La Consejera

By LeilaRipiano

459K 49.9K 23.6K

Desde hace tres años tengo un blog llamado "La Consejera". Doy consejos sobre lo que sea, dando mi opinión y... More

La Consejera
Capítulo 1 | Anónimo
Capítulo 2 | El Individuo
Capítulo 3 | El Soborno
Capítulo 4 | Consejo Nº1
Capítulo 5 | El Plagio
Capítulo 6 | La canción
Capítulo 7 | La prima
Capítulo 8 | El gato
Capítulo 9 | El Consejero
Capítulo 10 | El profesor
Capítulo 11 | La culpa
Capítulo 12 | La cita
Capítulo 13 | La sal
Capítulo 15 | La "novia"
Capítulo 16 | La Videollamada
Capítulo 17 | El encuentro
Capítulo 18 | El cumpleaños
Capítulo 19 | El almuerzo
Capítulo 20 | La amistad
Capítulo 21 | Los sentimientos
Capítulo 22 | La cena
Capítulo 23 | El vacío
Capítulo 24 | La distancia
Capítulo 25 | La decepción
Capítulo 26 | La esperanza
Capítulo 27 | La verdad
KYLE | Capítulo 23
Capítulo 28 | El pasado
Capítulo 29 | El presente
Capítulo 30 | Las consecuencias
Capítulo 31 | La inseguridad
Capítulo 32 | La comunicación
Capítulo 33 | La idea
Capítulo 34 | La decisión
Capítulo 35 | La seguridad
Epílogo
EXTRA 🎄✨🎅🏻

Capítulo 14 | Conejos

9.9K 1.1K 528
By LeilaRipiano

Desde el robo, me he acostumbrado a pasar más tiempo en el instituto. Cuando terminan las clases no vuelvo a mi casa, sino que voy a la biblioteca del instituto para hacer tarea y todos los trabajos que debo hacer en computadora.

Lo que más extraño de mi notebook es poder entrar a mi blog libremente. Si bien puedo utilizar el celular, no tengo todas las opciones disponibles con las que cuento desde la computadora, y apenas puedo contestar algunos consejos sin que se me trabe y se me cierre la página. A su vez, estaba realmente entusiasmada con unos cambios que quería hacerle a mi blog y me entristece no haber podido llegar a hacerlos.

En teoría, no se pueden utilizar las computadoras del instituto para entrar en páginas que no son académicas, pero cuando estoy segura de que nadie está supervisando, ingreso a mi blog en pantalla incógnito y vuelvo a ser completamente feliz por unos minutos.

Pero mi verdadero salvador es Kyle, él trata de traer al instituto su computadora portátil cuando no lleva demasiado peso para prestármela y que pueda utilizar mi blog. Muchas veces la trae inclusive cuando tiene entrenamientos y su mochila explota por el peso que lleva solo para que yo pueda usarla. Siempre le digo que no lo haga, que me siento muy agradecida pero que no hace falta y que va a terminar teniendo escoliosis, pero él no me hace caso.

Hoy es unos de esos días en los que él me ha dejado su computadora antes de ir entrenar, así que estoy en la cafetería devorándome una dona y contestando consejos.

Ronda: Hola Consejera, me siento vacía. Muchas veces me siento sola, y por más de que tengo familiares y amigos a mi alrededor, no logro sentirme comprendida. ¿Qué puedo hacer?

La consejera: ¡Hola! Completamente sola jamás estarás, porque tienes a la única persona que necesitas: a ti misma. Tal vez lo que necesitas es fortalecer la relación que tienes contigo, disfruta de estar sola, sácale provecho a esa "soledad" que sientes, tal vez la respuesta no está en los demás sino en ti. Busca dentro de ti qué es lo que falta, con qué puedes llenar ese vacío, estoy segura que hay mucho potencial en ti y puedes encontrar algo que te pueda llenar y hacer sentir bien, alguna motivación. No tiene por qué ser una persona específicamente.

