dejando sobre mis mejillas.
-Por mi está bien.- conteste.
Ella entonces asintió y luego se puso de pie.
Observó con atención mi cama, dejándome esperando por sus indicaciones sobre la misma.
-Siéntate como yo lo hice antes de que sucediera toda nuestra discusión.- me indicó señalando el lado derecho de mi cama.
Avance de rodillas por el colchón y luego me senté con la espalda apoyada en la pared, a falta de cabecera la pared siempre era un buen soporte.
-¿Así?.- pregunte estirando mis piernas.
Ella aplaudió y yo le dediqué una mirada llena de fastidio.
Entonces Hange avanzó nuevamente hasta la cama y simplemente pasó una de sus largas piernas sobre las mías, así que quería quedar sentada sobre mi de nuevo...
Aquella posición parecía gustarle demasiado, no dije nada, solo me limite a verla acomodar su peso sobre mi, cada rodilla a un costado de mi cuerpo.
Estuvo así un momento hasta que al parecer encontró la posición correcta y simplemente dejó caer su pelvis a la altura de la mía, y debido a que lo hizo con el nulo tacto con el que se caracterizaba, solté un gruñido por el momentáneo dolor que me causó tenerla sentada sobre mi miembro.
-Perdona mi torpeza, lo olvide.- dijo como si recién se diera cuenta en donde se encontraba sentada.
-Recuerda que debajo tuyo hay un pene, está vivo, y así me gustaría que se mantuviera... con vida.- dije con sarcasmo.
Ella comenzó a reír a causa de mi mal chiste y sin esperar más acercó su rostro al mío.
Como en ocasiones anteriores nos besamos pausadamente, disfrutando del momento y de la efímera tranquilidad que este espacio nos brindaba.
Nuestros alientos chocaban sobre la boca del otro debido a la cercanía, y aquello no era un problema, por lo que mis manos se dirigieron hacia su cabello y las de ella se quedaron descansando sobre mis hombros.
Por algunos minutos todo transcurrió como normalmente lo hacía, solo disfrutábamos de nuestra cercanía, pero entre aquel beso que poco a poco iba subiendo de intensidad pude sentir que ella comenzaba a mover sus caderas sobre las mías, buscando así generar algo de fricción entre nuestro cuerpos.
Y al parecer la coordinación en este tipo de casos no era nuestro fuerte ya que a pesar de que ella continuaba haciendo círculos con su pelvis, no había ningún cambio en realidad.
Me aleje del beso mientras ella me miró confundida.
-Aplica un poco más de presión cuando hagas ese movimiento, yo levantaré mi cadera y veremos si así funciona.- le dije.
Ella sonrió y se acercó a mi oído susurrando un Sí.
Entonces comenzó con el vaivén nuevamente, y yo hice lo que había comentado, y de esta forma sintiendo que la tela sobre mi miembro rozaba de forma más directa con la de mi compañera.
-Levi... eres todo un conocedor.- dijo medio en seria, medió burlona en mi oído.
Mis manos que antes se encontraban en su cabello salieron de ahí y se posaron en su cintura, ella comenzó a dejar besos por mi rostro mientras intentábamos tener buena coordinación.
Decidí que si estábamos dispuestos a hacer esto sería buena idea acelerar un poco las cosas, y de esta forma fue que colé mis manos debajo de la blusa color amarillo que ella llevaba puesta.
Su respuesta fue un gemido en un tono bajo que honestamente fue dirigido de forma inmediata a mi parte inferior.
-Creo que con la fricción no será suficiente.- mencionó ella en voz baja.
Asentí, ya que sí se sentía bien cada vez que la tela de nuestros uniformes rozaba con nuestros respectivos sexos pero no era lo que llamaríamos maravilloso.
-Mete tu mano en mi pantalón.- dijo ella en un tono demandante.
Pase saliva, eso se había escuchado demasiado bien, y a mi sistema nervioso le había gustado.
Hice lo que ella me pidió, desabroche su pantalón, haciendo espacio suficiente para poder ingresar mi mano a través de el, ella realizó lo mismo sin dejar de mirarme.
-Mierda, no sabía que eras experta.- dije con sarcasmo.
