■ NARRA TN ■
Un día había pasado desde que presencié el momento en que Jungkook abrazaba a Somi con delicadeza.
En ese momento había decidido continuar mi vida sin Jungkook, pero cuando estuve a punto de hacerlo me detuve y pensé que quizás lo estaba juzgando mal.
No podía pensar con claridad así que por decisión propia decidí evitarlo encerrandome en mi habitación y pasando tiempo con Taehyung, porque siempre permanecía a mi lado.
■ NARRA JUNGKOOK ■
Finalmente mañana llegaríamos a los corporativos científicos.
Tenia pensado reunir a todos a la hora de la cena para planear una estrategia en contra de todo lo que nos íbamos a enfrentar.
Zombies, el presidente y la seguridad de la capsula.
Teníamos que estar preparados para todo.
Tome en mis manos una pistola que se encontraba sobre la mesa y comencé a recargarla lentamente con las balas que tenía en los bolsillos de mis jeans.
Me encontraba en la zona de comedores del tren. A pesar de la sangre que había por todos lados, se podía notar lo lujoso que era este lugar, las mesas parecían de madera oscura, los asientos eran bastante comodos y las lámparas desprendían una luz que iluminaba cada sitio del vagón.
-- Finalmente te encuentro -- dijo Taehyung con la respiración agitada.
Puso una mano en su pecho e inclino su cabeza hacia atras, como intentando recuperar el aliento.
Parecía que había corrido un maratón.
-- ¿Que pasa? .-- pregunté, mientras lo miraba por el rabillo del ojo.
-- Necesito pedirte un favor.-- respondió poniendo las manos en sus cintura.
Deje la pistola sobre la mesa nuevamente y dedique toda mi atención en él.
-- Te escucho.
Taehyung tomo una bocanada de aire y por alguna extraña razón sentí que le estaba costado decirme lo que pasaba.
-- TN esta en mi habitación,-- dijo finalmente, mientras apretaba el puño -- tienes que ir a hablar con ella.
Mi estómago dio un giro inesperado, por lo que tuve que poner una mano sobre la mesa para recuperar la estabilidad mental.
No quería pensar lo peor, pero Taehyung tenía la mirada cargada de preocupación.
-- ¿Que ha pasado? -- cuestione.
Taehyung me dedicó una sonrisa forzada.
-- Te llevare, sígueme.
Salimos del comedor y comenzamos a caminar por el vagon del tren. Nuestras pisadas eran tan rapidas que se podían escuchar por todos lados.
Tras un abrir y cerrar de ojos ya nos encontrábamos frente a la habitación de Taehyung.
-- Hasta aquí he llegado yo.-- dijo girandose hacía mi de forma cabizbaja.-- Es lo único que puedo hacer por ella.
Alcé una ceja, todo era muy extraño.
-- ¿A que te refieres con eso? -- pregunté.
Taehyung suspiró con frustración y se llevo las manos a la cintura.
-- He reprimido mis sentimientos por TN todo este tiempo, pero no pienso soportarlo más, -- dijo apuntandome con el dedo -- es tu última oportunidad, si vuelvo a saber que TN la ha pasado mal...
Se detuvo un momento.
-- Vamos,-- dije frunciendo el ceño -- completa lo que ibas a decir.
-- No la dejare ir nunca más.-- respondió.
La manera en que me había hablado
Taehyung me había dejado anonadado, me sentía como la escultura llamada: "El vacío del alma".
Asentí con la cabeza y tras unos segundos de silencio Taehyung se fue caminando por el pasillo desapareciendo de mi vista.
■ NARRA TN ■
-- Mira lo que traje para la cena de hoy -- dijo Taehyung entrando a mi habitación con una gran bandeja en las manos.
Con mucho cuidado, colocó la bandeja color dorado sobre la cama y se sentó a mi lado con una sonrisa en los labios, como si estuviera esperando una reacción de mi parte.
En la bandeja se encontraban dos vasos llenos con limonada, una rosa blanca y una pizza increíblemente apetitosa para la vista, pues sus pepperonis se encontraban esparcidos por todos lados.
-- ¡Increíble! -- dije asombrada -- ¿De dónde has sacado todo esto Taehyung?
-- Yo lo hice.-- respondió.-- Todo, menos la rosa, ya que esa la conseguí en un sitio que no pienso decirte.
Entonces lo recorde.
La primera vez que conocí a los chicos, hicimos una especie de presentación para que logrará confiar en ellos, ya que siempre me iba a un rincón e intentaba no hablar con nadie.
Todos comenzaban a hablar de sus habilidades.
Hoseok: Le apasionaba bailar.
Yoongi: Amaba actuar.
Taehyung: Le encantaba cocinar.
Nayeon: Le gustaba pintar.
Mientras esos pensamientos pasaban por mi cabeza recorde la mirada fria de Jungkook diciéndo: "No importa lo que te guste a ti, es probable que no dures una semana con nosotros".
Baje la mirada y me lleve una mano al pecho.
Extrañaba a Jungkook.
-- ¿Que pasa? -- preguntó Taehyung ladeando la cabeza con preocupación-- ¿No te ha gustado la sorpresa?
Negue con la cabeza, era incapaz de mirarlo a los ojos.
-- No tengo mucha hambre esta noche. -- dije con una sonrisa a medias.
Taehyung soltó un bofido y se levantó de la cama.
-- TN apenas probaste la cena de ayer, necesitas fuerzas para enfrentar a la seguridad del presidente mañana en la noche.
-- Lo se.-- respondí.
Un silencio nos invadió y de un momento a otro Taehyung se arrodilló frente a mi, tomo mi mano y recargo uno de sus brazos en mis rodillas.
-- Ayer fuiste a hablar con Jungkook,-- afirmó -- no me has querido decir lo que paso entre ustedes, ¿han arreglado las cosas?
Negué con la cabeza.
-- No quiero recordar lo que paso ayer.
Desvíe mi mirada de Taehyung y suspiré mientras intentaba olvidar todo lo que había visto el día de ayer.
Sentí como la mano de Taehyung apretaba la mía.
-- Mirame TN -- dijo casi en tono de súplica.-- ¿Recuerdas lo que hablamos aquel día?
Sus ojos se dilataron en medio la situación, parecía nervioso, pero no sabía cuál era la razón.
-- ¿Querías que confiara en ti?
Taehyung asintió con la cabeza.
-- Exactamente, pero te dije que... -- intento decir -- Q-que... Que si las cosas salían mal podías estar conmigo, porque yo jamas te haría daño.
¿Que ha querido decir con eso?
-- Siempre has estado conmigo -- mencioné, mientras me soltaba de su mano y me reía nerviosamente -- Solo que... -- sentía como un nudo comenzaba a formarse en mi garganta mientras pronunciaba cada palabra.-- Ayer encontré a Jungkook abrazando a Somi y mientras intentaba buscar una respuesta termine encontrandome a Eun Woo y...
Taehyung suspiro.
Tomo mi barbilla ligeramente entre sus dedos y me obligó a mirarlo.
-- Asegurate de comer esta pizza con la persona que entre por esta puerta -- dijo pasando su pulgar por mi mejilla -- Regreso en un momento.
Mientras salía de la habitación había notado una pizca de tristeza en su rostro, pero no sabía deducir la razón.
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