Cuando terminaron todas las clases, Mike se disponía a irse a su casa, hasta que se le ocurrió ir a ver cómo estaba Will. Quería saber si había mejorado en el rato que había estado en clase.
Se giró para despedirse de sus amigos, pero vió que estaban planeando algo, y en ese momento él no quería ir con ellos.
- Bueno, tengo prisa. Adiós, nos vemos mañana. - dijo antes de que Lucas le pudiera explicar qué querían hacer.
- Pero Mike... - intentó decir Lucas, pero el otro ya se había alejado con la bicileta e iba en dirección a la casa de los Byers.
Will se despertó en su habitación, ahora ya se encontraba mucho mejor. Hizo el intento de levantarse, pero entonces entró su madre.
- No, no te levantes. - dijo nada más entrar.
- Ya me encuentro mejor... - dijo Will. Su madre siempre su preocupaba demasiado.
- ¿Seguro? Yo creo que... - entonces fue interrumpida porque llamaron a la puerta. - Espérate un momento, voy a abrir.
Joyce fue hasta la puerta y la abrió, encontrándose a Mike.
- Hola señora Byers, venía a ver como está Will. ¿Ya está despierto? - dijo el chico.
- Sí, se acaba de levantar...
- Hola Mike. - dijo Will desde el pasillo.
- Bueno, pasa, pasa. - invitó Joyce a Mike. - ¿Quieres algo? Puedo prepararte algo de comer...
- No hace falta, pero gracias.
- Mike, ¿quieres venir a mi habitación? - sugirió Will sin pensarlo.
- Emm... Sí, sí, claro. - contestó el azabache.
Los dos se fueron hacia la habitación del más bajo, cerrando la puerta.
- Bueno, y... ¿cómo estás? - empezó la conversación Mike.
- Mejor que antes. - contestó el otro. Tenía pinta de que iba a ser una situación muy incómoda, hacía bastante que Mike no se preocupaba tanto por Will y no vivían ese tipo de situaciones.
- Y... ¿Qué quieres hacer? - preguntó el pelinegro.
- Mike, ¿quieres quedarte a cenar? - dijo Joyce entrando a la habitación sin permiso.
- Gracias, pero creo que es mejor que no, mis padres quizás se enfadarían.
- Bueno no pasa nada, tranquilo. Ya no os molesto más. - se despidió ella.
Entonces Mike se sentó en la cama al lado de Will. Este lo miró sin decir nada. El otro tampoco sabía que decir.
Los dos se empezaron a acercar lentamente. Sus caras cada vez estaban más cerca...
Podían sentir sus respiraciones, cada vez más y más cerca.
Y entonces pasó. Sus labios se juntaron por un segundo.
Toc, Toc, Toc.
Los dos se separaron de repente al oír a alguien llamar a la puerta de la calle.
- Debe de ser Jonathan. - dijo Will.
- Vale... Mejor me voy. Adiós. - se despidió Mike.
- Pues... Adiós.
Mike salió de la habitación de su amigo (¿amigo?) y se encontró con la madre y el hermano de él.
- ¿Ya te vas, Mike? - preguntó la madre de Will.
- Sí, adiós.
Al salir de la casa de los Byers Mike vio a Nancy en su coche. Ya se iba, pero justo antes de hacerlo vio a su hermano.
- Mike, ¿qué haces aquí? - preguntó ella.
- He venido a ver a Will.
- Ah, vale. Venga sube, que te acompaño.
- Vale. - dijo el más pequeño subiendo al coche.
Durante el trayecto tuvieron una conversación normal de hermanos. La verdad Nancy entendía muy bien a Mike, seguro que si le contaba lo que había pasado le ayudaría, pero le pareció que era un problema suyo, y lo último que quería era que su padre se enterara, así que no dijo nada.
Minetras tanto, Will estaba en su habitación pensando en lo que había pasado un rato antes en ese mismo sitio.
¿Mike quería hacerlo? ¿Le gustaba a Mike o solo lo había hecho por probar? ¿Se repetiría?
Demasiadas preguntas y ninguna respuesta.
Entonces Jonathan entró en la habitación.
- Hey, ¿qué tal? - preguntó.
- ¡Bien! - dijo Will, un poco demasiado contento.
- ¿Me he perdido algo?
- No, no. Solo he tenido un día bueno.
- Me alegro.
- ¿Y tú qué tal?
- Pues bien... - y así empezaron una conversación de hermanos.
Will le explicaba todo a Jonathan, pero pensó que quizás hay cosas que no se deben explicar (aún)
Un rato después, Joyce los avisó para que fueran a cenar.
Will se fue a dormir temprano, o a intentar dormir. Se pasó un buen rato pensando en lo que había pasado, y queriendo poder encontrar respuesta a todas las preguntas que se había hecho.
El día siguiente tenía que ser un gran día, quizás todas sus imaginaciones con Mike se harían realidad, o eso esperaba.
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Nota del autor:
Gracias de verdad por todo el recibimiento que está teniendo esta historia, cuando empecé a escribirla no me esperaba para nada tantas lecturas.
Espero que os esté gustando, la verdad es la primera vez que escribo algo así y lo público.
También deciros que si encontráis algún error o queréis sugerir algo para la historia, ¡decidmelo! Me hace mucha ilusión que os intereseis por este fic :)
Y bueno, para terminar deciros que a partir de ahora empieza lo interesante, ¡estad atentos!