-¿Qué pasa? ¿De qué quieres hablar?- cuestiona Easton muy confundido, pobre, si supiera que estoy en las mismas circunstancias.
Pero ya me ha quedado claro que siento algo por él ¿En qué momento pasó? Ni idea, pero ahora entiendo lo que quería decirme Dorian sobre ser yo misma con la persona que me gusta y él también, y creo que eso es lo que está pasando ahora.
Pero... a la llegada de Juliet, pareciese como si Easton estuviese dudando sobre lo que me dijo, pero de algo si estoy segura, no dejaré que esto me afecte si la respuesta que espero no es la esperada.
-¿Rick?- su mano siendo agitada frente mío me hace despertar de mi transe-¿De qué quieres hablar?
-¡Oh! ¡Cierto!- señalo el sofá para que tomemos asiento, ya sentados y mirándonos directamente inhalo todo el aire que puedo y comienzo- Quiero hablar sobre lo que pasó ayer en la noche...
-¿Lo de ayer?- levanta una ceja.
-Si... lo que me dijiste antes de que llegara Juliet...
-Oh... eso...- sus ojos se posan en otro lado como si no pudiera verme a los ojos.
-Si... quiero saber si lo que me dijiste era verdad... ¿En verdad te gusto?- una pisca de ilusión invade mi rostro y ya me estoy empezando a morder las uñas que no tengo.
-Pues... la verdad... todo lo que te dije era cierto, me pareces alguien muy divertida e interesante, me caes muy bien y no necesitas vestirte de esa forma, no eres como las demás chicas y si no te sientes cómoda vestida así entonces no lo hagas, eres única Rick, eres una de las pocas chicas que conozco que le gusta las cosas de los chicos, y...- su mano alcanza la mía entrelazándola y haciendo que mi pobre corazón se salte un latido- Lo que aun no me deja tranquilo es saber qué es lo que sientes tú.
-Pero... Juliet dijo...
Empieza a negar con la cabeza- Olvídate de eso, hay que tener un poco más de confianza, ella ya es pasado y no creo que vaya a pasar algo entre ella y yo.
Okey, esto me está confundiendo, si lo acabo de ver bien feliz con ella en un parque.
-Yo...
-¡Ricky!- la voz de Dorian se escucha entrar a la casa haciendo que quite mi mano entrelazada de la de Easton- ¡A que no sabes a quien vi abrazándose en el parque! ¡A Eas...- entra a la sala viéndonos con los ojos bien abiertos- ton...
-¿Me estabas espiando?- voltea un poco furioso hacia mí.
-¿Qué? No, o bueno si pero todo fue idea de Dorian- lo señalo.
Easton voltea a verlo fulminándolo con la mirada- ¿Es cierto?- da un paso hacia él y el pobre Dorian levanta las manos en modo de derrota mientras camina de espaldas.
-¿Qué si te estábamos espiando? No... solo estábamos pasando por él parque y te vimos muy feliz con esa linda rubia, y también abrazándote y riendo- veo su espalda tensarse y voltea lentamente hacia mí.
Escuchar todo lo que ha dicho Dorian me ha dejado en shock, mi boca abierta ligeramente- ¿Es cierto?- cuestiono casi murmurando.
-Lo que pasó... no es lo que en realidad parece...
-¿Qué está pasando?- cuestiona Dorian sin saber lo que está sucediendo, pero ninguno de los dos le hacemos caso.
-Me dijiste que ella era pasado... no creo que siendo tu ex tengas tanta confianza como para ir abrazándote con ella- no sé cómo es posible que estas palabras estén saliendo de mi boca, pero parece que estoy enojada, estoy enojada.
Da un paso hacia mí- No, no. Ella quería hablar conmigo sobre lo nuestro y...
-¿Aun sientes algo por ella?- siento mi vista borrosa ¿Qué me está pasando? ¿Por qué me estoy poniendo así? ¿Por qué tengo ganas de llorar? No, tengo que aguantar...
Sus ojos bajan al piso pero no dice nada.
