Después de que Gu Yang salió del departamento, Gu Hai entró nuevamente a su alcoba solo para ver que Bai Luoyin seguía en la silla profundamente dormido. Suavemente le tocó el cabello y notó que solo una parte de este había sido secado mientras que el resto seguía húmedo.
Con el propósito de no querer que se enfermara, tomó la secadora. Pero aún teniendo un desagradable enojo, cambió el aire de caliente a frío e inmediatamente encendió el secador antes de dirigirlo hacia la cabeza de Bai Luoyin. Aunque era verano, el aire acondicionador dentro del departamento estaba programado a una temperatura muy baja, haciendo completamente imposible sentir un poco de aire caliente. La repentina ráfaga de aire frío a tal velocidad hizo que Bai Luoyin sintiera escalofríos y despertara de un susto. Sus ojos somnolientos se dirigieron rápidamente hacia el espejo para echar un rápido vistazo y contrario a sus expectativas, el corte de cabello era bastante bueno. Sin otro pensamiento, miró hacia el peluquero parado a su lado y se dio cuenta de que se había convertido en una persona completamente diferente.
“¿En dónde está tu hermano?” preguntó Bai Luoyin.
Una vez que estas palabras entraron al cerebro de Gu Hai, el molesto nombre sonó repetidas veces en su cabeza antes de abruptamente lanzar la secadora hacia su mesa de estudio. Miró a Bai Luoyin, sus ojos poseían una densa y siniestra aura que estaba por hacer erupción.
“¿No te has quedado con él el maldito tiempo suficiente? ¿Estás molesto de que llegué temprano a casa?”
Las dos preguntas salieron disparadas sin indicios de una necesidad de distinguir lo que está bien de lo que no y penetraron en los nervios de Bai Luoyin con tanta profundidad que su humor se volvió peor. Honestamente no podía comprender en absoluto como estaba conectado el cerebro de Gu Hai.
*/¿Cómo puede un simple corte de cabello volverse tan complicado y ser retorcido una vez que pasó por su cerebro?/*
“¡Es cierto! ¡Sería mejor si no hubieras regresado toda la jodida noche!”
Habiendo dicho eso, Bai Luoyin se arrancó con desprecio la ropa que cubría su cuerpo. Justo cuando estaba por alejarse, de pronto una mano firme le sujetó el brazo y lo mantuvo en el lugar antes de, a la fuerza, hacerlo tambalearse en retroceso. Fue tan repentino que su cabeza casi choca contra la mesa de noche junto a la cama.
Un segundo después, tomando ventaja de la momentánea falta de equilibrio de Bai Luoyin, Gu Hai lo empujó hacia abajo y presionó su cuerpo sobre él.
“¿Quieres que muera de furia, no es así?”
“¿Quién está haciendo enojar a quién?” Los delgados dedos de Bai Luoyin sujetaron la ropa de Gu Hai mientras lo veía directo a los ojos, “¿Qué hice mal? Él me molestó sin cesar e insistió en darme un corte de cabello. Además de dejar que lo cortara, ¿qué más podría haber hecho? ¿Quieres que le dé una bofetada en la cara? ¡Es tu hermano! Si no lo fuera, ¡ni siquiera me molestaría en absoluto en su existencia!”
Dos pares de ojos se miraban fijamente en medio de la oscura aura que los rodeaba mientras que sus respiraciones se entremezclaban en una sensación de opresión que parecía sofocarlos.
Después de encontrarse un punto muerto por lo que pareció una eternidad, Bai Luoyin finalmente rompió la unión de sus miradas y habló con un tono despiadado, “No quiero discutir más contigo.”
