Buenas a todos, espero que anden muy bien. Hoy ¡hay otro capítulo más!. Ojalá les guste. Escribí cuatro capítulos mas, porque no me convencía el final que tenía. Ahora le di otro final, y este me gusto mas, ya esta casi todo corregido. Este capítulo es el mas largo, con unas cinco mil palabras, luego los demás se van reduciendo.
Resumen: El grupo de Kazuma logra salvar al pueblo de los magos carmesí. Él y su grupo se queda a dormir con la familia de Megumin. Sin embargo duermen en un cama todo el grupo junto, ahí Darkness comienza a besar a Kazuma. Al otro día vuelven a la mansión.
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Llegamos a la mansión, todos mojados.
Darkness, se comenzó a desvestir. Las chicas se sentían cohibidas por mi presencia.
- No se preocupen chicas, si ya las vi desnudas - dije sonriendo
Se sonrojaron, en parte tenia razón.
Yo, creyente firme en la igualdad de genero comencé a desvestirme, ellas se dirigieron a sus habitaciones. Luego se turnaron para bañarse.
Ya se hacia de noche y estábamos por cenar.
- Propongo un brindis por nuestra excelente misión - dijo Aqua
- Si, brindemos - dijo Darkness
Darkness me sonrió, y brindo mi copa, luego bebió.
Bebí, comimos y fuimos al sofá, a jugar a las cartas.
- Esta vez sin apuestas eh, Kazuma - dijo Aqua
- Tu eres la que quiso jugar a desnudarse. Ademas, te escuche el otro día en el baño
Se le hirvió la cara.
- ¡Callate nini! - grito Aqua
Junto al fuego de la chimenea y la lluvia de fondo, mire a cada una de las chicas con sus pijamas, recordé todo lo que pasamos. Defender Axel. La lucha contra Ornaris. Salvar al pueblo de los magos carmesi. Y mas importante, la primera vez con Darkness.
- Que maravilloso mundo - dije
Las chicas me miraron extrañadas por un momento, pero luego sonrieron.
- Claro que si - dijeron al unísono
Cuando ya se hacia muy de noche fui a acostarme. Escucho alguien abrir la puerta de mi pieza, era Darkness.
- Umm, Kazuma - Darkness me mira desde la puerta - ¿puedo pasar la noche contigo? - pregunto
- Claro que si, ven - respondí abriendo las sabanas
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Esa noche fue especial, Darkness entro a mi cama de dos plazas y se recostó.
Al entrar me dieron ganas de tocar sus senos. Pero me resistí. Ella vio mi rostro y sonrió.
- Solo te dejo a ti que lo hagas - dijo sonriendo
Metí la mano dentro del camisón y sentí su piel suave y caliente. Mi mano subiendo hasta tocar los senos de Darkness. Logre hacerlo y me sobrevino un gran calor, algo se comenzaba a levantar de mi entrepierna. Darkness parecía haberlo notado, estaba sonrojada.
Comenzó a tocar mi entre pierna, y comencé a desvestirme.
Darkness al parecer solo tenia su camisón. Se levanta y se pone arriba mio.
Al terminar nos miramos a los ojos y nos abrazamos.
Nos quedamos en silencio, sin decir nada. Mi corazón late relajadamente.
- Kazuma -
- ¿Que pasa? - pregunto
- Te quiero - dice Darkness
- Yo también - respondo
En ese momento nos quedamos en silencio. Me pongo de espaldas mirando hacia el techo y paso mi brazo sobre la cabeza de Darkness. Ella se acerca a mi pecho y se recuesta ahi. Darkness siente mi respiración, mis latidos rítmicos.
Comienzo a tener sueño. Cierro mis ojos y duermo.
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Al dia siguiente nos despertamos, la luz iluminaba a través de la ventana. Miro a Darkness. Ella al parecer sigue durmiendo. Intento levantarme sin molestarla.
Al hacerlo abre sus ojos.
- Kazuma - dice Darkness. Se levanta, su pelo desarreglado, su cara de sueño, y su pijama arrugado. Al verla me di cuenta de que no solo es linda cuando esta despierta o cuando duerme, sino que es hermosa cuando se acaba de levantar. Pero tenia que molestarla un poco.
