Olivia Benson ~ Acto 2 - Parte 3
_______________________________
En los últimos días de veraneo, os voy a dar unos consejos para combatir el calor.
- Beber mucho agua
- No tomar el sol
- Limitar toda actividad física
- Si el valor sigue siendo excesivo, siempre está la ducha fría
_______________________________
- Olivia, mi niña - dijo Camila entrando en la habitación.
- ¿Pasa algo, Camí? - dije dejando mis partituras a un lado.
- Su madre quiere que os vayáis a probar los vestidos para esta noche.
- Ahora bajo, recojo estoy voy.
Guarde todas mis partituras en unas carpetas y las puse encima de mi mesa.
Baje las escaleras y ahí estaba mi madre esperándome.
- ¿Ya podemos irnos? - pregunto y yo solo asentí.
Nos montamos en la limusina y encendí mi móvil.
Me llegó una notificación de la reina cotilla.
________________________________
Visto: Serena Van Der Woodsen y el Chico Solitario, dándose amor en las calles de New York.
¿Habrán vuelto? ¿Vosotros qué opináis?
La reina cotilla, XOXO.
__________________________________
Pobres, ahora todo el mundo se iba a enterar de que estaban juntos por culpa de la reina cotilla.
Llegamos al estudio de diseño de Eleanor Waldorf, bajamos y fuera se encontraba Eleanor.
- Hola, Ele - dije mi madre dándole dos besos en las mejillas.
- Hola Jenni, y hola Olivia, ya me han hablado de la gran actuación que hiciste el otro día - dijo dándome dos besos mi.
- Hola Ele, seguramente la habrán exagerado - dije y reímos.
Subimos en el ascensor y llegamos a su gran estudio, donde estaban nuestros vestidos.
- Una observación muy interesante, ¿quién eres? - dijo Eleanor al ver a ¿Jenny? Arreglando un vestido.
- Soy... Soy Jenny Humphrey, la becaria de Parsons, creía que se iría, Laurel iba a recibirla - dijo nerviosa.
- Y yo he decidido venir aquí - dijo Eleanor sería.
Mi madre y yo solo mirábamos la escena en silencio.
- Deja todo eso ahí y trae el resto de maletas. Y bueno así que ahora las becarias tienen opinión, he estado mucho tiempo fuera.
- Señora Waldorf, espero que no piense que... - dijo Jenny pero Eleanor la interrumpió.
- ¿Decirle a la modelo que por culpa de mi diseño va a llevar un vestido lleno de fallos? Hace calor y es tarde terminaremos tu prueba mañana.
- Lo siento mucho, ha sido una gran falta de profesionalidad, le prometo que no volverá a pasar, se lo juro.
- Ya lo se, y aquí menos, necesito personas de confianza. Recoge tus cosas.
- No, por favor no puede.
- Claro que puedo queridas si todavía quieres una carta de recomendación no vuelvas a hablar - nos miró - Seguidme chicas, vamos a por vuestros vestidos - dijo haciendo que la siguieramos.
- ¿Hace mucho calor aquí no? - dijo mi madre moviendo sus manos haciendo como un abanico.
- Si y no se porqué - dijo Eleanor un poco furiosa.
Llegamos a la zona donde estaban los vestidos y me lo puse.
- Estás guapísima cariño - dijo mi madre sonriendo.
- Date una vuelta, Liv - dijo Eleanor.
Me di la vuelta y sentí como aplaudieron.
- Te queda genial.
- Gracias mamá, a ti también - dije sonriéndole.
Entre en el vestido y me quite el vestido, lo metieron en una funda y me lo dieron.
- ¿Estás lista? - pregunto mi madre.
Yo solo asentí con la cabeza.
- Bueno ya nos vamos Ele, gracias por los vestidos son geniales - dijo mi madre sonriendo.
- Gracias a vosotras y siento que hayáis tenido que presenciar esa escena.
- Son cosas de trabajo - dijo mi madre sonriendo y salimos del estudio.
Llegue a mi casa y me giré en la casa, estaba prácticamente cansada y no había hecho nada.
Mi móvil vibraba y vi un mensaje de Nate.
