๐“‘๐“ฎ ๐”€๐“ฒ๐“ฝ๐“ฑ ๐”‚๐“ธ๐“พ || ๐“œ๐“ช๏ฟฝ...

By MaryGrey9

7.1K 591 235

Y sin importar que pase, estarรฉ a tu lado. || Segunda temporada de "I Promise" || Historia original y colabor... More

Prologo.
001.
002
003
004
005
006.
007
008
009
010
CAPITULO 11
012
014
015
016.
017.
018

013

298 24 12
By MaryGrey9

Mateo.

Las cosas con Diego estaban mejor. Ambos poníamos de nuestra parte para que nuestra relación fuera más estable y tranquila, aunque el tema de mis padres aun no salía a la luz y no sabía cuándo estaría listo para compartirlo. La última clase no la compartía con ninguno de mis amigos, así que en cuanto terminó no dude en salir en busca de mi novio a quien encontré justamente en el pasillo a lado de Andrea. Tal parecía y ella era una nueva amiga de Diego y me agradaba, las risas de mi novio eran sinceras cuando estaba con ella y me tranquilizaba el que tuviera una nueva confidente que le hiciera bien.

Me acerqué a ellos saludando a la chica y recibiendo una sonrisa de su parte. Mientras Diego fue más tímido preguntándome cómo estaba y si me había ido bien. Tal vez era el necesitarlo cada vez más o no entendía pero no pude evitar dejar un beso sobre su frente y atraerlo con mi brazo. — Esa es mi señal. Nos vemos más tarde, Di.

Andrea le dio un beso en la mejilla a mi chico y siguió su camino por los pasillos.
— ¿Tienes tarea? — Pregunté confundido.
— No, vamos, quiero llegar a casa.

Noté lo pensativo que se veía pero no quise hostigar así que ambos fuimos hasta el estacionamiento donde Aristemo nos esperaba, ellos habían notado mi falta de auto pero no habían hecho preguntas y se habían ofrecido de llevarnos y traernos a su casa donde me la pasaba la mayoría de mi tiempo o cuando iba al trabajo y me subía a la curiosa "burra" de Temo. Era extraño pero me había acoplado a ese par bastante.

Al llegar a la privada, seguí sin presionar a Diego quién seguía en su mundo y me dedique solo a escuchar las quejas de Aristóteles por las correcciones que Tiago le había hecho, al entrar al departamento y por consiguiente a la habitación de mi novio por fin pregunté.
— Ya suéltalo, Diego. ¿Qué pasa?

DIEGO.

La invitación de Andy seguía en mi cabeza, últimamente habíamos hablado bastante de lo estresados que nos tenían en ciertas materias y como necesitábamos un respiro, claramente, ella sabía de mi extraña conversación con Alex y cómo sus palabras me habían inquietado, también tuve sus regaños por no querer hablar con Mateo sobre ello pero no era sencillo, realmente no sabía si podríamos dar mayores pasos en nuestra relación a pesar de nuestras pruebas ya superadas. Cuando lo escuché preguntar que sucedía suspiré. Era hora de sincerarme con él, pero me tomé el tiempo de quitarme los tenis y además recostarme en la cama invitándolo a sentarse conmigo. — Vamosaunafiesta.
Lo vi mirarme confundido. — ¿Qué?
— Que si vamos a una fiesta. Bueno, es algo así. En un almacén. — El silencio se hizo presente entre nosotros y sentí un gran nervio de haber arruinado todo. — Lo siento, yo solo pensé que era buena idea.
Me tomó de la barbilla, y me hizo mirarlo. — ¿Por eso has estado así? — Asentí. — ¿Creíste que me negaría?
— Creí que te enojarías.
— ¿Por qué?
Su mirada era intensa, hizo que me sintiera avergonzado en cuestión de segundos. — Es solo que, estar juntos en un lugar tan libre como ese donde tal vez haya más personas de las que están en la universidad puede ser incómodo.

Suspiró. — Tampoco quiero que termines de lo que te gusta por mi, Diego. Y si quieres hacer algo así, dímelo. Somos novios, en algún momento debemos enfrentar estas situaciones y vivirlas. Así que iremos a esa fiesta.

