Llegando el día de la boda de su hermano.
La noche anterior había decidido quedarse en la mansión Lan para estar con su hermano desde temprano.
Luego de desayunar fue hasta el jinshi, donde su hermano estaba terminando de vestirse.
Se acercó sonriendo mirándolo a los ojos mientras le acomodaba la cinta de su frente, a pesar de que su hermano no era muy expresivo, podía notar el brillo en sus ojos.
-Estás muy feliz con este matrimonio...me alegro que hayas encontrado a la persona perfecta para ti.
-¿Y que hay de ti? ¿La has encontrado?
La pregunta de WangJi lo descolocó bastante, el sabia de su compromiso con Meng Yao, pero debía aceptarlo, eso estaba obligado a terminar, quizás su hermano ya se había dado cuenta. Suspiró apesadumbrado-No te puedo mentir a ti WangJi...recuerdo la única vez que me dijiste que Meng Yao no era el indicado para mi...quizás si te hubiera escuchado en aquella oportunidad...o si hubieras insistido.
-Estás decepcionado de ti mismo, por que sientes que fueron mentiras las cosas que le has dicho a Meng Yao, pero estoy seguro que tu amor por él fue genuino, solo que ya pasó, la llama se apagó, pero no debes culparte mas de lo debido. A veces las personas son solo el camino para nuestro destino.-posó la mano en el hombro de XiChen en un gesto de apoyo.
XiChen aun seguía procesando las palabras de su hermano menor, que estaban llenas verdad, quizas escuchar aquella palabras tambien eran parte del destino, porque todas las ultimas noches sin tener un buen descanso por estar pensando, se volvían inutiles a causa de las palabras de WangJi.
Sintió que se había liberado que aquellas cadenas, pero a la vez solo era un paso de unos cuantos que tenía que dar para al fin ser completamente feliz.
Siguió a su hermano que ya se había adelantado al salón donde estaban las pocas personas invitadas.
Lan Zhan al encontrar su mirada con el hombre que amaba sintió que su cuerpo era atraído por un gran imán ante el cual no quería luchar en su contra, a pesar de las palabras, pensamientos y reproches de las demás personas, el quería ser feliz junto a su hermoso Wei Ying.
XiChen observó como los novios se miraban intensamente mientras caminaban hasta estar frente a la persona que oficiaba la ceremonia.
Su tío que estaba a un lado parecía un que tenía un arcoíris bajo su piel, por que su rostro iba de un color a otro mientras en silencio rechinaba los dientes.
-Tío por favor. Dijiste que aceptabas esto.
-Dije que lo iba a aceptar pero no que lo iba a aplaudir, aun creo que ese muchacho no es conveniente para WangJi.-dijo entre dientes apartando la vista de la pareja.
XiChen entendía un poco el coraje que su tío sentía, no era la primera vez que pasaba por lo mismo. Con sus padres había ocurrido lo mismo. Finalmente el sentía que al oponerse les salvaba de perder el camino que él mismo creía correcto.
Suspiró mirando hacia la columna de sillas donde estaban los invitados de parte de Wei WuXian, en los primeros asientos estaba Jiang Cheng que observaba a la pareja de enamorados con cierta nostalgia. Le dio algo de alivio el no ver la ira que había visto en otras oportunidades. Quizás finalmente había aceptado la relación de su hermano y aceptado que aunque ahora comenzaría su familia con WangJi, no dejarían de ser familia ellos mismos.
La joven pareja dijo con un gran sentimiento sus votos, sus promesas y profesaron su amor sellando todo aquello con el intercambio de anillo y un suave beso.
Terminada aquella ceremonia se dirigieron a otro salón donde habían mesas donde pasarían a comer acompañando a la nueva pareja de casados.
Entre aquel alboroto, XiChen se acercó a felicitar a la nueva pareja.
-Espero que sean muy felices. De ahora en adelante cuida mucho de mi hermano joven Wei.- le sonrió
-Por supuesto XiChen, cuidaré muy bien de Lan Zhan-dijo sujetando el brazo de su esposo dándole una gran sonrisa y mirándole intensamente.
Dejó a la pareja compartiendo con otras personas y se dispuso a buscar a Jiang Cheng. En el salón no lo encontró y comenzó a preocuparse. Salió al jardín donde la luna brillaba como hace mucho no lo hacía en Los recesos de las nubes. Quizás era un buen presagio. Siguió buscando iluminado su camino con la luz de la luna. Hasta que como ultima opción fue hasta el estacionamiento.
Apoyado en su auto, sosteniendo una botella de vino en una de sus manos, Jiang Cheng daba sorbo tras sorbo directo de la botella.
XiChen se acercó apoyándose en el auto junto a él, pero no quería criticarlo, solo hacerle saber que no estaba solo y nunca lo dejaría solo.
-Estoy seguro que tienes cosas mucho mejores que hacer.
-Me gusta estar contigo, aquí, en la fría noche, bajo la luz de la luna, casi como esa noche, pero esta vez no estoy desabrigado.
Jiang Cheng soltó una carcajada para finalmente dirigirle la mirada ofreciéndole la botella de vino con una sonrisa.
XiChen lo observó y luego en la botella haciendo un gesto de negación junto con una sonrisa.
-Esta vez te la dejaré pasar Lan Huan, pero a la próxima debemos beber juntos.