-Aun sientes algo por ella- cierro mi boca mientras asiento lentamente tratando de no verlo- Esta bien- paso a su lado pero me agarra del brazo deteniéndome- Suéltame- en un gesto brusco me libero de su agarre y empiezo a correr escaleras arriba.
Escucho pasos detrás de mí y suplico que no sea Easton porque estoy segura que soy capaz de golpearlo.
Entro a mi cuarto y me dejo caer sobre la cama tratando de controlar las ganas de llorar- ¿Tú eras la chica misteriosa?
Volteo mi rostro para ver a Dorian ahí parado con los brazos cruzados- Perdón por no habértelo dicho.
Camina hacia mí sentándose en el borde de la cama- ¿Por qué? ¿Por qué no me lo dijiste?
Inhalo hondo y me incorporo sentándome al frente suyo- Porque desde un principio me dijiste que no me metiera con él y aun así no lo hice, pensé que tal vez si te lo decía te enojarías conmigo...
-Owww- su mano alcanza mi mejilla acariciándola suavemente- Te has enamorado.
-Eso creo- bajo la mirada- Es la primera vez que me sucede esto.
-Y no va ser la última, tal vez Easton no era el indicado y eso no significa que te derrumbarás, hay muchos hombres en el mundo y... - aparta su mano de mi mejilla- Eres muy hermosa con los gustos de un hombre, serias perfecta para cualquiera, poco a poco.
-Si... tienes razón, pero me siento mal...
Se inclina hacia mi- Easton tiene problemas con eso, seguro ya te has enterado sobre la relación de él y la rubia ¿O te cuento?- niego con la cabeza- Esta bien, entonces si ya lo sabes será mejor que te olvides de él, un hombre puede estar hablando con miles de mujeres pero su corazón solo le pertenecerá a una...
-Yo quisiera que fuera esa chica, pero parece que Juliet ya me ganó ese puesto- agarro la almohada y la empiezo a apretar- Lo que más odio es que me haya mentido, diciendo que ya se olvidó de ella y que su relación ya era pasado, y aun así sigue enamorado de ella- Lanzo la almohada para un costado.
-¿Sabes lo que necesitas?- lo miro confundida- Divertirte y emborracharte, está semana haz tus clases como siempre, evita el mínimo contacto con Easton y el viernes vamos de fiesta en la fraternidad Picsen, dicen que este viernes van a ver más invitados y seguro muchos chicos lindos.
No evito reírme- Gracias- le muestro una sonrisa.
-No te preocupes, eres como la hermana que nunca tuve- se coloca una mano en el pecho- Y siendo mi hermanita no vas a llorar nunca, y hablando de hermanos ¿Tú hermano?
-Cierto...- agarro mi celular y no hay ningún mensaje- cuando fui al estadio lo vi bien feliz con una chica, no creo que esté preocupado de mi, ya me llamará cuando se acuerde de su hermanita.
No evito abrazarlo- ¡Wow! ¡Me estás dando un abrazo!
-Si... así que disfruta este momento porque no creo que lo vuelva hacer- y así nos quedamos por menos de 20 segundos porque no aguanto más el contacto.
-Bueno, te dejo, quiero ir a comprar algo en la tienda- se levanta y sale de la habitación.
———
Y así llega el lunes, las clases pasan lentamente y aburridas, no he visto a Easton pero si a Juliet, tras su regreso varias chicas se han juntado con ella, ahora es como una de las populares, escuchando comentarios sobre que es la más linda y que ha cambiado demasiado desde que se fue.
Aun así siempre siendo el centro de atención no la he visto con Easton o que alguien hable sobre su relación, y agradezco infinitamente eso ya que no podría concentrarme en mis estudios.
Mi hermano Miles me ha escrito después de varias horas después del partido, que por cierto hemos ganado; me escribió preguntándome donde estaba, obviamente le dije que estaba en casa, aunque por el otro lado él se la pasó muy bien con esa chica que conoció.
En la cena tampoco aparece Easton y el ambiente tenso, agradezco a los chicos que han querido levantarme el ánimo cambiando de tema y apostando que perdería un partido de videojuegos contra Jordan.