- Darkness, estas muy fea - dije seriamente
Darkness se sonrojo, dándole todavía un aire mas de lindura.
- Idiota - dijo desviando su mirada.
Me dio un vuelco al corazón.
- Sos preciosa - dije acercando mi rostro contra ella y dándole un beso. Luego sonreí.
- Ja, ja, ja estas loco - replicó
Luego de esto se levanto. Y se fue hacia su habitación.
Al salir se encuentra de cara con Megumin. Ella la mira sorprendida.
- Hola Megumin - dice Darkness pasando por su costado
Megumin se queda quieta.
- Hola
Darkness sin prestar mayor atención se dirige hacia su habitación a cambiarse.
Kazuma estaba sentado sobre su cama mirando por la ventana.
Megumin se acerco y toco la puerta.
- Pasa - dijo Kazuma. Asumió que era Darkness.
Al abrir la puerta vio a Megumin con su basto y su pijama.
- Kazumaa, preparate para tu muerte!!
- Nooo esperaa - dije
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Estábamos desayunando en el comedor con Megumin y Darkness
- ¿Asi que se quedo en tu habitación? - dice Megumin, tomando te con galletitas - ¿Y fue por decisión propia?
- Exacto
Megumin negó con su cabeza.
- Darkness - dijo Megumin sosteniendo los brazos de Darkness y sacudiendolo - claramente estas en algún tipo de magia, ¡¡vuelve!!
- No estoy en ningún... - decía Darkness siendo sacudida - ningún.. tipo de magia -
Escucho sonar la puerta la mansión.
- Correo - grita alguien.
Mientras Megumin sacudía a Darkness intentando que se "libere" fui a buscar la carta. Al agacharme a recogerla vi que tenia el sello de la familia Dustiness Ford. Decía: Para Dustiness Ford Lalatina. Me acerque devuelta a la mesa.
- Lalatina, para ti - dije volviendo a sentarme
- ¡No me llames asi! - dijo enojada. Luego observo la carta. - ¿Que sera?
Luego de leerla nos dice.
- Es mi padre, nos invita por una fiesta que hará en la mansión
- ¡Perfecto!, una diosa como yo se lo merece - dijo Aqua llegando para desayunar
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Nos cambiamos, estaba preparando mi valija. Pensando en como iba a ser volver a ver al padre de Darkness, el señor Ignis. Se que vengo de otro mundo, y aquí parecieran vivir con las costumbres de hace siglos.
Cargue mi maleta, y lance un bufido.
Escucho la puerta de mi habitación abrirse, era Darkness. Vio mi rostro de decepción.
- ¿Que sucede Kazuma? - pregunto Darkness
- Una pregunta, ¿la nobleza puede tener relaciones antes del matrimonio?
La cara de Darkness se sonrojo al instante.
- Ehh. bueno...esoo - dijo Darkness que se quedo callada por un rato - creo que no se puede je,je - dijo rascándose una mejilla
- Ya me parecía - dijo Kazuma
- Pero a mi no me importa las reglas de la nobleza - dijo Darkness apoyando su mano sobre mi hombro. - si me importara no hubiera sido una aventurera
Cerré mi maleta y nos fuimos.
Nos tomamos un carruaje personal. Directo hacia a mansión Dustiness Ford.
Llegamos al atardecer. Cerca de la entrada nos estaba esperando el señor Dustiness Ford Ignis. Parado firmemente, indemne, se notaba a leguas como toda su vida paso siendo un noble. Vio llegar nuestro carruaje, detrás de él estaba la mayordomo con un traje que daba un aspecto mas formal. En su rostro no se notaba ninguna expresión. Al vernos llegar se acerco y abrió la puerta del carruaje por el cual salieron Darkness y las chicas.
- Señora Lalatina, me alegra verla otra vez - dijo la mayordomo
- Gracias Clarice, es lindo verte otra vez - respondió
Vio como su padre se acercaba con sus brazos extendidos. Ella le devolvió el abrazo.
- Papa - dijo Darkness
- Hija de mi corazón - respondió
El abrazo duro un tiempo.
- Oh y ustedes, su equipo - dijo saludandonos. - Kazuma, querido, ¿como estas? ¿Como te llevas con mi hija?
- Eh... eh... bien - respondí avergonzado.
