Título: Amor Platónico
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- Masato, esta es TN TA, tu futura esposa- Dijo el señor Hijirikawa.
- Un placer volver a verte- TN se inclinó frente a él con una radiante sonrisa.
- Padre, no puedes hac...
- Masato, los modales- Gruñó el Hijirikawa.
Masato se inclinó frente a ella a modo de saludo y volvió a mirar a su padre.
- Padre, me dijo que no estaría prometido hasta los 22 años.
- Se cambiaron los planes, dentro de tres semanas te casarás con la primogénita de la familia TA.
......
- Señor Hijirijawa, ¿acepta a la señorita TA cómo su legítima esposa, para amarla y cuidarla, en la salud y en la enfermedad, en la pobreza y en la riqueza, hasta que la muerte os separe?
- Si, quiero- Su semblante era totalmente sereno.
- Señorita TA, ¿acepta al señor Hijirijawa cómo su legítimo esposo, para amarlo y cuidarlo, en la salud y en la enfermedad, en la pobreza y en la riqueza, hasta que la muerte os separe?
- Si, quiero- Contestó con una sonrisa, siendo normal al estar enamorada de su futuro esposo desde que tenían diez años.
- Por el poder que me ha sido otorgado, yo les declaro, marido y mujer. Puede besar a la novia.
Masato trago saliva y levantó el velo de su ahora esposa. Sería su primer beso, el de ambos. El peliazul acunó su rostro entre sus manos y bajó para posar suavemente sus labios sobre los de su esposa.
La sala estalló en aplausos y felicitaciones, mientras la pareja disfrutaba del contacto entre sus labios. Se separaron pocos segundos después, ahora ambos sonriendo.
......
TN miraba el anillo mientra recordaba como se había convertido en la esposa de su amor platónico desde los 10 años. Sus familias no eran muy amigas, pero coincidían en algunas fiestas y ella se quedaba sonriendo al ver al peliazul con su amigo pelinaranja hablando y riendo. Según ella, amor a primera vista.
Bajó de la limusina frente a la casa a la que se mudaron un año después de casarse. Cogió su bolsa del coche y camino con una radiante sonrisa hacia su casa, pero se detuvo al ver a Masato en el jardín con... Su compositora. Hablaban con pequeñas sonrisas y cuando acabaron, se miraron unos minutos con su semblante triste y al final se abrazados. TN apresuró su paso para entrar en su casa y cerró los ojos con fuerza.
Masato no la amaba.
No como ella lo hacía... Estaba muy claro que él amaba a su compositora, y seguramente por culpa de ella y su egoísmo no es feliz.
TN se obligó a no llorar y comenzar a hacer los papeles... Y la maleta.
Cuando oyó la ouerta de la entrada cerrarse, escondió la maleta bajo la cama, y cerró el armario.
- TN, ¿estas aquí?- Tocó la puerta de la habitación y entró- No me avisaste de que habías llegado- Sonrió.
- Perdón, tenía prisa en ir al baño- Río leve.
- ¿Qué tal la compra?- Se acercó y besó la mejilla de su esposa.
- Bien...- Murmura ella con una mini sonrisa.
- Estas muy callada, no es propio de ti, TN- Dijo rodeando su cintura- ¿Cansada?
- Un poquito... Puede ser- Se encoge de hombros.
- Vamos a intentar quitártelo, entonces- Sonríe.
.......
TN acarició una última vez la mejilla de su esposo, mientras este dormía plácidamente en la cama, y se permitió soltar una lágrima. Lo echaría tanto de menos... Pero no quería ser la responsable de su infelicidad.
Agarró la maleta y luego dejó el anillo encima de los papeles en la mesita. Salió de la casa y caminó hasta llegar a la acera. Echaría de menos todo de lo que ha pasado con él, sobre todo las veces en las que él le había dicho «Te Amo»... Pero era obvio que no era así, que no la amaba. Su corazón nunca le perteneció, y eso era lo que más le dolía.
