Un grito de frustración resonó en todo el tercer piso del edificio, las personas en el lugar brincaron en el aire asustadas y se dirigían miradas de preocupación. Desde temprano aquel día, el director Kim había entrado bufando a la compañía, había gritado que no quería interrupciones antes de cerrar de un portazo la puerta de su oficina, un par de horas después había llegado Christopher Bang alegando que tenía una reunión de emergencia con el director, sin esperar respuesta, había interrumpido en la oficina y ahora sólo se escuchaban los gritos del director Kim, todos los que estaban fuera de la oficina se hacían la misma pregunta, ¿qué habría pasado para que el director le gritara de aquella forma al actor?
―¡Dijiste que harías un buen trabajo! ―gritó Woojin con la cara roja por el enojo.
―Es un gran trabajo...
―¡Sí, un gran trabajo para un novato! ¡Pero esto de tu parte de una completa mierda!
―No puedo comprender por qué estás de mal humor ―respondió tranquilo sin alterar su fría expresión.
―¿Por qué? ¿¡PORQUÉ!? Realmente me estás preguntando por qué ―gritó exasperado―. Mira esto...
Woojin le extendió a Christopher su celular, el actor lo tomó y observó lo que el director le mostraba.
Christopher observó a detalle las publicaciones de Lee Know buscando cuál podría ser la molestia real del director. Todos el elenco tenía aprobación para publicar las imágenes después de la conferencia, así harían mayor publicidad entre sus Fans y al aparecer el castaño se había tomado todo muy en serio pues hasta las fotos teaser con él había subido, pero no había publicado nada extraño ni siquiera un pequeño spoiler.
―Sigo sin entender que te enoja tanto. Las fotos individuales salieron bastante bien, cada uno logró demostrar las personalidades de sus personajes, y las publicaciones no tienen nada importante que merezca atención.
―¿Estás ciego o sólo quieres molestarme? ―Woojin le dio vuelta a su escritorio hasta ponerse al lado del actor― Mira más a detalle esto.
El director le dio click a una de las publicaciones.
Christopher observó aún más la publicación esperando que algo no estuviera bien, pero sin lograr entender del todo, la imagen era limpia, buena iluminación, el vestuario, maquillaje y peinado estaban pulcramente ordenados, qué diantres quería el director Kim. Su paciencia estaba llegando al límite y se terminaría muy pronto si continuaba gritando.
Woojin no pudo soportar más, la cara inexpresiva del australiano para él significaba que no estaba entendiendo cuál era el defecto de esas fotografías.
―¡El maldito problema aquí eres tú! ―dijo exasperado.
―¿Disculpa? ―preguntó incrédulo entre cerrando los ojos―. A pesar de las diferencias de edades, de verdad me veo como un estudiante y nadie notaría que tengo diez años más como para estar en el último grado.
―Si tuvieras la apariencia de una persona de veintiocho años jamás te habría contratado como protagonista para un drama juvenil ―espetó sin más―. Tu propio egocentrismo y superioridad te impide ver más allá de tu propia nariz...
―Detente ahí con tus insultos, yo no vine aquí a escucharte criticar mi trabajo...
―Lo critico por que yo soy el director y tu contrato es exclusivo para interpretar a un estudiante enamorado, ¿ves a un hombre enamorado en esas fotos? Por que yo no lo veo, veo a un par de amigos posando para una foto, ni siquiera hiciste algo por tener contacto físico, de no ser por Lee Know que se apoyaba en ti o te abrazaba, estas serían las peores fotos promocionales de un drama, ¿cómo es posible que un novato haga mejor trabajo que tu? ―recriminó.
Christopher tensó la mandíbula, dirigió su mirada a las fotos nuevamente. Puede que Woojin tuviera ligeramente razón, no se veía ni medianamente enamorado, ni siquiera había chispas de atracción, eran dos buenos amigos disfrutando la compañía del otro, pero sólo amigos que nunca llegarían a ser pareja. ¿Cómo no lo había notado antes?
―Tampoco todo es tu culpa, también es culpa del inepto fotógrafo que no pudo corregir esto. ¿En qué mundo un drama BL se representa de esta forma? Los Fans y medios han hecho críticas positivas pero las críticas negativas están haciendo estragos, no puedo permitir que esto se siga repitiendo. ―regresó a su asiento y se sostuvo la cabeza con las manos, parecía al borde de un colapso― Mi drama está pensado para ser una obra maestra que revolucione el mundo de los dramas y no pienso dejar que lo arruinen. Cumplí tu capricho de probar al novato, él superó las expectativas de ambos, y no hagas esa cara, no estoy inventando nada aunque no lo quieras admitir.
