-Ayúdanos, Thalia. - se acerca mi hermana.
-No, aquí estoy bien. - digo sentada en el sofá.
-Bien, pero no dormirás arriba. - dice y me levanto de golpe.
-¿Qué? Estás loca. - ruedo mis ojos.
-Convive con nosotros, Thalia, no te pasará nada. - me da unos golpesitos.
No lo se, Rick.
Bufo y subo las escaleras para bajar almohadas y sábanas para hacer camas en el suelo. Ellos también traen cosas para dormir en el suelo, pero no almohadas. Bajando, Cassian me espera en las escaleras.
-Hola, quizás...
-No. - lo interrumpo y le doy las sábanas.
Voy a ayudar a Zara y a dar las demás almohadas. Ellos acomodan sus camas y yo la mía.
Se me hace ridículo que tenga que dormir abajo ya que ellos no son mis amigos, son los de mi hermana, pero bueno, ya no puedo decir que no. Ya estoy aquí abajo y ya hice mi cama, así que ya no hay vuelta atrás.
Subo a mi recámara para buscar una pijama para usar, me decido en un conjunto de blusa blanca lisa y unos pants negros y mis calcetines negros. Si, me gusta andar descalza en la cabaña.
Salgo de mi recámara y veo la puerta de Zara entreabierta y veo a alguien cambiándose, supongo que es Zara. Camino para abrir la puerta, pero veo a Zara subir.
-¿Qué haces? - me ve divertida.
-Creí que estabas... Que estás... - señaló su puerta y me alejo.
-Es Cassian, se está cambiando. - arquea la ceja. - ¿Estabas espiando?
-Dios, no, no soy así Zara. - digo nerviosa. - Yo...
Giro mi cabeza y se abre la puerta dejando ver a Cassian sin playera.
-Yo, me voy. - digo y me voy de ahí.
Bajo las escaleras lo más rápido que puedo y veo a Xam usando su celular. Al menos solo esta él, no es como que los demás me caígan mal, pero Xam es el más calmado.
-Thalia, te ves tan... - sale Aslan del segundo baño.
-Tan normal. - sonrío. - No quería...
-¿Verte sexy? - me ve aguantando la risa.
-Iba a decir que me diera frío, pero okay. - pasó de él y me siento en mi cama improvisada.
-No se que sea, pero te ves muy bien. - sonríe Aslan.
-Ey, relaja tus hormonas, príncipe encantador. - se levanta Xam del sillón.
-¿Qué? - Aslan lo ve. - Es linda, como para una noche, pero ya sabes a quien quiero. - le guiña el ojo.
Xam rueda sus ojos y yo me río, pero no se a quien se refiere. Alzó la mirada y veo a Azalia y a Zara bajar las escaleras y detrás de ella viene Cassian. Ambas traen unas pijamas de un short y un crop top de tirantes, claro, exponiendo de más.
-Esa sí es una pijama, Thalia. - me dice Aslan.
-Visto. - le alzó el pulgar y el rueda sus ojos.
Ya que todos bajan me acuesto en mi cama y me tapo. Los demás hacen lo mismo pero antes se ponen a hablar y claro, yo de asocial sin hablarle a ninguno de los creepys de esta cabaña.
Tarde más en despertarme en la madrugada que dormirme con todo el ruido que hacían los demás.
Me levanto cautelosamente para ir a la cocina a tomar algo o comer algo, quizás sea eso. Voy a la cocina y prendo la luz, abro el refri y veo que hay mucha comida pero no hay leche. Leche es lo que necesito, necesito lactosa ahora.
-¿Qué eres? ¿Drácula? - oigo una voz masculina y ronca.
Doy un salto. - No hagas eso ya. - ruedo mis ojos.
-Perdón, Drácula. - alza sus manos. - ¿Insomnio?
-Si. - Cassian se recarga en la barra y yo me acerco.
Quedamos en silencio, pero me tomó el tiempo para observarlo. Ahora si trae camisa, su pelo ondulado esta alborotado y esta jugando con sus manos.
-¿Sabes lo de la llamada que hizo mi hermana? - suelto.
-Si, pero yo soy chismoso. - ladea su cabeza. - Además, no es de mi incumbencia y mucho menos la tuya.
-Molesto, raro y misterioso pero sabes que guardan secretos. - me recargo enfrente de él. - Vaya.
-¿Misterioso? - sonríe.
-Que el ego no se te suba. - ruedo mis ojos.
Cassian se ríe y su risa me contagia. No me doy cuenta que deben de ser las dos de la mañana y estoy riéndome con Cassian en la cocina mientras que los otros están durmiendo en la sala.
-¿Eres legal? - Cassian cambia de tema.
-¿Legal? - arqueo una ceja divertida.
-Si, si eres mayor de 18. - rueda sus ojos.
-¿Y quieres saber por qué...?
-Nada más, es solo curiosidad, Becker. - se muerde su labio.
-Si tengo 19, yo supongo que lo soy. - lo observo. - ¿Y tú?
-21 años, bebé. - me guiña un ojo. - Lo que quieras hacer conmigo, con mucho gusto, Becker.
-Paso. - me alejo y me apoyo en el fregadero que esta atrás de mi.
-Te diré Becker, al menos hasta que encuentre tu apodo. - se acerca a mí.
-¿Y yo como te digo? - veo que esta a centímetros.
-Dime Piers, Becker. - alza mi rostro.
-Creí que tu apodo era... ¿Qué? ¿Choco chip? - lo veo y se aleja riendo.
-Deberías averiguar por qué me llaman así. - pasa su lengua por sus dientes.
-Repito, paso. - me cruzo de brazos.
-No te resistirás. - se cruza de brazos.
-Tu no te resistirás, estoy segura de que quieres besarme y supongo que hasta hacerme más. - me acerco y otra vez quedamos a centímetros.
-Hagamos algo, si tu me besas primero gano. - hace una pausa. - Y si yo te beso antes, lo cual dudo, tu ganas. ¿Qué dices, Becker?
-Esos son juegos tan idiotas de tu parte, Piers. - ladeo mi cabeza.
-Tienes miedo a perder. - estamos muy cerca.
-No, no quiero romper tu ego, solo eso. - paso por su lado. - Descansa, Piers.
Salgo de la cocina con una sonrisa de victoria que no puedo quitarme de mi rostro. Me acuesto en mi supuesta cama y memorizo su rostro. Su labios estaban tan rosados, algo tan tentador, pero el orgullo es muy grande y no lo besaré porque él lo hará antes.
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Otro cap beibis :D
BESITOOOS
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