-Puedo hacer muchas cosas con las manos sin siquiera tener que observar.- respondió orgullosa de sí misma.
Así fue como poco a poco ella comenzó a deslizar su mano dentro de mi pantalón, mientras yo hacía lo mismo con el de ella, disfrutando de la sensación de tener la experiencia de antes pero de forma diferente.
Ahora mismo solo nos estábamos dedicando a acariciarnos el uno al otro con la barrera que delimitaba nuestra respectiva ropa interior, si bien la sensación no era intensa aún, era mucho más disfrutable a comparación de simplemente estar rozándonos con la esperanza de avanzar.
-Cualquier cosa que no te agrade o te perezca incómoda dímela y me detendré.- Hange asintió y luego dijo.
-Lo mismo va para ti.- finalizó dándome un sonoro beso en los labios.
Si habíamos decidió ir a por todo entonces eso haríamos, comencé a intentar deslizar mis dedos a un costado de la ropa interior notando por primera vez la humedad que ya se percibía en aquella zona.
Hange se aferró a mi, al sentirme realizar aquello y dejando su rostro escondido a la altura de mi cuello, al parecer lo estaba disfrutando ya que su agitada respiración así me lo indicaba.
-Has lo de la vez pasada.- me dijo, lo que finalmente se traducía en que quería que ingresara nuevamente mis dedos dentro de ella, masturbandola con el fin de poder prepararla para cuando decidiéramos de una vez pasar a aquello de la penetracion.
Asentí siguiendo sus órdenes, dedicándome a ingresar uno solo de mis dígitos, mientras que con mi pulgar intentaba acariciar toda la zona externa, esparciendo así aquella humedad.
-Eso se siente bien.- comentó mientras delineaba con la punta de su lengua el contorno de mi oído.
Continué con aquello mientras sentía la mano de mi compañera únicamente rozar por encima de la tela mi miembro aún dentro de mi ropa interior.
Levante un poco las caderas para indicarle que hiciera más presión, ella respondió colocando la palma de su mano contra mi pene haciendo que un gemido se quedara a mitad de mi garganta.
Si esto apenas comenzaba, y ya lo estábamos disfrutando, no me imaginaba cómo sería llegar al final.
Mi mano libre descansaba en su espalda, dándome así un mejor soporte, pero después de pensármelo mejor decidí realizar lo de la vez anterior, así que abriendo los botones de su camisa llegue hasta aquella tela extra que cubría sus senos, y deslicé mi mano dentro sin retirarlo y tocando de forma un tanto tímida sus pezones.
El gemido que soltó Hange esta vez seguro fue audible para alguien en el pasillo por lo que tuve que indicarle que guardara silencio haciendo que un ligero Shhh abandonara mis labios.
-Ah...- suspiro de nuevo, intentando acallar las sensaciones.- Otro.- dijo sin más.
Y no hacía falta que explicara a qué se refería, ingrese un segundo dedo en su interior, a lo que ella respondió metiendo de una sola vez su mano dentro de mi ropa interior tocando directamente mi pene y masturbandolo de forma lenta arriba y abajo.
Nuestras respiraciones en este punto eran más que irregulares, y si llegásemos a soltar aquellos gemidos que estábamos intentando hacer pasar desapercibidos seguramente nos descubrirían, no es que nos importara mucho pero tampoco queríamos llamar la atención de todo aquel dentro de las habitaciones.
Por lo que continuamos en silencio.
Comencé a aumentar el ritmo con el que mis dedos entraban y salían de su cavidad, haciendo que Hange al notar insuficiente el movimiento se moviera para que mis dedos pudieran entrar de forma profunda dentro de ella.
-¿Otro?.- pregunte, podía sentir mi frente perlada por el sudor.
-Hmmm.- respondió mientras movía su rostro de forma positiva.
Así fue como termine ingresando tres dígitos en ella y en respuesta la mano sobre mi miembro tomó un ritmo bastante más rápido, por lo que la única alternativa que teníamos para acallar los sonidos obscenos que amenazaban con dejarnos en evidencia era besarnos, y así hicimos.
