Estabas en el aeropuerto esperando a ser llamada por el megáfono para embarcar en un avión con destino a Londres. Ansiabas que llegase este día como nunca, porque al fin volverías a la ciudad que tanto te gustaba, a ver a los amigos que dejaste por allí cuando hiciste el intercambio el año pasado, pero sobretodo porque ibas a volver a verle a él. El móvil empezó a vibrar. Te habían mandado un mensaje por whatsaap. Lo abriste y sonreíste.
“X: Cuento las horas que quedan para volver a verte.”
“Tú: ¿Si? Pues no te olvides de añadirle una hora, que siempre te olvidas.”
“X:No, no, tranquila me he acordado esta vez...Puse el reloj en hora y todo para no contar mal.”
No pudiste evitar reírte, la gente que pasaba te miraba como si estuvieras loca. Tu novio vivía en una zona horaria diferente a la tuya, él tenía una hora menos por eso siempre que llamaba lo hacia tarde.
“Tú: Bien, bien, veo que has hecho bien los deberes.”
De pronto por él megáfono avisaron a los pasajeros con destino Londres que debían embarcar, por lo que te despediste de él, apagaste el móvil y te subiste al avión. Mientras volabas pensaste en tú relación. Era muy difícil mantenerla, por la distancia y por otros factores. Suspiraste. Pero el ver que una sonrisa sincera de sus labios y una mirada de sus ojos y que sus suspiros eran para ti y solo para ti te producía un hormigueo en el estomago. Dos horas y media estuviste pensando, aunque a mitad del trayecto te quedaste dormida, pues no habías dormido muy bien esta noche. Al aterrizar el avión, te desabrochaste el cinturón de seguridad y encendiste tu teléfono móvil. Bajaste las escaleras y echaste a andar por la pista hasta llegar al lugar donde se recogen las maletas. Mientras esperabas por la tuya pusiste tu código pin y guardaste el aparato en el bolsillo de tu abrigo. Con suerte tu maleta fue de las primeras en salir, la recogiste de la cinta y la arrastraste hacia la salida, pero antes cogiste de nuevo el móvil y viste un mensaje en el móvil que era de él.
“X: Ahora mismo tienes que estar adorable sonriendo al ver mi nombre... La verdad es que echo de menos verla, y oler tu perfume por la mañana y sobre todo esos besos y abrazos que me dabas... Sé que falta mucho para que tu avión llegue al aeropuerto pero yo no puedo esperar más. Estoy muy nervioso por volver a verte así que ya voy para allá ;) Te quiero cariño <3 <3 <3”
Sonreíste y al salir por la puerta viste sus característicos rizos de espaldas a ti. Te acercaste levemente y le respondiste el mensaje: “Yo aun más xx Pero no sé yo si de verdad tienes tantas ganas de verme, como me estas dando la espalda...” Entonces su móvil empezó a vibrar y lo saco del pantalón. Lo miro y al ver que le habías respondido se giro levemente y te vio. Al ver de nuevo después de tantos meses sus ojos en directo te dejo sin respiración. Se acerco a ti rápidamente y te abrazo fuerte. Tú también lo hiciste. Te susurro al oído que te había echado mucho de menos y que te quería. Tu sonreíste antes esto y al volver a escuchar su voz tan cerca sin tener que colgar el teléfono minutos después. Al separaos te sonrío como lo hacia siempre, se le veía emocionado y tú también lo estabas. Mientras vigilaba que nadie estuviese mirando te cogió de la mano con una de las suyas mientras que con la otra arrastraba tu maleta. Aunque al salir por las puertas del aeropuerto y meterte dentro del coche tuvisteis que soltar vuestras manos enlazadas, pues así era la vida de tu novio. Ser famoso tiene muchos contras en cuanto a lo que se refiere con la vida privada que pasa a ser publica. Por lo que habíais decidido no contar nada de lo vuestro a nadie. Solo lo sabían los más allegados y haciéndoles prometer que no contarían nada. Te subiste en el asiento del copiloto, mientras él guardaba tu equipaje en el maletero, para luego subirse al coche y arrancar.
