Seguimos con la historia...
Narra Adrien:
Después de lo que sucedió con Lila, busqué a Marinette por todas partes, pero no la encontré. No logré alcanzarla y se perdió entre los edificios del lugar. No sabía que era tan rápida. Demonios.
Hice mi mayor esfuerzo por encontrarla en la zona, pero no tenía éxito. La llamé por teléfono, no respondía. De hecho, apagó su celular. En verdad estaría molesta, triste, decepcionada, y todo por mi culpa.
Me dirigí a la zona comercial cercana a mi hogar, pero no, ni un rastro de ella.
Estaba desesperado. Necesitaba encontrarla, necesitaba aclarar las cosas con ella. No quería que las cosas terminaran así. Ella regresaría a la gira dentro de un par de días y me preocupaba que una vez se fuera, nunca más me permitiera verla.
Adrien: ¿dónde estás, Marinette? –me pregunté a mi mismo- por favor, aparece..
Durante un par de horas estuve buscando en los alrededores, pero nada. Tenía que actuar.
Me armé de valor, estaba a punto de cometer un acto suicida. Regresé a casa por mi auto y conduje hasta su casa. Si ella estaba ahí, seguramente también su hermana, Kagami me mataría.
Solo había una luz prendida. ¿Estaría ella en casa?. Inhalé con pesadez antes de bajar del auto. Al acercarme a la casa me temblaba todo el cuerpo, estaba nervioso, pero debía hablar con ella.
Al tocar no recibí respuesta. Toqué varias veces pero no recibí respuesta.
Adrien: ¿Marinette? –llamé, esperaba una respuesta- ¡Marinette!
Seguí insistiendo, no podía rendirme tan fácilmente.
Adrien: maldición.. –solté con molestia- Marinette...
Esperé fuera de su casa por un par de horas, pero nada. No aparecía nadie. Sus padres eran médicos y normalmente trabajaban los turnos nocturnos, seguramente estaría en el trabajo. Pero si Kagami estaba en casa con ella, seguramente jamás me dejaría hablarle.
La noche seguía avanzando mientras esperaba. Infinidad de veces seguí marcando su número, pero ella seguí sin responder..
Poco a poco me estaba ganando el sueño. Ya eran casi las 4 de la mañana.. debía irme.
Antes de subir nuevamente al auto, voltee por última vez a la casa. La luz seguía encendida. ¿Ella estaría ahí? Nunca respondió a ninguna de mis llamadas, o a mis llamados a la puerta. Bajé la cabeza con tristeza antes de regresar a casa.
**************************************
Desperté cuando escuché que alguien llamaba a la puerta. La cabeza me dolía. ¿cuánto tiempo dormí? ¿por qué está todo tan claro?
Adrien: ¿qué hora es? –pregunté al aire
Nuevamente escuché que tocaron la puerta. Reaccioné.
Adrien: ¡¿Marinette?!
Rápidamente me levanté de la cama y corrí hacia la puerta, ¿acaso sería ella?.
Adrien: ¡¡Marinette!!
Grité en cuanto abrí la puerta. Pero no, no era ella.
Luka: ah.. ¿hola..? –dijo confundido
Adrien: Luka..
Que decepción, no era ella.
Adrien: ahh.. hola Luka –lo saludé
Luka: vaya, que carita.. –dijo burlesco
Adrien: si.. a sido una larga noche.. –dije desganado- pasa..
Me hice a un lado para que él entrara. Tras hacerlo, se sentó en el sillón y yo cerré la puerta, aún más desganado.
Suspiré.
Luka: que gusto verte –dijo con una sonrisa- ¿cómo has estado? –preguntó
Adrien: bien.. –respondí sin ganas
Luka: claro, si, se nota –dijo con sarcasmo y rio
Adrien: disculpa han.. –pausé- han pausado algunas cosas.. –dije- ¿cuándo regresaste?
Él ya no vivía en la ciudad. Hacía un par de meses se había mudado y era una sorpresa para mí que estuviera de visita.
Me miró intrigado, analizando mi situación como solo él solía hacerlo.
