"Hoy iré a buscar material para comenzar el segundo celular, porque no te lo dije, pero ya el primero está listo. Sin embargo no es lo que parece, pero si es un teléfono, ¿porque? porque lo hice yo. E inventé mi propia marca "Senku's Phone" ¡la cual será reconocida en todo el mundo! adiós Samsung, adiós iPhone, adiós Huawei, ¡Senku's Phone será el nuevo móvil que destroce el mercado de la tecnología!
Aún no estará a la venta, claramente, ya cuando podamos volver el mundo como era antes será oficialmente lanzado al mercado, y como debes estar pensando, serás la primera en usarlo.
Ya casi podremos atacar, y la verdad me pone nervioso, pero admito que se que seré el ganador del mundo, eso es simplemente asegurado. La causa de mis nervios es perder a alguno de mis amigos, e incluso perder a Taiju y Yuzuriha, ya sea que mueran o se hayan aliado a Tsukasa, me pone los pelos de punta sinceramente, pero algo si tengo claro...seguiré siempre a mi corazón, a mi pasión por la ciencia, la meta de volver al mundo de antes, y encontrarte. Despetrificaré a todas las personas, el mundo será lo de antes, y finalmente podremos volver a vivir una vida normal...como tuvo que ser."
«29 de diciembre del 5739»
-¡Senku! ¡¿nos vamos?!
La voz de Chrome se escuchó fuera del laboratorio. El nombrado guardó la libreta donde siempre, para luego ponerse su ropa de invierno e ir con el segundo científico del lugar. Finalmente a ir en busca de más materiales para armar el celular.
¿Cuanto tiempo llevaba caminando? Si sus cálculos no eran incorrectos, al menos unas dos horas. Chrome se había dormido de tanto caminar y Senku era el encargado de llevarlo en su hombro, pero después de tanto tiempo sus pies no estaban dando para más, por lo cual se sentó tirando a Chrome a un lado despertandolo en el acto, normalmente se despertó exaltado listo para el ataque, sin embargo se detuvo al ver que solo era el muchacho quien fue la causa de su sueño interrumpido.
Ahora era Senku quien comenzaba a dormirse, estaba agotado, tanto de la caminata como el gran peso que Chrome se guardaba. Se acostó en la fría nueve sintiendo como esta le quemaba la nuca, pero con una agradable sensación, cerró sus ojos carmesí dejándose llevar por la refrescante sensación de frío, tomó un puñado de nueve tirandosela en su propia cara.
Estaba agotado físico, como mentalmente.
¿Es una pérdida de tiempo las esperanzas? ¿debería rendirse y sólo concentrarse en su mundo científico? ¿tendrá que olvidarla para siempre?
Todo es tan confuso, tan estresante, que se está cansando, su mente dice rindete, pero su corazón dice que siga adelante.
¿A quien debe obedecer?
Sus pensamientos fueron interrumpidos por una ardilla que le pasó en el rostro, este se sobresaltó despertando de su fantasía y dándose cuenta que Chrome le estaba hablando.
—Finalmente, pensé que ya estabas empezando a delirar. Te pido una disculpa por haberme dormido y hacer que me cargues.–Comentó el castaño arrepentido.
Senku solo lo observó sonriendo como solo el sabe.
—No te preocupes Chrome. Sigamos adelante.–Dijo el pelo de cebollino siguiendo su viaje.
O eso pensaba.
Su atención fue llamada por un pequeño rayo de luz que provenía del oeste.
—Por aquí.–Comentó para que Chrome lo comenzará a seguir.
Estaba seguro que allá encontrarían uno de los tantos materiales que necesitaban.
El castaño algo confundido solo le siguió el paso hasta poder alcanzarlo.
—¿Donde vamos?
—Vi oro que nos puede ayudar a crear los hilos, sígueme.
—¿Oro en medio del bosque? ¿no es que solo hay en cuevas y en el agua?
—Quizá alguien del grupo de Tsukasa lo haya saqueado, e incluso puede ser el mismo Hyoga.–Comentó Senku acercándose al objetivo.
—¿No es peligroso?
—Si se les olvidó, fue porque fueron atacados por un animal salvaje, por lo cual ahora es de nosotros.
