Aprendizaje salvaje [TanIno +...

By Mapache_sensible

11.7K 848 833

Tanjiro no es el chico razonable y educado que recuerdan, convertido en demonio es como un niño explorando el... More

Capítulo único

11.7K 848 833
By Mapache_sensible

Lo prometido es deuda, en un grupo donde estoy salió la idea de un hard con Tanjiro demonio, simplemente me dieron unas ganas tremendas de escribirlo. Y no es para menos, porque diablos apenas salió en el manga todos quedamos en shock, pero ciertamente esa versión del Gompachiro despierta los bajos instintos de todos! 7u7

Este era un regalo de día de reyes, pero eh estado ocupada, así que tarde pero bueno jajaja Si te gusta este oneshot vota por él, deja tu comentario y sígueme para más!! 😎💖


 


Por fin habían terminado todo o casi todo. Muchos cazadores que habían muerto protegiendo a las personas inocentes, fueron recordados como verdaderos héroes. Aun si su organización estaba escondida y se mantenía en secreto, todo los sobreviviente llevarían en sus corazones la voluntad de los caídos.

Muzan estaba muerto pero como el mal nacido que era no podía irse del todo sin arrastrar todo a su paso. Como un cobarde y un egoísta, antes de morir se había llevado consigo a Tanjiro, transformándolo en demonio y que pudiera seguir su legado. Pero no era suertudo, claro que no lo era y no todo era un desastre en su situación. Gracias a Nezuko que logró llegar justo a tiempo, segura y con ese vínculo de hermano que tenían los Kamado. Detuvo a su hermano con la misma determinación con la que él lo hizo una vez hace años frente al pilar del agua. Tanjiro había visto más allá de la locura, el hambre, el odio y la maldad, la luz que Nezuko representaba lo guió por el camino correcto. No tenía conciencia de lo que era antes como humano, ahora solo era un ente guiado por instintos y el hambre. Como lo era Nezuko al principio pero más errático.

Por suerte Aoi que tenía unos cuantos conocimientos de medicina estaba dispuesta a traerlo de vuelta, y crear una medicina a base de algunos escritos que Shinobu y Tamayo habían dejado. Gracias a que ahora tenían la sangre de Muzan a la mano esperaba fuera más fácil. Por lo mientras tenía que resistir a esa asfixiante hambre de carne humana que como demonio tenía. Y a esa maldad desmedida que de vez en cuando aparecía y lo volvía loco, babeando como un perro rabioso, con esa mirada de asesino en potencia. Así habían pasado meses en la mansión mariposa, todos ayudaban en lo que podían, limpiando y cortando leña. O en la cocina, preparan las comidas de todos.

– Nezuko-chaaan aquí esta lo que faltaba de ropa– el rubio se acercó lleno de corazones que volaba a su alrededor, con el cesto de ropa recién lavada.

– Gracias Zenitsu eres de tan buena ayuda– la chica se giró al estar de espaldas y sonrió.

Al rubio casi le daba un paro cardíaco cada que esa sonrisa le iluminaba, casi cegando su vista. Era un ángel en su kimono rosa, y sus mejillas sonrojadas. Cayó al piso dramático como si el amor le apuñalara el corazón y le mataba por dentro de pura felicidad. Aunque los gritos de sus amigos llegaron más rápido a sus oídos de lo que esperaba, vio cómo uno lo saltaba y seguía corriendo, mientras que el otro no tuvo consideración y piso su espalda para impulsarse.

– ¡Ahhg!

– ¡Te voy a atrapar Monjiro!– dijo Inosuke persiguiendo al susodicho.

– ¡Cuidado chicos, no sobre la ropa limpia!– grito Nezuko preocupada, los siguió con la mirada con una sonrisa de alegría, al ver a ambos chicos tan divertidos.

El rubio se recuperó para levantarse enseguida– ¡Idiota, solo porque Tanjiro pueda estar bajo el sol no quiere decir que puedan estar todo el día jugando!

La menor sabía que el rubio no se quejaba porque de los tres era el que más trabajaba si no porque siempre lo ignoraban– déjalos un rato más, además ya terminamos por hoy con el trabajo de casa.