Mientras iba conduciendo puso una mano sobre tu muslo y el calor de su mano sobre esa parte de tu pierna te hizo sonreír.
Harry: ¿Que tal el vuelo, cariño?
Tú: Agotador la verdad... Harry, ¿A donde vamos?
Harry: Se me olvido comentarte que mamá quiere verte... Le dije que estarías cansada, pero insistió tanto que acepte pasar una noche en casa, espero que no te moleste.
Tú: No, no te preocupes. También extrañaba a Anne... En realidad lo extrañaba todo de aquí.
Observabas el paisaje que un año atrás habías visto asombrada. Pronto llegasteis a casa de Anne. Harry bajo tu maleta y abrió la puerta con la llave.
Harry:¡Mamá ya estamos en casa! - Entrasteis hasta el recibidor donde Harry dejo tu maleta para ir en busca de su madre.
Anne: Hola cariño.-Dijo tú adorable suegra abriendo los brazos. Harry pensó que lo iba a abrazar a él, pero se equivoco y te fue a abrazar a ti. -¿Que tal te ha ido todo?
Tú: Pues muy bien, extrañando esto por aquí, pero bien al fin y al cabo.-Dijiste con tu mejor sonrisa. Detrás de la mujer veías como Harry se cruzaba de brazos.
Harry: Hola mamá, ¿Qué qué tal estoy? Pues ahora que lo preguntas estoy muy feliz, ¿El camino? Uuff de miedo. He conducido más de dos horas seguidas, pero nada, no me he chocado ni nada. A por cierto mira traje a (TN) sana y salva. ¿No la habías visto? Pues me ha dicho que esta muy cansada ¿Qué por que? Oooh porque ha tenido dos horas y media de vuelo más otro tanto en coche así que cojo la maleta y le enseño mi cuarto. Vale, vale no te pongas así mujer. La llevo al de visitas, y la dejamos descansar que ha tenido un largooo día, ¿Si? -Anne y tú estabais perplejas ante el monologo de Harry y no pudisteis evitar reíros por los gestos y caras que ponía. Entonces cogió la maleta y te cogió la mano, pero antes dijo.-Si mamá yo también te quiero, no hace falta que lo repitas constantemente.
Te guió hasta la habitación de las visitas. Una vez allí Harry dejó la maleta al lado de la que sería tú cama. Tú entraste de ultimo riéndote levemente. Él te cogió de la cintura y te acerco a su cuerpo sin dejar un espacio libre entre vosotros.
Harry: Creo que no te he dado la bienvenida como te mereces...-Dijo susurrando contra tus labios, para luego juntarlos en un beso cargado de añoranza y pasión. Vuestros labios se volvían a acariciar y vuestras lenguas se enzarzaban en un juego dictado por ambos después de tantos meses sin poder saborearos él uno al otro. Una de tus manos se dirigió a los rizos de este chico que con solo un beso te hacia vibrar mientras él te apretaba contra su cuerpo para poder sentiros. Empezaba a faltaros el aire y os separasteis levemente. Harry dejó su frente apoyada sobre la tuya y no separasteis vuestros cuerpos en ningún momento.- No sabes cuanta falta me hacía esto- Dijo sonriéndote- Necesitaba volver a besarte de nuevo.
Tú: Yo también necesitaba volver a estar contigo, como antes.-Le decías mientras acariciabas su cuello lo que le hacía estremecerse.
Harry: ¿Sabes? Hace tanto tiempo que no estamos juntos que creo que se me han olvidado ciertas cosas que hacíamos juntos- Dijo picaramente mientras metía sus manos debajo de tu camisa y te apretaba contra su cuerpo.
Tú: ¿A sí? ¿Qué cosas?- Dijiste siguiéndole el juego mientras sonreías.
Harry: Algunas cosas que hacíamos...-Entonces se giro y miro hacía la cama- Pero creo que no era esta la posición adecuada...