- Que bien, bueno entremos, no se van a quedar aquí fuera - dijo Ignis señalando hacia la puerta.
Entramos. Nuestra mansión ni se compara con la de la familia Dustiness Ford.
Al entrar al vestíbulo la mayordomo Clarice nos indico hacia donde nos íbamos a hospedar.
- Tienen camas de dos plazas para dos personas, o para una persona - dijo seriamente
- Para una persona - respondí
- Ya veo, que lastima - respondió
- Que lastima, ¿por quee? - dijo Kazuma
- Por aquí estan sus habitaciones - dijo Clarice sin prestar atención - por la noche se hará una fiesta, unas horas antes se les dará ropa adecuada - Clarice miro despectivamente mi ropa de aventurero
¿Por que es asi?
- Me retiro
Me fui a la habitación. Esta vez Darkness no estaba con nosotros, ella esta un piso arriba. Luego de desempacar la ropa Kazuma salio. Fuera de la habitación estaban Megumin y Aqua charlando.
- ¿Vamos afuera?, creo que hasta la noche no tenemos nada que hacer - dijo Kazuma
- Bueno vamos - sonrió Aqua
Estaban en el patio de la residencia. El día era tranquilo, el viento traía esa brisa refrescante que a Kazuma le gustaba tanto. Vio el agua de los estanques y los patos frente a él nadando tranquilamente. Aqua y Megumin se acercaron a ellos, y estos salieron espantados.
- Trae granos de maíz, o arroz y vendrán - dijo Kazuma
- Ya vengo - dijo Megumin entusiasmada.
Me fui a sentar a un banco junto con Aqua. Apoyado con mis brazos sobre el banco, con mi cabeza mirando hacia el cielo. Cerré los ojos por un momento.
- Kazuma... - dijo Aqua
- ¿Que sucede? -
- Dime... ¿hay alguien que te guste? - pregunto Aqua sonrojada
En ese instante pensé en Darkness. Ella me gusta.
- Eh.. sii. hay alguien, ¿por que preguntas?
- ¿Quien es?, ¿es una del grupo? -
- No te voy a decir eso - respondí acongojado
- ¿Es Megumin? -
No dije nada, solo me quede mirando al frente, veía como los patos nadaban con tranquilidad.
- ¿Soy... yo? - pregunto Aqua
No dije nada, seguir mirando a los patos. Aqua me parecía una chica muy linda, pero yo estaba con Darkness y quería estar con ella.
- ¿Es Darkness? -
Cuando la nombro mi corazón comenzó a latir, intente no parecer demasiado obvio, pero no lo logre.
- Es Darkness, ya veo - dijo Aqua - bueno, al menos seguiremos en equipo. Igual quiero hacer esto
Se acerco hacia Kazuma y toco sus brazos. Se poso cerca de él y logro sentir su respiración. Kazuma se había quedado helado por la situación. Aqua cerro sus ojos, Kazuma los mantuvo abiertos y vio como Aqua se acercaba poniendo sus labios para besarlo sobre su mejilla. No hizo nada. El corazón de Kazuma comenzó a latir rápidamente. No lo entendía. Luego de finalizar Aqua se alejo sonrojada.
- Lo siento - dijo Aqua
- No.. no pasa nada - dijo Kazuma sonrojado
En ese momento oyó como Megumin se acercaba corriendo con una bolsa con granos de maíz.
- Aquí esta - dijo Megumin
Kazuma sonrió.
- Ven, mira, lo tienes que lanzar de a poco - dijo.
Al arrojar el maíz vio como una serie de patos se acercaron a comer. Estuvieron dos horas ahi hasta que fueron a merendar.
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En la merienda se encontraron con una mesa llena de comida, dulces, panes, facturas, de todo. También había diferentes tipos de tes, cafés. Comieron hasta que ya estuvieron demasiado llenos.
- Creo que no podre comer por la noche - dijo Kazuma
- Yo tampoco - dijo Megumin tocando su panza
Al rato llego Clarice.
- Señores es hora de bañarse y cambiarse para la fiesta
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Se baño y le dieron un traje negro con una camisa blanca. Al parecer este le quedaba justo, se miro al espejo. El mayordomo que le había pasado las prendas lo miraba impertérrito. Sin decir una palabra. Vaya parece una momia pensó Kazuma. Sin embargo este traje que me dio esta muy bien.