A continuación, inmediatamente presionó sus manos con firmeza contra el pecho de Gu Hai para hacerlo a un lado. El primer intento fue un fracaso y Gu Hai seguía mirándolo fijamente, con una expresión determinada en su rostro, negándose a moverse una pulgada. Solo cuando hizo uso de toda su fuerza, su segundo intento tuvo exitoso en hacer a un lado al toro obstinado
Aún sintiéndose agitado, Bai Luoyin se arrancó su propia ropa, la lanzó bruscamente sobre la cama y entonces se dirigió al baño para tomar una ducha. Dejándolo solo en la cama, los ojos de Gu Hai viajaron silenciosamente hacia la ropa dispersa. La miró por un momento mientras pensaba en la persona que la usó, entonces enterró su cabeza en ella e inhaló el cautivador aroma que pertenecía únicamente a Bai Luoyin. Lento pero seguro, el fascinante aroma lo ayudó a controlar sus emociones.
Cuando estaba por levantarse para tomar un baño, descubrió algo que hizo que su sangre hirviera mientras recorría sus venas, lista para explotar en cualquier momento. En realidad, el pantalón de Bai Luoyin había sido desgarrado y las costuras rasgadas crearon una amplia abertura. Cada hilo roto que colgaba flojamente a cada lado de las costuras parecía tirar sin piedad de las fibras del corazón de Gu Hai.
Aferrando el pantalón, Gu Hai se dirigió a la puerta del baño e intentó abrirla. Cuando no se abrió, inmediatamente le dio una violenta patada. Entonces entró y avanzó hacia Bai Luoyin, quien estaba en medio de su ducha. Con una cara lúgubre, lanzó el pantalón que sostenía firmemente entre sus manos hacia el cuerpo húmedo de Bai Luoyin. Sin decir nada más, salió violentamente y cerró la puerta de golpe.
Sintiéndose bastante irritado por cómo habían resultado las cosas, Gu Hai bajó entonces a la cancha de baloncesto para tener un juego o dos hasta que todo su cuerpo estuviera empapado en sudor. Mientras el sudor seguía formándose y goteaba de su cuerpo, era como si el enojo en su corazón también escapara simultáneamente. Para la hora en que miró su reloj, ya pasaba de la una. Al ver hacia la ventana de su departamento, pensó que ya era hora de regresar y dormir.
Una vez que llegó a la entrada principal, encontró un trozo de papel pegado en la puerta. En ella había varias palabras escritas en un ataque de rabia.
‘¡Gente irrazonable, por favor haga un desvío!’
El rabillo de los labios de Gu Hai se elevó, revelando un mohín mientras empujaba la puerta y entraba.
Bai Luoyin ya estaba en la cama. Gu Hai se bañó primero antes de meterse bajo la cobija. Sin embargo, no mucho después de acostarse, Bai Luoyin se sentó.
Las llamas del encendedor emitieron una débil luz azul que rápidamente se desvaneció una vez que tocó la punta del cigarrillo. Entonces bocanadas de humo salieron de la esquina de los labios de Bai Luoyin.
Gu Hai entornó sus ojos y se giró ligeramente para mirar a la persona a su lado. En lugar de ver su rostro, se encontró con la amplia extensión de la espalda desnuda de Bai Luoyin. Mientras lo observaba por un momento, inconscientemente estiró su mano para tocarlo.
“¿Puedes explicarme exactamente qué pasó con ese pantalón?”
Sin bromear Bai Luoyin respondió inmediatamente con tres palabras, “No lo sé.”
No mucho después de haber dicho eso, Bai Luoyin estornudó, lo cual fue seguido por un segundo estornudo. Al ver su estado parcialmente miserable, Gu Hai estiró su mano con el fin de arrastrarlo de vuelta a la cama, sin embargo el chico obstinado se negó a moverse. Cuando estornudó por tercera vez, Gu Hai perdió por completo la paciencia. Usando la fuerza enganchó su brazo alrededor del cuello de Bai Luoyin y lo empujó hacia la cama.
Antes de que Bai Luoyin pudiera pronunciar la palabra, ‘jódete’, Gu Hai le selló los labios con un beso demandante. Bajo el tiránico control de Gu Hai, las respiraciones de Bai Luoyin fueron robadas a la fuerza y todas las posibilidades de expresar violentas e hirientes palabras fueron tragadas una por una... entonces, lentamente llovieron besos en la barbilla, a los costados y en la punta de la nariz, parpados y orejas. Gu Hai siguió besándole el rostro con sus suaves labios hasta que las descuidadas respiraciones de Bai Luoyin se volvieron estables para entonces volverse caóticas una vez más.