Siempre vas a tener a alguien que te quiera, eso no lo dudes, nunca estarás sola. Tal vez sientas que no te entienden respecto a tus problemas o situaciones de vida, pero piensa cuantas veces han tenido gestos buenos hacia ti y en esos momentos que te sentiste acompañada. Si realmente sientes que estás rodeada de personas equivocadas, analiza tus relaciones y trata de cambiar tu entorno. Tarde o temprano encontrarás a alguien que te comprenda, pero en el fondo espero que sepas que no la necesitas realmente y la única aprobación que necesitas es la tuya.

Cuando las cosas cambian dentro de ti, empiezan a cambiar las cosas alrededor de ti.

También podrías pensar en hablar con un profesional, si tienes la posibilidad. Te ayudarán mucho más de lo que podría hacer yo, pero de todas formas estoy aquí si quieres seguir hablando. ¡Suerte! 

Envío el mensaje y paso al siguiente chat.

Ana: ¿Cómo hago para entrar en una relación y no sentir miedo a que la otra persona me lastime, a no lastimarlo? ¿Qué pasa si lo echo a perder, si las cosas salen mal? No sé si animarme, no sé si la otra persona me quiere de verdad. 

Sonrío porque me recuerda a la conversación que tuve con Jean sobre su miedo a intentarlo con Lily.

Vaya, tal vez Sam es la mismísima Jean.

La Consejera: es normal que tengas miedo a entrar en una nueva relación, pero creo que no tienes que buscar no sentir miedo, sino hacerlo a pesar del miedo. Piensa en todo lo lindo que te puedes perder de lo contrario. Si, te vas a sentir expuesta y vulnerable, y pueden lastimarte, pero también pueden quererte y hacerte feliz. Siempre hay probabilidades de salir lastimada o de lastimar a otra persona, es parte de la vida misma, pero de todas las experiencias se aprende y en el caso de que suceda vas a terminar sanando y vas a vivir otra historia. Lo importante es no condicionarte con que lo vas a echar a perder cuando todavía ni siquiera ha comenzado y falta que vivas muchas experiencias con la otra persona. Y te darás cuenta enseguida si la otra persona realmente te quiere, no por lo que dice sino por sus acciones hacia ti, y recuerda que todos los días uno sigue conociendo a la otra persona y ese cariño puede seguir creciendo.

Anímate. Si, todo puede salir mal, pero también todo puede salir muy bien.

Leo el próximo mensaje y suspiro porque me hace acordar a Kyle.

Jack: Necesito un consejo. Mis padres se están separando y no paran de discutir, no sé cómo hacer para que no me metan en el medio y respeten mis propias decisiones. Sé que quieren lo mejor para mí, pero el odio que se tiene entre ellos parece que hace que se les olvide que soy su hijo y que sus acciones me lastiman.

La Consejera: creo que en estos casos no debes olvidarte que quieren lo mejor para ti, pero aún así siguen siendo personas que se equivocan e inevitablemente pueden decir o hacer cosas hirientes hacia ti. A menudo es muy doloroso y difícil llevar a cabo una separación, y aún más con hijos de por medio. Mi consejo es que seas comprensivo, pero aun así trates de ponerles limites cuando quieran meterte en el medio de sus peleas o que tomes una postura. Tú no tienes por qué elegir el lado de tu madre o tu padre específicamente, puedes tener tu propia opinión y coincidir o no estar de acuerdo con alguno de ellos, pero eso no quiere decir que quieras más a uno que a otro y ellos tienen que tener en claro eso. Es difícil cambiar las actitudes de nuestros padres, la mayoría de las veces no se logra, pero lo que si se puede lograr es trabajar en ti para que sus acciones y lo que digan te afecte lo menos posible, no es algo fácil y lleva práctica, pero trata de desvincularte de las situaciones que ellos te imponen cuando puedas, pon límites y sé firme. Al principio tal vez no te hagan caso, o lleve tiempo, pero si tienes una postura firme, tarde o temprano tu padre va a entender que eres su hijo y eres una persona independiente de tu madre y viceversa, sus problemas los tienen que arreglar entre ellos.

Fuerza, recuerda que todo es temporal y no estarás en esa situación por siempre.