Tuve que acercar su rostro al mío haciendo uso de mi mano libre posándola en la parte trasera de su cuello, el beso nada tenía de inocente a estas alturas por lo que cada vez que ella gemía nuestros labios se juntaban de forma dolorosa, para después despártenos un momento con el fin de tomar aire y continuar con el beso.
🟣
Podía sentir mi propio orgasmo cerca, ese sentimiento de anticipación burbujeante dentro de mi lo afirmaba, por lo que comencé a moverme mucho más deprisa sobre los dedos de Levi, sin olvidarme de subir y bajar mi mano por el miembro de Levi, el cual ya se encontraba totalmente endurecido, esto estaba saliendo mejor de lo esperado.
Continuamos así, besándonos de forma torpe como método para guardar silencio, y aunque eso era mejor que nada, podía sentir que Levi también se encontraba cerca de su propio orgasmo.
Solo un poco más y podríamos continuar con ello, la idea era que este primer orgasmo de ambos fuera de esta forma, y el segundo o los demás fuera de una manera mucho más práctica, eso era por lo menos lo que tenía en mente, sabía que a Levi le gustaría también la idea.
Escuchamos sonidos en el pasillo, lo cual no era extraño, ya que aún era algo temprano, lo extraño vino después.
Un par de fuertes toques sobre la puerta de madera nos obligaron a dejar de lado nuestro momento de calentura.
Nos miramos contrariados, deteniéndonos al instante, el temor era evidente en ambos.
-¿Qué mierda?.- dijo en voz baja mi compañero.
-¿Qué hacemos?.- le pregunte en voz baja.
-No creo que sea importante, guarda silencio.- respondió Levi mientras de aclaraba la garganta.
-¿Quién es?.- preguntó en voz alta y como normalmente lo hacía, nada había cambiado en su tono de voz que nos delatara.
Shhh... volvió a decirme en voz baja, y era muy estúpido porque sus dedos seguían dentro mío moviéndose con lentitud.
Deja de moverlos, le dije en un susurro, aferrándome un poco más a él, por su parte, él tenía pleno conocimiento de a que me refería pero solamente negó mientras una sonrisa se dibujaba sobre sus labios.
-¿Quién es?.- volvió a decir.
Su mano moviéndose nuevamente al ritmo que anteriormente mantenía, provocando que un escalofrío me recorriera la columna al tener que guardar silencio.
-Lo... lo siento mucho, capitán ... pero estoy buscando a la líder de escuadrón, ¿sabe dónde se encuentra?.- era Armin.
Note por la expresión de mi compañero que estaba a punto de soltar una barbaridad, por lo que me adelanté.
-¡Aquí estoy!, ¿para qué me necesitas?.- dije gritando.
Levi me devolvió una mirada incrédula, a lo que solamente le mostré mi lengua en forma de burla.
-Líder de escuadrón, el comandante Erwin la busca, dice que necesita que revise un par de documentos ya que tratan de algo importante.- respondió el chico rubio y el sonido de su voz se escuchaba suavizado debido a la puerta.
No hagas nada, le dije a Levi ya que estaba por hablar nuevamente.
-¿Traes los documentos contigo?.- pregunté.
Levi se quedó inmóvil obedeciéndome.
-Así es, ¿puedo pasar?.- preguntó el chico y ahora sí que entramos en pánico.
La puerta NO tenía seguro, así que negué con mi rostro mientras Levi decía no,no,no,no dile que no, carajo... ¡que mal momento para que Erwin pida esto!, en voz baja.
-¡NO, NO!, es decir... eh, no puedes entrar ya que estamos organizando bastantes documentos que encontré en mi habitación y el suelo es un desastre, ya que los estamos apilando, pero si quieres pue...- me detuve al sentir de nuevo ese característico movimiento en mi interior, el cual casi hace que nos descubran...
¡Carajo, Levi!
¿Es que acaso no podía esperar?, me aclare la garganta y aun sintiendo los sonidos obscenos amenazando con abandonar mis labios continué hablando, si tenía suerte probablemente Armin no lo notaría.
-Eh, puedes desli... ¡AH, DESLIZALOS POR DEBAJO DE LA PUERTA!.- prácticamente le grite mientras jalaba el cabello de Levi.
