~𝔜𝔬𝔬𝔫𝔤𝔦~
La nieve caía a través de la ventana de aquél edificio hasta perderse con el suelo congelado del asfalto salado.
El vidrio se empañaba con mi caliente respiración por la diferencia de temperatura y parpadeaba rápidamente como si eso fuese a permitirme ver a través nuevamente.
La mañana era fría, terriblemente helada pero brillante por el reflejo del sol en la nieve blanca y recién caída de las grandes nubes que encapotaban el cielo.
-¿Señor Min?- Escuché detrás mío.
Me volteé intentando salir de mi ensueño, volviendo a la realidad del grupo de ejecutivos con trajes formales que me miraban sentados en una gran mesa de vidrio negro.
-¿Está de acuerdo?- Me preguntó uno de ellos.
-Lo siento, no estaba escuchando- Dije caminando hasta ellos. Si me quedaba cerca de la ventana, volvería a perderme en la vista.
-Si le parece bien que estos sean los actores principales- Me dijo tendiendome las carpetas.
Asentí viendo las fotografías, el proceso de audiciones no era mi trabajo, confiaba en quienes se encargaban de ello.
-¿Está seguro?- Preguntó otro. -Park no es gay-
Tomé la carpeta viendo su currículum y su experiencia previa, leyendo películas y series que realmente no conocía.
-¿Y leyó el guión?- Cuestioné sentándome en el lugar que me correspondía, pasando mi pierna sobre la otra y apoyando me espalda en la silla negra y cómoda.
-Si- Respondió el más cercando a mí.
-¿El libro?- Pregunté fingiendo que leía el escrito.
-Dice que si- Respondió nuevamente el mismo hombre de traje y corbata.
Alcé la vista de las hojas sin mover ni un centímetro la posición de mi cabeza, viéndolo por la cima de los ojos, alzando mis cejas curioso.
-¿Entonces cuál es el problema?- Pregunté de manera obvia, obteniendo una tos seca de incomodidad de parte del hombre.
-¿No preferiría usted que el papel del protagonista homosexual lo interprete alguien que realmente lo represente?- Cuestionó ahora el de mi izquierda.
-¿Ustedes le negarían a un homosexual un papel de un heterosexual?- Pregunté poniéndome de pie.
-No, claro que no- Dijeron más de uno a la vez.
-Porque un actor tiene que saber ponerse en su papel y si él está de acuerdo con hacer escenas de sexo con un hombre siendo heterosexual, confío en que sea buen actor para llevarlas a cabo- Espeté saliendo del lugar, ya estaba cansado de toda esa situación.
Hace dos años publicaron uno de mis libros titulado "Lovers". Iba de un joven que descubre que le gustan los hombres cuando su jefe intenta seducirlo.
Hacía unos meses, me llegó una solicitud para adaptarlo al cine. Yo estuve de acuerdo con la única condición que me dejaran formar parte del equipo.
No quería que volvieran a mi bebé una película cutre que se vuelva conocida meramente por las escenas de sexo homosexual. Había trabajado duro en hacer personajes imperfectos pero no tóxicos para que las jóvenes hormonales que lo leyeran no romantizaran un hombre cruel y malvado por el hecho de ser un caliente empresario con dinero y ansia sexual.
No pensaba que iba a tener que estar presente en la decisión de cada maldita cosa.
Desde como iba a ser el póster promocional a que escenas se podían recortar, bajo el contrato, todo parecía ser igual de importante.
Definitivamente volver al departamento después de un día de trabajo y encontrarme con el aroma a galletas recién hechas, era la misma gloria y la razón de la emoción en mi pecho.
-Llegué- Dije cerrando con llave.
-¡Yoonie!- Gritó Hoseok apareciendo desde su cuarto. -Hice galletas-
-Lo noté- Respondí mientras me quitaba el abrigo y los zapatos. -Huele bien-
-Deja se enfrían y comes algunas- Me guiñó el ojo, sentándose sobre la mesa tan alegre como siempre. -Necesito pedirte un favor-
-¿Por eso has hecho las galletas?- Pregunté con los ojos entrecerrados con sospecha.
-Puede ser- Sonrió de oreja a oreja moviendo sus pies colgando en el aire.
-¿Que quieres?- Rodé los ojos sentandose en la mesa, a su lado.
-Esta tarde tengo ensayo y no puedo ir a pie con el frio que hace- Dijo para, después, morder su labio inferior con miedo al rechazo.
-De acuerdo- Suspiré cansado. -Yo te llevo-
-Veras...- Siguió nervioso haciéndome fruncir el ceño. -El ensayo dura dos horas y necesito que me traigas de vuelta-
Rodé los ojos soltando un bufido de protesta, pero al fin y al cabo, Hoseok había sido mi mejor amigo desde que tengo memoria. No iba a dejar que pesque un resfriado o se rasgue un músculo si podía evitarlo.
-Vale, te pasaré a recoger, hijo- Tras decir esto, Hoseok se abalanzó sobre mí, rodeandome con sus brazos y llenandome el rostro de besos.