– Pero Nezuko-chan siempre es lo mismo, está obsesionado con Inosuke, y eso que casi lo mata...

– Pero al final no sucedió nada malo, ellos se quieren mucho, ya sabes como son.

El mayor suspiro, siempre estaban jugando, tal vez era culpa de sus antiguos sentimientos lo que hacía que Tanjiro estuviera cerca de Inosuke cuidándolo aunque no lo necesitara. Siguiéndolo en sus tonterías ahora que también era una bestia como Inosuke, peleando y demostrando su poder.

Nezuko sonrió y una vez que acabó de tender la ropa alargó la mano para tomar la del mayor– Vamos Zenitsu tenemos que ir a comprar al pueblo las cosas que pidió Aoi ¿iras conmigo, cierto?

– ¡Po-por supuesto, yo cargare todo no te preocupes por nada! ¡Nezuko-Chaaan!

El rubio olvidó a sus amigos inmediatamente y toda la situación anterior, centró su atención en la pequeña chica de ojos rosados e inocentes. Ambos entraron a la casa, después de terminar su tarea del día y listos para seguir con su día.

Tanjiro corría con todo y manos, como un animal mientras reía como un maníaco. Para él las cosas no eran sencillas, no es que supiera realmente, porque no podía comer carne humana aunque cada gota de sangre en su cuerpo se lo rogara. Pero si su hermana, la bonita chica de voluntad indomable, con la cual sentía esa conexión especial de familia, se lo pedía y fue capaz de casi sacrificar la integridad de su cuerpo para detenerlo. Entonces no tenía por qué recriminarle y solo debía hacer todo lo que pudiera para no caer en esa tentación. De esa manera encontraba cosas para pasar el rato sin pensar en eso, una de ellas era correr como desquiciado por todo el lugar durante el día, él no necesitaba dormir mucho así que se mantenía despierto día y noche. Lo que hacía cuando la luna estaba en lo alto del cielo, y no se escuchaba más que el suave respirar de todas las criaturas. Algo que le tranquilizaba y bajaba sus instintos era ver a su familia dormir. Inmersos en sueños esperando fueran felices, con caras tranquilas y sin una pizca de tristeza. Con ese olor a paz que solo le hacia suspirar.

– ¿¡Kentaro!?

Escucho a lo lejos como el chico de cabeza de jabalí le llamaba, no supo cuándo se alejó tanto de él mientras corría. Inosuke apenas sintió la presencia detrás de él giró sobre sus talones, pero el demonio era más rápido y terminó tirado en el suelo con un Tanjiro aprisionando sus manos y piernas. Sintió su respiración en el cuello, aspirando cada uno de sus aromas corporales. A Tanjiro le caía bien Inosuke no sabia porque, tal vez era ese aroma tan familiar que le decía era una buena persona. O la esencia de las flores silvestres y el dulzón de la miel, el no olía como los demás era casi adictivo. Cientos de veces se preguntó si sabría también como lucía ¿estaría bien lamiéndole solamente?

No quiso quedarse con la duda así que lo hizo, quitó el largo cabello que estorbaba y dio un gran lengüetazo por el cuello del chico, haciendo que su espalda se arqueara un poco. Agradecía que el chico no llevara camisa para ver cómo sus músculos se contraían deliciosamente. En verdad ahora quería darle una mordida...

– ¿¡Gompachiro que haces maldición!?– los ojos de Tanjiro llegaron a su propias manos que aprisionaba las contrarias.

No, no podía darle una mordida o no se detendría hasta terminarlo todo y con todo se refería a todo. Así que se levantó y comenzó a trepar árboles de nuevo, hasta perderse de la mirada verde. Inosuke de levanto por fin algo confundido, el demonio Tanjiro era encimoso, siempre aparecía detrás de él para abrazarlo cuando estaba haciendo cualquier cosa, así que estaba acostumbrado a su contacto, pero la lamida era nueva. No se sentía realmente molesto por ese comportamiento en específico, solo curioso.

– ¿Tanjiro...acaso estaba probando mi fuerza?– habló feliz imaginando de porque lo había hecho, le comenzó a doler la cabeza por pensarlo mucho así que se detuvo dejando el tema de lado y siguió intentando alcanzar al otro.