El bastardo únicamente comenzó a reírse en voz baja mientras escondía su rostro entre mi cuello y hombro, continuando con los movimientos que estaban por volverme loca.
El sudor frío que estaba experimentando ahora mismo me decía que no tardaría mucho en alcanzar mi tan ansiado orgasmo.
-¿Se encuentra bien, líder de escuadrón?.- preguntó Armin con tono preocupado.
Aquello hizo reír con más entusiasmo a Levi mientras continuaba con lo suyo, yo apenas y estaba consciente de lo que estaba pasando.
Contéstale, dijo Levi en mi oído.
-¡SÍ, SÍ... TODO ESTA BIEN!.- grité una vez más.
-Esta bien.- lo escuche mencionar detrás de la puerta, mientras el sonido característico de papel siendo manipulado se escuchaba o por lo menos lo escuchaba de forma lejana ya que a Levi ahora no solo le bastaba con tenerme al borde del orgasmo manteniendo una conversación, si no que también se dedicó a morder de forma ligera el contorno de mi oreja.
El ritmo de los movimientos de Levi aumento de forma desprevenida por lo que intente con todas mis fuerzas el no dejar salir ningún gemido, mientras tanto un par de hojas entraron por debajo de la puerta.
-¡Yo me encargo de que revise esos documentos, Armin!.- respondió Levi en voz alta.
Maldito cínico, seguramente le hubiera gritado de poder hacerlo, pero estaba más ocupada mordiendo mi labio inferior para evitar que Armin quedara traumatizado.
-Muchas gracias, capitán, que pase una buena noche, usted también, líder de escuadrón.- dijo a modo de despedida el rubio.
🟣
-Igualmente.- respondí con tono alto, notando las paredes del interior de Hange cerrarse a un ritmo de pulsaciones constantes, su orgasmo estaba a segundos de suceder.
-¿No vas a responder, Hange?, no seas grosera.- dije nuevamente pero ahora con burla y en voz alta para que Armin escuchara ese regaño de mi parte hacia mi compañera.
-¡BUE...BUENAS NOCHES!.- gritó y enseguida se llevó su mano libre hacia sus labios.
Su orgasmo finalmente había llegado.
Mientras su cuerpo sufría algunos espasmos, mis dedos continuaban en movimiento, las paredes que me envolvían eran extremadamente cálidas.
-Gracias a ambos, hasta mañana.- dijo de vuelta Armin con entusiasmo.
Hange aún soltaba algunos quejidos sobre su mano pero ahora ya no tenía porque restringirse tanto, Armin se había marchado.
Por lo que si bien no estábamos del todo a salvo, ya no éramos un completo peligro para quien fuera que estuviera cerca de la habitación pero sí para los demás en caso de que algunos de esos quejidos se hicieran audibles.
-Ah...ah...ah...- suspiró mi compañera sobre mi hombro de forma pesada.
-¿Todo bien, Hange?.- pregunte con tono regular como si nada hubiera sucedido.
-Eres un idiota...y te odio.- mencionó con voz entrecortada, sin apartarse de mi ni siquiera para mirarme.
-No lo parecía hace unos momentos.- volví a burlarme.
Había sido suficiente castigo lo que había tenido que pasar Hange, por lo que retiré mis dedos de su interior, un suspiro de entre sus labios también abandonó su cuerpo cuando mis dígitos lo hicieron.
Limpie mis dedos con un pañuelo que encontré dentro del bolsillo de mi pantalón y luego pose ambas manos sobre su cintura, seguramente aquella posición encorvada no era lo que llamaríamos cómoda por lo que se lo hice saber.
-Siéntate aquí, estar así no debe ser muy agradable.- retire mi mano izquierda de su cintura para palmear el lugar vacío del colchón a nuestro costado.
-No, aún faltas tú.- dijo incorporándose y metiendo sin más su mano en mi ropa interior.
🟣
Antes debido a la sorpresa de las acciones de Levi me vi obligada a retirar mi mano con la cual me encontraba masturbandolo para poder afianzarme de él, de sus hombros, de su espalda, de su cabello, de lo que sea que tuviera a mi alcance para evitar que mis gemidos fueran escuchados por Armin.