Luka: llegue ayer –dijo recargándose en el sillón
Adrien: ahh.. que sorpresa.. –dije intentando sonreír
Me alegraba verlo, si, pero no era el momento indicado.
Luka: ¿qué está pasando contigo? –preguntó de pronto
Adrien: ¿de qué hablas? –pregunté
Luka: fui a buscarte al estudio y me dijeron que no habías llegado –dijo- te marqué varias veces por teléfono y no me respondiste –enumeró- y ahora vengo a tu casa y tienes aspecto de perro pateado, ¿qué pasa? Estaba a punto de irme –preguntó extrañado
Adrien: ¿ah? ¿fuiste al estudio? –pregunté confundido
Luka: claro, de allá vengo –respondió seguro
Adrien: ¿qué hora es? –pregunté mientras llevaba mi mano a mi cabeza, me dolía
Luka: son casi las 2 de la tarde –respondió
Adrien: ¡¿qué?! ¡¿las 2?! –repetí
Estaba sorprendido, jamás había faltado al trabajo, y ahora por desvelarme esperando a Marinette, no desperté a tiempo. Esto era malo. Con razón me dolía la cabeza, me faltaba dormir algunas horas más.
Adrien: no puede ser.. –llevé mis manos a mi cabeza, mientras me sentaba
Luka: si, ¿qué estabas haciendo? –preguntó intrigado
Adrien: estaba dormido.. –respondí
Luka: ¿dormido a esta hora? –preguntó confundido- tu nunca haces eso, no faltas al trabajo y duermes hasta tan tarde..
Adrien: lo sé.. –respondí- esto va de mal en peor
Luka: ¿qué ha pasado Adrien? –insistió- ya me estas preocupando
Adrien: ha pasado lo peor que me pudo haber pasado en la vida.. –respondí
Luka: ¿te despidieron? –preguntó
Adrien: no.. –dije en un suspiro- Marinette..
Luka: ¿Marinette? –repitió confundido- ¿qué pasó con ella? ¿le ocurrió algún accidente en la gira?–se estaba preocupando
Adrien: no, nada de eso –respondí
Luka: ¿entonces? –siguió
Adrien: Lila regresó.. –respondí
Luka: wow, wow, wow, wow –estaba impresionado- ¿Lila? ¿estamos hablando de "esa" Lila?
Adrien: si.. esa Lila.. –afirmé
Luka: creo que ya sé por dónde va esto.. –dijo
Adrien: regresó hace como una semana y me buscó –dije- con la idea de retomar nuestra amistad –suspiré- y cuando Marinette llegó de vacaciones hace unos días las presenté, quería que se conocieran.. –fruncí los labios
Luka: ah.. creo que si es lo que creo.. –dijo
Adrien: y justo ayer.. –hablé- cuando estaba por verme con Marinette, llegó Lila.. –seguí- y..
Luka: ¿y... qué? –preguntó intrigado
Adrien: me confesó que estaba enamorada de mi –dije
Luka: ¡no...! –alargó sorprendido
Adrien: de hecho –seguí- que siempre estuvo enamorada de mi, pero nunca dijo nada por complacer a su madre..
Luka: ¡lo sabía! –dijo levantándose con violencia- sabía que su regreso no era un buen augurio..
Estaba molesto, dio un par de vueltas en la sala. Solo lo miré.
Luka: ¿por qué no nos dijiste antes? –preguntó algo molesto mientras volvía a sentarse
Adrien: todo pasó tan rápido...
Guardamos silencio por unos segundos, luego continuó.
Luka: ¿y qué pasó con Marinette? –continuó
Adrien: justamente ayer que Lila me confesó todo esto –dije- estábamos frente a mi casa, yo tenía que verme con Marinette y Lila me besó.. –fruncí los labios
Luka: ¿lo hizo? –seguía muy sorprendido
Adrien: si.. –bajé la cabeza- y Marinette vio todo..
Luka: no..
Llevó su mano a su frente y suspiró, se miraba decepcionado.
Luka: y se fue, ¿o no?.. –inquirió
Adrien: si.. –respondí en voz baja
Cerré los ojos con pesadez y suspiré, todo se estaba yendo a la mierda.