Lo encontró detrás de unos arbustos mirando hacia un claro enfrente curioso se acercó para mirar en la misma dirección. Ahí había dos jabalíes en mero apareamiento, Inosuke se sonrojo, sonrojo que por suerte nadie veía gracias a su máscara. No es que le diera vergüenza, era algo natural entre animales y muchas veces lo había visto en muchas otras especies, pero el hecho de que Tanjiro lo viera con tanta concentración era otra cosa.

Tanjiro lo miró y giró la cabeza curioso, a veces era como un niño que no sabía nada y apenas descubre todo de nuevo– ¿comer?

Inosuke no entendió a la primera hasta que como por arte de magia después de unos minutos pudo contestar– no tonto, se están apareando– dijo acercándose sin hacer ruido, sobre sus puntas como el otro, cuando noto que el pelirrojo no entendía grito un poco más fuerte– ¡Ya sabes, como si se devoraran con amor, para hacer un bebé!

– ¿Bebe?

– Monitsu dice que es algo que se hace cuando dos personas están enamoradas y quieren pasar a tener una relación más seria.... ellos tiene un bebe ¡pero realmente Monitsu es un tonto y no entiendo qué quiere decir con todo eso!

El mayor se quedó quieto en un momento pensativo, Inosuke solo lo observó, esperando dijera o hiciera algo, como continuar con su juego de atrapar al otro. Pero no hizo nada hasta que alzó la mirada y le mostró todos los dientes divertido como si le hubiera ocurrido algo.

– ¡Espera Tontaro! Ahhh– el mayor lanzó sobre su cuerpo hasta que Inosuke quedó acostado en el pasto con Tanjiro encima.

Tomó ambas manos del menor con una sola suya, aprisionando todo movimiento, Inosuke trató de liberarse pero la fuerza del contrario era descomunal. Si como un humano era fuerte como demonio no tenia la mínima oportunidad de hacer algo. Con delicadeza el mayor le quitó la máscara para dejarla a un lado, mirando directamente sus ojos. Ambos brillantes y dilatados, llenos de asombro.

– Hermoso... Inosuke hermoso...

– ¿¡Que demonios dices, te estas burlando de mi, idiota!? ¿Tienes algún problema con mi cara?

El demonio no contestó solo se acerco para besar su frente, después su mejilla, haciendo un camino para llegar al cuello, tembló por la sorpresa. No mentiría, estaba asustado, temía que el mayor perdiera la razón, no tanto por él mismo si no por Tanjiro, jamás se perdonaría hacerle algo como eso siendo demonio, preferiría morir antes de volverse humano y saber lo que hizo.

Un sonrojo coloreo sus mejillas, comenzó a sudar nervioso– ¿¡Vas a comerme!?

No pudo terminar de reprochar, cuando sintió los labios del otro juntarse a los suyos, besándolo de manera agresiva. Intentando juntar su lengua con la contraria. Sorprendido abrió los ojos sin entender ¿para qué hacía eso? La sensación era rara y húmeda, pero por más extraño que pareciera no quería detenerse. Pronto se dejó llevar, una vez más relajado, el mayor soltó sus manos y tomó su cara separándose apenas lo suficiente para dejar un camino de saliva entre ambos.

– Comer no... devorar...

– ¿Eh?

Con su mano libre bajo el pantalón de Inosuke descubriendo sus piernas, increíblemente blancas, jalo hasta dejarlo sin nada.

– Menos mal pensé que me comerias... ¡espera, no! ¿Qué carajos crees que haces? ¡Esto es cosa de machos y hembras idiota!

Realmente estaba confundido porque no estaba molesto, solo avergonzado de que específicamente Tanjiro lo viera desnudo, nunca había tenido problemas con eso, su pudor era muy bajo, casi inexistente. No le interesaba estar desnudo, toda la vida había estado solo en calzoncillos hasta hace poco que había conseguido pantalones. Pero esto era otra cosa, sabia de que iba el sexo y todo lo que conllevaba, pero nunca le interesó, nunca tuvo la intención de experimentarlo, casualmente su cuerpo estaba más preparado que él emocionalmente.