Subió al taxi que la esperaba y cerró la puerta. Observó por última vez la que una vez fue su hogar, lleno de amor y cariño...
Estalló en lágrimas cuando la casa desapareció de su vista. Y se quedó llorando en silencio, mientras ponía rumbo al aeropuerto, y nunca más volver a entrometerse en la felicidad de su amor platónico. Porque que solo era eso... Un amor totalmente imposible y no correspondido.
......
Masato se despertó por la mañana. A las ocho y media. Sonrió al recordar como se unieron la noche anterior, y estiró la mano para tocar a su esposa. Pero ella no estaba.
Con el ceño fruncido, se levantó y se puso sus pantalones y una blusa.
- ¿TN? ¿Estas en la cocina?- Fue hacia dicho sitio, pero no estaba.
Registró salón, baño y jardín, pero ni ratro de ella. Volvió a la habitación y entonces vio la mesita. Se acercó y se le fue el aliento al ver el anillo de matrimonio encima de unos papeles. Al leerlos no podía creer lo que veían sus ojos. Eran papeles de divorcio, firmados por ella y solo faltaba la firma de él. A su lado, vió una nota, y la abrió.
Masato:
Siento mucho haberte hecho esto estos dos años que llevamos de casados... Por si no lo entiendes, ayer al volver te vi con Haruka Nanami y supe gracias a ello que no eras feliz. Tu cara de tristeza, tu sonrisa triste y ese abrazo... Se me rompió el corazón al saber que mis sentimientos no eran correspondidos.
No estoy enojada, ni mucho menos. Es algo natural el estar triste por no poder estar con la persona que realmente amas. Y soy la culpable de que tu estés pasando por ello...
Masato, mi padre quería que me comprometiera con el hijo de los Naishiro.... Pero me negué, no iba a casarme con nadie que no fueras tu, porque desde que te vi, supe que solo tú podías completar mi vida. Y yo, de egoísta, insistí a mi padre que organizara nuestra boda, temía perder mi herencia y no quería casarme con otro que no fueras tu... Soy egoísta...
Pero ahora que comprendo esto, que sé que no me amas, que solo eres lo que siempre has sido para mi... Mi crush, mi amor platónico... Una amor totalmente imposible y no correspondido... Quiero pedirte perdón de corazón.
Si estás leyendo esto es que ya has visto los papeles de divorcio, ¿a qué si? Eres libre, mi amor... No tengo derecho a decirte así, pero... Bueno, no importa... Tienes mi bendición para casarte con aquella persona que amas en verdad.
Yo no volveré a entrometerme en tu vida, me fui de Japón para empezar mi propia vida de "plebeya", como diría Camus-san... Hablé con mi padre, no tengo herencia ni nada... Solo me quedan los buenos momentos, ¿no? Espero que tu crees los tuyos, porque los nuestros los atesoraré siempre...
Con amor, TN TA.
El peliazul sentía una mezcla de sentimientos casi inhumanos.
Ira, tristeza, decepción consigo mismo, culpabilidad... TN TA había sido su primer todo... Beso, novia, esposa... Primera vez... Si bien no fue su primer amor... En las tres semanas anteriores de la boda comenzó a conocerla mucho más a fondo, y ni qué hablar sobre el año entero que llevaban casados. La amó, y la ama. Hace cuatro meses hicieron dos años de casados.
Negó.
Se negó a aceptar aquello, exigía volver con su esposa. Ella no era egoísta, ella era perfecta.
Ella era su todo.
.......
El coche aparcó frente a un motel no muy decente. Estando en París, era de locos estar en un motel tan cutre.
El peliazul se bajó del auto y fue a recepción. Un hombre de unos cuarenta años, gordo y con barba, mantenía las llaves a un lado de su mesa, llena de bollos y donuts.
- Busco a TN TA.
- ¿Para qué?- Dijo el hombro con voz rasposa.
- Es mi esposa, quiero verla- Volvió a decir con su tono amable.