Después de unos cuantos besos más, los furtivos labios de Gu Hai se detuvieron repentinamente mientras miraba a Bai Luoyin con ojos centelleantes.
“¿Es debido a que ya no hay más presión sobre estudiar, que nos hemos encargado de los problemas con nuestros padres y que no te sientes tranquilo si no tienes una jodida discusión conmigo?”
Gu Hai era experto en dos cosas, actuar como un estúpido y culpar a la otra parte incluso cuando él mismo era el culpable.
La mirada enfadada de Bai Luoyin se dirigió hacia él, “Primero quítate de encima, entonces te diré exactamente lo que le pasó a ese pantalón.”
Dándole otro beso en el cuello, Gu Hai se movió a un lado obedientemente.
Dos segundos después, un miserable aullido que hiela la sangre se hizo eco dentro de la habitación.
“¡Auuuuuuu!... ¡No me pellizques! ¡No puedes pellizcarme ahí! Los hombres no deben torturar así a otros hombres....”
Cuando los dedos como el acero de Bai Luoyin finalmente detuvieron su ataque, la cara de Gu Hai ya se había vuelto una fea mancha púrpura.
“Gu Yang se puso tu ropa y estuvo vagando en nuestro departamento. Accidentalmente lo confundí contigo y le di una fuerte patada. Pero él no estaba dispuesto a perdonarme y siguió insistiendo que había sido mi culpa. Entonces comenzamos una discusión y poco después, empeoró en una pelea. Mira, de esa forma fue como el pantalón quedó así.”
El corazón de Gu Hai se tensó, “Él no te pegó, ¿verdad?”
“No, estuvimos atrapados en un punto muerto durante un tiempo y después de unos minutos terminó.”
“Debió haber hecho esto propósito...” Murmuró Gu Hai para sí mismo mientras miraba fijamente a Bai Luoyin. Solo después de que pasó otro segundo, de pronto se dio cuenta de algo extraño y preguntó rápidamente. “Entonces ¿cómo terminó dándote un corte de cabello?”
Presa por la oleada de preguntas, la paciencia para responder de Bai Luoyin se volvió en molestia. Respondió enojado, “¿Cómo voy a saber? ¡Deberías hacerles a tus ancestros esta maldita pregunta! ¿Cómo es que la familia Gu se volvió así de desquiciada? ¡Cada uno de ustedes son muy extraños!”
Gu Hai no dijo nada mientras escuchaba con una cara estoica el arrebato de Bai Luoyin.
“¡Solo explicaré hasta aquí! ¡Ahora depende de ti si me crees o no!”
Después de que estas palabras fluyeron de su boca, Bai Luoyin se dio la vuelta y dejó que su espalda estuviera frente a Gu Hai una vez más.
Los fuertes brazos de Gu Hai rodearon suavemente el cuerpo de Bai Luoyin antes de rozar su cara en la curvatura de su cuello. Cuando habló, su voz seguía con un tono fuerte e inflexible.
“En el futuro, intenta lo mejor posible no provocarlo.”
Una pequeña olla de cerámica se encontraba sentada frente a Bai Luoyin. Al verla, realmente quería tomarla y estrellarla en la cabeza de la persona detrás de él.
“¿Cómo es que me convertí en la persona que lo provocó? ¿Cuándo lo provoqué primero?”
Gu Hai parecía no haber escuchado nada de lo que Bai Luoyin acababa de expresar. Él simplemente se preocupó de sus propios asuntos y siguió con su perorata, “Él no es tan simple como nosotros. Alguien como él es mucho más complicado de lo que te puedes imaginar.”
”Puede hacer lo que le plazca. No tengo interés en saber nada sobre él. ” dijo Bai Luoyin, su tono estaba cargado de indiferencia.
