Mi padre me había traído a la cena empresarial que tenia esta noche, me había decidido por usar un vestido negro con tirantes y escote en forma de corazón que me llegaba arriba de las rodillas y unos tacones rojos. Cuando entramos al lugar mi padre saludo a unas cuantas personas antes de encontrarnos con los Collins, tenía un poco de nervios, no sé si ellos le dirían a mi padre sobre mi relación con su hijo.
-Señor y Señora Collins ¿Cómo están? – Pregunto mi padre educado como siempre.
-Señor Jenner, un gusto verlo. – Contesto el señor Collins con una sonrisa genuina.
-Lo mismo digo ¿recuerdan a mi hija?
-Claro que sí, es una chica maravillosa. – Contesto Rachel con una sonrisa, cuando mi padre puso su atención en el señor Collins, ella me guiño el ojo. Eso me hizo sentirme relajada.
Dylan apareció detrás de su padre y me sonrió en cuanto nuestros ojos se encontraron, se veía guapísimo en smoking.
-Buenas noches señor Jenner. – Saludo.
-Hola Dylan. – contesto mi padre.
-Deberiamos… - Estaba diciendo Rachel cuando otra voz femenina la interrumpió.
En cuanto la escuche cerré las manos en puños.
-¡Pero qué divina sorpresa! – Grito la señora Victoria, detrás de ella venia Demian, su hijo.
-Victoria. – Saludo Rachel educada con voz monótona y libre de emoción.
-¡Rachel! Luces fabulosa… y ¡Taylor! Estas hermosa niña, lucen increíble las dos, deberíamos tener una plática de chicas, solo para aconsejarnos. – Chillo la mujer.
-Buenas noches. – Saludo Demian poniéndose a un lado de su madre, saludando de una manera tranquila y relajada, fruncí el ceño.
Una vez que terminamos con los saludos, la señora Victoria nos arrastro a una mesa para sentarnos con ella, a mi izquierda estaba sentado mi padre y Dylan no dudo en empujar de manera sutil a Demian para sentarse a mi derecha. Estire mi mano y tome la suya por debajo de la mesa, ahora me sentía completa. Los meseros trajeron la comida y comenzamos a comer.
-Le dije a mi madre que no le dijera de nosotros a tu padre. – Susurro Dylan.
Le sonreí con cariño.
-Gracias, lamento que tengas que hacer eso. – Le conteste.
-Está bien, lo entiendo.
-Son una linda familia Rachel. – Comento la señora Victoria.
-Gracias. – Contesto ella.
-Me imagino que perder un hijo no es fácil, deben de ser duro. – Dijo la mujer.
Sentí a Dylan tensarse a mi lado, inmediatamente tome su mano y la apreté de manera tranquilizadora.
Todos los Collins estaban tensos.
-Por eso es importante seguir las reglas de transito, conducir ebrios es mala idea, su hijo es un ejemplo de eso… y no hablemos de Camille… ella… - estaba parloteando la señora cuando la interrumpí.
-Ya cállese señora, porque estoy así de pararme y golpear toda su cara llena de botox barato… no hable de Ian y de mi madre como si usted los hubiera conocido. – ahora Dylan era el que me sostenía del brazo, mi padre tenía su mano en mi hombro para mantenerme sentada en mi lugar. – No tiene derecho a expresar su opinión al respecto y le ordeno que se largue de esta mesa ahora mismo, porque sino ellos me soltaran y le aseguro que no sería bonito para usted.
-Nunca me habían hablado así en mi vida. – Murmuro la señora sintiéndose ofendida.
-Pues ya era hora que alguien le dijera sus verdades en la cara, ahora lárguese.
-¡Que niña tan maleducada! Vámonos Demian. – Dijo la señora haciéndose la indignada y segundos después ya se había ido con su hijo.
-Taylor, hija…
-No padre, ahora no, solo necesito aire. – Dije y me levante de la mesa.
Camine por el salón y luego abrí una puerta que daba a un enorme balcón, cerré la puerta tras de mí y camine hasta un pequeño banco de concreto que estaba a un costado. Mis pensamientos se vieron interrumpidos cuando mi celular comenzó a sonar, lo saque de mi bolso y conteste.
-Hola Jake.
-¿Hola Jake? ¿Eso es lo único que dirás? – Dijo del otro lado de la línea.
-Si ¿por qué? ¿pasa algo? – Pregunte confundida.