- Je, esperemos que no se haya tirado a ninguno.
Masato por poco no le rompe un par de muelas a ese hombre. Este buscó en una libreta antigua y suicia el nombre de dicha persona.
- 106.
- Gracias- Masculló el peliazul y se apresuró a buscar la habitación.
- Señor su padre..
- Dile a mi padre que estoy ocupado.
Masato interrumpió a su chofer y al encontrar la puerta, subió unas escaleras metálicas para apresurar sus pasos y llegar a la puerta. Habían pasado seis meses desde la última vez que la vió, y no descansaba ni un día en poder encontrarla... Y por fin estaba frente a su puerta.
Tocó tres veces. Nadie contestó. Insistió otras cuatro. Una voz se oyó.
- Voy, voy... Señor Beurdeu, pagaré el alquiler cuando...- TN abrió la puerta.
Los dos se quedaron sin respiración al verse. Se miraron a los ojos con un brillo de ilusión y cariño, hasta que los de TN se tornaron tristes y ausentes. Esta misma bajó la cabeza y se apresuró a cerrar la puerta, pero Masato fue rápido y colocó un pie en ella.
- TN, ¡¿Qué haces?!
- Eso debería decirlo yo... Te firmé aquellos papeles para que no volvieras a verme, no para que me buscaras.
- ¿¿Y tu ropa?? Esa ropa no es ni de broma lo que sueles llevar- Ignoró el comentario de TN.
- Es lo que me pude permitir luego de vender todo lo que tenía de ropas y botas... Te dije que empezaría de cero.
- Realmente tu padre te dejó sin herencia- Silencio...- TN, ¿¿por qué te fuiste??
- Ya leíste la nota... Masato, yo no te hago feliz... No soy lo que buscas, no soy capaz de hacerte sonreír ni de que te rías ni de que te sientas cómodo... Fui egoísta y por ello tu tuviste que pagar el precio... Si yo no hubiera intervenido estarías felizmente casado y... ¿Quién sabe? ¿Hijos quizás? Debería haber aceptado casarme con la otra familia... No quería molestarte más... Soy una persona horrorosa...- TN lloraba con gruesas lágrimas.
- Por dios, ¿te estás oyendo? ¿He dicho alguna vez que no sea feliz? ¿Que noneres mi tipo? ¿No me has visto muchas veces sonreír? ¿Reírme contigo? ¿Has visto alguna vez que me sienta incómodo con tu precencia? TN, no voy a mentirte, antes de que llegaras amaba a otra persona... Pero me cambiaste. Me hiciste ver que no amaba a esa persona. Me enamoraste tu, me enamorabas más a cada día que pasaba... Y a tan solo unos minutos de casarnos me dije... "Esta es la chica con la que quiero pasat el resto de mi vida, y con la que quiero tener familia"... TN, Nanami y yo nos abrazamos porque aclaramos nuestros sentimientos pasados, y le dejé claro que yo los había superado... Que encontré a la persona que realmente me hacía feliz... Mi amor...- Sonrojado, el peliazul ríe negando- Eres la única con el derecho de llamarme con ese apodo... TN, te amo... Más que a nada en este mundo... Eres lo único que necesito para ser feliz... Tenerte a mi lado, apoyándome, ayudándome en momentos difíciles... Eres lo mejor que mi padre pudo haberme traído...
-... Me siento... Tan estúpida...
Desde que vio que podía abrir la puerta, Masato no dudó en empujarla y correr a abrazar a su esposa.
- No debí dudar de ti pero... Todos los días me carcomía la culpa de que por mi egoísmo no puedieras ser feliz...- Sollozaba a rienda suelta, pegada al pecho de su amado, su calor envolviéndola otra vez- Te amo, te amo mucho Masato... Mucho, muchísimo... Mi amor...
- Y yo a ti... No voy a volver a hacerte dudar de eso... Te amo... Te amo mucho.
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Dejo esta cosita rápida por aquí y me voy °3°
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