–Nuestro primer Partido de hoy es contra el Nekoma. –informó Ukai –¿Como nos fue ayer?
–Será nuestro tercer set contra ellos, ayer jugamos dos set y perdimos ambos, 17-25 y 19-25. –explicó Shimizu.
–Bueno no hemos ganado ni uno pero sí vamos con calma podremos hacerles frente. –miró al dúo de primero –Hinata, Kageyama, será su primer Partido después de un tiempo.
–¡Si! –contestaron ambos.
–___ prepárate para entrar. –me dijo Ukai y asentí.
Todos los chicos se fueron a sus posiciones mientras yo ataba más fuerte los cordones de mis zapatillas.
El Nekoma fue el primero en servir así que Fukunaga tomó el balón y sacó.
–¡Buena recepción! –grito Kageyama a Daichi.
Kageyama hizo su pase super rápido hacia atrás enviándola hacia Hinata el cual remato con sus ojos cerrados pero pudo ser seguido por Lev aunque no llegó a bloquearlo y Yaku tampoco.
–Demonios... Eso fue increíble. –dijo Lev.
–¡No te preocupes Lev! Estuvo cerca. –dijo Yamamoto.
–Daichi, buena recepción. –grito Tanaka.
Hinata corrió hacia A pero salto hacia C y Kageyama le dio un pase super rápido aunque ahora Lev logró bloquearlo y Nishinoya no logró llegar.
–¡Eso es! –grito Lev.
Lev regresó a su posición y con mirada desafiante insito a Hinata volver a atacar.
–Esto es malo. –susurre. Ukai me miró sorprendido y confundido.
Luego de un punto perdido el entrenador Ukai pidió tiempo en el cual a Hinata se le veía algo raro y Kageyama lo noto.
Al regresar a la cancha los del Nekoma hicieron su servicio complicando a Kageyama el cual tuvo que dar el primer toque. Luego Daichi la levantó hacia Asahi.
–¡Asahi el último! –grito Sugawara.
Mis ojos y los de todos los demás al ver a Hinata tratar de robarle el balón a Asahi lo cual terminó que ambos chocaron perdiendo el punto.
Asahi formó en su rostro una expresión de asustado pero desapareció cuando Hinata empezó a disculparse.
Note que la expresión de Ukai era tensa y no sólo el se puso así después de aquel choque si no que todo el equipo estaba así.
–Entrenador, creo que es momento de que ___-Chan entre. –dijo Takeda-sensei mirándome.
Ukai suspiro.
Al escuchar el llamado de Ukai me acerque y me sorprendí al ver el número que reemplazaría.
–¿10? ¿Hinata saldrá? –pregunté.
Segundos después me levante y Camine hacia la línea de la cancha mostrando el numero. Pude ver la expresión de enojo y sorpresa de Hinata el cual solo se acercó a mi y tomó su número de mala gana. Antes de cruzar lo detuve.
–No lo tomes a mal. El entrenador sólo quiere que las cosas no estén tensas, no te quitaré tu puesto. –
Apretó los dientes y salió.
Camine a la posición de Hinata y mire al resto del equipo regalando una sonrisa.
–¿Recuerdan las señales? –pregunté a lo que ellos asintieron con una sonrisa.
Kuroo se coloco en la parte de al fondo listo para hacer su servicio, mire por el rabillo del ojo la espalda baja de Kageyama y vi la señal.
Haríamos un ataque rápido.
Kuroo sacó pelota la cual fue recibida por Nishinoya limpiamente.
Retrocedí un poco y corrí a máxima velocidad por el medio de la cancha hasta que salte, Kageyama levantó la pelota para mi y remate sin bloqueo alguno dándonos el punto.
–¡Eso es! –gritaron todos.
Ukai sonrió.
–Y así la tensión del equipo desapareció. – susurro Ukai.
A pesar de que logre desaparecer la tensión el set terminó 15-25 así que tuvimos que cumplir nuestro castigo de lanzamientos.
Cuando terminamos me acerque a la puerta y empeze a beber agua.
–___-Chan. –escuché detrás de mí.
Mire para atrás y vi a Hinata mirándome.