Sujetando firmemente la mano de Bai Luoyin, Gu Hai habló con tranquilidad, “No quiero que lo entiendas. Solo quiero recordarte que mantengas tu guardia. No lo consideres como alguien que va en el mismo camino que nosotros.”
Bai Luoyin de pronto recordó algo y se mofó con frialdad, “Pero él dijo que entre ustedes dos, uno es un vulgar gánster mientras que el otro es más refinado. En esencia, ambos son iguales. Es solo que se muestran diferente.”
“¡Iguales mi trasero!” Gu Hai apretó sus dientes con furia mientras seguía justificándose, “¡Él simplemente se está elogiando a sí mismo! ¡Hay una gran diferencia entre nosotros! Yo puedo tener una lengua afilada, pero tengo un corazón amable. ¡Él es un maldito bastardo sin piedad que habla con crueldad y se niega a admitir sus propios errores! ¿Recuerdas la historia que te conté sobre el cometa? ¡De solo este pequeño asunto trivial, claramente puedes ver la diferencia entre nuestras personalidades!”
Habría sido mejor si Gu Hai nunca hubiera mencionado ese asunto nuevamente. Desafortunadamente, una vez que lo mencionó, Bai Luoyin se sintió con ganas de reír otra vez. En lugar de ver las malvadas intenciones de Gu Yang, todo lo que descubrió fue la estupidez de Gu Hai.
“¡No me muestres esa sonrisa traviesa! ¡Estoy siendo serio contigo!” Ahora enfurruñado, Gu Hai sujetó las mejillas sonrojadas de Bai Luoyin y le dio un tirón a ambos lados, asegurándose de no tirar demasiado.
Bai Luoyin calmó lo suficiente sus nervios para evitar reír, “Está bien, está bien, lo entiendo.”
Haciendo una ligera mueca, Gu Hai lo miró intensamente por un tiempo. No le tomó mucho notar el extraño parpadeo de las luces reflejadas en las brillantes y cristalinas pupilas de Bai Luoyin. Incluso las comisuras de su boca parecían contraerse y destensarse como si tratara de controlarse. Con solo verlo, Gu Hai sintió que el lamentable estado de su propio orgullo sufría un duro golpe.
Apretando sus dientes, Gu Hai se lanzó inmediatamente sobre él con toda su fuerza, “¿Aún tienes el valor de reírte? ¿Aún quieres reír? Entonces te dejaré tu jodida risa. Te dejaré tu jodida risa...”
“Jajaja.... hip.... jajaja....”
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Temprano en la mañana del día siguiente, Gu Hai fue rudamente despertado de su sueño por una llamada de Gu Yang a las siete en punto.
“¿Aún no te has levantado?”
Gu Yang bostezó, “¿Por qué llamas tan temprano? ¿No dijiste que tu audiencia en la corte comienza a las nueve?”
“¿Crees que es igual que ir a clases, donde simplemente puedes irrumpir cuando suena la campana?”
Sintiéndose ligeramente molesto por el escándalo, el somnoliento Gu Hai se frotó los ojos y respondió impaciente, “Está bien, ya me levanté.”
Sin embargo, después de que terminó la llamada, Gu Hai inmediatamente se enterró otra vez entre las cobijas, en lugar de levantarse como había dicho. Justo cuando se giró hacia Bai Luoyin en búsqueda de su calidez, vio que su ojos se movían en una batalla para despertar. Sonrió, pensando que la expresión de Bai Luoyin era idéntica a la de un pequeño e inocente ratón. Incapaz de controlarse a sí mismo, Gu Hai sopló una bocanada de aire contra sus pestañas y se burló de él por un tiempo, hasta que Bai Luoyin recuperó por completo la conciencia.
“Tengo que salir por un momento. Mi hermano tiene que asistir a una audiencia, así que tengo que acompañarlo. Después de lavarme, te cocinaré un poco de gachas. Para cuando te levantes, podrás comerlas.”
“No es necesario,” Bai Luoyin estiró su cuerpo, “también tengo que salir,”
“¿Para qué vas a salir?” Preguntó Gu Hai mientras se vestía.