El martes fue igual, Easton no aparece, el centro de atención es Juliet, Dorian detrás de los chicos que juegan sin camisa durante el almuerzo y yo pensando en Easton, aunque quiera olvidarme de él me resulta difícil, ya que todo lo que sucede en mí alrededor me hace recordar a él.
Mi hermano Miles está detrás de la chica que conoció y no se ha dignado a escribirme.
El miércoles es distinto, se escuchan murmullos sobre que Juliet se ha conseguido a un novio y que es Easton, en realidad ya no sé si creer o no, escucho lo que dicen pero aun así no veo a Easton con Juliet, tal vez esa es la razón por la que no lo veo, seguro no quiere que yo los vea juntos.
Y volvió a casa, pero no dirigió una sola palabra con nosotros, se encerró en el cuarto.
Y hoy es jueves en la tarde, como de costumbre Easton no sale del cuarto y al pobre de Tyler lo ha dejado afuera.
Estoy en camino con Dorian al centro comercial porque quiere comprarse un atuendo nuevo para la fiesta de mañana, vamos al lado de prendas de hombres y estoy como esclava cargando todas las prendas que encuentra en el camino.
-¿Por qué tienes que elegir tanta ropa?-cuestiono detrás del montón de ropa.
-Porque puede ser que me guste una camisa pero no el pantalón, o me gusta el color pero no el diseño, es moda Ricky, y si vas a estar en una fiesta donde tal vez el amor de tu vida esté ahí tengo que lucir reluciente, y como te dije van a estar estudiantes de otras universidades y hasta personas que ni son de nuestra edad.
-No me van a dejar entrar al vestidor de hombres ¿Lo sabes? Tendrás que cargar todo esto tu solo.
Se ríe- Solo déjamelo a mí, no hables y veras la magia.
Caminamos hacia los vestidores donde nos recibe un chico joven- ¿Todas esas prendas llevará al vestidor?- cuestiona el chico.
-Sí, y por eso necesito que mi hermanito me ayude a llevarlas ¿Puede?- me señala, estoy a punto de refutar pero entiendo lo que trata de hacer.
-Sí, claro, pero solo puede entrar una persona en el vestidor, tu hermano puede esperar afuera.
-Gracias- le muestra una pequeña sonrisa y vamos a los vestidores, un gran pasillo con las paredes de espejos, y al frente de cada vestidor hay un pequeño sillón para que mis debiluchas piernas de pollo puedan descansar- Mi querida Ricky espérame aquí, saldré con cada conjunto y tú me dirás cual te gusta más ¿Te parece?- asiento y desaparece de mi vista.
Miro mi celular con la esperanza de recibir un mensaje de... Easton... pero no hay nada, sé que debo olvidarme de lo que pasó, debo olvidarme de lo que siento por él, debo olvidarme de él. Apenas una fraternidad de chicas esté desocupada me iré a vivir en ella, como dijo el director, así no volveré a ver a Easton cada vez que despierte.
-¿Qué te parece?- aparece Dorian con una camisa suelta de color blanca, una chaqueta de cuero y jeans oscuros- ¿No crees que es demasiado formal?
-A mi me parece muy lindo, me gusta cómo te queda- se empieza a mirar en el espejo detrás mío, de un lado a otro y niega con la cabeza.
-No me convence, me pondré otro- y así vuelve a entrar en el vestidor.
Mi mente ahora no está pensando del todo claro, mi subconsciente me ha dejado a mi suerte igual que mi raciocinio, me abandonaron.
Nos la pasamos casi una hora ahí, siento que me he quedado sin trasero por estar todo el tiempo sentada- ¿Y ahora qué te parece este?- cuestiona Dorian modelando frente mío.
-Se parece mucho al número diez que te pusiste.
-Me ofendes, este es una camisa rojo vino, el otro era rojo sangre y este jean es azul oscuro y el otro era azul marino.
-Perdón, no soy buena diferenciando los colores.
-¿Aun sigues triste por lo de Easton?- se cruza de brazos.
-No... solo estoy cansada, eso es todo- bajo la mirada.