Ya era de noche. Kazuma estaba sentado sobre una silla mirando por la ventana que daba al patio. Este estaba iluminado por antorchas pequeñas que a pesar de dar una visión, esta era muy leve.
Alguien toco la puerta.
- Pase - dijo Kazuma
El que entraba en la habitación era Ignis. Parecía serio al entrar. Kazuma se alarmo al instante, se habrá enterado de lo nuestro con Darkness y viene a matarme. Y me dejo aquí para que no haya testigos. ¡Lo planeo todo!.
- Hola Kazuma - dijo el padre de Darkness
- Hola, ¿sucede algo?
El padre lo miro con cara seria.
- Si sucede algo - dijo sentándose en la cama - ven - indico con un gesto de golpear la cama para que se siente al lado suyo.
Me quiere matar en la cama para que parezca un ataque cardiaco, o un suicidio. Kazuma trago saliva y se acerco.
- ¿Sabes? ¿Mi hija es muy linda no? - dijo el padre sonriendo
- Eh... si.. creo - dijo Kazuma. Obvio que es linda, es perfecta la chica mas linda que conocí
- ¿Y como es muy linda seguro tendrá muchos pretendientes no?
- Si seguramente - respondí
- Bueno, Darkness todavía no se caso, por lo que es imposible que haya tenido relaciones ¿no? - pregunto mirándome a los ojos y poniendo su pesada mano sobre mi hombro
- Cla... -
Otro golpe de la puerta sono. Era la mayordomo Clarice.
- Señor lo necesitan en otro lugar - dijo Clarice llevando de la oreja a el padre de Darkness.
- Espera espera... ya voy - decía el padre de Darkness
Kazuma soltó un soplido. Y luego de cinco minutos volvió a oír otro golpe de puerta.
- Pase - respondí temeroso
- No te preocupes. Venia a avisarte que como no perteneces a la nobleza tienes que intentar no llamar la atención - dijo Clarice
- Ya veo - respondió Kazuma. Cuando Clarice se fue, comencé a pensar. Nunca podre estar con Darkness, somos diferentes clases sociales. Ella pertenece a la nobleza, yo soy un simple plebeyo. Darkness si quisiera podría dejar de hacer misiones, y casarse con algún barón, es lo suficientemente linda para encontrar cualquier joven noble disponible. ¿Quien la rechazaría si es hermosa?. Rubia, ojos celestes, una cara preciosa y un cuerpo seductor.
En esos momentos Kazuma sentía como el pesar se le vino a su cuerpo. Reflexiono que jamás podría vivir con Darkness como novios.
Ya esta, es algo que tenes que olvidar. Por mas que estés enamorado, es alguien imposible para vos.
Estuvo una hora apoyado sobre la cama. No había visto a Darkness en todo el dia.
Otro golpe se oyó en la puerta.
- Pase - dijo Kazuma
- Ya puede salir señor, Aqua y Megumin ya se encuentran en la fiesta. Lalatina también esta - dijo Clarice
- Gracias - respondió Kazuma. Se levanto apesadumbrado, un golpe en su corazón le estaba martillando constantemente.
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Kazuma camino por el pasillo hasta encontrar el salón principal, de donde venia tanto alboroto. Al abrir la puerta noto un mundo de gente, todos nobles. En su mayoría señores, había también algunos jóvenes con aires de altanería y soberbia. Él entre tanta gente noble, se estaba comenzando a enojar. No solo por la reflexión que hizo con respecto a él y Darkness sino por todos estos nobles de pacotilla. Un joven noble chocó hombros apropósito con Kazuma.
- ¿Qué te sucede idiota?. ¿Quieres pelear? - decía el noble tronando sus nudillos. Tenía pelo castaño y era un poco mas alto que Kazuma.
Kazuma lo miro enfurecido. Pero luego recordó el comentario de Clarice: "no sos un noble, pasa desapercibido".
No respondió.
- Ja, no dices nada, será que los nobles de hoy son cada vez mas tontos - respondió.
- Ja, ja - rió su compañero - ya dejalo Michael, vamos a ver a Lalatina - dijo el otro joven. A diferencia de Michael, el otro pesaba mas y tenia pelo rubio.