Finalmente llegaron al lugar...y Senku se decepcionó por completo.
No era más que una simple estatua.
Una que era iluminada por el sol.
Este apretó los labios chasqueando la lengua dándose un pequeño golpe a su cabeza por otra vez jugar con el.
—Es una estatua...–Comentó Chrome señalando la persona envuelta en piedra.
—¡Me equivoqué!–Dijo el ojicarmesi haciendo una mueca.
Pero algo le llamaba la atención.
Si tenía oro.
Y es una pequeña pulsera que llevaba en su muñeca.
Solo iba a retirar la piedra y volver a casa...pero le dió por desherredar a la persona dentro de las lianas del árbol.
—Chrome, ayúdame.–Dijo hacia al castaño.
—¡Si!
Chrome sostuvo con fuerza la estatua humana mientras Senku rompía las lianas que impedían la libertad para el cadáver.
Finalmente pudo quitarlas todas, por lo que le pidió a Chrome que le diera la estatua, este obedeció dándole el cadáver a Senku. Lo puso frente al árbol listo para quitar el brazalete.
Pero grande fue su sorpresa al ver su rostro.
Ese tan deseado rostro.
El muchacho botó todo el aire en sus pulmones colocando su mano en la cintura de la estatua...estaba feliz.
Finalmente la había encontrado.
—Chrome, vuelve al campamento.–Dijo Senku colocando su nariz en el brazo de la estatua.
—¿Que? Pero Senku, ¿a donde vas?–Preguntó el chico bastante perplejo.
—Seguiré buscando solo.–Comentó quitando el brazalete de oro en la muñeca del cadáver.
El castaño asintió y se fue camino a su aldea. La estatua mantenía sus brazos cubriendo su rostro, con este hacia un lado, con el ceño fruncido y los ojos cerrados, como si estuviera esperando lo que debe de pasar...algo normal para ver como una luz extraña te vuelve de piedra.
—Bienvenida de nuevo.
Con los demás curiosos y preocupados por su desaparición de varias horas y el porque lleva alguien de hace años consigo. Senku solo siguió adelante hasta llegar al laboratorio, con cuidado subió en este entrando, no sin antes decir que va a estar ocupado.
Colocó a la chica de piedra en una pared comprobando que se iba a quedar en su lugar, como segundo acto fue a buscar su agua milagrosa, que con la mano temblorosa comenzó a rociarla encima de la muchacha frente a el, el agua caía poco a poco hasta llegar al suelo manchandolo con heces de murciélago.
Con el frasco totalmente vacío, cruzó los dedos esperando lo que el quería, solo esperaba cada segundo donde ella saliera del cascarón que la mantenía atrapada por más de tres milenios, verla sana y que saltara a sus brazos.
Sus súplicas fueron escuchadas, aquella roca comenzó a crear grietas por todo su cuerpo...hasta ver su piel salir de aquella prisión personal.
Desde ese momento, Senku probó de nuevo un pedazo de cielo y esperanza.
La chica salió por completo de aquella piedra que la mantenía encerrada, su cuerpo se tambaleó hacia delante, el suelo esperaba su cuerpo para recibirlo con un fuerte golpe, pero antes de que pasara eso, los brazos del muchacho lograron atraparla a tiempo.
Su piel...era tan suave, ¿cuanto tiempo deseó volver a sentirla?
La joven (no tan joven) desconcertada se agarró de los fuertes brazos de Senku como apoyo, no entendía lo que pasaba a su alrededor, ni cuánto tiempo había pasado desde que aquella luz verde apareciera mientras hacía sus tareas, perdiendo la razón y sin conciencia de cuánto el mundo estaba cambiado. Sus ojos se dirigieron a la mirada carmín del chico, con delicadeza miró a su alrededor y tratando de entender la situación.
—¿Senku? ¿que sucede? ¿donde estamos? ¿que está pasando? ¿que pasa con tu ropa? ¿porque estoy desnuda?
Tantas preguntas, para ver como el chico simplemente la miraba desde su perfil.
La muchacha seguía preguntando cosas y ninguna respuesta, solo sintió como su rostro era tomado por una cálida mano, miró hacia arriba dándose cuenta lo que los ojos del cabeza de cebollino daba a entender.