Señaló a Christopher mientras hablaba, el rubio hizo una mueca de desacuerdo pero no dijo nada, se limitó a fruncir los labios y mirar directo a los ojos al director.
―Es un milagro que Lee Know aceptara el reto y no nos demandara por incumplimiento de contrato ―resopló―. He revisado cada uno de los dramas románticos en los que has participado, y en ninguno pudiste trasmitirme un sentimiento real de amor a través de tus personajes. Has hecho un increíble trabajo para ocultar eso con tus otras habilidades artísticas y el público lo ha pasado por alto, pero está ocasión no será igual, cómo director te exijo que soluciones tus problemas personales y el set me des algo más que esta mierda ―exigió señalando su teléfono―. Si no eres capaz de transmitir algo con lo que yo esté satisfecho, ten por seguro que arruinaré tu carrera y la de tu hermano...
―¡¿QUÉ?! ―gritó Christopher levantándose de su asiento―. ¿DE QUÉ ESTÁS HABLANDO?
―Por fin veo una emoción en ti ―Woojin sonrió de medio lado―. Sé que tienes un hermano en el mundo del espectáculo, aún no sé quién es, pero lo averiguaré, y te juro que si no haces tu mejor esfuerzo, se pueden despedir del mundo del espectáculo, me conoces bien y sabes que lo haré, por más famoso que seas soy un director respetado y te contaré un secreto ya que sé el tuyo ―rió maliciosamente―. Soy el hijo único del CEO de Stray Kids Entertainment, empresa para la cual laboras, si no quieres que tus doce años de carrera se vayan a la mierda, te recomiendo empezar a actuar según mis exigencias.
Christopher frunció el ceño, sabía desde hacía años que Woojin era alguien importante en el mundo del espectáculo, pero jamás le había cruzado que el CEO Kim sería el padre de ese director, no se parecían en nada, pero no dudaba que el padre haría lo que fuera para complacer a su hijo. A su mente llegó el caso de un actor que trabaja en la misma empresa que él, el actor se había relacionado románticamente con Woojin, después de meses de noviazgo y fama por parte del actor, le había sido infiel al director y misteriosamente al día siguiente del escándalo, el actor había sido despedido y nunca más se había vuelto a ver en aquel mundo. El australiano pensó que había sido despedido por el escándalo, pero ahora aquel misterio ya no lo era, definitivamente Woojin era bastante poderoso en aquella industria y haría lo que fuera por conseguir lo que quería y él no sería la excepción.
La cara sonriente de Jeongin apareció en su mente, el recuerdo de cuando niño le había expresado que se convertiría en actor como él y que llegaría a ser famoso para poder actuar juntos, le martilló con fuerza la cabeza. Él haría lo que estuviera en sus manos para que su hermano cumpliera sus sueños, nadie se interpondría en ellos, ni él mismo.
―No sé qué clase de entrenamiento tendrás que hacer, pero tu suerte y la de tu hermano está en tus manos...
―Tendrás lo que quieres, pero si te metes con mi hermano, conocerás mi ira ―sin esperar nada más devolvió el teléfono y salió lo más rápido que sus pies le permitieron de aquella oficina.
Christopher salió bufando, cuando llegó al ascensor, tomó su teléfono rápidamente y marcó a su hermano. Él sacrificaría cualquier cosa por el bien de su familia, lo había hecho hacía 15 años, lo volvería hacer ahora.
~✯★✯To Be or Not to Be?✯★✯~
Eran pasadas las ocho de la noche, Minho se encontraba en su camerino quitándose el maquillaje, acababa de terminar unas cuantas grabaciones para el drama junto a Félix y Hyunjin pero tan pronto terminaron salió huyendo del set, no había vuelto a hablar con ambos chicos desde la fiesta y los evitaba adrede, sabía que tarde o temprano tendrían que hablar con ellos pero él aún no se sentía con ánimos para enfrentarlos. Durante esa semana había hecho varias grabaciones con diferentes actores, aún no grababa ninguna escena con el australiano así que sólo se habían visto en la conferencia de prensa, intercambiado unas cuantas palabras y nada más. Tampoco había vuelto a ver a Jeongin, sus escenas aún no eran en conjunto, pues Jeongin interpretaba al mejor amigo de Jongwoon.
