Naruto llevaba una grande ojeras debajo de sus ojos, con el cansancio plasmado en su rostro comenzaba a pensar porque rayos no le había dicho a su padre que a las 7 a.m no era una buena idea para salir, pero recordando la situación vergonzosa que se encontraba en ese momento, había hecho que no se fijara en la hora acordada su padre.
-¿A donde iremos?-pregunto con una sonrisa torcida al sentirse enojado
- Iremos al pueblo-emocionado le respondo- quiero que veas el reino pues debes conocer tu tierra hijo, puede que seas el futuro heredero de todo esto.
-¿Menma no iba serlo?-dijo confundido y con nervios
-Aun no esta dicho-dijo con una sonrisa- ustedes dos son mis hijos mayores y a pesar de que tu eres un bastardo (hijo ilegitimo, pero en esos tiempos así eran llamados) por tus venas corre sangre real, tanto la mía como la de los Uzumakis
-Pero Menma tiene sangre Uchiha...-contradijo de inmediato, el no deseaba el poder, ¡Era mucha carga para su delicada espalda de princesa!
-Al contrario de ti, tu madre era hija del líder por lo que su poder es aun mas fuerte que el de una chica mas del clan, además de que ella había sido bendecida con el poder del Kyubi el cual la hacia aun mas especial que cualquier otra mujer-hablo con cariño y amor- tu madre fue especial, y tu también lo eres-le miro a los ojos- Mikoto en cambio es una Uchiha, si, pero a diferencia de tu madre, ella solo es una prima lejana de la familia real, su poder es minúsculo a comparación del inmenso poder de la realeza que llevaba tu madre. En si, solo su apellido y poder militar que tiene su padre, es algo que se puede recalcar de ella, aparte de su belleza también.
-Entonces si Mikoto-san su poder es menor, ¿Por qué no te casaste con madre quien tan especial? ¿Por qué no quedarte con ella que te iba a dar herederos mas formidable, padre?
- ...Este no es un lugar apropiado para hablar de ello-dijo serio- en algún momento te diré la historia
-Pero...
-Naruto, no es el momento-sentencio con una voz mas alta de lo que le había hablado
-...Vale
Naruto estaba confundido, tenia muchas preguntas sin respuesta y por lo que le había dicho era mas que obvio que su padre no quería responder esa parte de la historia por lo simplemente quedo en silencio mirando el paisaje quedándose en lo mas profundo de sus pensamientos.
Aquella conversación le había quitado el sueño.
Caminaba y caminaban, el calor abatía a Naruto, que con una capucha puesta le daba un sofoque enorme que le hacia sudar como un cerdo y eso le fastidiaba, estaba a punto de coger a su padre por el cuello y mandarlo a la verga por enseñarle lugares que eran aburridos y refinados; cuando de repente apareció alguien que hizo sobresaltar a Naruto.
-Señor Minato...-hablo un joven
Naruto se giro junto a su emocionado padre, quien le enseñaba una cafetería famosa de la ciudad; se poso su mirada en el hombre musculoso enmascarado que tenia mirada aburrida posaba sobre un libro de texto que leía.
-¿Que pasa Kakashi?-pregunto con seriedad
"Así te llamas bombón" dijo Naruto con un poco de baba en la boca.
- En el castillo sucedió algo...
-Te dije que quería el día libre, ¿no es así?
-Si, pero...-miro al rubio menor- es urgente-Minato entendió de inmediato su mensaje
-Naruto...
-¿Si?
- Entra a la cafetería, si deseas algo-dijo le dio unas cuantas monedas de oro- no dudes en comprarte lo que quieras.
-Okey padre-asintió dándose cuenta de la seriedad del asunto, no quería problemas- ¿No deseas algo, padre?-pregunto por cortesía
-Lo que tu me escojas será mi preferido
- Entiendo, entonces me voy retirando- el dio una inclinación con su capa y se fue dirigiéndose a la cafetería
Cuando Naruto se fue, Minato empezó a interrogar a su guardia.
-¿Que es tan urgente para que me llames y me hagas retirar a mi hijo?
-Son los Uchiha's, señor-dijo con el ceño fruncido- han venido al castillo a visitarlo, desean su presencia inmediatamente
Ambos se miraron preocupado.
- ¿Sabes la razón de su venida?
-Dijeron que no dirían el asunto hasta que estuviera presente
-Mierda...-maldijo entre los dientes- Dile a uno de tus hombre que cuide de mi hijo y no lo lleve al castillo hasta nuevo aviso, lo que menos queremos es que vean a Naruto.
-¿No seria mejor encerrarlo señor?