Aquella frase había sido como algo muy casual, pero para XiChen fue realmente cercano e incluso intimo. Dio un suspiro guardándola muy profundamente en su corazón.
Estuvieron bastante tiempo en aquel lugar cruzando una que otra frase.
Jiang Cheng tiró la botella ya vacía a un lado dando un largo suspiro se soltó la corbata abriendo su la parte de arriba de su traje, desabotonando su camisa hasta la mitad de su pecho.
XiChen miraba los movimientos del hombre a su lado, lentamente, como de un sueño se tratara, como si fuera un relámpago el deseo se encendió.
-Maldita sea, no se que ocurre conmigo...-caminó tambaleándose hasta un basurero cercano comenzando a vomitar.
XiChen se acercó sin idea de hacer ademas de colocar su mano sobre la espalda de Jiang Cheng-¿Quieres que te lleve a casa?-dijo suavemente pensando en que no aceptarían su propuesta
Jiang Cheng asintió volviendo a su auto, pero caminando hacia el lado del pasajero. XiChen que lo había seguido hasta estar junto el auto, se quedó de pie recibiendo las llaves que el hombre le había lanzado antes de subir en el asiento del copiloto. Sonrió entendiendo y subiéndose al automóvil rápidamente.
-Entonces te llevaré a tu casa...
-No. No a mi casa. Quiero ir a otro lugar-escribió algo en el gps, para volver a acomodarse en el asiento tapándose la vista con una mano, cerrando sus ojos-No preguntes solo conduce.
XiCheng algo sorprendido aceptó la orden y prontamente llegaron a un edificio bastante exclusivo. Se estacionaron y subieron a un ascensor.
-Este apartamento lo compré hace poco tiempo...cuando quiero pasar tiempo solo vengo aquí.
Se bajaron del ascensor y entraron a una de las dos puertas que habían en el elegante pasillo. El apartamento era de apariencia limpia y bastante sobrio. Lo que mas llamaba la atención era la gran vista que tenía de la ciudad hermosamente iluminada en la noche.
-Voy a...-tapándose la boca corrió hacia una puerta encerrándose.
XiChen se acercó hasta el gran ventanal observando como la ciudad aun seguía con vida
-Me tuve que lavar la boca cinco veces para sacarme el mal sabor...-se acercó a XiChen luego de salir del baño
XiChen lo observó, esta vez estaba aun mas descolocado, la parte de arriba de su saco fue dejado sobre un pequeño mueble y su camisa estaba desabrochada hasta la mitad de su torso. Nuevamente una llama de deseo se encendió en su pecho, pero esta vez fue consumido totalmente.
Jiang Cheng notó un brillo extraño en los ojos de su acompañante, que lo atribuyó a la baja iluminación del apartamento, pero no pudo adivinar el siguiente movimiento, en un pestañeo XiChen se aproximó hasta tomar sus labios, tomándolos suavemente.
Sintió que su corazón palpitaba fuertemente, pero el sabor de los labios de XiChen fueron un licor embriagante de rápido efecto. Correspondió a aquel beso, que comenzó a ser profundizado, sus lenguas tibias recorriendo el espacio inexplorado.
Sus cuerpos se pegaron fuertemente, con la intención de unirlos, sus manos recorrían fuerte y desesperadamente el cuerpo del otro.
XiChen estaba cegado por la pasión, habiendo tenido un momento de reconocer el lugar, empujó a Jiang Chen hacia un sillón cercano, posándose sobre él.
Besando su cuello,lamiendo su pecho, acariciando aquella extraordinaria piel, que había estado deseando tocar hace bastante tiempo.
Observó a Jiang Cheng bajo su toque, ocultando su rostro con el dorso de su mano aún podía escuchar sus gemidos, hasta que llegó a sus pantalones y comenzó a desabrochar lo que estorbaba a aquel bulto que ya se asomaba de manera evidentemente dolorosa.
-AHuan ¡no! no hagas...ah...ahm...-gimió con su respiración acelerada al sentir como era tomado en la boca de XiChen.
XiChen ni siquiera había dudado un segundo antes de tomar la palpitante erección de Jiang Cheng en su boca. Aunque nunca antes había echo algo como eso, sentía que lo necesitaba, que debía hacerlo y su mejor recompensa era las reacciones de WanYin sucumbiendo ante el placer.
-Lan Huan yo...voy a...-a penas podía pronunciar palabra cuando sintió que su semilla explotó dentro de la boca de XiChen. Aquello le hizo sentirse como si hubiera caído desde una gran altura. Miró a XiChen que parecía estar en un estado de shock. Rápidamente se incorporó abrochando sus pantalones, se puso de pie junto a XiChen temblando sin saber que hacer-Yo...yo..lo lamento...yo-estaba temblando seguro que lo unico que pasaba por la mente de XiChen era arrepentimiento. Sin esperar reacción entró a su dormitorio apoyándose en la puerta de manera alterada.
XiChen estaba en un estado de letargo ante la serie de hechos que acababan de ocurrir. Su mente estaba echa un atado de pensamientos. Tratando de recuperar se puso de pie.
-Tengo que arreglar las cosas...-miró la puerta donde Jiang Cheng se había encerrado y salió del apartamento con una gran determinación y una idea que se alzaba sobre las demás tomando la mayor fuerza.