- Oh tienes razon, Leonardo, vayamos donde este Lalatina, le expresare todo mi amor y así podre casarme con ella - dijo Michael
Bah, idiota, pensó Kazuma al oír sus comentarios. Luego se alejaron de él. Kazuma, sin embargo, los siguió. Observó una vorágine de jóvenes nobles queriendo cortejar a Darkness, ella estaba en el centro hermosamente bella con un vestido blanco, que marcaba parte de su cuerpo, a partir de sus caderas poseía un tul que cubría sus piernas. Su peinado también estaba diferente, tenia una parte de su largo cabello atado en un rodete y otra parte la dejaba caer por su espalda. Su cara parecía congestionada.
Kazuma se acerco un poco e intento escucharla.
- Gracias, gracias pero no puedo aceptarlo - decía Darkness mientras otro chico le ofrecía un anillo
En ese momento vio como Michael y Leonardo se acercaban a Darkness empujando a los demás nobles, para posicionarse cerca de ella.
- Mi querida Lalatina - dijo Michael besando la mano de Darkness
Kazuma comenzó a enojarse. Pero no hizo nada, sabia que si se metía, todos iban a descubrir que a él le gustaba Darkness e iban a averiguar quien demonios era.
- Oh hola, perdón no se quien eres - respondió Darkness
Una risa se mostró dentro de Kazuma. Ja, ja idiota.
La cara de Michael se desencajo por un instante.
- No importa mi querida Lalatina - volvió a repetir Michael.
Con lo que le molesta a Darkness ese nombre pensó Kazuma.
Bah, mejor me voy, no creo que esta noche pueda hablar con Darkness. Me aleje entre la muchedumbre del lugar. Me metí entre nobles e intente escapar de ese lugar. Caminando entre toda la gente logre ver las ventanas sobre los que había un balcón, en el que cabían un par de personas. Por suerte no había nadie así que me dirigí allí.
Se quedo reposando un momento. Este balcón daba hacia la entrada de la mansión. Vio todo el patio exterior, se alzaba con decenas de coches. Con sus cocheros y defensa personal cubriendo los carruaje.
La noche estaba iluminada por una gran luna, el día estaba despejado y no hacia frío. Kazuma respiro un poco de aire limpio. El balcón era de un blanco mármol, duro y frío, tallado con diferentes estilos por debajo. Las balaustres eran onduladas. El alfeizar, sobre el que apoyaba sus brazos, era liso.
Kazuma se apoyo ahí mismo y miro fuera de la mansión. Pensando en que esta iba a ser una noche larga. Aqua y Megumin seguramente estarían por ahi.
- Te estaba buscando - dijo una voz
Kazuma se dio vuelta, era Megumin, llevaba un vestido negro con estilo de flores, todas negras también, no cubría todo su cuerpo, sino hasta sus pantorrillas por lo que Kazuma noto como su vestido se iba expandiendo desde su cadera hasta sus rodillas, le quedaba muy lindo, y en una persona tan chica como Megumin exaltaba mas su menudo cuerpo.
- Ah, hola Megumin - dijo Kazuma. noto que llevaba en su mano un plato blanco donde al parecer había una pata de pollo. En su otra mano tenia una serie de cartas.
- ¿Que es eso? - pregunto Kazuma
- Ah esto, comida - respondió
- No, tonta, lo otro - dijo
- Ah, cartas -
- De quien? -
- Pues de unos chicos - respondió sin prestar atención - toma
Kazuma agarro una sola y la abrió: "Megumin, al verte esta noche con tu vestido negro un vuelco dio en mi corazón que provoco que me alegre 100 veces por verte, en un solo instante, solo conozco tu nombre por hablarte poco, pero esto durara por la eternidad. Me encantaría volver a verte en mis diez mil terrenos, o puedes venir a mi campo donde entreno mis caballos, o a mi lujosa mansión." Con amor Nicola.
Finalizo Kazuma.
- Bah, que aburrido - dijo Megumin - si no hay explosiones no me llamen
Deje la carta cerca suyo, junto con las otras.
Luego mire hacia el salón. Todos nobles yendo de un lado hacia otro. Cada uno llevaba un traje diferente, con diferentes estilos, con diferentes colores. Kazuma sabia que con las deudas que tenia ahora nunca podría comprarse uno asi.
