Vegetta corría.
El traje se sentía ligero en su cuerpo y agradecía que la máscara tuviera los lentes de visión nocturna porque si no era muy probable que se estampara contra algo. Era de madrugada y el cielo estaba sumido en una oscuridad aterradora.
Pero él ocupaba correr. Ocupaba despejarse. Ocupaba dejar de pensar en el casi beso. Ocupaba dejar de pensar en él te quiero
-Es que soy tonto...-
Rubius se había ido demasiado rápido, probablemente incómodo con su acercamiento. ¿Cómo se le había ocurrido intentar besarlo? Le estaba contando sobre alguien y ese alguien no era él.
Rubén no estaba enamorado de él. Solo eran amigos.
Se detuvo de golpe mientras pasaba la casa de Willy al ver a su amigo sentado junto a su lago pescando tranquilamente como si no fuera de madrugada. Se quito la máscara y la chaqueta para luego dejarlas junto a una roca a pocos pasos de su amigo. (por lo menos podría intentar disimular un poco)
-Hey...- saludo despacio no queriendo asustarlo
-Hey, lobo nocturno- contesto Willy con una risa, imitando el acento y sin volverlo a ver
- ¿Cómo...?
-Te conozco- le dijo- Y no eres nada sutil. O sé leerte demasiado bien, cualquiera es válida.
Asintió, con el ceño fruncido y decidió sentarse junto a él.
- ¿Qué haces pescando a esta hora?
-Insomnio- respondido encogiéndose de hombros- Y Cristina me dijo que si volvía a patearla por "intentar acomodarme" me iba a dormir al invernadero el resto de la semana-río con humor
Vegetta le sonrió.
-Suenas feliz
-Soy feliz- suspiro enamorado- Ella es la pieza que le faltaba a mi vida.
Vegetta tragó saliva con fuerza. Hacía muchos años esa frase se la decía a él.
- ¿Qué hay de Akira? - pregunto con una sonrisa
-Profundamente enamorada de Nieves-rodó los ojos- La hubieras visto cuando se fue de casa "Eres guapo, pero hay una noruega más guapa esperando por mi"
- ¿Nieves? - Vegetta asintió- ¿Rubius está bien?
-Las molesta todo el rato y creo que les está construyendo una habitación aparte porque dice que no soporta escucharlas besarse todo el tiempo. Pero por lo demás está bien- se encogido de hombros- Pasamos mucho tiempo en la casa del árbol últimamente esperando meteoritos.
Willy sonrió de lado.
-Claro, meteoritos-
- ¿Y ese tonito es por?
-Te conozco- repitió rodando los ojos- Y sé de primera mano como eres cuando te gusta alguien. Y te gusta Rubius. Y a Rubius le gustas tú. Creo que lo sabe todo Karmaland excepto ustedes.
-Eso no es verdad. Somos amigos-
- ¿Yo también fui solo tu amigo entonces? - levantó una ceja. Vegetta se puso rojo y abrió la boca para replicar- Puedes negarlo las veces que quieras, pero tu y yo tuvimos algo. Fuiste mi novio, aunque nunca lo dijéramos oficialmente, lo cual te convierte en mi ex. Así que sé como actúas con tus amigos y sé como actúas con las personas que te gustan porque actuabas similar conmigo, así que puedes mentirte a ti mismo las veces que quieras, pero no puedes mentirme a mí.
- ¿Y si soy tu ex porque somos amigos entonces?
-Es una tontería que los ex no puedan ser amigos. Terminamos en buenos términos, dejamos que el tiempo pasara y poco a poco volvimos a retomar nuestra amistad. Eres mi mejor amigo Vegetta, pero también eres mi ex, una cosa no quita la otra.
Vegetta aparto la mirada de la de Willy y suspiro resignado.
Por supuesto que Willy era su ex. Estuvieron juntos como por cinco años si no es que más. Pero luego cuando fundaron Karmaland, con el trabajo y las responsabilidades su relación amorosa poco a poco se fue apagando.
- ¿Crees que debería decirle algo? - preguntó con la cabeza gacha- Hay mucha gente que no va a estar de acuerdo.
-Creo que tienes derecho a ser feliz ¡Que te importe un carajo lo que diga la gente!
- ¡Esa boca!
-Nadie es 100% heterosexual en el 2020 por favor- rodo los ojos- Y aquí entre nos, todos nos hemos liado con todos, no sería nada raro.
Se miraron a los ojos unos segundos para luego comenzar a reír a carcajadas.
-A veces olvido lo bien que nos llevamos- se limpió una lágrima del ojo- A veces te extraño
-Pues ven a casa y te hago una tarta, o vamos a pescar, o a ponerle bombas a Fargan, que aún tenemos muchas cosas que no hemos hecho-
Se quedaron en silencio con una sonrisa en sus caras.
-Te quería sabes- Le dijo Vegetta- Sé que no todo siempre era perfecto y que a veces teníamos nuestras peleas, pero te quería muchísimo.
-Lo sé- sonrió de lado y lo abrazo con fuerza- Yo también te quería, pero no podemos seguir viviendo en el pasado y te mereces ser feliz y estar enamorado.
- ¿Y si él no me quiere?
-Lo hace.
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Se me ocurrió una idea. Vamos a ver si sale bien.
¿Opiniones?
Mi corazón Wigetta sufrió con esto, pero mi corazón Rubegetta está saltando por mi nueva idea.