Tú te reíste y él te cogió en peso hasta tumbarte en la cama. Luego fue recostándose lentamente sobre ti hasta que vuestros labios volvieron a encontrarse. Harry te besaba con pasión, demasiada. Pero tú también le seguías puesto que habíais pasado varios meses separados, os echabais de menos mutuamente. Harry se quito la camisa y la tiro al piso para luego acceder a tu cuello y besarlo como nunca. La temperatura empezaba a subir rápidamente y empezabas a notar calor. Harry lo noto y ayudo a que te quitaras la camisa, luego te miro deseándote aun más que antes. Te beso en el pecho bajo la barbilla y continuo bajando por tu cuerpo, lentamente pues sabia como te estaba poniendo aquello, mala, muy mala. Cerrabas los ojos concentrándote en sus movimientos y no podías evitar suspirar al sentir sus besos en tu piel, te erizaba, pero era del placer que te causaba todo aquello. Sus manos te acariciaban al igual que sus labios. Notabas como sonreía mientras besaba tu barriga. Te conocía perfectamente y le encantaba verte así aunque no necesitara ni mirarte para saber lo que sentías. Sabías que quería jugar contigo, pero tú no soportabas ni un minuto más sin besarle por lo que le tocaste el pelo. Él levanto la vista y sonrió. Tú te mordiste el labio al verlo de nuevo.
-¿No te aburres ahí abajo?- Te reíste ante tú comentario.
- La verdad es que no...Estoy muy entretenido- Entonces volvió a mirar hacía tu vientre y beso tu ombligo para luego mojar su labio inferior con su lengua. No te acordabas de lo sexy que era hasta este momento, te había debilitado con este ultimo movimiento. Entonces levanto la cabeza volvió hasta donde tú estabas acercando sus labios a los tuyos- ¿Y tú? ¿Te aburres por aquí arriba?- Rozo levemente tus labios esperando que respondieras. Esa voz te había dejado sin habla.
- No, solo que te echaba de menos- Dijiste como pudiste
- Vaya, no aguantas nada...-Dijo dándote un pequeño beso en el cuello.
- ¿Acaso se te había olvidado lo débil que soy ante ti?- Dijiste poniendo tus manos en su cadera y apretando un poco su piel.
- No, lo que se me había olvidado es lo débil que soy yo ante ti.- Entonces no aguanto más y beso tus labios de nuevo poniendo su mano en tu cuello. Con su otra mano llego a tu pantalón y lo desabrocho con prisa. No aguantaba más las ganas de volver a hacerte suya y tú tampoco podías aguantar más así que desabrochaste a la vez sus pantalones negros dejando entre ver sus boxers del mismo color. Entonces un grito procedente de la cocina os interrumpió, Anne os llamaba para comer. Harry puso los ojos en blanco y recostó su cabeza entre tu cabeza y tu hombro. Tú reíste ante esto acariciando su espalda. Tenías tantas ganas de estar juntos como él, pero esto te hizo mucha gracia. No habíais caído en que la familia de Harry estaba en la casa. Tampoco es que hubierais pensado mucho, solo pensabais el uno en él otro. Harry suspiro y se levanto de la cama. Esa imagen se te quedo muy grabada, y te había dejado peor de lo que estabas. Harry estaba con el torso desnudo y con sus pantalones desabrochados por los que se veía sus calzoncillos. Nada más levantarse se coloco el pelo como solo él podía hacer. Cerraste los ojos y suspiraste para relajarte. Harry cogió su camisa y se la puso mientras te acercaba la tuya y se sentaba en un lado de la cama mirando al piso. Sonreíste al ver esto mientras te ponías tu camisa. Te acercaste a él y le diste un beso en la mejilla acariciando su cuello con una mano.
-(TN)....por favor...- Dijo mientras suspiraba- No puedes ni imaginarte como estoy ahora y no puedo bajar con esta cara a comer con mi familia. Así que por favor no me hagas esto- Tú te reíste, creías que exageraba. Sí, es verdad que los dos estabais muy ansiosos, pero no creías que fuera para tanto.
- ¿Tan mal estas?
- Cariño, no te puedes imaginar como me has dejado...
-¿Yoooo? Pero si no te he tocado- Dijiste sorprendida. Entonces él levanto la cabeza y te miro.
- Es que si me hubieras tocado en este momento no seguirías con ropa- Suspiraste ante esto. Después de tanto tiempo todavía sabia como dejarte sin palabras.