Antes de terminar de poner sus cosas personales en su bolso y regresar a casa, su manager tenía que volver a la oficina a recoger unos papeles, por lo que le dio indicaciones sobre tomar un taxi.
El día siguiente tendría libre pues era domingo y el lunes debía madrugar para el famoso viaje a Oncheon, donde estarían casi un mes haciendo grabaciones.
Minho tomó su celular y comenzó a revisar sus redes sociales, sonrió con satisfacción al ver una publicación de Changbin.
La conferencia de prensa había sido todo un éxito, habían presentado al elenco, habían respondido preguntas hasta las incómodas, cómo si antes habían besado a alguien del mismo sexo, Christopher había logrado evadir las preguntas con respuestas inteligentes y una que otra broma. Minho no había podido evitar sentir cómo su estómago se revolvía al pensar en besar al australiano, por eso a la hora de las fotografías de la conferencia no se había situado al lado del actor para evitar todo contacto.
El castaño aún revisaba las publicaciones cuando recibió un mensaje de texto de Jeongin. Lo abrió para poder leerlo.
«Hola Min Min!!! Espero ya hayas terminado las grabaciones, tengo algo que contarte! ¿No te molesta si por casualidad le di tu... »
Minho no pudo terminar de leer el mensaje, cuando una llamada de un número desconocido apareció en su pantalla.
―¿Hola?
―¿Lee Know? ―preguntó una voz varonil.
―¿Con quién hablo?
―Soy Christopher.
―¿Christopher? ―preguntó extrañado, no recordaba haberle dado su número telefónico al actor―, ¿Christopher Bang?
―Sí.
El corazón de Minho comenzó a latir con fuerza, jamás en sus locos pensamientos había imaginado al australiano llamándolo. Cerró sus ojos para concentrarse en la voz del actor.
―¿Cómo conseguiste mi número telefónico?
―Se lo pedí a Innie...
Así que el pelinegro andaba por ahí dando su número, luego cruzaría unas cuantas palabras con Jeongin, aunque fuera hermano de Christopher, no tenía derecho a compartir su número sin permiso.
―Pero no te enojes con él, lo obligué a dármelo, es una emergencia...
―¿Emergencia? ¿Estás bien? ―preguntó ahora preocupado.
―Sí pero necesito tu ayuda...
―¿En qué te puedo ayudar?
―¿Podrías venir a mi apartamento? Te enviaré la dirección por mensaje de texto...
―¿A tu apartamento? ―deseó que su voz no sonara tan chillona en ese momento―, ¿Ahora?
―Si, ahora...
El australiano sonaba un poco alterado, definitivamente algo sucedía.
―Está bien, iré inmediatamente ―dijo no muy seguro de estar haciendo lo correcto.
―Cuando llegues a recepción solo di que eres el invitado del señor Bang, ¿entiendes?
―Invitado del señor Bang... ―Sonaba tan pretencioso―. Ok, estaré ahí tan pronto tenga tu dirección.
―Ok... ―fue su única respuesta antes de terminar la llamada.
Minho alejó el teléfono de su oreja observando distraídamente la pantalla. Acaba de hablar con Christopher Bang, le había pedido ir a su apartamento, ¿sería una broma pesada?
Mientras le daba vueltas a lo ocurrido, su teléfono vibró avisándole la llegada de un nuevo mensaje, sin pensarlo lo abrió y ahí estaba la dirección.
―Disculpe señor, ¿cree que me pueda llevar a otro lugar? ―dijo Minho lo suficientemente alto para que el conductor le escuchara.
―Claro joven, ¿cuál es la nueva dirección? ―respondió amablemente el conductor observándolo por el espejo retrovisor.
― A Seocho, por favor.
El conductor levantó sus cejas y silbó en asombro.
―Es una gran zona...
―Lo es.
―¿Su pareja?
Las mejillas de Minho adquirieron un intenso color rojo, el conductor rió por la expresión del castaño.
―Es un... «¿Qué era Christopher?» ... Un amigo... Creo...―se aclaró la garganta―. Tiene una emergencia, ¿podría llevarme ahí lo más rápido posible?
―Sí joven, estaremos ahí en menos de veinte minutos.
―Gracias.