Vio como su miembro se alzaba erecto, comenzando a doler, ¿Por qué su pene hacia eso? ¿sería una reacción natural? No supo por que mirar al siempre pulcro, educado y amable Tanjiro convertirse en alguien tan dominante, tan salvaje, era algo muy sexy de ver. El pelirrojo se acercó a su miembro para darle una larga lamida que hizo cerrar sus piernas temblorosas.

– ¿¡Que haces!?- asustado intentó hacerse para atrás, escapando.

Con sus manos trató de parar su cabeza pero no pudo y ciertamente no iba a golpearlo con el puño, era más fácil que se rompiera los huesos de la mano con la cabeza de piedra de Tanjiro. El demonio aprovechó el miedo a lo desconocido y distracción para meter el miembro del chico en su boca.

– ¡Ahhh no!... ¿Qué esta pasando?

Lamio y succiono toda la longitud, Inosuke apretó los cabellos pelirrojos, realmente se sentía bien, una sensación húmeda y asfixiante. La lengua del chico era peligrosa, no sabia que hacer. Algo único que nunca había experimentado, de pronto sintió el vientre caliente y una extraña sensación de hormigueo. Con la fuerza que tenía empujo a Tanjiro, no aguanto mucho hasta correrse dejando salir todo. Inosuke alarmado se sentó para notar que la cara del mayor estaba manchada con algo extraño, una sustancia blanca.

– ¿¡Qué demonios es esto!? Es pegajoso... da asco.

Tanjiro sonrió y levantó los hombros sin saberlo, como a Inosuke nunca le había interesado algo como eso no sabía si estaba bien, pero supuso que mientras no le molestara al pelirrojo no había problema. Mientras pensaba no se dio cuenta que el mayor se encontraba desabrochando el cinturón de su pantalón, sacando su propio miembro listo para seguir. Inosuke se quedó completamente quieto cuando Tanjiro levantó una de sus piernas y llevaba su miembro a su entrada, listo para entrar de golpe.

Saliendo del shock, empujó y comenzó a patear al mayor– ¡Espera un minuto salvaje de mierda! ¿¡Qué crees que haces!? Además...¡yo no voy a ser la mujer!

Tanjiro soltó su pierna de inmediato, ya que ahora sí olía a furia verdadera, arrepentido hizo un puchero metiendo la cabeza entre sus hombros, como si fuera un perrito asustado.

– Lo siento...- dijo bajito sin levantar la vista.

El corazón de Inosuke comenzó a latir más rápido, ciertamente era el Tanjiro que conoció aun si su conciencia no estaba bien. Tanjiro por lo general era tranquilo, pero de vez en cuando tenia episodios de locura. Y cuando volvía a ser tranquilo lucia como un perro. Por un momento se quedaron en un incómodo silencio– ¿No podemos hacer esto o si? ¿Además por qué conmigo?

– Me gusta Inosuke...

Los grandes ojos del mayor no lucían como antes, pero la dulzura y la confianza aun se reflejaba en ellos– bien lo haré... pero cuando te recuperes tendrás que hacerme de comer siempre que yo quiera ¿bien? Más te vale lo recuerdes Monjiro idiota– el pelirrojo no tardo en lanzarse a abrazarlo y darle un beso corto.

– ¡Inosuke! ¡Inosuke!– respondió el abrazo completamente feliz.

Inmediatamente recordó una conversación que había tenido Zenitsu con otros cazadores mayores, sobre cómo cuando se acostara con alguien tenía que preparar a la chica o dolería– ti-tienes que prepararme...

Enojado sosteniendo sus hombros para detenerlo, los ojos de Tanjiro se abrieron sin comprender por qué lo alejaba ni a lo que se refería– tienes que hacerlo con los dedos, mételos antes...

Tanjiro comprendió eso y le mostró los dedos con una gran sonrisa. Inosuke palideció, su actitud tímida se fue de nuevo y su instinto de sobrevivencia se activó intentando alejarse.

– ¡No vas a meter esas garras en mi culo bastardo!