- Megumin, ¿no te das cuenta de las oportunidades que tienes no?
- Eh, de que hablas - dijo Megumin mientras con sus ambas manos comía la pata de pollo. Se limpio su cara con su mano y luego limpio su mano con su vestido negro.
Kazuma la miro decepcionado.
- Nada
Siguió mirando hacia el salón con sus brazos apoyados sobre el barandal. Dentro percibió como unas personas se movian. Aqua estaba entre el medio de muchos varones.
- Por favor Aqua, ven a mis campos - decía un joven
- No ven a los mios, yo te cantare mil poemas
Que ridiculos. Aqua sin embargo les sonreía amablemente y los rechazaba.
- Muchas gracias pero tengo que irme, me esperan - dijo Aqua mientras nos miraba. Yo apoyado sobre el barandal, algo que ningún noble hace y Megumin con sus manos llenas de grasa.
- ¿Ellos? - preguntaron unos nobles
- Si - respondió alegremente Aqua - adiós
Los nobles se alejaron susurrando: "no parecen nobles, como van a tener esas actitudes, voy a enviar una carta a la escuela de nobles para que se enseñe mas estrictamente"
Bah.
Aqua se acerco a nosotros y exhalo una bocanada de aire. Luego se limpio su frente con su brazo como si hubiera safado de todos esos jovenes. Llevaba un vestido blanco que también le sentaba bien a su cuerpo.
- ¿Que hacen ustedes? - pregunto Aqua con sus manos sobre su cadera
- Aqui, estamos aguantando a que finalice esto - dije riendo
- Ya veo - respondió Aqua que se fue a apoyar al barandal junto con nosotros. - creo que hoy no la veremos a Darkness, estaba siendo cortejada por decenas de chicos.
- Si yo la vi, había bastantes haciendo fila - dijo Megumin
Asenti, porque vi ese circulo de varones intentando charlar con Darkness. Es posible que de ahí salga un novio para ella. Maldición, yo creí que íbamos a estar juntos mas tiempo. Pero que ingenuo fui al creer que un plebeyo como yo podría estar con una noble como Darkness. Nunca podremos ser novios. Pero aun asi, quiero estar con ella. Suspire otra vez por la depresión repentina, todo iba bien hasta este dia.
- ¿Que sucede Kazuma? - pregunto Aqua
- Nada
Luego de un momento de estar callados viendo como se desarrollaba la noche. Kazuma sintió como algo malo se aproximaba. En ese momento oyó gritos. Una muchedumbre de nobles comenzó a correr hacia otro lado de donde estaba ellos en el balcon. Se agolparon todos en un rincón del salon.
Kazuma y su grupo oyeron cerca el ruido de un vidrio romperse. A su derecha la puerta de vidrio que daba al patio se rompio. Mejor dicho fue rota, porque luego de un momento oyó unas pisadas fuertes dentro del salon. Lo vio, era un monstruo, un ser violaceo con aspecto humanoide, alto, y unas escamas cercanas a su rostro. Parecía un bípedo humanoide, sus dientes eran como triangulos, como si tuviera lleno de caninos, entro mirando hacia todos lados. El ser violaceo con patas anchas, estaba totalmente desnudo pero no se notaba ningún miembro ni nada. Detrás suyo entraron dos enemigos mas. Parecidos al primero. Kazuma y las chicas se alarmaron al instante. Se dejo de apoyar sobre la baranda y miro la distancia entre ellos y los nobles.
- ¿De donde viene ese poder de luz que tanto me llama la atencion? - pregunto el ser violaceo intentando oler el lugar - esta aqui, en este salón - dijo mirando a todos
Kazuma se estaba preparando para pelear. Pero escucho ruidos de fuera. Miro hacia el patio y no vio ninguna persona, ningún guardia. Oyó ruidos a su izquierda, entre los nobles aparecieron los guardias. Habían entrado por la puerta del otro lado para cubrir a los nobles. Eran mas de diez guardias.
Me alegre porque pensé que no tendría que intervenir.