Luego de eso, Minho no volvió a conversar con él conductor hasta que llegó al edificio donde Christopher vivía. Gran zona no era la palabra correcta, el lujo era tan palpable en aquel lugar, algo que Minho soñaba en un futuro incierto.
Después de pagar por el viaje, se dirigió a la recepción donde una amable y uniformada mujer le atendió.
―Buenas noches ―dijo la mujer―, ¿En qué le puedo ayudar?
Minho se aclaró la garganta antes de hablar ―Eh.. Sí, buenas noches... Soy el invitado del... Del señor Bang... ―arrastró cada una de las palabras.
―¿Señor Lee? ―cuestionó sonriendo.
Minho asintió con la cabeza, observó alrededor nervioso, sentía como si estuviera haciendo algo indebido, cómo si estuviera llegando a hurtadillas a la casa de su amante; rogaba que no hubieran paparazzis cerca o aquello sería una buena noticia al día siguiente.
―El señor Bang lo espera. Tome el elevador y suba hasta el penthouse, la puerta negra es la de la residencia del señor Bang ―la mujer señaló hacia donde se ubicaba el elevador.
―Gracias ―hizo una leve reverencia y se dirigió al lugar señalado.
Al entrar al ascensor, presionó el botón de penthouse, luego se recostó a la pared contraria a la puerta y comenzó a mover uno de sus pies. Se sentía nervioso y confundido, qué podría necesitar Christopher de él, si realmente fuera algo serio o una emergencia verdadera definitivamente no lo llamaría a él como primera opción. ¿Debería haber llevado algo de comer? ¿Jeongin sabría qué ocurría? ¿Debería haberlo llamado primero antes de subir? Bueno ya era muy tarde para todo aquello.
El sonido de la puerta abriéndose le indicó que había llegado al piso correcto, salió y buscó la puerta negra, la divisó al final del pasillo, caminó a ella y antes de tocar, respiró profundamente un par de veces. Escuchó el sonido del cerrojo siendo abierto y la puerta se abrió.
En el umbral de la puerta estaba Christopher, vestía un buzo negro al igual que una camiseta negra sin mangas dejando a la vista sus trabajados brazos, llevaba una toalla sobre el cuello y el cabello mojado, parecía recién salido de la ducha, el fuerte y agradable olor a chocolate inundó las fosas nasales de Minho. Conectó su mirada con los penetrantes ojos castaños de Christopher, el australiano le devolvía la mirada pero no era la mirada fría y desdeñosa de siempre, era una mirada curiosa.
―Ho.. Hola ―tartamudeó Minho.
―Pasa ―dijo Christopher haciéndose a un lado para que el chico entrara.
Minho entró al lujoso penthouse de Christopher, el lugar tenía buena iluminación, era espacioso y cada mueble o adorno estaban en perfecta armonía con todo, cada objeto combinaba entre sí dándole un toque moderno, cómodo y sofisticado, definitivamente viera por viera, aquel lugar gritaba Christopher, desde los cuadros retro hasta los finos sillones de cuero en la sala.
―Lindo apartamento ―comentó buscando la fuente de luz y abrió su boca con asombro―. ¿Eso es una lámpara de araña?
―Lo es, fue traída de Francia para mí ―presumió.
―Debes tener conocidos que te quieren mucho para traer algo tan costoso desde Francia.
―Aunque no parezca, Changbin tiene buen gusto.
―¿Fue... él...?
El australiano asintió entendiendo a la perfección lo que preguntaba el castaño.
―¿Quieres café? Acabo de preparar un poco.
―No gracias, no me gusta el café ― admitió.
―¿Chocolate, agua, vino o un refresco?
―Me encantaría el chocolate ―dijo sonrojándose al recordar el olor que desprendía el australiano.
Christopher asintió y se dirigió a la cocina dejando a Minho solo en la sala. El castaño continuó observando cada detalle de la habitación, era extraño que Christopher fuera tan amable, seguía hablando lo necesario pero ya no sonaba frío sino amable.
Al cabo de unos minutos, Christopher regresó a la sala trayendo una bandeja con dos jarras y un plato repleto de bombones de chocolate. Los depósito en la mesita en medio de la sala.
―Toma asiento ―invitó señalando uno de los sillones.
Minho tomó asiento y recibió la jarra que Christopher le tendía.
―Gracias.
―Puedes tomar los que quieras ―señaló los bombones.