- Anda amor, vamos abajo. A ver si te relajas.
- Vete yendo tú. A mí todavía me queda.
-¡Harry!- Dijiste indignada
- Es todo culpa tuya. Eres tú la que causa este efecto.
- Esta bien, yo no quiero saber nada- Saliste de la habitación sonriendo. Bajaste y te sentaste a la mesa. Gemma y el padrastro de Harry estaban allí. Los saludaste y como siempre ellos te trataron como a una más. Siempre te habías llevado muy bien con Gemma y era algo que a Harry le encantaba. Harry bajo poco después. Os dedicasteis unas sonrisas cómplices y se sentó a tú lado estrechándote la mano bajo la mesa. Os sentasteis los cinco a comer la deliciosa comida que había preparado Anne. Al terminar, tú decidiste ayudar a Anne a recoger la cocina mientras los demás recogían la mesa. -Cielo, seguro que estas muy cansada del viaje. ¿Por que no te vas a acostar un rato que Harry y yo terminaremos con esto?
- No, no te preocupes Anne. No estoy tan cansada.
-Bueno esta bien- Dijo Anne no muy convencida- (TN), esta noche tenía pensado ir al cine con unas amigas a ver una película nueva que estrenan. Igual te apetece ir.- Ibas a contestar, pero en ese momento entro Harry por la puerta soltando unos platos sobre la encimera y contestándole a su madre por ti.
- ¡Mamá! ¿Solo lleva unas horas aquí y ya me la quieres robar?- Dijo mientras se acercaba y te abrazaba por detrás alejándote de su madre. Tú y Anne os reíais.
- Harry, yo solo preguntaba si le apetecía.
- Pues no le apetece, esta noche la vamos a pasar juntos. Hace mucho que no estamos juntos. Así que hoy es nuestra noche- Dijo dándote la vuelta y besándote en los labios.
-Bueno, esta bien- Dijo Anne colocando los platos que había traído Harry. Gemma apareció por la puerta mientras vosotros seguíais abrazados.
- Mamá, esta noche voy a salir con las chicas, así que volveré tarde- Entonces se giro hacia ti.- (TN), ¿Te apetece venirte?- Fuiste a contestarle, pero otra vez Harry fue más rápido que tú.
- ¿¿Otra más?? Pero ¿Qué os pasa? ¿Esto es un complot para separarme de (TN)? Es mi novia, no me la vais a robar- Decía mientras os alejabais caminando de espaldas a la puerta. Las tres reíais y Harry te agarraba fuerte- Os estaré vigilando- Dijo riendo antes de salir por la puerta. Llegasteis a la habitación y os acostasteis en la cama abrazados mientras Harry seguía con la teoría de que todo él mundo os quería separar para quedarse contigo. Tú no podías parar de reír por sus locuras. Pasado un rato te quedaste dormida, la verdad es que si estabas cansada por el viaje y con Harry al lado haciéndote caricias era imposible no quedarse dormida. Te despertaste a las 8 y media y Harry ya no estaba a tu lado. Te levantaste y bajaste al primer piso. Estaba todo oscuro por lo que te asustaste, pero en el salón pudiste ver sus rizos en el sillón. Estaba acostado viendo la tele. Te acercaste por detrás y le tocaste el pelo. Él no tardo en girarse y sonreírte. Se sentó y te cogió la mano para que te acercaras, pero te sentó en sus piernas.
- Me has dejado sola en la cama- Pusiste una cara fingiendo tristeza.
- Es que ya no aguantaba más acostado y no quería despertarte-Dijo dandote un beso en la mejilla-¿Qué tal has dormido?
- Perfectamente, pero ahora tengo algo de hambre.
- Me lo supuse, por eso he reservado en un restaurante. Vístete y vamos a cenar.- Tú le sonreíste y fuiste a levantarte, pero él tiro de tu brazo para volverte a sentar encima suya- ¿No se te olvida algo? ¿Donde esta mi beso?- Tú sonreíste y le besaste tiernamente para luego volver al cuarto a cambiarte.
