┍━━━━━◦∘♔∘◦━━━━━┑
ANEXO I
Furia Espectral
┕━━━━━∘◦♔◦∘━━━━━┙
⇾ Nombre: Furia Espectral
⇾ Especie: Híbrido
⇾ Clase: Embestida
⇾ Color: Gris oscuro, casi negro, con destellos azules sobre su lomo.
⇾ Habilidades: Visión térmica, eco-localización, disparos de plasma azul eléctrico, sus garras se sujetan bien al hielo, puede camuflarse en la nieve y en la noche y tiene un buen sentido del olfato y auditivo.
⇾ Hábitat: Desconocido
⸻ESTADÍSTICAS
⇾ Ataque: 17
⇾ Velocidad: 20
⇾ Armadura: 18
⇾ Poder de fuego: 13
⇾ Límite de disparos: 7
⇾ Veneno: 0
⇾ Mandíbula: 6
⇾ Sigilo: 26
⸻CARACTERÍSTICAS
❲ Habilidades y debilidades ❳
El Furia Espectral es una especie híbrida dada entre un dragón Furia Nocturna y un Espectro de Nieve. Al ser un híbrido, tiene habilidades relacionadas con los dragones del que es proveniente, así como algunas más al tratarse de una especie rara, lo que lo hacen ver temible e imponente a la vista de los humanos.
Físicamente tiene la apariencia más relacionada con la de los Furias, su cuerpo es elegante y oscuro, de tamaño grande, sin llegar a ser robusto. Tiene patas y el cuello largos, en comparación con las especies de las que proviene y sus ojos son de un azul eléctrico que le ayuda con su visión térmica como los espectros, pero al contrario de ellos, su visión puede cambiar dependiendo sus necesidades. Generalmente, el Furia Espectral hace uso de su visión térmica cuando está cazando, lo que le permite distinguir entre su entorno y otro ser vivo.
En comparación los Furia Nocturna, el híbrido cuenta con garras gruesas que le permiten escalar en la nieve sin resbalar, sus escamas son una combinación del gris oscuro y el azulado y sus dientes no son retráctiles. Cuenta con cuatro apéndices en forma de lóbulo sobre la parte superior de su cabeza, unas son gruesas del tamaño de la oreja y las otras son más pequeñas y delgadas. También cuenta con dos pares de alas, el primero es el que le permite volar y son las más grandes; mientras el segundo par son más pequeñas, que ayudan en sus giros a la hora de volar.
El Furia Espectral puede atacar de distintas formas, pero generalmente lo hace con plasma al igual que los Furias; tiene la capacidad de bajar la temperatura en cualquier zona en la que se encuentre, cubriendo de neblina, o en ocasiones nieve, el lugar con tan solo hacer acto de presencia. Con su aliento puede escupir nieve a sus adversarios cuando no quiere atacar a matar y su rugido es idéntico al de un Furia Nocturna.
Este dragón no es agresivo, pero no quiere decir que no sea peligroso. Vive solo en zonas con temperaturas bajas, no convive con otros dragones más de lo necesario y cuando se encuentra en peligro ataca sin pensar, sus disparos son tan peligrosos como los de los Espectros de Nieve y nunca fallan.
Solo existe uno en el mundo (se desconoce sí hay más) y es el dragón que raptó a Sigrid cuando tan solo era una niña.
⸻CURIOSIDADES
⇾ Al ser un híbrido entre un dragón que se puede entrenar y otro que no, las probabilidades son muy pocas y sería muy difícil lograr establecer vínculo con un humano, más no imposibles.
⇾ Al contrario de los Espectros, el híbrido prefiere estar solo, cazar solo y no servirle a ningún otro dragón.
⇾ Puede tolerar el fuego con gran dificultad, mientras no esté a una elevada temperatura.
⇾ Su envergadura es similar al de los Furia Nocturna.
⸻INFORMACIÓN SOBRE DRACO.
AÑO DE NACIMIENTO: 718.D.C
ESPECIES PROVENIENTES: Furia Nocturna hembra y Espectro de Nieve macho.
FAMILIARES: Tiene un medio hermano Furia Nocturna.