Lo envío y sigo tomando mi café. Sé que todas estas situaciones son difíciles, y no es fácil aplicar la teoría a la práctica. Todo es a prueba y error, y siempre hay que hacer lo que uno siente y lo que uno puede dadas las circunstancias, pero espero que por lo menos ellos puedan encontrar en mi alguien con quien hablar y aunque sea descargarse.

Algunos de ellos me responden y seguimos manteniendo una conversación hasta que unos dedos tocan mi hombro y yo me doy vuelta, sin encontrar a nadie. Cuando vuelvo la cabeza hacia la pantalla, me encuentro a Kyle listo para darme un susto de muerte.

―Bu ―dice y yo no puedo evitar lanzar un gritito agudo.

Lo saco de en medio de la pantalla, maldiciendo.

―¿Hacia falta asustarme? ―pregunto y veo indignada como agarra mi taza y se termina mi café― ¡Kyle! Si no me estuvieras prestando tu computadora, ya te habría hecho escupir ese café.

Observo como tiene el cabello húmedo y huele a shampoo luego de haberse duchado después del entrenamiento. Sigue vestido con ropa deportiva, con unos shorts que le llegan hasta la rodilla y una camiseta bordo con el nombre de un basquetbolista que no conozco. Sus ojos negros me devuelven la mirada con un brillo de picardía. Se sienta en frente de mí y estira sus musculosos brazos, emitiendo un leve gruñido de dolor cuando escucha su cuello sonar.

―Amy ―dice―, sé que en el jardín no has aprendido a compartir como yo, pero no hace falta que seas así de violenta. ―Niego con la cabeza y vuelvo a prestarle atención a mi blog―. ¿Ya me has contestado mi consejo?

Frunzo el ceño.

―¿Cuál?

―He pedido un consejo de cómo sacar a bailar a mi hermosa cita de esta noche sin pisarle los pies y que tengamos que salir corriendo al hospital.

Resoplo.

―Te diría que no la saques a bailar porque me dan miedo los hospitales.

―Créeme, te darán más miedo mis movimientos cuando los veas.

Austin se deja caer en la silla vacía a mi lado.

―¿De qué hablan?

Él también tiene el pelo húmedo. Su cabello rubio luce más brilloso y noto que se ha puesto perfume. Me sonríe cuando lo miro y yo le devuelvo la sonrisa.

―De lo mucho que le gusta a Amy besarte ―le dice Kyle y giro mi cabeza con brusquedad hacia él.

―¡Kyle! ―me quejo― Estábamos hablando de todo el alcohol que deberé tomar para soportar esta noche.

Finalmente había aceptado ayudar a Kyle y hacerme pasar por su cita esta noche en la fiesta que hará uno de los jugadores de Doover y donde estará Jess.

―Estoy seguro que no será para tanto ―me anima Austin.

―¿Tú irás? ―me atrevo a preguntarle.

No me había detenido a pensar en lo extraño que sería actuar que estoy con Kyle mientras Austin lo presencia. Si bien no tenemos ningún tipo de compromiso y tan solo estamos dejando que las cosas fluyan entre nosotros, no me sentiría cómoda con él mirando.

―No ―responde―, hoy es el cumpleaños de mi madre.

Puedo ver por el rabillo del ojo como Kyle gesticula "Tu suegra" en silencio, pero yo no le hago caso.

―Oh, espero que la pasen muy bien ―digo.

Austin y yo nos miramos sin decir nada.

Kyle carraspea y se levanta de su asiento, lo miro.

―Yo ya debería ir a buscar a mi hermano a su entrenamiento, en un rato vuelvo.

Y acto seguido se va dejándonos solos.

―Yo también debería irme ―dice Austin.

Vuelvo la cabeza para verlo y él me agarra del rostro con ambas manos y se inclina para besarme. Me da un beso sin prisa, sin importarle que estamos en la cafetería del instituto y que hay gente que nos puede estar mirando. Yo le correspondo el beso, pasando mis manos por sus mechones húmedos, acercándolo más a mí.

Jamás sentí mi corazón acelerarse al besar a un chico, ni creo en que eso pueda sucederme, pero aun así disfruto la sensación de besar a Austin. Es un sentimiento agradable, nuevo y definitivamente placentero.