Tal y como lo prometió, unas horas después estábamos entrando al viejo almacén junto a Andrea, Aristóteles y Temo ya estaban ahí así que al menos rodeados de conocidos estaríamos. El lugar estaba repleto, muchos bailando mientras otros solo observaban, al estar en la puerta nos pusieron pintura fluorescente así que en contraste con la oscuridad y las luces de colores nos veíamos geniales.
Andrea nos llevó hasta una mesa donde estaban ya mi mejor amigo y su novio y gritó emocionada ante la canción que comenzó a sonar. — ¡Vamos a bailar!

Me tomó de la mano y yo miré a mi novio. Él asintió dejando en claro que no bailaría. Suspiré y me deje llevar por Andy, nos abrimos espacio cerca de nuestra mesa aunque aún me sentía algo decepcionado de que Mateo no nos siguiera, cosa que se olvido cuando Andy comenzó a moverse delante de mí cantando a pesar de que su voz no alcanzara a escucharse.


"Quiero hacerte entender..." Me dejé llevar por ella, total, ya estaba ahí, poco a poco las ideas, lo que me mantenía oprimido y estresado fueron saliendo, bailar era una terapia que sin duda necesitaba, Andy me tomó de las manos y entre risas ambos dimos vueltas, saltamos, nos movimos mientras las luces parpadeaban a nuestro alrededor. Me comenzaba a sentir sudoroso pero esta vez no me molestaba, no me preocupaba nada, me sentía libre. 


Ambos nos sincronizamos, de un lado a otro, incluso la imite al cantar un poco de la letra que entendía y tuve el atrevimiento de cantar a dirección de Mateo "Si me escuchas no sé que estoy diciendo, que estoy cayendo..." Añadí grabandose en mi mente la sonrisa divertida de mi novio que terminó de pronto. No supe o no entendí hasta que sentí unas manos en mi cintura. "Quiero hacerte entender" Esa voz se escuchó muy cercana pero no era Andy, no eran las manos que yo conocía, no era la voz que me enloquecía. Al dar la vuelta me encontré con Alex que parecía muy alegre acercándose demasiado a mi. Me separé, pero él volvió a acercarse, está vez siendo Andy quien se metiera entre ambos. 


— Me alegra que te estés divirtiendo, Dieguito. Toma, va por mi cuenta.
Dejó un vaso en mi mano y se alejó, justo cuando sentí la presencia de mi novio cerca. — ¿Qué quería ese? — Preguntó cerca de mi oído con voz seria.
— Solo me dejó esta bebida.
— Tranquilo, Mateo. Estaré más al pendiente. Yo lo cuido. — Dijo esta vez Andy sonriéndole con tranquilidad a mi novio.

MATEO.

Regresé a la mesa donde ahora solo estaba Thiago, quién no supe en qué momento se había unido, y a pesar de sus intentos de sacarme plática tenía esa sensación de enojo después de ver la manera en que Alejandro se había acercado a Diego. Mis puños se apretaron pero rápido me relaje ¿Que me pasaba? Yo no era así de impulsivo. Diego ocasiona sentimientos en mi que no había experimentado antes con nadie y me hacía perder mi propio control ; odiaba eso. 

Thiago dejó de hablar y al ver delante de mí, entendí porqué. Alex me miraba con una sonrisa que me molestaba demasiado. Se acercó más al ver mi nula acción de ir hacía él. — ¿Disfrutas tu asiento, Mati?
— Hasta que llegaste tú, sí.
Mi comentario solo lo hizo reír. — Sabía que Diego y tú eran opuestos totales pero verlo a él, tan libre y tú amargándote aquí, me hizo comprobarlo. Al menos lo dejas salir de esa jaula en que lo tienes.
— Yo no tengo a Diego en ninguna Jaula. — Dije serio. — Y no tengo porqué hablar contigo de mi novio.
— Mientes. No había visto a Diego tan sonriente como hoy... Aunque es obvio que preferiría bailar con alguien que no fuera una mujer. Probablemente, le pida bailar conmigo. Comprobé que me gusta abrazarlo. 