—Estás de vuelta...
No entendió que quería decir con eso.
—¿De vuelta? ¿de que hablas? ¿que fue lo que pasó? lo último que recuerdo fue aquella luz verde, que me dejó inconsciente, después de eso no recuerdo absolutamen-
Sus palabras fueron interrumpidas por los grandes brazos del científico rodeando su cuerpo en un abrazo, que decía más que mil palabras, miles sentimientos juntos, sensaciones extrañas, todo en un mismo lugar. Sin embargo aún seguía desconcertada, sin entender la situación u obtener respuesta alguna, por lo cual solo procedió a abrazar al joven que tenía en frente; su corazón empezó a bombear con fuerza por la sensación de calma que el muchacho le brindaba, su aroma a pólvora, azúcar y vino era algo bastante nuevo, sin embargo no le era una mala combinación, es más, le gustaba muchísimo.
—Te extrañé demasiado sabes...–Susurró el chico en la cabeza contraria.
-—Me extrañaste?-Comentó ella. Recibió un asentimiento por parte de el.–¿Porque?
—Han pasado 3700.–Finalmente se dignó a contarle.
—¡¿Eh?!
La fémina intentó alzar su cabeza para ver su rostro, fallando en el mismo, ya que Senku no se movía de su lugar.
—¿Como sabes eso?
—Soy un genio, ¿lo olvidaste?
Si que lo sabía, pero ¿como pudo saber eso exactamente?
Finalmente Senku se separó de ella volviéndola a mirar a los ojos, disfrutando cada momento de las vistas que tenía, el ver su rostro de nuevo, tocarla, recordar los momentos mágicos con ella...lo hacían feliz, la persona más feliz del mundo.
—Te lo explicaré más tarde. Ahora solo déjame disfrutar.–Comentó acercando su rostro al ajeno, y volver a tocar aquellos labios que hace milenios no tocaba.
Y ______ se dió cuenta de algo.
Ella también lo extrañaba.
No importa su inconsciencia, extrañaba al chico con toda su alma.
⚗️
—Se mi novia.
"Se mi novia..." su forma tan directa y sin pelos en la lengua le sorprendió bastante.
Y también le pareció lindo.
Hace un año que se conocían y comenzaban a relacionarse, conociéndose en una cafetería de gatos, donde ella era una empleada más del montón, pero quién más llamó su atención.
Era alérgica a los gatos.
—Es un negocio que antes era de mis abuelos, lo heredaron a mi padre quien hace tres meses falleció. Los únicos que trabajamos somos mi madre y mi hermano mayor, así que decidí ayudarles cuando tengo tiempo libre. Aunque los gatos me den alergias, soy muy feliz con ellos, verlos relacionarse con los clientes y con nosotros me da mucha alegría. Yo me encargo de la clientela, mi hermano con el cuidado de los felinos y mi madre en los bocadillos y bebidas. Todo a sido difícil con la pérdida de mi padre y el negocio, y eso que no cuento la parte de mis estudios, volviéndome alguien sin tiempo alguno.-Terminó de explicar la muchacha dándole un sorbo a su Mocca.
Senku la escuchaba con la mayor atención del mundo, quedando impresionado en el proceso de la conversación. Había empezado a ir a la cafetería más seguido, para jugar con los felinos, y saber sobre ella, quien es, porque trabaja en un lugar donde su piel se irrita al contacto del pelo de gato, conocerla. Su cabeza exigía conocerla más a fondo, y sin saber bien el porque, obedeció a su petición, volviéndose la primer persona que habla con ella desde hace muchísimo tiempo, ya que como bien le explicó, el tiempo apenas le llega a sobrar.
—Gracias por querer saber sobre mi Ishigami-kun, de verdad aprecio tu amistad.–Comentó sonriéndole al chico acelerando su corazón.
Senku acarició la cabeza de la muchacha como cachorro soltando una risa característica de el.
—Pensé que la chica de las alergias necesitaba al menos un amigo. Sin embargo aprecio también tu presencia.–Comentó ahora acariciando su mejilla.–Por cierto, llámame Senku...______.
—Senku...
