Llegue a casa y como de costumbre estaba sola, cojo mi teléfono y llame a mis padres para decirles que me iría hoy y Bety ella sin dudarlo fue a verme y justo ahora estába con ella.
- Te voy a extrañar.- dice abrazándome.
- Tranquila aún no me iré.- dije burlonamente, aún faltaban unas horas.
-Es que, que hare sin ti? Y más en la universidad.
- Tranquila pensaré en algo para volver.- dije.
-Oye estuve hablando con Dante y...-la interrumpo.
- No!
- Es que tienes que saber.- dice- Sin querer le dije que te ibas hoy y... y te juro que se me escapó no quería decirle.
- Mierda Bety, pero porque le dijiste- digo exaltada, si se de alguien que es sumamente necio es Dante, lo conozco bastante bien y se que no se quedará tranquilo al saber que me iré a vivir con otro hombre.
- Lo siento se me escapó es que lo vi tan triste sin ti, lo siento.- dijo haciendo un puchero, pero le di un empujón leve.
Mis padres ya estaban en casa, así que pase cada minuto con ellos ya que nos volveríamos a ver otra vez pero no se cuando, escuchamos la puerta sonar y la nana de la casa abrió y era el. Mierda, estoy nerviosa y no me puedo controlar al saber que me iré de mi casa es sumamente raro y mierda ese hombre se ve tan intimidante, ese hombre definitivamente parece ruso.
Tan solo su presencia en la entrada paralizaba a todos.
- Pase.- dice la nana y entra. Mis padres y Brayan al igual que Bety se despiden de mi .
- Te veré pronto cielo.- dice mi madre con los ojos hechos agua.
-Claro mama.- le doy un beso y me dirijo hacia Brayan- y tu pórtate bien y no vuelvas loca a mamá. Vendré a visitarlos cuando pueda.
- Hasta luego... - dice este abrazándome, Brayan no sabe de la verdadera razón del porque me voy solo sabe que iré a vivir con un amigo de papa.
Una vez sus hombres terminan de sacar mis cosas de la casa para introducirlas en una camioneta negra.
Salgo de allí junto a él, otra vez volveré a esa casa junto con el, espero las cosas sean diferente, justo cuando iba a entrar al auto escucho la voz de Dante llamarme.
- Royalty.- dice y veo como se me acerca.- ¿por que te vas? Si es por mi lo siento, ¿ok? yo no quise...
- ¿Lo conoces?- Me pregunta Erix detrás de mi.
- Si, no hace falta despedirme ya vámonos.- Respondo y Erix asiente.
- Por favor Royalty, no me hagas esto, No nos hagas esto! yo te amo... te amo, solo perdóname fui un idiota... Ella no significa nada. Solo fue un error.
Al Dante decir eso observo a Erix por encima de mi hombro. Podía ver como apretaba su mandíbula y como hacía su saco de lado para ingresar sus manos a sus bolsillos. Su postura era tan intimidante y más el verdadero propósito de ella. Al lado en su cintura podía ver una pistola guardada, Incluso Dante se dio cuenta.
- ¿Quien es el Royalty?- pregunta Dante
- A ti no te impor...- hablo pero Erix me interrumpe.
- Su esposo. - dijo este causándole a Dante una reacción rara y extraña.
- Esposo?- este me mira confundido.
- Si, es mi esposo y justo ahora me voy con el con permiso. -digo, con un enorme dolor al ver la cara de tristeza de Dante.
Una vez digo esas palabras entro al auto al igual que Erix dejando a Dante atrás y confundido, en el camino todo fue muy callado.
-Sonia!- dice Erix una vez que llegamos Erix en un leve grito.
- Si señor.- Dice.
- Llévala a la habitación. - dice este mirando su teléfono.
- A la misma señor?- pregunta.
- No, dormirá conmigo.- Una vez dicho esto me quedo en confusion total.
Espera que!?, no no este tipo esta loco yo no voy a dormir con el... El me dijo que no me tocara!
¡Casi me da algo allí!
-No eso no pasara.- digo de brazos cruzados. - Dormiré sola.
- Aquí se hace lo que yo diga y dormirás conmigo te guste o no.- Este me da una mirada asesina y yo sin poder hablar le volteo los ojos.
-Como ordene señor. - La mujer se retira dejándome a solas con el.
-Yo no voy a dormir contigo, prefiero el suelo.
Este sonríe un poco y se acerca acomodando un mechón de mi cabello detrás de mi oreja.
- Ya lo veremos. - dice y acerca sus labios a los mío..... dejándome con la sección del parálisis y esperando a que sus labios se peguen a los mío pero no sucede y se aleja dejándome con la respiración acelerada.