Me levanté de golpe. — Ni se te ocurra. — Él se levantó a la par muy cerca de mi. — Nos estamos viendo, Mati. 

Se alejó entre risas moviéndose como si fuera el rey del lugar. Thiago me pidió que me tranquilizará pero no podía permitir que ese idiota se acercara de nuevo a mi chico, por lo cual, bebí de golpe el trago que había evitado y fui entre las personas que estaban en la pista hasta donde se encontraba mi novio bailando con Andy. 


Me acerqué primero a ella, y le pedí que me dejará un momento con Diego, asintió y se alejó sin dejar de bailar, mi novio me miró extrañado tal vez pensando que nos iríamos pero lo que no se espero fue que lo tomé de la cintura atrayéndolo a mi. 

— ¿Quieres bailar conmigo?

Me miró confundido, pero asintió. Justo en ese momento, tal parecía que las cosas se pondrían más interesantes por el cambio de canción que me animo a no alejarme de él. 

El principio era lento, nuestros pasos también, en una extraña conexión de miradas que nos hacía olvidar realmente de todo nuestro alrededor. "We are damaged, take control." La voz de Diego fue un susurro que me estremeció completamente, ambos nos movimos sincronizados, en nuestra burbuja que nadie más podía romper, acoplados mientras teníamos inocentes roces tal vez por el poco alcohol que ambos pudimos haber consumido o por la necesidad de estar juntos. Nos dejamos llevar, mis labios fueron a su lóbulo dejando una mordida mientras tarareaba un poco, tomando el control, guiándolo, de un lado a otro. 

Dándole la vuelta, sin pudor, sin críticas. Solo él y yo. Su risa llegó a mis oídos y eso era una medicina total a mis enojos y celos tontos, lo besé, sin importar quién nos veía, lo abrace, sin tomar atención a las habladurías. Lo toqué, sin detenerme a pensar en lo que podría ocasionar en ambos. Éramos él y yo disfrutando como un par de adolescentes enamorados de un momento único. Los gritos me volvieron al lugar donde estábamos,  rodeados de personas brincando y movimientos de manos por todos lados, humo entre ambos. 

Diego estaba magnífico y yo necesitaba más de él. Quería pensar que nada había podido arruinar ese momento. Lo besé de nuevo y di la vuelta con él. Ambos sudorosos, ambos extasiados del ritmo, del calor que no nos abandonaba. Nuestras gargantas secas nos hicieron separarnos para ir a la barra, el trago que pidió Diego estuvo en mis labios tan pronto él bebió y me beso embriagándome de esa perfecta combinación; alcohol y mi chico favorito.

Muy sumidos estábamos hasta que escuché esa maldita voz que conocía perfectamente. 

 — Mateo Symanski dando espectáculos. Pero, según tú, los odiabas ¿No es así? Y todo se rompió. Keren me observaba con molestia. Diego la observaba a ella. Y yo solo veía a mi hermana cruzada de brazos frente a mi. 

→→→→→→→→→→

Había estado cerca, aún sentía su aroma, su calor. Ese que emanaba y su aliento, suspiró sin evitarlo. Cada vez se acercaba más y sin duda, no sería la última vez. Él sería suyo así fuera último que hiciera en la vida.

 →→→→→→→→→→

Mientras tanto, lejos de ahí, dos hombres se encontraban de nuevo frente a frente. — Sabía que tu no me fallarías.
— Bienvenido de vuelta, Ubaldo Ortega. 

****

¿Algunas teorías? Las leo. JEJEJE. 

Continue Reading

You'll Also Like

178K 4.7K 40
" She is my wife, stay away from her!" " Keep trying she will remain mine. " " Show me your scars, I want to see how many times you needed...
239K 8.4K 98
Ahsoka Velaryon. Unlike her brothers Jacaerys, Lucaerys, and Joffery. Ahsoka was born with stark white hair that was incredibly thick and coarse, eye...
80.2K 1.8K 33
!Uploads daily! Max starts his first year at college. Everything goes well for him and his friends PJ and Bobby until he meets Bradley Uppercrust the...