Llegasteis al restaurante y os sentasteis en la mesa que os correspondía. El restaurante estaba lleno de gente. Tenías miedo a que alguien os sacara una foto y la publicaran, pero no pasaría nada si no llamabais mucho la atención. Así que intentabais aparentar normalidad y parecer simplemente amigos, aunque eso era cada vez más complicado. Las muestras de cariño salían solas y teníais que pararlas antes de que fueran vistas por alguien. En un momento de la cena Harry se acerco a ti y te cogió la mano, tú te soltaste rápido por lo que Harry se quedo sorprendido.
-Harry, aquí no.
- Es verdad, se me olvidaba.- Entonces soltó un suspiro para volver a mirarte- Pero, (TN)....o nos vamos al baño o tendré que besarte aquí mismo, porque llevo toda la noche reprimiéndome las ganas de hacerlo.
- Ya claro, como que serías capaz de hacerlo aquí- Dijiste picandolo
- ¿A que no?
-Claro que no- Entonces Harry se levanto de su silla y se acerco a la tuya. Cogió tu cabeza con sus dos manos y atrapo tus labios en un largo beso. Hubieras intentado pararlo, pero te habías quedado impresionada. No creías que fuera capaz de hacerlo. Los dos habíais pactado que nadie se enteraría de vuestra relación en el máximo tiempo posible, para evitar que os acosaran en todas partes, pero parecía que Harry ya no estaba dispuesto a ocultarlo más. Harry se separo de ti riendo. Tú estabas blanca. Miraste hacia las mesas de alrededor y veías como observaban la escena. Tú color cambio del blanco al rojo.
-Harry, ¿Estas loco? ¿Como me besas delante de toda esta gente?-dijiste susurrando.
-Tú me picaste. Además de que ya estoy harto de ocultar nuestra relación. No he hecho nada malo, solo quiero que los demás sepan que soy feliz junto a ti. Quiero ir por la calle y poder cogerte de la mano, poder besarte y poder sonreírte sin tener que aparentar que no estoy enamorado de ti, porque si lo estoy.
Tú sonreíste de ternura al escuchar esto. Sabias que no iba a ser fácil a partir de ahora. Antes solo eras la amiga de Harry y habían sacado unas cuantas fotos tuyas con él, pero si aceptabas su petición de hacerlo publico toda tú vida estaría al descubierto. Tu pasado y tu futuro se verían expuestos. ¿Y si a las Directioners no les gustaban que estuvieras con él? ¿Y si se metían contigo por la calle o te insultaban? Había que ser realista, no eras tan guapa como Danielle o Eleanor y no sabías si las chicas preferían algo mejor para él. En ese instante Harry alargo el brazo y te cogió la mano. Tú lo miraste, estaba sonriendo. Entonces lo viste claro, daba igual lo que pensaran de ti, daba igual si te insultaban o te veían poca cosa para él. Él te había elegido a ti y sabias que lo tendrías siempre contigo. Merecía la pena enfrentarse al mundo y a las criticas por Harry Styles. Apretaste su mano y le devolviste la sonrisa en señal afirmativa a lo que él alargo más todavía aquella sonrisa preciosa. Salisteis del restaurante y caminasteis hasta la casa de Harry, esta vez de la mano sin esconder el amor que sentíais mutuamente. Te parecía raro besarlo en mitad de la calle ya que después de todo lo que llevabais no lo habías echo nunca. Llegasteis a la casa y todavía no había llegado nadie, estabais solos. Decidiste ir a cambiarte y ponerte el pijama mientras él llamaba a su madre para informarse de cuanto tardarían ella y Rob en llegar. Te pusiste el pantalón del pijama de espaldas a la puerta, pero cuando fuiste a ponerte la camisa notaste algo extraño. Te giraste y viste a Harry apoyado en la puerta. Estaba sonriendo mientras te miraba. Lo miraste de arriba hasta abajo y viste que llevaba su camisa desabrochada donde se veía su pecho al descubierto. Tenía sus manos metidas en el pantalón y estaba muy sexy apoyado en el filo de la puerta. Entonces terminaste de ponerte la camisa y el se acerco lentamente hasta posar sus manos en tu cadera rodeándote con ellas.