Una furia corre dentro de mi justo ahora, quería arrancarle los ojos, este hombre comenzaba a irritarme,
Subí a mi nueva habitación, que por cierto esta muy oscura a este tipo si le gusta lo oscuro, a lo contrario a mi, le tengo miedo, esto parece la guarida de Drácula, en fin entre a bañarme antes de que Erix subiera, me puse la pijama y me senté en la cama quise llamar a Bety pero no respondió, justo hay entro Erix a dañar mi vista.
| Subconsciente |
o más bien a arreglarla?
- Y una vez te digo, yo suelo dar patadas y suelo hablar mucho durmiendo así que.. puedes retractarte ahora.- digo
- No hará falta.- dice quitándose el saco y quedando con su camiseta blanca yo no dejo de mirarlo al ver que comienza a desbotonarse la camisa y ¡Dios mío! ya empezaba hacer calor, este ríe, al parecer noto mis nervios y entro al baño. Quede como una boba, parezco como si nunca hubiera visto a un hombre semidesnudo.
♡︎♡︎
A La mañana siguiente, me despierto y noto que este ya no está, entro al baño y una vez salgo con la toalla rodada en mi cuerpo, escojo una ropa cómoda y bajo a desayunar, entro a la cocina y me topo con la nana de la casa.
- Buenos días señorita, se le apetece algo.- dice esta amablemente.
- Si un capuchino.- digo tomando
asiento en unos de los taburetes junto a la isla, minutos despues esta me lo pasa- y porfavor dime Royalty.
- Segura? Al señor no le agradará la idea.
- Yo soy la señora de esta casa y como el puede poner sus reglas yo también.- dije regalándole una sonrisa.- por cierto sabes donde esta?
- El Señor salió muy temprano, probablemente a su empresa.
Imagine mi vida de casada muy diferente, al menos imaginé que estaría casada con Dante, soy una estupida por creer en el.
- Y cuentame, el ha vivido solo siempre?- pregunto intrigada ya que no se absolutamente nada de el y el probablemente sepa todo de mi.
- El Señor vive solo desde hace un buen tiempo, aveces viene su madre a visitarlo lo cual no es a menudo. - me responde esta.
- Y su madre donde vive?
- Luego de que su esposo muriera se fue nuevamente a Rusia y allá a estado desde entonces con su otro hijo.- dice está dejando atrás lo que hacía.
- Rusia? - sabia que algo tenía que tener el de Rusia porque un hombre así no se ve todos los días.
- Si, el Señor nació allá pero después de cumplir la mayoría de edad vino a vivir a la tierra natal de su madre.
- Entonces su madre es estadounidense y su padre era de Rusia?- esta asiente y ¡vaya! no me imaginaba eso.- de que murió su padre?
- Eso no está completamente seguro, bueno todos piensan que fue un accidente de avión.
-Como que piensan?
- Debería seguir preguntándole al señor ya que el sabe toda la historia.- dice está.
El día fue largo y sumamente aburrido ya que no salí de la casa, me encontraba en la habitación esperando a Erix, quería preguntarle si podía ir a la universidad al menos para no aburrirme aquí, me puse algo comodo para dormir. Veo la hora y Erix no llega, no se nada de él desde ayer, pasan varias horas después y al fin llega, y no en buen estado su camisa blanca estaba llena de sangre.
- Qué pasó?!- digo acercandome a él y con la cara horrorizada.
- Nada. - dice como si nada, se quita la camisa y veo una herida no profunda, pero parece un roce de algo.
- Mierda!, tienes que ir a un doctor.- digo casi exaltada.
-Te dije que estoy bien.- este entra al baño segundos después sale con una especie de botiquín.- toma.
-Espera no!- digo nerviosa.
- Solo limpia la herida y luego véndala.- dice como si fuera lo más normal.
Ok, tranquilízate solo haz lo que te diga y listo! Me pongo histérica al ver sangre, este se sienta en la esquina de la cama y yo me paro frente a el aunque con mucha distancia este lo nota y me toma de la cintura y me acerca mucho más a el.
Cojo un algodón y hecho alcohol, empiezo a pasarlo por la herida, eso debe de dolor, pero a él está lo más tranquilo posible.
- Necesito hablar...contigo.- dije haciendo una pausa.
- De que?
- Q-quiero terminar la universidad.- dije
- No.-dijo.
-No?!-dije presionando un poco la herida y este hace la primera queja de dolor.
- Puedes hacerlo más lento!, Mierda.- dice aún aguantando el dolor y mi furia salió.
- Yo no soy una puta doctora, si quieres busca a una de verdad.- digo soltando el algodón con alcohol y alejándome de el, pero este impide que de otro paso más.
Se levantan de la esquina de la cama, me agarra del cuello y me estampa contra la pared,quedo inmóvil, pero aún así mi rabia sigue.
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