–Lo que sucedió hoy... Lo lamento... –
–No te disculpes. –me miró sorprendido –Se que te molesto la decisión que Ukai hizo al cambiarte, solo quiero que sepas que lo hizo para sacarlos de tensión. Debes aprender a controlar tus emociones y que no te controlen a ti, tomará tiempo pero lo lograrás. –le sonreí –¿Que te parece si te ayudo a perfeccionar aquel ataque rápido?
Sus ojos se iluminaron.
–¡Si! –dijo emocionado.
Luego de la práctica perdimos como siempre. Tal y como se lo prometi Hinata se acercó a mí con un balón y yo solo reí al ver su emoción. Me posicione en la red y espere el balón el cual Hinata me lanzó y seguido de eso empezó a correr. Le di un pase rápido pero no logro golpearlo.
–Uno más. –pidió.
Asentí.
Estuvimos así unos 30 minutos y los dedos empezaban a doler pero podía soportarlo. Pero Hinata lo noto.
–¿Estas bien ___-Chan? –preguntó.
–Me duelen un poco los dedos pero no es nada grave. –sonreí.
–Ya se, vayamos con Bokuto-San y los demás para que descanses un poco. –
No espero mi respuesta y tomo mi mano empezando a correr. Solo rei y me deje llevar.
Luego de un rato de correr llegamos y Hinata se asomo por la puerta.
–Oye Tsukki, ¿Tragiste un amigo? –preguntó Bokuto.
Hinata se sobresalto.
–No sólo uno. –dije asomandome por la puerta.
Note como las mejillas de Bokuto se enrrojecieron al verme.
–¿Que haces aquí Hinata? –preguntó Tsukishima.
–Estaba practicando remates con ___-Chan pero le empezaron a doler los dedos así que quería dejarla descansar. –explicó.
–Eso es raro viniendo de ti ___-Chan. –dijo burlon Kuroo.
–Por eso..
–¡Déjenme entrenar con ustedes! –gritaron Hinata y Lev.
–¿Lev? –preguntó Hinata al notar su presencia.
–Lev, ¿No deberías de estar practicando recepcion con Yaku? –preguntó Kuroo.
Un escalofrío recorrió su cuerpo.
–Yaku-San dijo que lo estaba haciendo bien y me dejó irme. –explicó Lev.
–¿En serio? ¿No te escapaste? –preguntó Kuroo no muy convencido.
–Claro que no. –dijo Lev.
El capitán del Nekoma suspiro.
–Bueno ya que tenemos la cantidad necesaria hagamos un tres contra tres. –dijo Kuroo.
Hinata me miró y yo negué.
–No jugaré Hinata. Estoy algo cansada así que iré a dormir. –dije estirando mis brazos.
–Te acompañó. –dijo Akaashi.
–No te preocupes Aka-Chan, puedo ir sola. –sonreí.
–No te lo pregunté. –sé acercó a mí –Vayan calentando, regresó pronto.
Ambos salimos del gimnasio.
Por alguna extraña razón el ambiente era silencioso e incómodo, ningún de los dos miraba al otro. Traté de buscar algún tema de conversación mirando a los alrededores pero no se me ocurría nada. Fue la primera vez que me sentía nerviosa con la presencia de Akaashi.
–___-Chan. –me llamo.
Lo mire sin decir nada.
–A ti... ¿Te gusta Bokuto-San? –preguntó mirandome.
Mis ojos de abrieron de la sorpresa y automáticamente negué con la cabeza.
–Ya veo. –sonrió –Perdon por la pregunta incomoda.
–No te preocupes. –sonreí.
Luego de aquella conversación corta el ambiente volvió a ser tranquilo y para nada incómodo mientras hablábamos de los entrenamientos y nuestras técnicas de colocadores hasta que llegamos a la puerta de mi habitación.
–Bueno gracias por acompañarme hasta aquí pero deberías volver para que puedan entrenar. –dije.
–De seguro están practicando remates pero tienes razón, debería irme ya. –me miro.
Le sonreí.
–Nos vemos mañana Aka-Chan. –sonreí.
Se acercó y beso mi mejilla un poco cerca de mis labios lo cual hizo que me ruborice. El me sonrió.
–Nos vemos mañana ___-Chan. –dijo empezando a caminar.
Me quedé unos largos segundos mirando al suelo pensando en lo que acababa de pasar.
Me pareció algo raro ya que Akaashi siempre al despedirse revolvia mi cabello además que no le gustaba mucho el contacto físico y siempre se mantenía distante.
¿Que acababa de pasar?