-Se me había olvidado una cosa
- ¿El que?- respondiste confundía
-Nuestro beso de buenas noches- Entonces se acerco a ti y te beso. Luego saco su móvil y te giro posando tu espalda sobre su pecho. Levanto la mano con el móvil en ella y te pidió que sonrieras mientras acercaba su cara a la tuya para darte un beso en la mejilla medio mirando hacia la cámara. Sonrió mientras lo hacia y saco la foto. Le dio la vuelta y sonrió al verla al igual que tú. Entonces le dio a compartir y le dio a Twitter. Tú lo mirabas asustada. Entonces escribió algo que no lograste ver y la subió a Twitter. Entonces tu lo miraste para que te dejara ver el tweet. El rió y entro en su perfil. Leíste el tweet que ponía:
“ Vuelvo a tener la alegría de mis días entre mis brazos. Te quiero pequeña <3”
Tu sonreiste al ver esto y te giraste para pasar tus brazos alrededor de su cuello.
Tú: Aun no me creo todo esto... Volver a verte.-Le diste un beso en la mejilla.-Volver a escuchar tu voz sin tener que colgar.-Ahora le diste otro beso en la otra mejilla, mientras él subía poco a poco las manos por dentro de tu camisa del pijama, haciendo que te rizaras lentamente por su contacto.-Sentir tus caricias.-Esta vez le diste un beso en la comisura de los labios, mientras acariciabas con tus manos sus rizos y bajabas hasta su cuello.- Tus besos.
Besaste en un beso corto sus labios, pero él necesitaba más que eso, al igual que tú. Te atrajo hasta su cuerpo pegándote totalmente a él, mientras besaba ardientemente tus labios, y jugaba con tu lengua a placer. La respiración empezaba a faltar, él bajó sus besos por tu cuello, provocandote pequeños escalofríos que te hacían suspirar. Sabiendo el efecto hecho en ti, empezó a darte pequeños y suaves mordiscos, mientras iba subiendo sus manos debajo de tu camisa y desabrochaba hábilmente tu sujetador. Al sentir el roce de su piel con la tuya no pudiste evitar soltar un pequeño gemido que solo logró escuchar él, que hizo que sonriese. No podías aguantar más la lejanía de sus labios sobre los tuyos, por lo que agarraste sus mejillas y lo besaste mientras el sonreía picaramente. Mientras lo besabas, enrollaste tus piernas sobre sus caderas, notando así un bulto entre sus piernas, ahora sonreíste tú. Mientras Harry te llevaba hacia la cama, empezaste a atacar su cuello, su punto débil.
-Como sigas así no llego a la cama.-Dijo con dificultad y con voz ronca. Te separaste de su cuello y reíste. Sentiste la suavidad y comodidad de la cama bajo de ti mientras Harry se posaba sobre ti sin poner todo su peso mientras besaba tus labios. Decidiste enrollar tus piernas a su cadera, al notar la cercanía de vuestros sexos él no pudo evitar gemir. Te giraste y quedaste ahora tu encima, él se incorporó y te quitó la camisa del pijama junto al sujetador. Cerraste los ojos cuando Harry empezó a besar y jugar con tus pechos mientras tú suspirabas, de pronto paró y te miraba, abriste los ojos y le sonreíste, un pequeño rumor acudió a tus mejillas, él las acarició y dijo susurrando.
-No te vuelvas a separar de mí, por que no lo soportaría.- Te inclinaste hacia adelante con una sonrisa en los labios y le dijiste.
-No pienso volver a separarme, por que yo tampoco podría con ello.- Acortó la distancia para besar tus labios dulcemente, sin una pizca de prisa, saboreaba el momento junto a ti, regalándote en ese beso todos los que no pudo darte por culpa de la distancia, acariciaba tus labios con los suyos mientras te iba recostando levemente en la cama. Esa noche os entregasteis como nunca antes, prometiéndoos no volver a separaros, y diciéndoos cuanto os queríais mientras os dabais esas caricias añoradas.
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Este imagina no es solo de mi propiedad tambien pertenece a @PatriMcfly1D :), Las dos hacemos los imaginas juntas ^.^