Rebeca
Cuando abrí los ojos me di cuenta de que Dylan no estaba a mi lado como todos los días. Siempre así, era el primero en darse una ducha.
A veces he fantaseado con que él y yo despertemos y nos encontremos uno al otro por la mañana, algo romántico. Pero, luego recuerdo que:
1. El aliento mañanero.
2. Dylan no es del todo romántico.
3. Yo tengo el sueño más pesado que él, así que si tratara de despertarme le pegaría.
Me levante y fui a la sala, ahí había un baño donde me cepille los dientes, revise mi cabello y me encamine de nuevo a la cama, porque siendo honesta, todavía tenía sueño...
<<¡Dios mío, hoy vienen los padres de Dylan!>>
Corrí hacia el cuarto del mencionado en mi mente antes, y me avente a la cama boca abajo, para checar la hora en la mesita de noche que estaba a un costado del acolchonado. 2:37 de la tarde.
<<Wow, ahora sí que no culpo a O'Brien por irse de la cama.>>
Tome ropa de mi mochila "de supervivencia" y me di cuenta de que no había nadie en baño. Entre y no dude en darme una ducha pero algo invadió mi mente de golpe al verme en el espejo por la playera color amarillo que portaba como pijama, esta era de mamá, a quien no he llamado.
Inmediatamente saque mi celular de donde lo tenía guardado, y lo encendí: 21 llamadas perdidas.
1, 2...
—Mamá...
"¡Rebeca Carolina Mendes!, ¿Dónde estás?, ¿o estas bien de perdido?, ¡estaba a punto de llamar a la policía cuando tus amigas no supieron donde decirme tu ubicación!"
—Estoy bien, mamí, en serio...solo quería alejarme un poco de la realidad...de Robert.
Escuche un suspiro a través de la línea.
"¿Cuándo vuelves a casa?, necesito hablar contigo de justamente tu padre"
—Tal vez mañana, Dylan y sus padres quieren conocerme...entonces.
"Si, está bien, disfrútalo, Becky...solo...vuelve a casa pronto, ¿sí?"
—Claro, mamá. Te amo.
"Yo igual, pequeña"