-¡Eres el mejor!- Chilló emocionado. -Ahora si te has ganado tus galletas-
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Miraba con orgullo la gente interesada en mis obras. Las copas de champán y la música de jazz de fondo era algo rutinario en las exposiciones, pero extrañamente los ventanales empañados por el frío de la nieve, le daban una vista más elegante a la sala.
Era la primera exposición del año y me parecía sorprendente la cantidad de personas que habían teniendo en cuenta las bajas temperaturas de fuera.
-Jeon ¿Taehyung no vendrá?- La voz de Namjoon me trajo a la realidad.
Me volteé y lo ví con aquél traje marrón oscuro con camisa azul. Fruncí el ceño pensando que, aunque le quedaba bien, el traje era horrible.
-No- Respondí desviando la vista del traje. -Ha ido a trabajar-
-Ya veo- Respondió para luego tomar algo de champán. -Hace mucho no lo veo-
-El fin de semana que viene ha dicho que iba a ver a sus padres- Dije desviando la mirada a la gente que veía los cuadros. -Puedes ir con él-
-No lo sé- Respondió suspirando. -Nuestro padre anda enojado conmigo-
-¿Porque te has casado?- Pregunté confundido. -Pero si tu hermano también está casado-
-¿Que va?- Protestó soltando un bufido. -Uno le sale gay y el hetero se casa con una mujer estéril-
Reí entre dientes al ver su frustración. Namjoon tenía realmente madera de padre, era una pena que se haya casado con Hyejin y luego se enteraran que no podía quedar en cinta.
-Encima mamá le metió en la cabeza que Taehyung no podía escoger su orientación sexual pero que yo si podía elegir con quién me casaba- Dijo aflojando el nudo de su corbata y no pude contener la risa.
-Vamos, no seas así- Dije golpeando su hombro. -Puedes adoptar-
-Bajo esa lógica, Taehyung también- Responde y me atraganté con mi propia saliva. -Exacto, te salteas lo mejor de tener un hijo... el sexo-
-Pero también podrías saltearte los meses de embarazo- Dije viendo el reloj de mi muñeca. -Quedan quince minutos ¿Has comprado algo?-
-Si, seguro- Sonrió incómodo y yo rodé los ojos. -A ver, que yo puedo caerte en tu casa y pedirte que me hagas algo sin necesidad de venir aquí-
-Claro, porque no tengo nada que hacer en todo el día- Dije con tono sarcástico.
-Pues eso hacen los artistas- Dijo saliendo de la sala para que no tenga tiempo de responderle.
Rodé los ojos y comencé a caminar para buscar más champán. Acabaría ebrio esta noche si no tuviera solo once de graduación alcohólica.
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Estacioné el coche y vi con algo de pena como Hoseok se ponía dos abrigos y una bufanda para salir y se congelaba con la mano en la puerta sin animarse a abrir.
-No quiero- Dijo con voz aguda mirándome con ojos de cachorro.
-¿Y para que me hiciste venir?- Pregunté apoyando la cabeza en el respaldo.
-Porque debo- Hizo una mueca de dolor y golpeó su cabeza contra el vidrio. -¿Me acompañas?-
-¡¿Por qué?!- Grité confundido.
-Me abrazas hasta llegar a la calefacción- Me iba a negar, pero pareció preveer mis intenciones. -¡Tu tienes más fuerza de voluntad que yo!-
Gruñí con el ceño fruncido pero acabé cediendo y me puse el abrigo, la bufanda y los guantes. Acomodé mi gorro y tomé mis llaves.
-Vamos, levanta- Bufé abriendo la puerta.
Le dí la vuelta al auto para obligarlo a salir y lo acepté entre mis brazos. Y lo arrastré hasta dentro del edificio.
Una vez en el lobby, intenté irme pero me obligó a ir hasta el elevador encerrandome dentro junto a él, aún con sus brazos en mi cintura y su cabeza en mi pecho.
-¿Y eso por qué...?- Pregunté con los ojos entre cerrados.
-Porque sigue haciendo frío- Respondió abrazandome más fuerte. -Solo hasta el estudio-
Recién pude volver a respirar con normalidad, cuando llegamos hasta dos metros de distancia de la puerta del estudio de baile.
Lo saludé como si fuese una madre en el primer día de su hijo y me dirigí a mi auto nuevamente.
Cuando encendí el motor no arrancaba y casi pierdo la cabeza allí mismo.
Le dí una segunda vez, tercera y cuarta, y no había caso.
-Se congeló el motor- Susurré golpeando mi frente con el volante. -Estupido Hoseok-
Volví a abrigarme y tomé mis pertenencias para salir del auto. Debía haber alguien con tiempo libre dispuesto a darme una mano o pagarme un taxi o algo por el estilo.
Volví al edificio de bellas artes y decidí tomar las escaleras. Por un lado, para entrar en calor y, por el otro, para pedirle ayuda a todo ser pensante que me encontrara.