El pelirrojo se rio por la reacción del más pequeño, quien furioso se sonrojo. Comenzaron a pelear porque Tanjiro quería meter sus dedos e Inosuke lo detenía como pudiera para que no lograra su objetivo. Se dobló lo suficiente para poner su pie en el pecho del mayor y con todas sus fuerzas lo empujo. Cuando Tanjiro estaba por intentarlo de nuevo se quedó quieto solo viendo como el menor llevaba una de sus manos a su boca para humedecer sus dedos y de inmediato los llevó a su trasero. Dudo en meterlos, hasta que se atrevió, y tembló por la intromisión.

– Ahhh esto es muy incomodo ¿Por qué la gente lo hace? Ugh...

Tanjiro al verlo hacer gestos de desagrado se acercó tocando su miembro, aunque el peliazul se sorprendió, dejó que su compañero lo distrajera. Cuando la boca del mayor se acercó a su pecho y lamió sus pezones inmediatamente Inosuke solo se dedicó a disfrutar. Poco a poco subió su boca hasta llegar a su cuello, lamia y sus dientes querían rasgar todo a su paso.

No pudo resistirlo y lo mordió de manera dura, sacando algo de sangre, era la cosa más deliciosa que había probado en su vida. Quería mas, mucho más.

– Tanjiro para...

Por fin despertó de su trance, cuando escuchó su nombre salir de su boca, junto a el olor a miedo que le invadió las fosas nasales. Paro de inmediato, se sentía con mucha energía como si su fuerza hubiera aumentado. Sus ojos se dilataron y temblaba ansioso, de apagar el fuego que crecía en su pecho. Si seguía se lo terminaría comiendo, y obvio no quería eso.

– Lo siento...

– Esta bien, con que no me comas esta bien.

– Lo siento– la subida de adrenalina comenzó a hacerlo salivar, si no se distraía con otra cosa el hambre sería más fuerte. Entonces se dio cuenta que Inosuke ya tenía 3 dedos dentro, sin esperar más quitó su mano, tomó las piernas del menor para girarlo y estuviera boca abajo. Levantó su cadera y se posicionó como lo había hecho anteriormente el jabalí que observaba.

Sin esperar, comenzó a meter su miembro en la pequeña entrada del menor, sus paredes se abrían a su paso de manera estrecha y cálida.

– Ahhh demonios...– algunas pequeñas lágrimas comenzaron a llevar los ojos color esmeralda de Inosuke– ¡duele nhg!

Tanjiro se acercó a su cara, con su mano giró la cara de Inosuke para lamer las lágrimas que caían y beso sus mejillas, el peliazul sabía que estaba preocupado. Le dio un beso para calmarlo.

– Tranquilo estoy bien... ahh obvio el gran rey Inosuke puede con todo... esto no es nada.

– Inosuke se siente bien...– el demonio se dedicó a juntar sus manos con las suyas.

Cuando las embestidas comenzaron, su cuerpo tembló por el movimiento– Ahhh mierda... ¿por qué se siente así? mgh...

El calor cada vez subía más y su cuerpo sensible sufría de espasmos, sentía el sudor recorrerle humedeciendo cada poro. El calor sofocante le aturdía los sentidos, solo sentía las manos de Tanjiro sujetando su cadera, casi grabándose en su piel. Sus uñas picaban su carne y rasguñaba con poca fuerza.

– Ahh se siente bien, más...– Inosuke sin darse cuenta dejó que sus instintos como siempre hablaran por él, comenzó a mover las caderas al ritmo de su pareja, la necesidad de sentir más le ganaba incapaz de parar– Tanjiro me gusta...

El mayor continuó con las embestidas cada vez más rápidas y fuertes, el menor solo podía jadear y soltar gemidos altos, eso enloquecía su mente. No aguantaron mucho para que el inminente orgasmo llegara dándoles de golpe, a cada centímetro de su cuerpo, que tembló y se estremeció. Mientras soltaba toda su esencia sobre el pasto, el pelirrojo se vino, en su interior. Caliente Inosuke se sintió lleno, satisfecho de lograr apaciguar el clímax. Permanecieron unidos mientras sus pulmones se llenaban de nuevo del preciado aire que ahora anhelaban.