Minho chilló emocionado ―¡Son mis favoritos!
Sin pensarlo dos veces, tomó uno y lo metió entero en su boca, cerró los ojos disfrutando el sabor del chocolate derritiéndose lentamente en su boca, chilló nuevamente complacido.
Christopher contempló detalle a detalle como la figura de Minho se removía en su costoso sillón, su expresión era bastante sexy, sus mejillas abultadas mientras mascaba, sus ojos cerrados con fuerza mientras relamía sus labios, era una imagen placentera de ver.
El castaño abrió sus ojos de pronto asustado, acababa de gemir, conectó su mirada con el rubio y se sonrojó completamente. El australiano lo observaba fijamente y sonreía de lado, pero no era una expresión de burla sino de satisfacción.
―Lo siento ―se disculpó tímidamente.
―Solo estabas disfrutando la comida.
Minho sonrió ―Me pediste ayuda, dijiste que era urgente, pero no te ves en medio de una emergencia.
―Es una emergencia, pero de un tipo diferente.
Minho levantó una ceja, aquello era lo más raro que había escuchado hasta el momento.
―Continúa ―incitó.
Christopher se recostó más cómodamente en su sillón, tomó su jarra llena de café y bebió un largo sorbo antes de hablar.
―El director Kim dice que no tenemos química suficiente, al parecer no lo convencemos con nuestros papeles. El lunes iniciamos las grabaciones en Oncheon pero si no somos capaces de actuar como dos jóvenes enamorados, podemos irnos despidiendo del mundo del espectáculo para siempre ―mintió un poco, ya que la amenaza había sido sólo para él y Jeongin, pero era la única manera de que el castaño colaborara con su idea sin protestar.
Minho contrajo su rostro en una mueca de preocupación, él llevaba sólo un año como actor, no podía permitir que su carrera terminara tan pronto.
―Esto... no puede ser...
―Tengo una idea para mejorar nuestra actuación pero necesito de tu apoyo, sólo no podré hacerlo.
Minho lo volteó a ver, podía notar que el rubio no mentía.
―Te escucho.
―Quédate conmigo hoy. ―Minho levantó sus dos cejas, creía haber escuchado mal, por lo que Christopher se apresuró añadir―. Hagamos un ensayo aquí, finjamos que eres Kyuhyun y yo Jongwoon, sin guiones, sólo nosotros dos viviendo la vida de ellos, necesitamos conectarnos, que ellos sean quienes nos guíen, no nosotros a ellos, ¿crees tener la habilidad suficiente para dejar tu vida y actuar todo un día como una persona completamente distinta?
Minho se mordió el labio inferior, aquella petición era bastante arriesgada, no había tiempo suficiente para practicar y si no lograban congeniar, qué deberían hacer.
―Confía en mí y en tus habilidades, ¿puedes lograrlo? ―insistió.
―Puedo intentarlo ―susurró.
Christopher sonrió ampliamente dejando ver sus hoyuelos, Minho los admiró sintiendo su estómago brincar.
―Pero... ¿Cómo lo haremos?
―Haremos una escena sencilla, sal de mi casa, y cuando vuelvas a entrar serás Kyuhyun no Lee Know, y actuaremos de acuerdo a la situación, podrás volver a ser Lee Know hasta que yo lo diga, ¿entendido?
Minho asintió con la cabeza, tenía algunas dudas pero tal vez era mejor no saber la respuesta.
―¿Tu estás bien con esto?
―Lo estoy, soy actor profesional.
Minho soltó una risa nerviosa, por alguna razón escuchar esa respuesta era doloroso, esperaba estar haciendo lo correcto.
―Ya sabes, cuando abra otra vez esa puerta, ya no serás Lee Know, ya no pensarás ni sentirás como Lee Know, serás Kyuhyun por completo.
―Y tú serás Jongwoon por completo.
Christopher sonrió de lado, Minho se puso en pie, se disponía salir del apartamento cuando el brazo de Christopher lo detuvo.
―Lo que hagamos aquí, es un ensayo entre tú y yo, nadie más lo sabrá.
Minho no pudo evitar que un escalofrío recorriera su columna, qué pasaría si se dejaba llevar por su personaje y no lograba controlarse, no quería terminar haciendo algo que no había hecho ni en su vida real, pero tampoco quería arruinar el momento. Era la primera vez que Christopher lo necesitaba, le había pedido ayuda porque creía que podía hacer algo por él, era una oportunidad única, era ahora o nunca.