Adrien: la busqué por todos lados pero no la encontré.. –continué- luego fui a su casa y aunque estuve llamando jamás nadie respondió.. estuve hasta las 4 de la mañana ahí..
Luka: eso explica tu cara.. –dijo
Adrien: esto está mal.. –dije- no me responde las llamadas y si está en su casa no me recibirá.. –bajé la mirada- pronto se irá y.. quizá ya no la vuelva a ver..
Llevé mis manos sobre mi rostro y los cubrí con ellas. Sentía tanta frustración.
Luka: ¿vas a seguir buscándola? –preguntó
Adrien: obviamente –dije quitando mis manos- no puedo dejar que las cosas terminen así..
Me levanté del sillón y di un par de vueltas en la sala, necesitaba pensar.
Adrien: estoy tan molesto.. –dije llevando mi mano a mi barbilla
Luka: no lo dudo –dijo recostándose nuevamente en el sillón- la presencia de Lila nunca ha sido algo bueno..
Adrien: ¿de qué hablas? –pregunté confundido
Luka: ella siempre ha sido mentirosa y ha causado problemas.. –dijo con molestia- no me sorprende
Tenía razón. Aunque nunca lo quise ver por el amor que sentía por ella, su presencia en algún lugar siempre significaba problemas, tal como él lo dijo...
Adrien: si...
Me estaba deprimiendo, tenía que actuar.
Luka: bueno –dijo levantándose- ve, báñate, come algo y luego vamos a buscar a tu chica del violín
Me sorprendió su actitud, pero no pude evitar sonreír. Tenía un gran amigo.
Sonreí.
Adrien: gracias, Luka..
Luka: ¡andando!
Así como él lo dijo, tomé un baño rápido y comí algo, cualquier cosa, debía salir rápido a buscarla.
Adrien: bien.. –dije- creo que ya estoy listo.. –dije
Luka: bueno, andando.. –dijo animado
De pronto, alguien llamó a la puerta. La golpeó con fuerza varias veces y eso me sorprendió.
Adrien: ¿qué pasa?.. –dije al aire al escuchar eso
Luka: ni idea.. –dijo
Me acerqué a la puerta y la abrí con intriga.
Al hacerlo, me asomé para ver a la persona que tocaba, y justo en ese momento, sentí como alguien me golpeaba en una mejilla, con violencia.
Retrocedí mientras sobaba mi mejilla adolorida, ¿qué pasaba?
Adrien: auch.. –sobé mi mejilla
Nuevamente volví a buscar con la mirada a quien me había atacado. La encontré.
Era ella.
Adrien: ¿Ka-Kagami?
Kagami: te lo advertí, Adrien –dijo con voz colérica
Realmente estaba molesta; sostenía su mano, la mano con la que me golpeó, seguramente se la lastimó al abofetearme, tiene mucha fuerza.
Kagami: te dije que no te atrevieras a lastimar a mi hermana
Su mirada reflejaba rencor, furia, desprecio.
Me señalaba con el dedo en un ademán que transmitía impotencia. Sus ojos estaban rojos y llenos de lágrimas, seguramente me odiaba.
Kagami: te lo advertí y no me hiciste caso –rechinó los dientes, impotente- ¿cómo pudiste hacer eso?
Lágrimas corrían por sus mejillas. Lloraba del coraje.
Kagami: ¿cómo pudiste traicionarla así? –insistió
Adrien: no, Kagami, no fue así –dije intentando acercarme
Kagami: no te acerques a mi, Adrien –me señaló con el dedo, era una advertencia
Adrien: está bien.. –dije y me detuve- pero por favor, déjame hablar con Marinette, necesito explicarle.. –suplique
Kagami: ¡¡jamás!! –gritó eufórica- no después de lo que le hiciste –repitió
Adrien: ¡pero yo no hice nada! –intenté defenderme- yo solo trataba de hacer lo correcto y.. –me interrumpió
Kagami: ¿tu crees que estabas haciendo lo correcto? –me reprochó furiosa- ..debiste ver su cara, Adrien..
¿Qué...?
Kagami: ella está deshecha.. –gimoteó rechinando los dientes- está devastada..
