Verdades Ocultas

De Sorely_015

2.7K 210 56

¿Qué harías si tuvieras que decir la verdad aún sabiendo que eso destruiría todo a tu alrededor? Pensé tener... Mais

Capítulo 1
Capítulo 2
Capítulo 3
Capítulo 5
Capítulo 6
Capítulo 7
Capítulo 8
Capítulo 9
Capítulo 10
Capítulo 11
Capítulo 12
Capítulo 13
Capítulo 14
Capítulo 15
ANUNCIO

Capítulo 4

153 15 0
De Sorely_015

Miércoles.

Mitad de semana.

Día en el cual se cumple una semana de mi llegada a Merdys.

Las cosas no han cambiado mucho; Bell y yo nos llevamos mejor que nunca, Jerry sigue persiguiéndome con la excusa de cuidarme. Abden intentó acercarse a mí, diciendo que quería ser mi amigo. Llegó al punto de hartarme, dejaba notas en mi asiento, se ofrecía a llevar mis libros e incluso lo descubrí haciendo mis deberes. Decirle que se aleje de mí fue inútil, así que me vi en la obligación de aceptar su amistad.

No es tan malo como creí. Hacemos la tarea juntos, almorzamos con Bell y a veces me acompaña a mi residencia. Algo que me pareció extraño en estos días fue ver cómo algunos alumnos observaban a Abden con curiosidad, pero no solo eso, sino que también parecían algo asustados. Por supuesto, no pregunté el porqué. Sería tonto, ya que las únicas personas que conozco aquí son mi hermano, mi compañera de habitación y el idiota de ojos azules.

Para no pensar tanto en eso, camino por los pasillos vacíos en dirección a la biblioteca. Meter mi cabeza en un libro podría ser una buena distracción. Mi teléfono vibra en mi bolsillo y lo saco para ver de quién se trata: 

De: Sexy Mesero.

Para: Alessa.

¿Dónde estás? Te busqué toda la mañana.

A pesar de haber peleado casi una hora con él, no logré convencerlo de agendar su número con otro nombre. Tecleo una respuesta rápida:

De: Alessa.

Para: Sexy Mesero.

Estoy bien, buenos días a ti también. Estoy buscando algo con lo que pueda distraerme.

Intento guardar mi teléfono, pero cae de mis manos cuando choco con algo. O, mejor dicho, con alguien.

—¡Lo siento, iba distraído! ¿Estás bien?

Analizo un poco al chico que está parado frente a mí: rubio, alto; ojos color miel y mirada profunda. Su rostro tiene algo familiar, pero no logro descifrar de dónde lo conozco.

—Descuida, no fue nada. 

Se agacha a recoger mi pobre aparato, mientras que yo ruego internamente que la pantalla esté intacta.

—De nuevo, lo siento —dice, mientras me lo entrega. Lo guardo sin mirarlo, tengo miedo de que  se vea como una telaraña—. No conozco a nadie aquí, ¿podrías...

—Alessa.

Una tercera voz suena detrás de nosotros. Volteo, y mi ceño se frunce al darme cuenta de que su rostro se ve enfadado.

—¿Pasa algo, Abden? —pregunto.

—Vámonos.

—¿Disculpa?

—Tenemos que terminar un video explicativo sobre la teoría de Freeman Dyson para mañana. ¿Ya lo olvidaste?

—¡Mierda! Ni siquiera recuerdo de qué se trataba.

—Agradece que tienes un amigo inteligente y ya tiene todo estudiado, solo falta terminar el video. Vámonos.

Se da la vuelta, alejándose. Descubrí que hace eso casi siempre; se va sin siquiera mirarte porque sabe que vas a seguirlo. 

Le dedico un simpe "Adiós" al desconocido, para correr detrás de Abden. Odio que haga eso, no me espera para irnos juntos, solo camina y camina sin importarle desde que tan lejos lo sigo. 

Maldito sea Abden Whets y maldito sea su complejo se superioridad. 

                               ***

—Creo que no escuché bien. ¿Podría repetirlo?

El doctor parado frente a mí trata de entender cómo llegué aquí. Mi camiseta tiene sangre embarrada, me falta un zapato, mi cabello es un desorden y estoy segura de que, aunque lo repita mil veces, nadie va a creerme.

—íbamos caminando cuando, de repente, cinco perros salieron de la nada y nos persiguieron —repito.

Podría haber inventado algo mejor, pero los nervios nublaron mis neuronas. Abden sostiene su mano lastimada, a la vez que inclina su cabeza para parar el sangrado de su nariz. Su ojo morado se está inflamando, al igual que su mano. 

Bien, tal vez se me fue un poco la mano, pero todo fue su culpa. Yo solo defendí mi vida. No quería lastimarlo, pero él se lo buscó. Lo peor es que todo comenzó con un simple...

 —¡El negro es mejor que el rosa!

—¡Ya te dije que no podemos hacer todos los efectos en negro! ¡Abden, por Dios, solo déjame usar un color distinto!  