- ¿Quedamos hoy en el Palace en una hora? - ponía el mensaje.
- ¿Para que? - le contesté.
- Repetir lo de la otra noche.
Leí el mensaje y empecé a pensar en todo, no quería engancharme con Nate porque sabía cómo iba a acabar, pero por otra parte quería divertirme con el.
- ¿Qué opinas? - volvió a escribir.
- Ahí nos vemos.
Me puse a ver la tele un rato y después decidí que era hora de ir a mi encuentro con Nate.
- Hola, Archibald - dije sonriendo mientras me acercaba a el.
- Hola, Liv - dijo sonriéndome.
- ¿Vamos?
- Vamos.
Subimos a la habitación y empezamos a besarnos, nos separamos para poder respirar y empezamos a desvestirnos.
- ¿Usamos esto? - dije enseñándole una botella de champagne que tenía en mis manos.
- ¿Cómo lo utilizamos? - dijo y abrí los ojos.
- Déjame a mí, Archibald.
Lo tire en la cama y sonrió, abrí la botella de champagne y tire sobre su pecho un poco de champagne.
Empecé a chupar su pecho y solo sentí como soltaba pequeños gemidos.
- Ahora me toca a mí - dijo quitándome de encima de él e imitando mi acción.
Estuvimos así un buen rato, hasta que nos hicimos uno.
Acabamos de hacerlo y mire mi reloj.
- Creo que es hora de que nos vayamos - dije levantándome de la cama.
- Si, ya es tarde - dijo poniéndose su ropa.
Salimos de la habitación y nos montamos en mi limusina, deje a Nate en su casa y después fui a la mía.
Después de eso solo recuerdo subir a mi habitación tirarme en la cama y dormirme.
Al llegar a la fiesta pude ver como Chuck era rechazado por Blair, solté una carcajada al verlo y mi madre me miró.
- ¿Qué pasa, Olivia? - dijo mi madre mientras nos acercábamos a su jefe.
- Cosas mías, mamá, cosas mías - dije negando con la cabeza.
- Bueno voy a hablar con Liam - dijo y asentí.
- Yo iré a dar una vuelta por aquí - dije y fui directa a la barra.
Desde ahí podía ver todo lo que pasaba en la fiesta.
Bebí de mi copa de champagne y casi me atragantó al ver a Nate con la ¿madrastra de James? ¿Y con Vanesa?
Se encontraban discutiendo, ¿qué es que Nate se acostaba con las dos? ¿¡Y conmigo!?
Quería seguir mirando esa escena cuando la luz se fue.
- ¡Por favor mantened la calma! La luz volverá en unos momentos - dijo Blair mientras nos daban velas.
- ¡Olivia! ¡Olivia! ¿Dónde estás? - gritaba mi madre.
- ¿Qué pasa, mamá? - dije llendo hacia ella.
- Acompáñame al baño, es peligroso si voy yo sola - dijo cogiéndome de la mano.
Yo solo fui detrás de ella.
Mi madre entro al baño y yo me quedé fuera, cuando vi una escena que me rompió el corazón.
Nate hablando con Vanesa sobre su relación, el quería estar con ella y ella con el.
Sentí que una lágrima rebelde bajo por mi mejilla, pero no iba a permitir que Nate me viera mal.
- ¿Pasa algo cariño? - dijo mi madre al salir.
- Eh, no, no - dije suspirando.
- ¿Quieres irte a casa? - dijo mirándome con pena.
- Si - dije asintiendo.
Cogimos nuestras cosas y ya estábamos listas para irnos, cuando Nate nos paro.
- ¿Ya os vais? - nos preguntó confundido.
- Si, Liv no se encuentra bien y yo mañana trabajo - dijo mi madre sonriendo.
- ¿Estás bien, Liv? - dijo el preocupado.
- Si, solo necesito darme una ducha y dormir - dije sin mirarlo a la cara.
Nate solo me miró, y mi madre y yo solo nos fuimos.
_________________________________
El amor puede marcharse con el verano, pero algunas amistades duran todo el año, como la nuestra.
La reina cotilla, XOXO.
__________________________________