No.. no podía ser..
Kagami: y todo por tu culpa.. –lloró mientras llevaba su mano a su frente- eres el culpable de que ella esté sufriendo de esta manera..
No.. por favor no..
Kagami: gah.. –salió de sus labios
Era un sonido de impotencia, de desprecio puro hacia mi persona. Siguió llorando.
No podía creerlo. No quería creerlo. Había roto su corazón en mil pedazos y todo por un error.
Necesitaba verla, hablar con ella; pero sobre todo, disculparme por todo el dolor que le estaba causando. Ella no lo merecía, ella no merecía sufrir por mi culpa, pero debía arreglar la situación, no para que estuviera conmigo, si no para que ya no sufriera.
Ya no podía imaginar siquiera un futuro a su lado después de lo que estaba sufriendo. No así.
Adrien: por favor, Kagami.. –la llamé- déjame verla.. déjame hablar con ella –supliqué mientras lágrimas comenzaban a estancarse en mis ojos- necesito explicarle todo, las cosas no fueron así.. –me volvió a interrumpir
Kagami: por supuesto que no –me miró furiosa
Adrien: pero necesito hablar con ella –insistí
Kagami: eso no va a pasar, Adrien.. –afirmó
Adrien: por favor –insistí- necesito que me perdone..
Kagami: ¡¿y para qué?! –reprochó enojada- ¿para que la vuelvas a lastimar? ¿para volver a profesarle un amor que no es real? –preguntó con ironía
Adrien: ¡¡yo la amo!! –grite
Era verdad, mi corazón la amaba más que nada en el mundo.
Kagami: ¡no te creo, Adrien! –soltó- no creo en ti y en tus falsas y vacías palabras de amor por mi hermana, ella no se merece esto
Esto se estaba saliendo de control. No podía seguir así.
Adrien: es que las cosas no están bien –dije
Kagami: claro que no, no lo están –añadió con molestia
Adrien: ¡pero no me dejas explicarme! –grité alterado
Kagami: porque no quiero escucharte y Marinette tampoco quiere escucharte –respondió- ya no cree en ti..
Adrien: ¿qué...?
No podía ser.. no esas palabras.
Mi corazón se estrujó ante aquellas simples, pero poderosas palabras de desaliento. Estaba asombrado. Tristemente asombrado.
Adrien: ¿qué dijiste? –pregunté suplicante
Kagami: ella ya no cree en ti.. –me repitió más tranquila
Adrien: no puede ser real.. –dije casi en un susurro
La miré. Mis ojos reflejaban la sorpresa y el dolor que estaba sintiendo en ese momento por sus palabras. No quería creerlo.
Kagami: ya no quiere saber nada de ti.. –respondió
Me quedé callado. Sentía un gran vacío y una profunda tristeza, necesitaba verla.
Adrien: por favor, Kagami.. –insistí con lágrimas a punto de desbordarse- déjame verla para aclarar las cosas con ella..
Mi voz fue sutil, monótona, casi tan vacía como se estaba quedando mi corazón en ese momento.
Kagami: no.. –respondió serena- no te dejaré que la veas.. –siguió- ella se irá dentro de dos días y nunca más la veras..
No puede ser real, no quiero que se vaya, no así..
Adrien: por favor.. –dije mientras lágrimas comenzaban a caer por mis mejillas- déjame verla por última vez..
Kagami: no..
Respondió con sutileza antes de darse la vuelta e irse de mi hogar.
Yo me quedé ahí, parado frente a la puerta mientras incesantes lágrimas cubrían mi rostro. Estaba destrozado.
No pude más, me desplomé y caí a piso sobre mis rodillas. Las lágrimas salieron sin control y un alarido lleno de dolor salió de mi interior; había perdido, la había perdido.
Había perdido a la mujer que amaba. Ya no había nada que pudiera hacer.
Créditos de la imagen: kuro_M_LB en twiter
Ok, este es el penúltimo capítulo, pronto tendremos el desenlace de la historia. Ojalá les esté gustando, porque a mi si :)
Nos vemos en unos días.
Denle amor y compartan.
Visita la página: @Miraculeros en facebook