Su cuerpo tembloroso, sus mejillas con un dulce rojo en ellas, su respiración entrecortada y bastante nerviosa en el proceso.
¿Es esto una propuesta de noviazgo de verdad?
La última vez que estuvo con alguien fue por una apuesta puesta por su ex, dañandola dándole un mal sabor de boca, que ahora era tan insegura en el tema "amor"...pero de verdad que todo el tiempo que Senku estuvo a su lado, se sintió protegida, querida y especial.
Y porque negarlo, los sentimientos amorosos crecieron con el tiempo, y no solo en ella al parecer, el científico había empezado a manifestar sentimientos amorosos, aún sin tener tiempo siempre, los ratos donde estaban juntos eran los más especiales que podía llegar a tener, llegando a compararlos con sus experimentos y su sueño de ir a la luna.
—De...¿de verdad? ¿aunque no tenga casi nunca tiempo? ¿de verdad no importa nada? ¿no es otra apuesta?...–Decía ella hasta el punto de soltar pequeñas lágrimas por recordar aquel momento donde su ex la humilló en la cafetería tratándola de todo, menos bien.
—¿Haz puesto atención todo este tiempo conmigo ______?–Preguntó acercándose a la chica, abrazándola de pasó dejando que llorará en su pecho.
______ devolvió el abrazo llorando aún más fuerte, sin llegar a gritar.
Senku dejó que se desahogara lo más posible, vaya idea errónea le dejó aquel tipo en su cabeza, de verdad que no aprovechó la mina de oro que tenía, y solo por un par de billetes llegó a lastimarla.
—No te haré daño...–Susurró de forma calmada tratando que dejara de llorar.-No importa el tiempo. Sal conmigo y ponme a prueba.
______ comenzó a calmarse, su corazón bombeaba más de lo normal y saboreando cada palabra que Senku le decía. La sinceridad, y su gran corazón es algo que lo caracteriza por completo, además, desde que han estado juntos le a demostrado ser un muchacho noble, sin importarle las veces donde no han podido convivir por su falta de tiempo, algo que la chica apreciaba con su corazón aquel acto de bondad por parte de el.
—Me gustas mucho, Senku...–Susurró suavemente.
Senku solo sonrió egoncentricamente, pero con clara felicidad saliendo de su cuerpo. El también había desarrollado cariño y aprecio hacia la joven, hasta convertirse en amor, lo que lo llevó a cuestionarse si ella sentía lo mismo.
Y como siempre, el tenía razón.
Las acciones y aquella forma de actuar habían cambiado de cierto modo, no del todo, pero si minúsculos detalles que la hacían actuar diferente cuando estaba con el.
—Si me gustaría salir contigo...–Respondió la muchacha sonriendo en aquel abrazo reconfortante.
—Era cien mil millones por ciento que ibas a aceptar.–Agregó acariciando la cabeza de la chica y besando su cabello.
Un gesto que sin duda, recordará por todo el tiempo que viva.
⚗️
Separó los dulces labios ajenos para dejarla respirar, ella poco a poco abrió sus orbes mirando el rostro del muchacho disfrutando cada segundo de aquella vista tan hermosa, de cuclillas sentados disfrutando de la compañía del otro.
—Estuve petrificada 3700 años...–Dijo ella de forma pensativa.–Todos los humanos fuimos convertidos en roca por una extraña luz verde. Y tú padre, junto a otras personas crearon una nueva generación...es algo difícil de ingerir...
—No estaremos mucho así. Volveré el mundo a la normalidad y derrotaré el imperio de Tsukasa.
—¿Tsukasa?
—Otra historia larga.
La conversación fue interrumpida por un sonido externo, y como llamaban su nombre. Rápidamente Senku arrastró el cuerpo desnudo de _______, hacia el, así tapando al menos lo más privado de este.
—¡Senku! ¡tu descanso terminó!...
Ginro había entrado al laboratorio avisándole a Senku que terminó su descanso (que en realidad está cansado y quiere terminar) pero no sé esperan ver cómo Senku abrazaba a una chica, que de paso, era linda y estaba desnuda.
—¡Senku! ¡¿de dónde salió esa chica tan bonita?! ¡¿de verdad esas bellezas pueden aparecer de las rocas?!–Comentaba el rubio emocionado.
