Chapter three
Jueves 14 de marzo, Australia 2019
Caminaba entre las personas de servicio de la FIA, debía llegar al hotel para poder cenar y luego juntarme con los chicos en una sala de juegos que había pedido. Corrí un poquito, hacía mucho calor y había mucha gente.
Al llegar donde nos hospedamos me dirigí a el comedor para poder saciar mí hambre. Spencer eligió mí comida basado en la dieta que me había asignado mí entrenador. En conclusión, estaba comiendo proteínas, pollo, lo más sano posible, hervido, con verduras de igual modo hervidas.
Me senté en unas mesas que estaban unidas, eran siete en total. En ese momento llegaron los demás pilotos y se fueron sentando en la misma mesa.
- ¿Quién se unirá hoy a la "noche de juegos"?
- Si hay alcohol, yo seguramente. - Dijo Daniel.
- Eres un mal ejemplo para Lando y para mí, tenemos 19 no podemos tomar - obviamente, se lo dije en tono de broma.
- Uf si la buena, bien que tomas Champagne sin quejarte. - Me hice la ofendida.
- Por lo menos llego a tomar Champagne.
Los chicos no podían quedarse callados y estallaron en un profundo Oh apoyando mí último comentario.
- Volviendo a lo importante, quiero saber si vendrán todos porque alquile un salón de juegos para nosotros solos.
Los McLaren dijeron que sí, al igual que los Ferrari, Renault, Red Bull y Toro Rosso. Después tenías a los que vendrían individualmente como George, Kimi y Checo. No es que el resto nos cayeran mal, sino que Lance Stroll nos miraba raro cuando nos juntábamos y el resto tenía cosas de los autos o entrenamientos, ni idea en realidad.
- Maxiiii - Me miró y yo hice un puchero. - Porfiss
- Ven aquí - Me subí a su espalda y me agarré de su cuello.
Llegamos a la habitación y cada uno se esparció por todo el lugar, corrí para prender la PlayStation colocando el juego FIFA 19, no es por alardear, pero soy muy buena en él. Carlos se acercó con Lando, entonces llamé a George para conocerlo más y para que me ayudara a patearles el culo a los McLaren.
- Espero que preparen sus pañuelitos, porque estuve jugando todas las vacaciones bebés.
- Si te eliges un equipo como el Barca, lo dudo mucho. - Sainz al igual que yo, era muy competitivo en este tipo de juegos. - ¿Súper clásico?
- Si quieres perder... está bien.
Elegí a el Barcelona y el español eligió al Real Madrid, elegimos la camiseta y la formación, e inmediatamente comenzamos a jugar. Cada vez que metíamos un gol lo celebrábamos en la cara del otro. Russell resultó ser muy buen jugador al igual que Norris, fue un juego bastante divertido.
A pesar de haber empatado, Carlos y yo quedamos satisfechos con el resultado, el resto de los chicos se acercaron para empezar a hacer un mundialito. Entre risas, bromas y enojos, terminamos saliendo a las dos de la mañana de la sala de juegos.
Viernes 15 de marzo, Australia 2019
Eran las cinco de la mañana cuando Spencer me despertó, debía levantarme para luego dirigirme al gimnasio del hotel. Agarré el celular subí una historia en Instagram, contesté algunos mails de fans y le mandé un mensaje a Ralph Schumacher, mi tío.
"Gracias por avisarme, trataré de ir antes de Sakhir" enviado.
Me puse un conjunto deportivo Reebok y me dirigí hacía el gym, piernas, brazos, glúteos y ejercicios de cuello eran algunas de las rutinas que me habían dado esta semana. Me bañe y baje al restaurante, me acerque a saludar a los que ya estaban despiertos.
- Lewis, Valtteri, buenos días.
- Hey Maggy - Me senté con ellos - ¿Cómo vas con el nuevo motor?
- Bien supongo, no he visto gran diferencia - levanté los hombros.
- ¡Schumacher!
- Me retiro, un gusto caballeros.
Fui dónde estaba Walter y Spencer, ahora tenía revisión física, para luego poder ir al Autódromo. Llegamos dónde estaba el doctor.
- Buenos días, señorita Schumacher.
- Hola doctor Who. – Obviamente comprendió mi broma, este hombre siempre encontraba el origen de mis dolores o malestares.
- Ya sabes cómo es el procedimiento, puedes dejar la ropa en aquella camilla - Señaló a su izquierda. - e ir a la balanza.
Más cosas aburridas, en conclusión, así eran las mañanas de viernes de prueba. Caminé hasta el auto que Nissan nos mandaba para que fuéramos al Circuito.
- Firmas algunas cosas, te sacas fotos y luego debemos ir a hablar con tu ingeniero - El cronograma parecía bastante tranquilo.
Cuando llegamos al paddock me encontré con Charles él estaba hablando con un hombre, el cual no supe distinguir quién era.
- Hey Charles - Alegremente me acerque a saludarlo.
- Hola Maggy ¿Cómo estás?
- Oh muy bien, gracias por preguntar.
Movió sus manos señalando al hombre pelado que se encontraba justo detrás suyo. - Él es Jock Clear, mi ingeniero.
Le regalé una sonrisa.
- He visto tu foto en las oficinas de Lotus, además te recuerdo. Trabajaste con mi padre en las temporadas 2011-12.
- Me sorprende que me reconozcas - miró a la nueva promesa de Ferrari - Iré a hablar con Mattias, te espero a las 2 en el Motor home.
- Claro, nos vemos enseguida Jock.
- Adiós señor Clear, fue un placer haberlo visto nuevamente.
Mientras se retiraba, el monegasco me miró con una ceja alzada.
- ¿Qué?
- Siñir Cliir
- Oye ¿De dónde salió tanta confianza?
- Es una nueva temporada y presiento que cosas buenas sucederán en ella.
Miré sus ojos grises, eran extraños porque también tenían algo de verde en ellos.
- Lo mismo espero Charlie.
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El resto del día transcurrió con normalidad, en las vueltas de prueba, del día sábado, no tuve ningún inconveniente. Después tuve algunas entrevistas, pero de todos modos fue un día bastante tranquilo.
De todos modos, mis ansias ya comenzaban a crecer en mi pecho, mañana comenzaba la nueva temporada. Lo único que esperaba es que Charles tenga razón.