Cuando nos separamos, sonrío.

―¿Y eso por qué ha sido? ―murmuro.

―Para que no te olvides lo mucho que te gusta besarme, yo te aseguro que no lo haré

――――――――――――

Estoy toda la tarde en pijama en el sillón, pasando tiempo con mi familia y comiendo como si no hubiera un mañana. Hago videollamada con Lily que está en la misma situación que yo, salvo que ella detesta ponerse el pijama si no se irá a dormir. Lo cual me parece absurdo y creo que debería ser uno de los siete pecados capitales de la Biblia, pero ya estoy harta de discutir con ella al respecto.

A las nueve de la noche el timbre suena y Ratón y yo miramos hacia la puerta, yo confundida y él moviendo la cola.

―¿Kyle no venía a buscarte diez y media? ―pregunta mi hermana y yo asiento.

Me acerco para abrir la puerta. Por la mirilla logro distinguir a Kyle de espaldas. Suspiro y miro hacia abajo, mi pijama es de felpa y tiene estampado dibujos de conejitos con zanahorias, si no fuera Kyle correría a cambiarme de la vergüenza.

Abro la puerta y él se da vuelta. No puedo evitar sorprenderme. Se ha puesto unos jeans negros con unas zapatillas blancas, tiene una camisa azul marino arremangada hasta los codos. Su cabello castaño levemente ondulado le cubre la frente, rozando sus cejas que enmarcan unos ojos que me miran entre curiosos y divertidos. Bajo la mirada hacia sus manos... donde tiene un ramo de rosas rojas.

―¿Eso es para Jess? ―pregunto desconcertada.

―Son para ti ―me dice, con una media sonrisa, pero yo sigo pasmada y su sonrisa flaquea―. Oh no, espero que no seas de las personas que odian las flores y piensan que es un gesto cursi y estúpido. ¡O peor! Que les recuerdan a los funerales, porque Amy, te juro que está no es una indirecta de que terminaras en el hospital, ¡realmente he estado practicando mis pasos de baile!

Escucho pasos detrás de mí y salgo de mi estupor, aceptando las flores.

―¿Cuáles son tus intenciones con mi hija? ―escucho preguntar a mi padre.

No sé por qué, pero a mi padre le gusta incomodar a los invitados, lo mismo hacía con Dylan las primeras veces que venía a nuestra casa. Y a pesar de que yo sé que está bromeando, Kyle parece no darse cuenta y endereza su espalda sin romper el contacto visual con mi padre.

―Mis intenciones...yo... espero hacerle pasar una velada magnifica, danzar un poco ―dice y yo abro mucho los ojos al escucharlo hablar como si estuviéramos en el siglo diecinueve―. Todo legal ―aclara―. Bueno, es cierto que he traído una botella de alcohol ―indica levantando su mano izquierda, había estado tan sorprendida por las flores que no me había dado cuenta que tenía una botella de alcohol en la mano― lo que no es ilegal, aunque en teoría no tenemos edad legal para tomar, pero por lo menos no estamos tomando otras sustancias como―

Lo interrumpo antes de que mi padre se horrorice más de lo que ya está.

―¡Kyle me ha regalado flores! ―digo de repente.

―¿Qué tipo de flores? ―inquiere mi padre asustado, pero yo le pongo en su cara las rosas que Kyle me ha dado.

Nos quedamos en silencio y afortunadamente aparece mi madre.

―¿Qué hacen todavía en la puerta? ¡Siempre les digo que abran y cierren! Dios, así nos desvalijaran la casa. ¡Hola Kyle! ―lo saluda una vez que cierro la puerta y él entra―. ¡Pero que bellas flores! ―exclama y las toma de mi mano―. Voy a ponerlas en agua.

―Claro, la botella de alcohol es invisible ―murmura mi padre y la sigue.

―Gracias ―le digo finalmente a Kyle y le doy un abrazo que lo toma por sorpresa.

―No me esperaba esa reacción ―murmura riéndose y abrazándome más fuerte.