-Pasa que mi prima tiene novio y yo no lo sabía ¿Cuándo planeabas decírmelo? – mascullo molesto.
-No te enojes, no es para tanto.
-Claro que sí lo es. – Contesto, en ese momento la puerta se abrió y Dylan salió, busco frenéticamente con la mirada y cuando me vio se relajo visiblemente, cerró la puerta y se sentó a mi lado. - ¿Estas escuchándome Taylor Jenner? – La voz enojada de Jake se escucho.
-Creo que estas exagerando, ya estoy grande y puedo decidir con quién quiero salir, estas comportándote como mi padre Jake. Ocúpate de Megan, por cierto no me gusta esa chica. – Le conteste.
Dylan tomo mi mano libre y beso mis nudillos, haciéndome sonreír.
-¿Qué pasa con Megan? No la conoces.- Contesto a la defensiva.
-Es cierto, no la conozco, pero me parece superficial, es todo… ¡se llama Megan! Todos saben que ese es nombre de niña mimada.
-Cierra la boca Taylor. – Espeto molesto.
Me moleste, en primera porque nunca me había hablado así y en segunda porque defendía a su noviecita antes que a mí, era egoísta tal vez, pero Jake era como mi hermano y admito que me daban celos no tener su atención.
-¿Ahora estas molesto? No te gusta que hable de tu novia, pero tú si puedes portarte como un jodido hermano celoso, reclamarme cosas sobre mi novio… no te metas en mi vida Jake porque no eres nadie. – Dije y colgué, en cuanto lo hice me arrepentí.
Jake era una de las personas más importantes para mí y había estado conmigo cuando más necesitaba un abrazo, pensé en llamarlo para disculparme, pero me mi orgullo podía más que mi culpa, así que guarde mi celular en mi bolso.
-¿Todo bien? – Pregunto Dylan suavemente mientras quitaba un mechón de cabello suelto que había escapado del recogido que me hice esta tarde y lo ponía detrás mi oreja.
-No sé. – conteste honesta.
-¿Quién era?
-Mi primo… no quiero hablar de eso. – Murmure con una mueca.
-Oye… no hagas pucheros. – Me reprendió suavemente mientras tomaba mi mentón y depositaba un suave beso en mis labios. - ¿Cómo estás? – Pregunto cuándo se alejo.
No necesitaba preguntar para saber que se refería al reciente incidente en la mesa.
-Ya no estoy tan molesta… estoy bien ¿Qué hay de ti grandote?
Me miro divertido y luego se encogió de hombros.
-No me tomare a pecho lo que sale de la boca de una señora menopáusica chismosa, no vale la pena. – dijo.
-Bien dicho Bestia… su hijo Demian no me da buena espina.
-A mi tampoco, nadie puede lucir tan tranquilo en todo momento.
-Exacto, algo esconde.
Él asintió de acuerdo y luego en su rostro se formo una sonrisa traviesa.
-Te vez increíblemente caliente esta noche. – Murmuro acercando sus labios a mi boca.
-Lo sé. – Le conteste con fingida modestia.
-Tus tacones me encantan. – Susurro rozando mis labios.
-Para serte sincera los elegí porque sé que te gusta el rojo. – Murmure sin aliento.
-Una inteligente elección Gnomo. – Contesto antes de juntar nuestros labios.
Lo tome del cabello y lo atraje mas a mí, nuestras lenguas se rozaban de manera provocativa y el deseo de hacerlo de nuevo con él se instalo en mi. Quería que me tocara por todas partes como anoche, quería tocarlo y besarnos hasta perdernos en un placer infinito. Dylan rompió el beso, nuestras respiraciones eran agitadas.
-No sabes cuánto te deseo justo ahora. – Dijo con la voz más ronca de lo normal, era un tono sexy que me dejaba en un estado de estupidez temporal.
-¿Qué piensas hacer al respecto? – Pregunte para provocarlo.
Me miro de una manera que me hizo saber que estaba en un lio y que no me dejaría escapar de él esta noche o cualquier otra.
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Nuevo capitulo!!!!
Que les parece? dejenme saber en los comentarios.
No pierdan de vista a ese Demian.
Alguien quizo golpear a la señora Victoria? ._./
Creo que Tay y Dylan se convertiran en unos adictos al sexo... Christian Grey estaria orgulloso XD
No olviden regalarme un voto... eso seria genial.
Hasta la vista babys B)
-Laura Sánchez