Luis:
"¡Oh sí, así papi, soy tu perra!" -palabras sucias que salían de la boca de la puta desconocida que me estaba cogiendo, ni siquiera sabía su nombre, mucho menos me interesaba, pero esto era lo que debía hacer para mantener mi reputación.
Le metía el guevo con todo y bolas en cada movimiento, ella estaba tan abierta que seguro ni lo sentía, que asco. Me salí rápidamente de ella para poder acabar en su tetas caídas y flácida, demasiado para una quinceañera, parecía haber amamantado cinco muchachos, pero solo era su gordura.
La dejé tirada en la cama y me vestí rápidamente para salir de esa escena que me causaba náuseas.
¿Ya te vas, mi amor? -preguntó mientras sonreía y sólo ahí pude notar la caraota que tenía entre los dientes, eso antes de que se diera vuelta y vomitara el suelo.- Perdona, tengo problemas en la vesícula.
Salí pirao de ahí, maldita gorda de mierda, ojala se ahogue con su vómito.
Comencé a caminar hacia mi casa ya que la bicha esa no me dio pal pasaje y no hay mucha gente que te de la cola para Vellavista 2.
Escuché una notificación en mi iPhone 4 y al abrirla era la notificación de mi nuevo vídeo que subió mi manager, solo ahí me di cuenta de que eran las 3pm.