―Todo será entre tú y yo ―susurró antes de salir y cerrar la puerta tras de sí.
~✯★✯To Be or Not to Be?✯★✯~
Minho se apoyó en la puerta e inspiró varias veces, tenía que concentrarse, algo dentro de él se removía nervioso, sigo haciendo el ejercicio de respiración hasta que se sintió lo mejor posible para controlarse. Cerró los ojos y repasó mentalmente su personaje.
Kyuhyun era un estudiante becado en una prestigiosa escuela, pero era tan inteligente y dedicado a sus estudios que se había convertido en el presidente del consejo estudiantil, no era tímido pero sí reservado, estaba tan dedicado a su estudio, que nunca había salido con nadie, así que era un completo ignorante en temas del amor, había conocido a Jongwoon y como compañeros de clase se habían relacionado poco a poco, habían vivido algunas experiencias juntos que los hicieron descubrir que se gustaban, pero miles de cosas los detenían para declararse su amor mutuo, especialmente por que eran dos hombres, Kyuhyun refrenaba sus sentimientos porque le daba miedo la sociedad, las críticas y el rechazo que pudiera recibir.
Minho abrió los ojos horrorizados, había olvidado preguntar en qué punto de la historia comenzarían a actuar.
―Sí debemos actuar para mejorar nuestras escenas de enamorados, puede ser que ya estén saliendo ―Minho se mordió el interior de las mejillas, jamás dejaría ese tic nervioso―. Supongo que lo descubriré cuando toque la puerta y él abra.
Respiró un par de veces más y giró hasta quedar en frente de la puerta, levantó su brazo y dio un leve toque sobre la madera negra. Esperó en silencio pero nada sonó del otro lado, tocó nuevamente con más fuerza, por sí no lo había escuchado la primera vez, pero nada, seguía sin escuchar nada.
―Vamos ―dijo para sí mismo―. ¿Por qué no abres Christo.. No... Jongwoon?
Tocó nuevamente con más fuerza mientras llamaba.
―¿Jongwoon-ssi? ¿Me escuchas? Soy Kyuhyun, ¿Estás ahí dentro?
Siguió tocando con fuerza hasta que escuchó cómo se abría el cerrojo. La puerta se abrió lentamente y Christopher apareció en el umbral con la cara empapada, la camiseta pegada al cuerpo, las mejillas rojas y respiraba con dificultad.
―¿Jongwoon estás bien? ―preguntó tomando el rostro contrario entre sus manos.
Sin previo aviso, el cuerpo de Christopher se deslizó hacia Minho. El castaño lo atrapó justo a tiempo, se sentía caliente por alguna extraña razón.
―¡Jongwoon tienes fiebre! ―exclamó.
―¿Kyu eres tú? ―logró articular con un hilo de voz.
―Soy yo, pero ¿qué te pasó?
Minho pasó un brazo de Christopher sobre sus hombros para poder entrar a la casa, tarea difícil porque el australiano pesaba más que él.
―Enfermé, ayer tuvimos práctica de fútbol y llovió, hoy no me sentí bien para ir a clases.
Ambos caminaron hasta el enorme sofá, el cual parecía más una cama que un sillón. Lentamente, Minho ayudó a Christopher a acostarse en el sofá, le levantó las piernas y le quitó las pantuflas.
―Por eso faltaste ―se dijo a sí mismo―. Estaba preocupado por eso vine a buscarte, espero no te moleste la interrupción.
Christopher le tomó una mano y sonrió débilmente.
―Tú jamás podrías molestarme, tu sola presencia me da energía.
Las mejillas de Minho adquirieron un leve color rojo. Era la primera vez que alguien le decía algo tan meloso.
―¿Quieres que te prepare algo de comer?
Christopher asintió con la cabeza.
―La cocina queda por allá ―señaló una puerta al lado contrario del sillón.
Minho se levantó en aquella dirección y entró a una amplia cocina equipada de diferentes máquinas y una sofisticada refrigeradora. Gritó de la emoción para sus adentros al ver semejante lugar, él siempre había soñado con tener una cocina amplia, ya que le gustaba cocinar. Registró cada cajón hasta encontrar los ingredientes necesarios para preparar algo para la gripe, le tomó unos quince minutos preparar un arroz blando y una sopa, encontró una bandeja, puso todo encima de ella y se dirigió a la sala nuevamente.