El nombrado solo se mantuvo sereno, sin dejar de abrazar (proteger) a la muchacha entre sus brazos. Ginro quería acercarse a la chica, sin embargo sus acciones fueron negadas por una jarra de vidrio arrojada por Senku, la misma que usó para guardar el agua milagrosa, Ginro se asustó y automáticamente retrocedió.
—Ya que estás, trae algo de ropa, que sea cómoda, abrigada y femenina.–Dijo el científico escondiendo el rostro de _______ en su pecho.
El rubio nervioso se fue a buscar lo dicho, salió corriendo y llorando al mismo tiempo.
De verdad quería al menos conocerla.
Quedando ambos solos, simplemente se quedaron abrazados, Senku había cumplido una de sus metas, y su felicidad no tenía precio, estaba feliz y no podía negarlo, se siente satisfecho, y la esperanza volvió a su pecho, quitando todo rastro de desconfianza. Ahora la tenía frente a el, y no la dejará ir tan fácil.
—Tu cara...-Dijo ella al ver el rostro de Ishigami con ciertas cicatrices en su rostro.
—Las tenemos todos los que fuimos despetrificados. No es sorpresa, tu también la tienes.–Agregó pasando sus dedos sobre las marcas de ella, las cuales pasaban por su ojo izquierdo, terminando en su frente.
Ella de forma automática se tocó el rostro buscando señal de su cicatriz, la encontró sorprendiendose. No pasó mucho cuando el viento entró con fuerza al laboratorio, helandole el cuerpo a ______, como acto reflejo se abrazó ella misma para darse calor, pero rápidamente una manta acobijo su desnudes, manta propietario del muchacho frente a ella, está le regaló una sonrisa y un gracias.
Ginro volvió con lo pedido por Senku, este agradeció y se fue de una patada por el científico. Senku le entregó la ropa, ella le dió la espalda para vestirse un poco más tranquila, sin embargo daba totalmente igual.
—Ya no tendrás que trabajar tanto.–Comentó.–Ni hay gatos cerca, podrás estar más conmigo.
Una sonrisa sincera se asomó por los labios de la chica, cerró sus ojos pensando en la paz que tendría por un tiempo.
—Gracias.
Finalmente terminó su vestimenta, Senku tomó su mano llevándola hacia el pegandola a el, se miraron un par de segundos, para que sus labios volvieran a juntarse nuevamente, un beso cálido, suave y nostálgico. Aquellos flashbacks volvieron a recorrer su mente, dónde compartían momentos de su vida juntos, ya sea grandes o pequeños, eran simplemente apreciables, y a Senku, nada lo hace más feliz que volver a ver a su novia junto a el, volver a sentirla, y estar con ella.
Ahora, solo falta reconstruir el mundo, y finalmente estará satisfecho con su obra, volver a lo que era antes, y junto a su lado.
Finalmente...la recuperó, podrá dormir tranquilo, y sus notas serán vistas por ella.
Un logro más en su vida.
Fin
Nmms la primera historia que terminó en mi vida, y nisiquiera está pública. Si amikas, esta madre estaba terminaba hace tiempo. Ahora que tengo su atención, estoy triste, si, estoy triste. ¿Porque estoy triste se preguntarán? Pues muy fácil mi amiga.
Arthur Morgan, ¿se te hace reconocido ese nombre? Si no, pues tas pendeja xd. Las que si lo conocen, ya deben saber la razón de mi tristeza. Aaaaah como se puede extrañar tanto a un wey que nisiquiera existe :( ni en animes e llorado tanto como lo hice en este juego hermano, pero alch estuve como dos días llorando por ese we, pero bueno, no podemos hacer mucho, lo hecho hecho está, pero pinche Rockstar, pa'que haces que le agarre cariño a un personaje si después haces lo que haces *pichula arresentida*
En fin, amigas muchas gracias por llegar a leer esta mierda, me hace re feliz que la llegaran a leer, significa mucho para alch. Besitos en el siempre sucio, y amen a Senkitu bb. Cuidense, lavense las manos que hay Coronavirus, tomen awa y declarense a su crush.
Las quiero montón uwu