-Esper...ah.- le escuche soltar debido a la sorpresa.
-¿Qué pasa Levi?, ¿te sientes mal?.- pregunte en voz alta mientras reía de forma audible.
Rápidamente colocó una de sus manos sobre su boca, mi mano dentro de su pantalón se movía rápidamente.
-¿Levi?.- pregunte de nuevo.
Su normalmente pálido rostro ahora se encontraba teñido de un sonrojo que lo hacía lucir adorable, aunque no menos peligroso.
-¿Qué... ah...quieres?.-respondió con dificultad.
-¿Te sientes mal?.- pregunte con semblante inocente mientras que con mi mano libre comencé a retirar a la fuerza la mano que mantenía cubriendo su boca.
Pase en reiteradas ocasiones mi pulgar sobre la punta de su pene, provocando varios estremecimientos en el cuerpo de mi compañero.
-¿Por qué no me contestas, Levi?.- dije burlona mientras tomaba su rostro por el mentón.
Al no poder hacer uso de su mano para acallar sus gemidos, Levi optó por tomar con fuerza entre sus dedos la sábana que se encontraba debajo de nosotros mientras cerraba con fuerza los ojos y mordía sus labios.
-Cállate.- dijo apenas audible debido al esfuerzo.
Hice una mueca de disgusto.
-Oblígame.- dije a modo de reto, sonriendo ante mis propias palabras.
Lo que sucedió después fue rápido, bastante rápido.
Levi dejo de estrujar la sábana para atraerme hacia sus labios y comenzar a besarme con entusiasmo.
Aquel beso era una maravilla, nuestras lenguas y cavidades se hacían cargo de eliminar casi todo rastro de nuestros gemidos porque sí, ambos estábamos gimiendo, pero por razones diferentes, yo por el beso y él por las acciones que estaba llevando acabo dentro de su pantalón.
Comencé a presionar la base de su miembro con un poco más de fuerza mientras subía y bajaba de forma más lenta, al final un solo toque de mi pulgar sobre la punta fue lo que lo llevó al orgasmo.
Mordió mi labio con fuerza por un instante, aunque fueron solo unos segundos, en los cuales no hizo ningún daño, pero que le sirvió a él para poder cubrir su quejido a causa de la liberación.
El beso no se detuvo, si no hasta que los movimientos de mi propia mano sobre mi compañero lo hicieron.
Con la respiración sumamente agitada rompió nuestro contacto, buscando mi hombro como apoyo para su mentón.
Limpie mi mano que aún tenía restos de semen con ayuda del pañuelo que previamente Levi había utilizado.
Al finalizar, lo abrace y me deje caer al costado libre de su cama, atrayéndolo conmigo en el proceso.
Acostados y en más de una forma saciados después de lo que habíamos hecho, ya estábamos más que preparados para lo siguiente.
Pero debíamos esperar un momento o dos, para poder recuperar el aliento, y esperar a que no hubiera más interrupciones como la de antes.
Aún teníamos mucha energía que seguramente podríamos utilizar por un buen rato.
¡Todos aman los votos y los comentarios!
Según yo, revisé el capítulo pero si llegaran a encontrar algún error ortográfico háganmelo saber.
Como algunos leyeron en mi muro, ya no quería continuar con esta historia porque me parecía extremadamente horrorosa la forma en la que redacte los capítulos anteriores... me dio mucha pena.
Pero algunos de ustedes ya tienen tiempo siguiendola, y pues estando tan cerca de la recta final la verdad es que sería una barbaridad el dejarlos así.
Por lo que, no se preocupen, no la
dejare en el olvido, la continuaré hasta terminarla, de eso no hay duda.
Ok, habiendo aclarado ese punto...
Cuéntenme, ¿qué les pareció?
¿Están listos para lo que viene?
¿Habrá más interrupciones?
¿Saldrá todo bien?
¿Alguien resultará traumatizado por culpa de este par?
Eso lo descubrirán en el siguiente capítulo.
Nos leemos pronto 👋🏻