Encontró a Jongwoon dormido en el sillón, depositó la bandeja en la mesa y buscó con la mirada alguna manta para cubrir al rubio, localizó una sobre la silla masajeadora que daba hacia la terraza. Se acercó con cuidado al australiano y le colocó encima la manta, se iba a retirar cuando la pálida mano de Christopher atrapó su muñeca.
―No te vayas, no me dejes ―suplicó, sus ojos brillaban con mucha intensidad, Minho tragó grueso.
―No lo haré, me quedaré contigo hasta que te sientas mejor.
―Ven, solo así me sentiré mejor ―dijo levantando la manta dando a entender que quería que se acostara a su lado.
Minho se tensó, no estaba seguro si sería lo correcto aceptar la propuesta o resistir, aún no descubría en qué etapa de la relación estaban esos dos.
―No me vuelvas a rechazar, solo no me quiero sentir sólo ―dijo haciendo un tierno puchero ― solo estamos tú y yo solos, nadie más nos ve, no me alejes...
La mente de Minho conectó ideas, probablemente Kyuhyun ya había rechazado a Jongwoon por temor a ser criticado a pesar de sentirse atraído por el rubio. Fingió que pensaba y valoraba las opciones, hasta que lentamente se acercó al sillón y se acostó al lado de Christopher.
―No te preocupes, no tienes que decir nada, nadie lo sabrá ―susurró con voz ronca.
Una nueva corriente de energía recorrió la espalda de Minho.
―No estoy preocupado por ellos, si no por ti, creo que debería ir a buscar algún medicamento.
Hizo ademán de levantarse pero Christopher pasó uno de sus brazos por encima del estómago de Minho impidiendo que se moviera.
―No necesito medicina pues tú eres la única medicina que necesito.
Las mejillas de Minho se tornaron de un rojo chillón, se recriminó mentalmente por emocionarse por unas palabras que no iban dirigidas a él sino a su personaje.
―Kyu ―susurró el australiano contra su oreja, logrando que su piel se erizara.
―¿Hmm? ―fue lo único que logró articular.
―¿Por qué me rechazaste realmente? ¿Acaso no sientes lo mismo que yo? ¿Qué te detiene?
―No estoy seguro de lo que siento Jongwoon-ssi, nunca he estado enamorado antes, así que no sé cómo se siente y tengo miedo ―dijo casi inaudible.
―¿A qué le tienes miedo Kyu? ―continuó surrando contra la oreja de Minho, cada susurró era una nueva descarga de emociones.
―Tengo miedo de la gente, mis estudios dependen de una beca, no quiero perder todo lo que he construido por algo de lo que no estoy seguro...
―Hoy no hay nadie aquí para mirar y juzgar, déjame enseñarte, quiero que descubramos juntos esto, dame una oportunidad de amarte, sin prejuicios, solo tú y yo.
Christopher comenzó a recorrer el cuello de Minho con su nariz aspirando el embriagantes aroma del castaño, con sus dedos comenzó a trazar cálidas figuras en la mejilla del contrario.
Minho sintió como él aire comenzaba a faltar en sus pulmones y su respiración se volvía irregular, pero su cuerpo no respondía, él no quería parar de actuar, quería seguir adelante, ir más allá de lo que nunca había ido, por primera vez quería ser libre, sin arrepentimientos. En ese momento comprendió que KyuHyun se sentiría de la misma manera.
Cerró los ojos, tomó una gran bocanada de aire y exhaló con fuerza, abrió sus ojos y volteó su cabeza hasta quedar de frente a la de Christopher.
―Solos tu y yo, por esta vez ―susurró recorriendo con sus ojos los del australiano.
Christopher percibió el olor a chocolate que desprendía el aliento del castaño, era delicioso. Minho le estaba regalando una vista suya bastante hermosa, tenía el cabello desordenado por la posición, los ojos le brillaban, las mejillas estaban teñidas de un rojo chillón y tenía la boca abierta, parecía una sensual invitación al paraíso, pero Christopher sabía que tanto Kyuhyun como Lee Know eran inexpertos en el amor y el arte de besar, por lo que lo ideal sería ir despacio sin correr.
―¿Alguna vez te han besado? ―preguntó haciendo contacto con los ojos del castaño.