Bai Luoyin relajó sus músculos mientras se sentaba, “¿No te mencioné que renuncie a mi oportunidad de entrar a la universidad sin haber tomado el examen de ingreso? En ese momento hubo un maestro que me ayudo a manejar este asunto. Ya que de pronto renuncié a esta gran oportunidad y ni siquiera le dije una palabra con antelación, creo que es bastante grosero de mi parte. Quiero ir y darle una explicación apropiada.”
Gu Hai asintió, “¿Ya has contactado al maestro?”
“Tu hermano me ayudó a hacerlo.”
De pronto, la tez de Gu Hai cambió a varios colores pero eligió no decir nada más.
Después de que los dos se bañaron, fueron juntos a la alcoba y se cambiaron de ropa. Bai Luoyin se giró para ver a Gu Hai con una cálida sonrisa y dijo “Puedes irte primero ya que no tengo prisa.”
“¡Vamos juntos!” dijo Gu Hai radiante.
“No vamos en la misma dirección.”
“Quiero dejarte primero, entonces iré a buscar a mi hermano.” dijo Gu Hai suplicante mientras lo miraba.
“¿Por qué quieres perder el tiempo? ¡Es más conveniente si conducimos nuestro propio coche! Además, ¿no le urge a tu hermano que vayas rápido? Deberías apresurarte ya, ¡en un momento conduciré mi propio coche!”
Sin embargo, Gu Hai siguió insistiendo, “Quiero llevarte yo mismo o de lo contrario no me podré relajar.”
Incapaz de persuadirlo para que cambiara de opinión, Bai Luoyin no tuvo más opción que apresurar sus movimientos y dirigirse a la puerta con él.
Justo cuando el coche daba una vuelta para dejar el vecindario, Gu Hai recibió otra llamada de Gu Yang.
“¿En dónde estás ahora?” preguntó Gu Yang.
Había un poco de impaciencia en el tono de Gu Hai mientras hablaba, “Acabo de dejar el vecindario.”
“¿Cuánto tiempo te tomará llegar aquí?”
“No estoy seguro.” Dijo Gu Hai, lentamente aumentó de velocidad, “Necesito llevar primero a Yin Zi a un lugar, entonces iré a buscarte.”
Después de un momento de un desagradable silencio, la fría voz de Gu Yang fue transmitida desde el otro lado.
“¿Estás conduciendo su coche?”
Justo cuando Gu Hai estaba por contestar ‘sí’, de pronto un carro salió de la intersección y se dirigió hacia ellos. Sintiéndose ansioso, pisó los frenos, pero no hubo respuesta y el coche siguió avanzando con su propia voluntad. Gu Hai sujetó el volante con toda la fuerza que pudo para poder maniobrar el automovil. Esto fue solo después de hacer un repentino y escalofriante giro que apenas logró evitar un peligroso choque.
“No hablemos ahora.”
Gu Hai colgó rápidamente y de inmediato giró su cabeza a un lado para ver a Bai Luoyin. La sola expresión de este le dijo que estaba completamente asustado. Sus ojos estaban ligeramente abiertos y su aliento era exhalado esporádicamente como si apenas pudiera respirar.
Lamentándose, el largo brazo de Gu Hai se estiró, sus dedos se adentraron en el cabello de Bai Luoyin, suavemente acariciándolo. Entonces con tono suave, lo confortó, “¿Te asustaste hace un momento?”
Disfrutando la comodidad del toque de Gu Hai, Bai Luoyin tomó una respiración profunda y dijo débilmente, “En el futuro, intenta no responder tu teléfono o hacer una llamada cuando estés conduciendo.”
Gu Hai le dio una cálida sonrisa antes de girar su cabeza hacia el camino. Notando que el coche estaba a punto de entrar a la calle abierta, donde los coches venían hacia ellos, de inmediato pisó los frenos con toda su fuerza. Pero no hubo respuesta. Los pisó nuevamente. Seguía sin haber respuesta. En un instante, la apacible sonrisa de Gu Hai se quedó congelada en su cara...