- Mi hijo es un Uzumaki, nunca se quedaría quieto ni aunque le dieran oro-sonrió por un momento- pero no es solo eso una de las razones, ¿Te diste cuenta de su poder?
-Ciertamente es muy abrumador-dijo nervioso
- El solo hecho de que este en el castillo por un momento es suficiente para que el deje su marca, su parte lobuna a dejado marcado muchas partes del castillo como para dejar en claro que también es su territorio. Con solo entrar te das cuenta de que el ya estuvo allí. Los Uchihas ya se habrán dado cuenta de los nuevos olores, especialmente el de mi hijo el cual es dulce y suave...como el de un omega
-Ya veo
-Ya saben que esta aquí-afirmo un poco furioso- pero no harán ningún movimiento, al menos no dentro del reino, esperaran hasta que se verifique que esta bajo mi ala.
-Entiendo, me encargare de ocultar la presencia de Naruto hasta que se retiren.
-Confió en ti Kakashi.
-No lo dude
-Solo espero que Mikoto no haya abierto su bocota...
-Como si me fuera a quedar esperándote-dijo refunfuñando- ¡A mi nadie me abandona!
Con los brazos cruzados caminaba por las calles desconocidas, se había perdido hacia un buen tiempo mientras se escapaba del guardia que le habían encomendado, pues su estúpido padre se había ido sin despedirse y dejándole mas dinero diciéndole que se quede en el pueblo con ese hombre desconocido que probablemente puede violarlo, ¿Acaso su padre era ciego que no veía su belleza enorme? Sentía indignación y por eso había decido escapar de las garras de ese lobo vestido con armadura.
-Desconsiderado, tiempo de padre e hijo decían, será divertido decían, nunca te abandonaran decían...patrañas
Mientras se quejaba con el aire, Naruto distraído no se había dado cuenta de la persona que estaba enfrente suyo, por lo que metido en sus pensamientos, choco con el desconocido que lo tumbo prácticamente e hizo que tuviera un gran golpe en su trasero
-Fíjate por donde andas dobe-dijo con una voz muy gruesa y varonil, que hizo que el lobo-zorro interno del rubio se estremeciera
Naruto levanto la mirada enojado, se dijo que este llevaba una capa que cubría la mitad de su rostro
-¿¡Disculpa!? Yo no fui el que termino parado con las ropas limpias teme-se quejo- yo sou el que esta con el trasero adolorido. Debería usted disculparse si chocas con alguien, ¿¡sabes!? es algo de educación.
-Usted no ha pedido disculpa tampoco
-Pues entonces lo siento-le dijo rápidamente Naruto- Perdón por chocar
-Te perdono-Una vena de enojo se noto en el cuello de Naruto al ver su arrogancia
-Te toca-dijo con una sonrisa enojada
-¿Porque? Si yo no fui el que choco.
-...
-...
-¿Tu madre te hizo caer de la cuna o que? Porque parece que no sabes escuchar y razonar
-No fui el idiota que choco
-Pero si el que me hizo caer, así que discúlpate ¿si?
-No hay razón de hacerlo
-¡Me lastimaste!
-Pero no fue el que lo causo
-Lo hiciste idiota, no fui el único culpable de chocar, usted tampoco evito el accidente
-¿Como podría? Es tan pequeño como un enano, es imposible fijarse en usted
- ¡Mido 1.75! ¿Cómo podría ser enano si mido lo que un beta promedio normal lo haría?
-Yo lo veo así-sonrió arrogante- usted es un e-n-a-n-o
- Te voy arrancar esa sonrisa de galán de telenovela-dijo ya enojado
-Inténtalo enano
El rubio se lanzo sobre el hombre a lanzarle unos buenos golpes, este por reflejo le iba aplicar una llave pero la flexibilidad y la rapidez de Naruto se le hizo imposible, por lo que quedaron en una posición en donde ambos se contrarrestaban y ninguno podría ejercer mas fuerza de el otro.
-Suéltame para darte uno buenos golpes teme
-Eres muy fuerte dobe, me sorprendes
- Te voy aplastar la cara que tienes estúpido
-Haber si puedes
Naruto entre la lucha se fijo por un momento en sus ojos, fue por un instante en que pudo mirar su rostro, uno en donde los ojos profundamente negros brillaban con algo rojizo que hizo estremecerlo pero que no le hizo flaquear, sino que aumento su espíritu de lucha.
- Eres el segundo hombre sin ser de mi familia que puede conmigo
-¿Me debo sentir alagado acaso?
-Mucho dobe
-Eso lo veremos teme