—¡No, no y no!

—De acuerdo, tú quieres que sea negro y yo quiero que sea rosa. ¿Y si lo hacemos en rojo?

Lo piensa por un momento, para luego asentir. 

Terminamos nuestro video con efectos en color negro y rojo. Para celebrar, Abden propone salir a cenar. Mientras nos preparamos, noto que algo se mueve en la pared. Me acerco un poco, dando un grito al darme cuenta que es una cucaracha.

—¡Abden! ¡Abden! ¡Hay una cucaracha en la pared!

—¿Y? —pregunta, mientras mira al insecto con desinterés.

 —¡Mátala! ¡Las cucarachas me dan asco, les tengo fobia! —chillo, corriendo lejos de la pared.

El ojiazul toma a la maldita cucaracha en sus manos. ¡¿Es que acaso no le teme a la muerte?! Abre la ventana, listo para sacarla. Pero, con una sonrisa traviesa, camina hacia mí extendiendo sus manos.

—¿No quieres saludarla?

—¡Sácala! ¡No te acerques a mí con esa cosa en tus manos!

—¡No seas dramática! Mírala, es tan grande como mi dedo meñique. No hará daño, dale un besito.

 —¡¿Qué haces?! ¡Aléjate de mí!

Una mini persecución comienza, Abden me persigue con el bicho en sus manos. Corro por su habitación, arrojándole todo lo que encuentro. Me quedo sin cosas que lanzar, así que un ataque de desesperación me quito el calzado, tirándolo directo a su cara.

Un grito agudo sale de sus labios cuando mi zapatilla impacta en su ojo. Mi corazón se detiene cuando la cucaracha sale volando de su mano. Grito con terror, tratando de meterme bajo la cama; pero Abden tropieza conmigo. 

Caigo al piso, dándome un duro golpe en la frente. El dolor desaparece cuando veo algo que, si me lo hubieran contado, jamás lo hubiera creído: Abden cae contra su escritorio, rompiendo su nariz. Todo su peso recae sobre su mano izquierda, doblándola de forma anormal ; un crujido se escucha a la vez que un grito de dolor puro inunda la habitación.

—¡Carajo! —se queja, observado su mano.—¡Alessa, ayúdame! 

—¿Ya se fue? —interrogo, mirando a todas partes.

—¿Qué?

—La cucaracha. ¿Ya se fue?

—¡¿Cómo puedes preocuparte por eso ahora? ¡Llévame a un puto hospital!

Corro hasta él, ayudándolo a levantarse. La sangre brota de su nariz como si fuera una cascada. Bajando las escaleras, llamo a Jerry para que nos ayude, llegaremos más rápido en su camioneta.

 En mi defensa, hubiera sufrido un infarto si esa cucaracha me tocaba. El doctor pregunta una y otra vez qué fue lo que pasó y yo le repito la ridícula historia que inventé para ocultar mi vergüenza. 

 —Entonces, los perros los persiguieron y su amigo tropezó, cayendo sobre una roca que rompió su nariz, lastimó su ojo y fracturó su mano. ¿Eso es lo que quiere decir?

 —Sí.

—¿Y qué pasó con los perros después de que él se cayera al piso?

—Se fueron.

—¿Solo se fueron? ¿No les hicieron nada?

—Eran perros simpáticos después de todo —sonrió con nerviosismo.

Termina con las preguntas, cosa que agradezco. Examina a Abden, limpiando un poco la sangre en su rostro. Me pide que vaya a la sala de espera, porque necesita hacerle unos puntos. Me voy lo más rápido que puedo. Si veo una aguja clavándose en su nariz, tendré pesadillas de por vida. 

Jerry está sentado junto a una máquina de dulces, esperándome. Le cuento las novedades, sentándome a su lado. La culpabilidad me invade, tal vez se me fue la mano con el golpe en el ojo. 

Suspiro, apoyando mi cabeza en el hombro de mi hermano. Lo único que espero es que no le quede ninguna cicatriz.

Cucaracha: 1

Alessa: 0

Continue lendo

Você também vai gostar

115K 13.2K 33
⚠️ Terminada ⚠️ Y es que nunca pude amar a alguien más con la misma intensidad con la que te ame a ti, te recuerdo día y noche. Jamás olvide nuestros...
8.8K 486 41
[_Hola, soy Gilly, cree esta cuenta para terminar y crear historias de hazbin hotel, La historia que voy a terminar se llama Obsesión de Charlie x Al...
5.3K 244 14
Despues de 8 años volviste a japón para tener una mejor vida y terminar tu preparatoria, Tambien para cumplir la promesa que le hiciste a una niña cu...
Secrets of a Royal Family De Bon

Mistério / Suspense

7.8K 717 13
Charlie sabía que su papá era alguien que solía ocultar muchas cosas de las personas y eso era algo que ella respetaba. Pero jamás pensó que su padre...