HÁBITAT: Bosques helados, islas, el Santuario de dragones.
"—Es difícil descifrar lo que Draco quiere, deberás tener cuidado, ambas sabemos que los dragones no son malos; pero hay dragones que no se entrenan y el Espectro de Nieve es uno de ellos, deberás tener cuidado. —Valka Abadejo a Sigrid Whiterkler cuando la conoció."
Medio hermano de un Furia Nocturna, Draco creció en conjunto con él para protegerlo en sus primeros años cuando la madre que compartían desapareció un día sin volver. Desde entonces, el Furia Espectral tuvo que apañárselas para sobrevivir del peligro que suponían otros dragones y los humanos que les cazaban.
Durante toda su vida, el Furia Espectral jamás prestó lealtad a ningún dragón alfa, por lo que no tenía la necesidad de saquear aldeas por provisiones. Junto a su hermano, ambos cazaban su propio alimento lo más alejado de los humanos y conforme fue pasando el tiempo, al ver que no había necesidad de seguir cuidando de su hermano, Draco desapareció, buscándolo solo en raras ocasiones.
Su primer contacto con humanos se dio en el año 7.27. D.C. cuando dragones atacaban una isla grande, el fuego y los rugidos era lo único que se escuchaba con dragones y humanos peleando. Al Furia Espectral no le importó lo que pasaba a su alrededor, esa misma noche, estuvo a punto de abandonar la isla cuando algo captó su atención. Una niña rodeada de dragones grandes, a punto de arrojarle fuego. El Furia Espectral la terminó salvando antes de que el fuego le rozara una de sus extremidades y con la neblina emanando de su boca, logró marcharse sin dejar rastro, con la niña entre el filo de sus garras.
Draco no supo porque hizo aquello, salvar a un humano; pero tampoco tenía intención de hacerse cargo de ella, así que la dejó en una cueva donde dragones no tan agresivos vivían en ella y se desapareció de su vida.
Meses después, el Furia Espectral conoció a una nueva humana que vivía entre dragones. Pese a que a Draco le desagradaban tanto los humanos como los dragones, había algo en ellos que le permitía darse el lujo de sentirse a salvo. Aquella fue la primera vez que dejó que un humano se acercara a él y confío en ella. Al no ser un dragón que se mantuviese quieto en un mismo lugar, desaparecía por semanas y no volvía hasta que se sintiese seguro de volver con la humana. Valka.
En algunas ocasiones, Draco se asentaba para visitar a su hermano y comprobar que siguiese vivo. A diferencia de él, al Furia Nocturna le gustaba hacer acto de presencia en las aldeas humanas solo para atacar y destruir sus lugares, aquello fue lo que causó su captura con una de las redes de un humano.
Incapaz de volar, Draco seguido visitaba a su hermano en el valle en el que se asentó para protegerlo de dragones más grandes que pasaban por ahí. Pues no importaba si su hermano seguía siendo más fuerte o no, siempre tuvo un instinto protector con él. Estuvo con él durante esos meses, asegurándose de ocultarse cuando el humano que había capturado a su hermano se aparecía.
Y ahí, en una de esas ocasiones, fue donde la volvió a ver. A esa niña que salvó años atrás de morir bajo las llamas del fuego. No todos los días iba con ese extraño humano, pero Draco siempre se aseguraba de marcharse cuando ellos aparecían, sin querer anunciar su presencia. Hasta el día en que el amigo humano de su hermano se puso en peligro, fue un instinto de protegerlo el que le hizo acompañarlo hasta la aldea vikinga donde los humanos estaban aglomerados. Y, pese a que iba para defender a su hermano de un posible fatídico destino, sus ojos solo se centraron en esa niña con ojos asustadizos, donde la volvió a tomar entre sus garras y se la llevó lejos de ahí, lejos hasta el hogar donde la única humana en la que confiaba vivía.
Draco no volvió a ver a su hermano Chimuelo desde aquel día.
Curiosidades sobre Draco:
⇾ Draco es el nombre que recibió de Valka, cuando ella le acogió y ganó su confianza.
