Dunkler Hain.
Bien es cierto que no me dio buena vibra al ver una anuncio del pueblo, siempre fue algo escalofriante ver su bosque oscuro que según es bueno. Ahora con lo que me dijo Xam, no creo poder estar tranquila en la cabaña.
-Bien, hasta aquí el tour. - dice Xam estacionadosé enfrente de la cabaña. - Tengo que trabajar.
-¿Tú también? - hago un puchero recargandome en el asiento.
-Todos trabajamos, además es lunes ¿qué esperabas? - sonríe.
-Si, pero Zara te dijo que no me dejarás sola. - lo señalo.
-Solo encierrate y no habrá problema, tranquila. - se ríe. - Tampoco creas todo lo que te dicen, Thalia.
-Pero eso sí pasó. - bufo.
-Ah bueno si, pero en esta parte no ha pasado nada. - dice y me da unas palmadas en el hombro. - Yo espero a que entres.
-Okay. - digo y salgo dudosa del auto.
Agarro mis llaves para abrir la puerta de madera. En cuanto la abro, veo a Xam y me despido con la mano y él también yéndose de reversa.
Cierro la puerta y escucho la regadera, pero aquí no hay nadie, según yo. Dejo mis cosas en el sillón y agarro uno de las herramientas para chimenea y subo las escaleras cautelosamente.
Estoy en el pasillo y todo está oscuro pero visible, veo la puerta del baño. Camino lentamente y alzo más la herramienta preparándome para atacar al que esté ahí.
El picaporte se gira seguido de que se abre la puerta dejándome ver al intruso.
-¿Qué diablos estas haciendo? - me ve divertido.
-Creí que eras un ladrón. - bajo la herramienta.
-Suelta el poker, mejor. - Cassian lo pone en la pared. - ¿Acaso creíste que un ladrón estaría bañándose?
-No lo pensé bien. - ruedo mis ojos. - Xam me contó lo que ha pasado en el bosque y tenía miedo.
-Pues ya no temas. - me guiño el ojo. - ¿Qué te contó? Lo de los trillizos, supongo.
-Si, ese. - me cruzo de brazos.
-Ya veo. - se acomoda la toalla de su cintura la cual apenas note.
-¿Y no piensas cambiarte? - arqueo una ceja.
-¿Qué? Estoy mojado y sin la toalla, desnudo. - se acerca a mi pero yo no me muevo. - Además estamos solos, yo digo que aprovechemos la oportunidad.
-Paso. - hablo firme. - Cámbiate y me ayudas con la cena.
Abro la puerta de mi habitación y él ya va a entrar.
-Wow, ¿que haces? - le obstruyo el paso.
-Mi ropa la dejé ahí. - ladea la cabeza.
-¿Osea que te desnudaste en mi cuarto? - hago una mueca de asco.
-Si, no te excites demasiado. - se acerca a mí y estamos a centímetros. - ¿Me dejas pasar, Becker?
Ruedo mis ojos. - Ya que, Piers.
Cassian sonríe y le doy el paso para que entre. Toma la ropa que dejo en mi cama bien doblada y se va al cuarto de mi hermana a cambiarse.
-Que mal, yo quería cambiarme en el cuarto de la Becker más bonita. - oigo que dice al cerrar la puerta y me río de su comentario.
Voy a mi cama y me acuesto y le mando un mensaje a mi hermana. No me responde así que me voy a Instagram para ver memes que me aparecen y luego voy a Facebook a hacer exactamente lo mismo. Sentí que pasaron segundos, pero en realidad no.
-Oye, tengo hambre. - Cassian se asoma por mi puerta.
-Pues vamos a comer, bebé llorón. - digo y se ríe.
-Sigue buscando apodos. - rueda sus ojos.
Bajamos las escaleras y llegamos a la cocina abriendo refri y alecenas en busca de una cena decente.
Tardamos horas, pero al final decidimos galletas con leche. Las galletas estaban escondidas y son de las que me gustan, chips ahoy!, son mis favoritas después de las oreo, claro.
-De seguro las compraron para molestarme. - bufa.
-No si. - remojo mi galleta en la leche. - ¿Tú trabajas?
-Claro, pero en las mañanas. - escuchar eso me sorprende. - Trabajo en el mismo lugar que tu hermana.
-En el restaurante. - digo y asiente.
-¿Y tú no trabajas? - cuestiona comiéndose una galleta.
-No, el dinero era de mis padres, no lo ganaba por cuenta propia. - alzo mis hombros.
-Ay no. - niega.
-¿Qué? - lo veo confusa.
-Eres una mimada. - dice y me contengo la risa.
-¿Mimada? - lo miro confundida.
-Si, ¿o te lo defino, mimada? - dice y me río.
-No soy mimada, no te confundas. - bebo un poco de leche.
-Eres mimada y me quedo con eso, ahora tu busca un apodo para mi, se que no será difícil. - se recarga en la mesa.
-Que tal... Molesto. - alzó mis hombros algo sonriente. - Porque mentira no es.
Se ríe. - Tu quieres a este molesto entre tus piernas. - se señala.
-Quisieras. - ruedo mis ojos.
-La verdad si, eso quiero. - dice normal. - Cogerte y hacerte gritar, aunque nadie te va a escuchar.
-¿Nadie me va a escuchar? - en vez de calentarme o hasta darme asco, me entra el pánico.
-Era para que te calentara, no para que te pusieras pálida. - se recarga. - ¿Es por lo de que nadie te va escuchar? - hace una mueca.
-¿Tal vez? - suspiro. - Cassian, se que no me entiendas, pero me da miedo el bosque y no se por que acepte venir a vivir aquí.
-Si entiendo, por un tiempo también me daba miedo, pero Zara me ayudó con eso.
-¿Zara?
-Si, tu hermana ¿acaso sabes como te llamas? - pregunta confundido.
-Si se quien es Zara, no estoy tan idiota. - bufo.
-Pues parece. - susurra y lo ignoro.
Me quedo pensando y, si Zara quiere que esté alejada de él, ¿por qué lo ayudó? No tiene mucho sentido para mí.
-Mimada. - me habla Cassian.
-¿Qué pasa? - lo veo.
-No intentes buscar respuesta a lo que sea que te estés preguntando. - se levanta. - Todo tendrá respuesta, solo se paciente.
Paciencia es lo que no tengo, Cassian...
__________________________________
Okay no se que acaba de pasar pero bueno, espero que les haya gustado el cap :D
BESITOOOS
:3
|
\/