Los guardias estaban con diferentes tunicas. Algunos eran guerreros, otros magos. Parecían muy bien preparados. Los magos vestían tuntúnicasicas suntuosas, y los guerreros llevaban su armadura de acero. Todos los guardias desenvainaron sus armas. Al parecer eran un mejor equipo que nosotros, pensó Kazuma.
El ser violaceo miro a los guardias y sonrio.
- Encarguense ustedes - dijo a aquellos dos seres que estaban detrás de él. Eran parecido al primero pero solo que eran mas chicos.
- Si mi señor - dijeron
Se acercaron a los diez guardias.
- Deberían irse, solo estamos buscando la fuente de poder de Luz.
Mire a Aqua de reojo que había puesto una cara como de desentendida.
- ¡Es por ti! - dije
- No me grites, ¡no tengo la culpa!
Bueno, en parte tenia razon.
En ese momento la batalla comenzo. El primer guardia guerrero se acerca con su espada desenvainada.
- Te cortare en pedacitos - dijo el guerrero mientras sonreía
El ser comenzó a caminar hacia el guerrero.
El guerrero quiso atacar primero por lo que se acerca corriendo. Oi los pasos del acero titineando sobre el piso. El ser permanecía impavido. En un instante, sin verlo siquiera, el ser había clavado su puño sobre el estomago del guerrero, que no había llegado a blandir su espada, sus ojos se volvieron blancos, y se desmayo, soltando su espada que caía sobre los pies de unos jovenes nobles.
Los demás guardias a pesar de estar atemorizados se adelantaron para pelear. Los dos seres solo seguían sonriendo, ahí parados.
- Vamos vamos, quien sigue - grito uno
Se acercaron los magos, los guerreros iban mas delante. Se posicionaron en modo defensivo. Esta vez no iban a atacar primero ellos, sino los magos detras. Eran cinco magos y cuatro guerreros contra tres seres.
- Ja, esto ya esta ganado, rindanse ahora - dijo el mago principal en el centro
- Ustedes deberían rendirse si no quieren sufrir daños
- Protegeré a mis nobles aun si me cuesta la vida - dijo con un puño sobre su pecho - diferente seria si fueran unos simples plebeyos
Un aplauso estruendoso provino detrás del mago. La mayoría de los nobles a pesar de estar atemorizados aplaudieron.
- Protejenos, nuestras vidas importan mas que las de cualquier plebeyo - grito un joven noble
Idiotas.
- Deberías escapar, mago - dijo el monstruo
- ¡Callate! - grito el mago principal - Firee - arrojo. Los otros magos utilizaron el mismo poder. Una bola de fuego se formo frente a los tres enemigos y los consumio, no se lograba ver ni un rastro de un cuerpo por todo el fuego que habia. Kazuma que estaba cerca sintió el calor de la llama.
- ¡Si!, le dimos - festejo el mago
Mas aplausos de los nobles. Las llamas comenzaban a menguar, y los magos y guerreros creyeron que la batalla había finalizado. Sin embargo los enemigos seguían inhertes. Estaban ahi, parados en el mismo lugar donde recibieron el fuego.
Los nobles se miraron atonitos.
- Bah, hacia un poco de calor - dijo un monstruo
- Bueno ahora nos toca a nosotros - dijeron al unísono ambos monstruos mientras se acercaban lentamente. El enemigo principal sin embargo no intervino en toda la lucha. Se quedo cruzado de brazos.
Los magos y guerreros comenzaron a estar mas atemorizados. Empezaron a retroceder. Un mago choco contra un noble en su retroceso, el noble era Michael.
- Pisaste mi pie, idiota - grito Michael empujando el mago hacia delante
El mago atemorizado por ambos bandos no sabia que hacer. Unos pocos segundos después los dos monstruos con increible velocidad lograron cargarse a todos los guardias. Kazuma no los logro ver. Sucedió todo tan rapido. Cuando volvió a pestañear estaban todos derrotados y tirados sobre el suelo.
- ¿Alguien mas va a querer seguir con esto?
- Estúpidos plebeyos - grito Michael que tomo una espada. Junto con Leonardo y otros nobles se posicionaron para combatir. Kazuma y todo el grupo los observaron.
Hubo nuevos aplausos estrenduosos.