―No ―susurró Minho deseando que esa pregunta no fuera sólo para Kyuhyun.
―¿Te puedo besar? ―preguntó sin rodeos.
Minho abrió los ojos como platos, escuchó como los latidos de su corazón comenzaron a latir con fuerza, juraría que el australiano los podía escuchar. Bajó su mirada hasta los carnosos labios de Christopher y se mordió el labio, por primera vez sintió la necesidad de tocarlos pero se contuvo, volvió a levantar su mirada hacia los castaños ojos de Christopher.
―No sé cómo besar ―admitió con timidez.
―Déjame enseñarte ―susurró Christopher.
Sin esperar respuesta, el australiano se acercó lentamente hasta el rostro de Minho, ambos podían sentir el aliento del contrario mezclándose con el propio. Christopher no rompió el contacto visual con Minho, acarició dulcemente la nariz respingada del castaño con la suya, Minho contuvo el aliento y Christopher aprovechó el momento para unir sus labios a los del castaño.
Minho cerró sus ojos y se dejó llevar por el australiano, se notaba lo inexperto que era al mover sus labios torpemente, pero al aparecer a Christopher no le molestaba pues movía sus labios lentamente para que Minho se pudiera acoplar a los movimientos.
Christopher comenzó moviendo sus labios suavemente contra los de Minho, succionando un poco el labio inferior, el sabor a chocolate seguía impregnado en la boca del castaño así que saboreo un poco más hasta que pudo escuchar el leve suspiró que salió de la boca del contrario, sonrió con satisfacción para sus adentros y continuó besando mientras con una mano daba suaves caricias en la espalda baja de Minho y con la otra le recorría el cuello, mandíbula y mejilla. Christopher sacó su lengua y recorrió el labio superior de Minho arrancándole otro suspiro de placer, luego volvió a besar con dulzura los labios del chico.
El australiano tenía un debate interno, quería aumentar el nivel, pero tampoco quería asustar a Lee Know, abrió sus ojos como platos al entender que había dejado de pensar que besaba a KyuHyun, sino que estaba besando a Lee. No se dio cuenta cuando había dejado de actuar, mezclando los sentimientos de Jongwoon con los propios. Sin apartarse de Minho, observó cómo el chico estaba relajado, entre sus brazos, con las mejillas coloradas y sus labios torpes moviéndose sobre los suyos, por una vez nadie sabría que se había salido de su personaje, ni Lee Know.
Entre dulces besos e inocentes caricias, ambos actores se quedaron dormidos abrazándose con fuerza, y pensando que su compañero no debía saber que se habían salido del papel.
~✯★✯To Be or Not to Be?✯★✯~
Al día siguiente Christopher había despertado de primero, pues la luz de la ventana le daba de lleno en el rostro, intentó moverse pero algo pesado se lo impedía, abrió sus ojos y se encontró con la tierna imagen de Minho dormido entre sus brazos. Recordó lo de la noche anterior y no supo cómo reaccionar o cómo debería despertar al castaño. Jamás había pensado llegar hasta ese punto fuera de un set de grabación, pero muy en lo profundo sabía que no se arrepentía de lo que había hecho, por el contrario, el monstruo interior que lo perseguía cuando Minho estaba con alguien más, ahora ronroneaba tranquilo como un gato mimado.
―Si me sigues mirando así me voy a gastar Jongwoon-ssi ―dijo Minho con voz carrasposa.
―Buenos días Kyu ―respondió dulcemente.
Minho no abrió sus ojos pero se acercó al cuello de Christopher y aspiró su aroma, por alguna razón su olor a café no le disgustaba.
El australiano quitó algunos mechones del rostro de Minho antes de depositar un suave beso en los labios logrando que Minho por fin abriera los ojos y lo observará con cariño.
―Creo... ―dijo Minho aclarándose la garganta―... Creo que podría acostumbrarme a despertar todos los días así.
Christopher sonrió antes de contestar.
―Yo también ―se agachó y besó nuevamente los labios de Minho.
Hola!
Gracias por leer hasta aquí, sé que el cap fue muy extenso pero espero haya cumplido las expectativas, personalmente es uno de los caps que más disfruté escribir!
Si encuentran algún horror de ortografía no olviden decirme 😉 siempre leo todo el cap varias veces antes de publicar pero siempre se va alguna que otra palabra 🤣
Gracias por apoyar, con amor,
Ami 🐱