Piso tras piso y todas las puertas cerradas con carteles de "No molestar". Bufé cuando me quedaban tan solo tres para llegar al estudio de Hoseok, al cual iba a entrar sin importarme el cártel.
Para mi sorpresa, al terminar ese tramo de escalera, había un par de puertas abiertas de par en par, y no solo eso, sino que también la gente salía de allí con elegante ropa puesta y una sonrisa en el rostro.
Caminé hasta el caballete y leí el nombre y los datos del evento antes de entrar.
Un largo salón blanco con muchas pinturas colgando de las paredes y pequeños focos iluminando desde arriba de cada una.
Una sensación de comodidad y atracción me llevó a quedarme viendo anonadado una pintura de una mujer en paños menores rodeada de flores rosas.
Era extraño, los colores cálidos y los trazos duros parecían hacer palpable la piel de la joven, como si posando la mano se sintieran su curvas en aquél plano.
-¿Te gusta?-
Me dí la vuelta algo asustado, dando con el hombre más hermoso y atractivo que había visto en mis veintitrés años de vida.
El cabello azabache bien peinado, el pantalón formal negro y la polera del mismo color ceñida mostrando sus perfectos músculos bajo esta.
De repente, mis zapatillas mojadas por la nieve, mi jean viejo y mi buzo del Hard rock se sentían totalmente fuera de lugar.
-Si- Respondí en un suspiro. -Siento entrar así vestido- Dije bajando la mirada a mis pies sucios; estaba mojando su piso. -Es que se me ha descompuesto el coche y necesito ayuda-
-¿Que le ha ocurrido?- Preguntó el hombre mirándome desde arriba.
-Creo que se ha congelado el motor y debo venir a recoger a mi amigo en dos horas- Mordí mi labio inferior al darle cuanta que solo me había concentrado en irme y me había olvidado por completo de que debía regresar por Hoseok.
-¿Dos horas?- Pensó un momento mientras yo notaba como la gente se iba. -Yo debo quedarme a organizar, si quieres luego los llevo yo-
-¿Tu auto no se habrá congelado?- Pregunté sonriendo.
-No, yo lo he guardado en el estacionamiento- Me sonrió y yo bajé la mirada sintiéndome estúpido por no haber hecho lo mismo.
-Me ayudaría mucho que nos llevaras- Asentí; volvería por el auto mañana cuando no haga tanto frío. -Esperaré fuera-
-No, por favor- Negó posando su mano en mi hombro y yo sentí todo mi cuerpo temblar por el tacto. -Quédate aquí-
-¿Seguro?- Pregunté mordiendo mi labio. -No quiero incomodar-
-No lo harás, me vendría bien una distracción- Juro que su sonrisa es lo más hermoso que he tenido el placer de ver. -Soy Jeon Jungkook-
-¿Jeon Jungkook?- Repito pensativo. -¿Donde he oído ese nombre?-
-Tal vez en el caballete de fuera, soy el artista en exposición- Me dice señalando con la mirada la puerta.
-¿Estás tomandome el pelo?- Pregunté con los ojos abiertos de par en par. -¿Tu has pintado esto?-
-Todo, si- Asiente varias veces como si no fuese nada importante. -Salvo las paredes-
Suelto una risita entre dientes embelesado por su belleza y su sonrisa orgullosa bajo esos ojos iluminados a más no poder.
-Soy Min Yoongi- Me presento teniéndole la mano, gesto que corresponde enseguida.
-¿Puede ser que seas escritor?- Me pregunta y yo siento el carmín en mis mejillas.
-¿Has leído algo mío?- Pregunto avergonzado; llevo publicando desde los dieciocho, hay cosas que no me enorgullezco de haber escrito.
-¿Eres el escritor de Lovers, verdad?- Pregunta y mis piernas empiezan a temblar. -Tengo tu libro en mi casa, pero aún no lo he leído-
Trago duro algo incómodo pero más relajado por saber que no había leído mi novela homoerotica.
-¿Sabes de que va?- Mi corazón golpeaba con fuerza contra mi pecho, lo único que me faltaba era que me dejen tirado en la nieve por pervertido homosexual.
-De un chico que mantiene relaciones con su jefe por lo que tenía entendido- Dice tranquilo y eso me hace respirar al saber que no era homofóbico.
-Si- Respondo cerrando los ojos. -Esa-
-Es un gusto conocerte, Min Yoongi- Dice con esa mirada de estrellas y esa sonrisa de conejito.
-El gusto es mío, Jeon Jungkook-
𝖑𝖔𝖛𝖊𝖗
NOTA
Hola!
espero que les guste porque va a tener dos tenporadas aunque no me la pidan, pero sería lindo que les guste y lo apoyen 😊
Ah y diganme si no ven las diferentes tipografías porque va dependiendo de los teléfonos aunque solo es el numero del capitulo y los cambios de narrador...
Bueno, besos!
Gracias por leer 🥰
[Historia sin editar]