Está es una adaptación la obra pertenece a FuJOsH1
El nuevo rechazado, ahora que haré?
Con la simple bata comienzo a salir de la enorme mansión.
- no de nuevo...- mis ojos comienzan a llenarse de lágrimas.
Llegó a un bosque de árboles grises con hojas negras.
Qué hice mal?
Sigo caminando y llegó una barranca, es demasiada altura para llegar al fondo.
Me siento en la orilla.
Tienes razón kurogiri.
No debo tener rencor.
Además fui yo quien arruinó la vida de katsuki, yo fui un entrometido dentro de su vida.
Yo nunca debí haber sido vampiro en primer lugar.
Obviamente el por ser un el sangre pura debe seguir teniendo esa pureza, él no sabía que yo era un demonio.
Tenía que regresarme para no avergonzar a su familia y sangre.
No tuvo la culpa de nada.
Fue mi culpa, él es una víctima más de un error el cual nunca debió pasar.
además él se sentirá solitario ya que el rechazará la pareja hace que se sienta completamente vacío.
Pobre, lo siento katsuki...
Siento mi corazón liberarse.
Muy tarde ya me han rechazado.
Ahora ya no tengo nada ni a nadie, estoy solo, como siempre ha sido.
Mira mis manos negras y poco a poco se va desvaneciendo el color hasta volver a mi color natural.
Me levanto decidido, me acercó más al barranco, terminamos con todo.
Me doy la vuelta y me dejó caer.
Puedo sentir el aire chocar en mi cuerpo.
Se siente tan bien.
dejó de sentir el aire y ahora siento unos poderosos brazos sostener mi cuerpo.
- Haz aprendido... pequeño- esa potente voz me hace sentir escalofríos.
-¿Qué?- estamos volando.
- cuando desperté puede sentir de tu cuerpo desprender odio, por eso me vi forzado a manchar tu piel, además siento mucho haberte tratado tan mal, era necesario que aprenderás- el fue quien...
- cómo pudiste ser tan cruel- lágrimas comienzan a salir de mis ojos.
- lo siento mucho, pero ahora que eres completamente puro, podrás estar conmigo cómo debió ser desde el primer día en que te vi-
††††
El rey se sienta en el sillón, lleva su mano a mi rostro y acerca sus labios en mi mejilla para darme un dulce beso.
-sabes? Puedo hacer que olvides a katsuki, todo lo que sentiste o hiciste con él, quieres que lo haga? No quiero que sigas recordando, a pesar de que ya no sientes odio ni nada, no quiero que te pongas triste... Quieres hacerlo?-
Olvidar, eso es lo que necesito.
- Si quiero que lo hagas, pero cómo lo sabes?-
-Yo sé todo pequeño... Sólo recordarás a kurogiri y a mí bien?-
- S...si- siento como se acerca a mí y me da un beso en la cabeza.
†††
Estoy sentado en un hermoso y lujoso sillón de color rojo, el Rey me mira con ternura.
- Saldré a ver cómo va todo, puedes hacer lo que desees, si quieres salir hazlo, kurogiri te traerá ropa... Si sales llévate a las panteras-me da una sonrisa y se marcha.
En cuestión de minutos entre kurogiri sonriendo.
En cuestión de minutos entra kurogiri sonriendo.
-Me alegro tanto de que esté aquí...- sus ojos tienen lágrimas.
Me extiende ropa.
- Se puede cambiar aquí, nadie lo verá - se da la vuelta y se va.
Me quitó la bata y me quedó desnudo miro la ropa y comienzo a ponermela.
Es un short verde y las rodillas, un chaleco azul que me deja al descubierto todo mi torso, los zapatos son sandalias color arena.
Camino al enorme espejo y me miró.
Me siento muy feliz, no sé porque.
No me había dado cuenta de que mi cuello, pecho y brazo tengo unas enormes marcas.
Mis sueños son largas y de color negro.
Mi cabello verde cae por mis hombros, mis mejillas pálidas con pequeñas pecas.
†††
Comienzo a caminar a la entrada, las panteras están acostadas.
- Vamos? - .estás inmediatamente se levantan , son enormes.
Abro la enorme puerta, el cielo está nublado, hay árboles de tono gris y hojas negras.
Comienzo a caminar, las casas son grandes y muy bonitas, la gente que me ve se arrodilla inmediatamente.
Puedo ver como una viejita es ayudada por sus nietos a arrodillarse.
Rápidamente camino a la viejita, me con miedo.
- Abuela apúrate - Escucho que le dicen los niños.
- Señora no lo haga, no lo debe hacer- le ayudo a levantarse lo poco que ha podido arrodillarse.
- Pero -
No se preocupe, para todos los demás, no es necesario arrodillarse!-
Todos asienten sonriendo.
- ustedes su luz, usted lo ayudará...- asiento confundido.
- disculpen, pero tienen comida que me puedan regalar? - digo avergonzado.
- Si!! - grita un pequeño niño de 5 años.
Asiento y me agarra de la mano, las panteras gruñen.
- cállense!- Bajan la cabeza y se callan.
Camino junto al niño y llegamos a una hermosa casa de dos pisos.
El pequeño abre la puerta, entramos y es muy bonita por dentro.
Me lleva una pequeña cocina,donde una señora se voltea y en cuanto me ve tira el vaso de vidrio al suelo.
Camino a ella y comienzo a levantar el vaso.
- no por favor no lo haga!- se agacha para quitarme, pero con el movimiento hace que me corté.
- Auch...- Escucho gruñir muy fuerte a las panteras.
- PERDÓNEME!- Se levanta asustada mirando a las panteras.
- Mami!-Gretel niño corriendo a su madre.
Me levanto con la mano sangrando.
- Paren...- Síguen gruñendo.
- Mami que pasa ?! - Dice el niño llorando
- DETENGAN SE!! - las panteras dejan de gruñir.
- AFUERA!! - se dan la vuelta y salen.
- perdón y yo no quería que usted se ensucian las manos...- dice llorando.
- no pasa nada...- veo mi mano llena de sangre.
- déjame ayudarte- me agarra de las manos y me lleva a un lavamanos para limpiar la herida.
Termina de limpiar la y me la cura.
- Mami él dijo que tenía hambre!- miro la señora que me ve con una enorme sonrisa.
Bajo la mirada avergonzado.
- permítame - se levanta y veo que comienza a servir en un plato de comida.
Se da la vuelta y pone el plato enfrente de mí.
- gracias...- haber recubierto y comienzo a comer sin saber qué es.
††††
Terminó de comer y escuchó como la puerta de la entrada es abierta.
La mujer se arrodilla junto con su hijo bajando la cabeza.
- Izuku vamos... - es el rey.
Me volteo y camino a él.
- me amó...- no dice nada y me carga en una mano.
Nos saca de la casa y comienza a caminar a la mansión.
- qué pasa? -le preguntó.
- nada pequeño, sólo es que ya es muy tarde para que tú estés afuera.
Mira los lados las panteras caminan junto a nosotros.
Me acomodo en su pecho y cierra los ojos.
Ignoren el uniforme.