⇾ Pese a que debe mantener lealtades como los demás dragones, al único dragón alfa por el que se interesó fue el Salvajibestia.
⇾ No es cercano con otros dragones que no sean Chimuelo, por lo que básicamente le da igual si están en peligro, si les asesinan o no.
⇾ Su madre fue asesinada cuando Chimuelo tenía un tres años de edad, desde entonces Draco se dedicó a protegerle pese a que en un principio no le importaba.
⇾ Cuando era joven, Draco intentó integrarse con los Espectros de Nieve, pero fue inútil cuando trataron de asesinarlo al no reconocerlo como uno de los suyos.
⇾ Pese a que no soporta ambientes cálidos, tuvo que adaptarse por Chimuelo ya que él no podía sobrevivir en lugares con bajas temperaturas.
⇾ Draco no volvió a acercarse a Chimuelo cuando este comenzó a vivir con Hipo, sabiendo que ahí estaría a salvo.
⇾ El Furia Espectral, Draco, es el principal dragón al que los cazadores buscan para dar caza desde que sucedió la danza sobre el cielo.
⇾ En un principio Draco sería el dragón de Sigrid, pero tras reflexionar un poco, me di cuenta que no era lo que ambos necesitaban.
⇾ Draco tiene un vínculo con Sigrid desde el momento en que la salvó de los otros dragones; pero no es el tipo de vínculo como el que tienen Hipo y Chimuelo o Sigrid y Nymeria. Es diferente.
⇾ Draco en un principio no sería un híbrido, tenía pensado que fuera proveniente de una especie creada por mí; pero me daba tanto miedo la idea de crear mi propio dragón y que no me saliese que, en su lugar, busqué especies parecidas al dragón que quería mostrar.
⸻EL DÍA EN QUE DRACO CONOCIÓ A VALKA
Había algo que inquietaba a los dragones.
Valka pudo sentirlo, al percatarse del súbito silencio en el que se acababan de instalar. El aire era pesado de respirar dentro de la cueva helada y el fuego de los dragones era débil como para combatir con las bajas temperaturas dentro del montículo.
Un poco confundida, la vikinga se incorporó de la roca en la que estaba sentada y se aproximó hasta la lanza recargada en la pared frente a ella. Trató de que sus pisadas no hicieran mucho ruido mientras avanzaba con cuidado y su pecho se infló aliviado al sentir el arma entre sus manos.
—Brincanubes, quédate ahí —murmuró la mayor, haciendo una seña con sus manos al Cortatormentas del otro lado del montículo—. Ustedes también —señaló en dirección a los otros dragones e inspiró profundo antes de dar un paso afuera de la cueva.
Fue recibida por una extensa neblina grisácea que la cegaba de lo que había a su alrededor, el frío viento sacudió su melena rojiza y el silencio fue inquietante. Valka no sabía que le esperaría si daba un paso más hacia el exterior, no tenía miedo, pero tampoco sabía lo que ocurriría. Profirió vaho de su boca a causa de las temperaturas contrastando su cuerpo y ejerció el agarre en la lanza.
—¿Quién está ahí? —preguntó a la nada.
A lo lejos se escucharon las ramas de los árboles estrellarse unas con otras, más vaho escapó de su boca e inhaló profundo. Quizás no había nada y solo eran imaginaciones suyas... Pero nada tenía sentido, los dragones de la cueva seguían sin salir, el frío se hacía cada vez más pesado estando fuera y el silencio era increíblemente sepulcral.
La vikinga estiró la mano con la que sujetaba su lanza y la estiró hasta el piso delante de ella, cubierto en su totalidad por la neblina. Suspiró y golpeó el suelo durante un par de veces. Dos veces. Tres veces. Cuatro... A la quinta la lanza no tocó el suelo, algo le sostenía. Era pesado, pero suave. Valka trató de jalarlo hacia a ella con pesadez, queriendo su lanza de vuelta y de pronto, un gruñido se escuchó.
Un gruñido irreconocible a sus oídos.
—¿Quién está ahí? —Volvió a preguntar, con el corazón latiendo con gran fuerza sobre su pecho—. Ándale, sal de ahí.