―Yo tampoco me esperaba que me regalaras flores ―contesto.

Cuando nos separamos nos damos cuenta que Maia sigue en el sillón. Está comiendo nachos con Ratón en su regazo. Mi hermana nos mira fijamente a nosotros mientras mi perro mira fijamente los nachos.

―¿Tú no estabas mirando tu serie? ―le cuestiono.

―Iba a empezar otro capítulo, pero la secuencia que acabo de ver es más interesante.

―¿Qué serie estás viendo? ―pregunta Kyle, pero yo la corto antes de que diga el nombre.

―Realmente no quieres saberlo, vamos.

Lo arrastro hasta mi habitación.

―Serás el alma de la fiesta, conejito ―comenta Kyle una vez que cierro la puerta. Él deja la botella de alcohol en mi mesa de luz junto a mi calcetín de conejo―. Parece que tienes una obsesión. Pero bueno, me encanta saber que yo me he puesto lindo exclusivamente para mi cita y ella no se preocupo por ponerse un pijama que no tuviera una mancha de salsa ―indica señalando una mancha en mi pecho.

Me siento culpable, pero igual me defiendo.

―Tú me has dicho que pasarías por mí en una hora y media ―replico―. Me he bañado, solo me falta cambiarme y producirme un poco.

Él se saca las zapatillas y se acuesta en mi cama.

―Pensaba que sería divertido tomar algo antes de que vayamos a la fiesta, creo que lo necesitaré.

―Sí ―concuerdo―. Necesito mucho alcohol en la sangre si voy a tener que besarte.

Kyle se incorpora de golpe, mirándome ofendido.

―¿Tan horrible te parezco? ―inquiere indignado―. Lo decía porque no sé como voy a reaccionar al ver a Jess y espero no verla con otro chico, pero ahora tengo la autoestima por el piso y voy a tener que estar muy borracho para olvidar tus palabras.

Me río por su dramatismo.

―¡No pongas palabras en mi boca que no he dicho! ―exclamo abriendo mi armario para decidir que ponerme.

―¿Te parezco atractivo? ―pregunta y yo lo miro ante el tono serio de su voz. Él me está mirando con una ceja levantada, esperando una respuesta.

Y es entonces cuando debo admitir que al abrir la puerta no solo me sorprendí por las flores. Kyle está tan atractivo que me dan ganas de hacer que Jess y él estén frente a frente y gritarle a ella ¡Qué importa si te engañó mujer, mira este rostro y este cuerpo!

Pero desde luego no voy a decirle eso a él.

―Sabes que eres atractivo ―le digo en cambio, pero él no parece conformarse.

―Mi pregunta es si soy atractivo para ti.

Me lo quedo mirando por un instante antes de contestar.

―Esta noche lo descubriremos.

Kyle se ríe por lo bajo y decide dejar ir el tema. Agarra la bebida alcohólica de la mesita y me mira indeciso.

―Debería ir a buscar dos vasos.

Le saco la botella de la mano y le doy un largo trago que hace que mi garganta escueza.

―¿Realmente los necesitamos? ―pregunto.

Él me mira boquiabierto.

―No, supongo que no los necesitamos.


-----------------

Hola!

Muchas gracias por todos sus comentarios y votos!!

Y gracias a todas las personas que pidieron algún consejo en el capítulo anterior, van a seguir apareciendo partes así en más capítulos, así que todavía pueden ser incluidos.

Instagram: @leilaripiano

Besos ❤❤

Continue Reading

You'll Also Like

352K 22.8K 37
[SEGUNDO LIBRO] Segundo libro de la Duología [Dominantes] Damon. Él hombre que era frío y calculador. Ese hombre, desapareció. O al menos lo hace cu...
7.9K 475 12
Esta es la historia oficial de "Alex"
417K 4.1K 2
Él es el diablo, pero ella carga consigo todas las perversas tentaciones. *** La deportación le respira en la nuca y aparentemente la única salida es...
112K 10K 71
Júlia Fort García es la hermana mayor del joven lateral del Fc Barcelona Héctor Fort,el club invita al equipo a un partido de la sección femenina,est...