- Claramente, un noble es mucho mas fuerte que un plebeyo - decían los nobles
- Si, la formación de un noble es inigualable - respondió otro
Mas aplausos, sin embargo Kazuma noto algunas caras serias, a Ignis y Darkness entre todos los nobles. Miraban seriamente a los monstruos. Observo que el señor Ignis sostenía fuertemente la mano de Darkness.
Los jovenes nobles se pararon sobre los cuerpos tendidos de los guardias y agarraron sus armas.
- Mi nombre es Michael de la família Gretunberg - dijo Michael apuntando con su espada a los monstruos - les digo mi nombre para que sepan quien los va a derrotar, yo, un noble, no un simple plebeyo - sonrió
Se comenzó a escuchar mas aplausos de los nobles. Darkness ni su padre aplaudian.
- Mi nombre es Leonardo de la la família Lavalleja - dijo sonriendo - prepárense para morir
Los monstruos lo miraron con una sonrisa maliciosa.
- Parece que se quedaron mudos por mi esplendor, ja, ¡ahora mueran! - grito Michael acercándose con su espada hacia los enemigos.
Los monstruos sonriendo solo se quedaron parados, cuando Michael se acerco le dieron un puñetazo en el rostro, este lo empujo hasta los nobles. Cayó desmayado en un instante. Algunos nobles soltaron sus espadas pero los monstruos no fueron misercordiosos y a cualquiera que se haya presentado, se defienda o no, atacaban. A todos los dejaron tirados.
- Ahora si, ¿alguien mas? - dijo el monstruo principal
Se oian gritos y llantos de aquellas personas, algunas se reunieron en torno a los jovenes tirados e intentaron despertarlos, en vano.
Los nobles estaban totalmente temerosos. Algunos intentaron abrir las puertas o salir por las ventanas, pero estas estaban cerradas.
Creo que era hora de intervenir. Mire a Aqua y a Megumin, me devolvieron la mirada y asintieron.
- Megumin, ve a buscar tu bastón - susurre. Ella asintio, limpio sus manos llenas de grasa en su vestido y salto el barandal para dirigirse hacia el patio y de ahí entrar en la residencia y buscar su baston.
Darkness se acerco de entre todos los nobles con cara seria.
- No permitiré que hagas mas daño, monstruo - dijo Darkness con su vestido blanco, impecablemente hermosa. Parecía una reina.
- ¿Tu?, ¿una mujer?, ¿sin armas ni nada?, ¿piensas que nos vas a ganar? - dijo el monstruo
En ese momento me acerque hacia el medio y busque una espada, agarre la cercana a Michael. y "sin querer" pise su mano. Me posicione a la izquierda de Darkness con espada en mano.
- Perdón a todos, pero yo no soy un noble. Y la verdad que defender nobles no me importa, pero son personas, y eso si es importante - dije mirando hacia mis enemigos
Los nobles detrás mio sususrraban: "un plebeyo entre nosotros, que hace aqui, no quiero que un débil plebeyo me defienda, aparte mi vida es mas importante que la de todos".
Comentarios negativos hacia mi.
Mire a Darkness, estaba furiosa viendo fijamente a los enemigos. Tenia su manos apretadas en puños, estaban totalmente blancos, tan apretados que la sangre no fluia.
- Darkness, toma una espada - dije
- No la necesito - respondió sin mirarme. Crujio sus puños. Iba en serio ahora.
En ese momento Aqua se apareció corriendo y se posición al lado de Darkness, a su derecha.
- Y yo soy Aqua, una diosa - dijo sonriendo
Los nobles volvieron a susurrar: "aparte de ser un plebeyo esta loca".
Aqua pareció no prestar atención a los comentarios.
Todos nos posicionamos para combatir. Puse mi espada frente a mi, era pesada, sin embargo era capaz de manejarla con una mano.
- Oh, así que una dama de la nobleza se presenta frente a nosotros - dijo el monstruo principal - deberías irte porque quedaras mal igual que ellos - dijo señalando a los nobles tirados
- Yo me enfrentare a ti - dijo Darkness señalandolo
- ¿A mi? ja, - rió - tendrías que saber que yo no soy igual a ellos dos, mi velocidad y fuerza esta a otro nivel.
- Ataca si puedes - dijo Darkness posicionandose
Los nobles sususrraban: "La señorita Lalatina sabe combatir, es una verguenza, dejo los habitos de una dama".
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