Cuando al fin Tanjiro salió del menor, Inosuke sintió algo escurrir por su entrepierna– es tan pegajoso... es lo mismo que te tragaste ¿que demonios es esto?...

– ¡Un bebe!– grito el demonio de repente.

Ambos ojos se abrieron de sorpresa y se miraron confundidos– ¿Es para hacer un bebe? ¿Seremos padres?

Inosuke y Tanjiro se abrazaron con grandes sonrisas emocionados por la noticia, permaneciendo semidesnudos. Se volvieron a besar unos minutos más, antes de vestirse y regresar a casa. Saltando y gritando de felicidad.

–¿Dónde estaban? ¿Y porque se ven del carajo?– preguntó Zenitsu que los encontró entrando sospechosamente, aun con esas sonrisas bobas estaban llenos de tierras y tenían pasto y hojas en el cabello.

Inosuke que realmente no tenía pena solo lo dijo– oh, estábamos aprendiendo de la naturaleza a como hacer un bebe.

– ¿Eso qué demonios quiere decir?– confundido el rubio les presto toda su atención.

– ¡Apareamiento!– grito el demonio dando vueltas.

– El apareamiento es para hacer bebes Monitsu, no seas estúpido.

– ¿Que?...– cuando se dio cuenta de lo que pasaba se tapó la cara para gritar sobre sus manos, después estiró la mano para sujetar la quijada de Inosuke y señalo al demonio a su lado– ¡Él es un demonio ahora tarado! Ni siquiera es consciente de lo que hace.

– A mi no me vas a echar la culpa, ¡él empezó todo!– de un manotazo se quitó la mano de su amigo de encima.

El rubio estaba harto– ¡No me interesa quien empezó! ¡No puedes simplemente tener relaciones con él!

– ¿¡Ah cómo no!? Lo acabamos de hacer ¿no escuchaste lo que dije antes?

– ¡No me refiero a eso imbécil!– grito mientras lo miraba furioso, queriendo arrancar su propio cabello– ¡Ni una palabra de esto a Nezuko, animal enfermo! ¡No dejaré que se entere de las estupideces que haces con su hermano!

– ¿Eres estupido Monitsu? Claro que no le voy a decir que su hermano casi me come, eso la haría llorar.

Zenitsu que ya no quería verlos, hasta que pasara un tiempo, intentó controlar su enojo– por cierto es imposible para ustedes tener un bebe, los dos son hombres.

– ¿¡Que!?– ambos chicos gritaron al unísono y se abrazaron mientras lloraban desconsolados y sin esperanzas.

Antes de que pudiera irse a descansar de los tontos de sus amigos, sujetó el brazo de Inosuke, el menor lo miro extrañado, el rubio sonreía malvadamente– ahora por tu estupidez... tendrás que usar ropa hasta que todas estas marcas desaparezcan de tu cuerpo...– dijo mientras le señalaba algunos puntos en su cuerpo, como su cuello, torso y espalda– ¡ve a vestirte!

– ¿Que..?– con miedo miró donde apuntaba el mayor, tenía chupetones, mordidas y arañazos por todas partes– ...¡¡Gompachiro!!

El nombrado sonrió felizmente y se puso a correr de nuevo trepando árboles, escapando de un Inosuke con ganas de derramar sangre. Por que podrían habérselo follado y por el no había problemas, pero otra cosa era meterse con el calor que tendría que aguantar durante días, por culpa de la incómoda ropa que odiaba usar.

Continue Reading

You'll Also Like

1.9K 157 10
Después del último raromagedón, han pasado ya 5 años desde que los "Misteriomelos" se fueron de Gravitty Falls, han vuelto después de un tiempo y aho...
4.7K 532 44
¿Qué pasaría si Izuku Midoriya no naciera sin peculiaridades, sino con una peculiaridad que no fuera típica? Era más poderoso que el don normal, pero...
45.6K 5.4K 5
Tanjirou es un Omega que lo único que tiene en mente es cuidar a su pequeña hermana, sin embargo, sin previó aviso su cuerpo entró en celo en el peor...
1.8M 239K 58
El amor puede llegar de manera impredecible... Para aquel Omega que por mucho tiempo creyó que lo había encontrado, vendrá en su demandante e impone...