El gruñido se intensificó, ninguno de los dragones de la cueva salió y Valka temió que se tratase de uno de esos dragones alfa, más grandes que cualquier otro. Poco a poco, la ojiverde miró como la niebla se comenzó a disipar y alcanzó a distinguir unas garras haciendo presión a la lanza y unos dientes mordisqueando el palo de madera.
Se trataba de un dragón.
¿Acaso era...? ¿Un Furia Nocturna?
La información sobre ese dragón en Berk siempre fue escasa.
La cría maligna del relámpago y la muerte misma.
Pero había algo extraño en ese dragón, pensó Valka. Todo seguía siendo helado y estaba segura que las bajas temperaturas en esos momentos se debían a él.
La neblina descendió, revelando el cuerpo completo del dragón. Estaba sentado sobre el suelo, su cola gris oscura se balanceaba de un lado a otro con enojo y sus ojos la dejaron desconcertada. Tan azules que era imposible apartar la mirada. Valka inclusive retrocedió un poco de la impresión al verlo. No, este dragón, no era un Furia Nocturna. Los Furia no dejaban que los humanos les vieran, eran asesinados antes de eso... ¿Pero existía la mínima posibilidad?
Valka examinó al dragón sin decir ninguna palabra, sus manos se aferraron al palo de la lanza que estaba con ella y en seguida, el dragón desconocido ejerció presión en el agarre con su garra filosa, impidiendo a Valka quitárselo.
—Dame eso —pidió la vikinga, tratando inútilmente de recuperar su lanza para protegerse.
Un gruñido recibió. Y cuando Valka volvió a tratar de recuperar la lanza, otro gruñido se hizo presente.
Un poco más calmada, Valka respiró profundamente y exhaló el aire retenido en sus pulmones. Este dragón no parecía que la atacaría, pero estaba dispuesto en no entregarle su lanza. Tal y como comprobó, la presión de las garras se hizo más presente haciendo a Valka casi desequilibrar por la repentina fuerza. Entrecerró sus ojos y suspiró, sí así quería jugar...
—Hey, dame eso —ordenó Valka, jalando con todas sus fuerzas—. No es un juguete, te vas a lastimar.
Nada. Un gruñido.
—Odín dame fuerzas.
Después de intentar por varios métodos distintos, el dragón solo se burló de ella mordiendo más el palo. Valka vio las marcas de los colmillos sobre su lanza y profirió un suspiro. Al cabo de muchos minutos intentando, el dragón liberó las fuerzas de sus garras permitiendo a la vikinga recuperar su lanza. El dragón no volvió a gruñir, lo que la confundió un poco.
—¿Tienes hambre? ¿A eso has venido? —preguntó—. Puedes quedarte aquí, aún me queda un poco de salmón.
El dragón no respondió, en su lugar se incorporó sorprendiendo a la pelirroja. Su cuerpo era de más altura que ella misma, su cabeza estaba a centímetros encima por la suya y sus ojos estaban fijos en ella. El frío se hizo más presente cuando el dragón se incorporó y el vaho escapó de sus orificios nasales.
Valka no sabía lo que estaba ocurriendo, pero sentía curiosidad por ese dragón. No sabía lo que quería, ni mostraba sus emociones como los dragones con los que vivía. Este era tan diferente, tan extraño y tan atemorizante. Y cuando menos lo pensó, había estirado la mano con intención de acariciarlo; estuvo tan cerca que pudo sentir el frío de sus escamas, pero antes de que sus dedos rozaran su piel áspera, el dragón emitió un gruñido. No como los anteriores, este era parecido al ronroneo de un gato y sin dejar que Valka le tocase, la neblina volvió a cubrir el lugar y el dragón desapareció.
Ese fue el primer día en el que Draco y Valka se conocieron.
⸻NOTA ACLARATORIA
Aún hay mucha información de Draco que falta por saber, pero que omití añadir aquí para evitar los spoilers. Esa información la sabrán en el segundo libro.
Sin embargo, si tienen una pregunta en específico de Draco o la especie de la que proviene, pueden dejarla en comentarios y yo se las responderé con mucho gusto.