-Vámonos- levanto la mirada- Iremos a que te pongan bonita.
-Pero ¿No vas a comprar nada?- me levanto.
-Compraré el primero que me puse, me gustó mucho, además todos estarán borrachos y no creo que nadie note a un Dorian súper guapo bailando entre ellos, me cambio y nos vamos- asiento sonriente, me cae muy bien Dorian, a veces deja de hacer sus cosas importantes para velar por mí.
En minutos sale con las prendas que va a comprar- ¿A dónde dijiste que vamos a ir?
Caminamos hacia el cajero- Mi hermanastra ha abierto un salón de belleza con su madre, tal vez si vamos nos hagan un descuento.
-Dorian tu sabes que yo...
-No te preocupes- me interrumpe mientras paga las prendas que ha elegido- No te obligaré a usar maquillaje o ponerte extensiones, solo va hacer un día en el spa con tu queridísimo amigo Dorian, es hora de que nos borren estas ojeras y nos pongan aun más bellos de lo que ya somos.
-Está bien- salimos del centro comercial y tomamos un taxi porque le suplique que lo hiciera ya que ya no siento los pies- ¿No que no te caía bien tu hermanastra?
-Sí, es algo pesada y creída, pero es mi hermanastra, y como mi padre le está pagando los caprichos, no todos claro está, a su madre debe aguantarme.
-Te estás aprovechando- se lleva una mano al pecho en forma de ofensa.
-¿Cómo crees?- levanto una ceja- Bueno si, tal vez un poco, pero me entenderás cuando la conozcas, es buena chica pero a veces puede parecer un poco fastidiosa.
Llegamos a un enorme edificio de tres pisos con paredes de ventanas, una cascada pequeña en el patio rodeado de un pequeño jardín verde y un gran letrero blanco con una flor que dice "TULIP, SALÓN Y SPA"- llegamos, prepárate para conocer a mi hermanastra.
El lugar está rodeado de rejas blancas, subimos unas cuantas gradas de color plomas y una chica nos abrió la puerta con una sonrisa.
-¡Hermanito!- una chillona voz nos hace saltar a Dorian y a mí, y aparece una linda chica de cabello ondulado corto negro, grandes ojos cafés y parece casi de nuestra edad- ¡Por fin vienes a visitarme!
Le salta encima a Dorian rodeándolo con sus brazos, lleva puesto un uniforme de color blanco con café- Hola Celeste- se separan y para no parecer que sobro aquí muestro mi mejor sonrisa.
Celeste me mira y chilla - ¡Por fin conseguiste novio!- me salta encima para ser yo ahora la que me rodea con sus delgados brazos- ¡Wow! Es bastante delgado, un poco más y podrías ser mujer.
Cuando por fin me libera siento que vuelvo a respirar- Te equivocas Celeste, no es mi novio, en realidad es Ricky, mi amiga.
Sus ojos se le abren- Oh perdóname, pensé que eras un chico.
-No te preocupes, me pasa seguido.
-Venimos para que puedas hacer algo para que su bella cara parezca más de una mujer que de un niñito- Celeste empieza a verme de arriba abajo, escaneándome.
-Esto es un reto ¿No has pensado en usar extensiones Ricky?
-Prefiero no usar.
Se me queda mirando un poco más- Vamos a tardar demasiado, pero acepto el reto ¿Y tú Dorian? ¿También vienes a que te arreglemos la cara?
-Que graciosa- gira los ojos- Aunque no me vendría mal un poco de arreglo.
-Entonces quedamos, ahora estamos un poco ocupados aquí, pero si pueden regresar dentro de dos horas todo este lugar quedará disponibles para ustedes dos.
Dorian me mira- ¿Te parece bien?- asiento ¿Qué más puedo perder? No tengo nada más que hacer después de todo.
-Muy bien, si quieren pueden esperar en nuestra cafetería- nos señala por un pasillo que arriba dice "CAFETERÍA"- Los llamaré cuando les toqué a ustedes.
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Nota de autora: No comentare nada al respecto, ustedes lo harán.
No olviden votar que me ayudaría mucho.
¡¡¡Besos!!!