Después de la noche de Halloween, Draco y Harry habían estado pasando más tiempo juntos. Al parecer Draco no quería perder de vista a Harry, y Harry ya acostumbraba a tenerlo cerca. Pero aparte de eso, a ambos les encantaba pasar tiempo juntos.
Es cierto que después del partido de Quidditch, todos se la pasaban mirando a aquellos cuatro Slytherin's que habían estado animando al equipo rival. Ya que la rivalidad entre Gryffindor y Slytherin no era algo nuevo. Eso hizo que en el Gran Comedor algunos Slytherin's se le quedarán viendo raro, otros hasta con odio.
—¡Solo era un estúpido juego de Quidditch, así que dejen de mirarnos antes de que les arrojé un maleficio!—exclama Pansy derepente. A lo que la mayoría desvío la mirada.
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Harry nunca se imaginó que iba a ser amigo de Draco Malfoy, su segundo peor enemigo. Tampoco se imaginó con las ganas de tenerlo a su lado y de volver a abrazarlo.
—¿Estás bien?—le pregunta Ginny tomándolo de la mano, viéndolo tan pensativo.
—¿Eh? Si, si—Harry, inexplicablemente, se había sentido incómodo ante el contacto de la chica. Pero ignoro ese pensamiento. Lo que no sabía es que esta lo había notado.
Ginny decidió no hacer más preguntas.
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Ahora Draco y Harry se encontraban caminando por los pasillos, después de la clase de Pociones.
—Draco, en serio agradezco tu ayuda, pero Snape me detesta y para eso no hay solución.
—Oye, él...si te odia, pero eso no significa que no puedas mejorar. Sobre todo si me tienes a mí de profesor—dijo con aire de grandeza. Harry río, rodando los ojos.
—Claro, porque con Draco Malfoy como profesor, tienes un diez asegurado, ¿Verdad?—dijo mirándolo, con una sonrisa.
—Exacto. Puedes compararme con Granger y ganaría.
Harry pudo ver a Ginny, la cual andaba con Neville y Luna. Esta al ver a Harry se despidió de sus amigos y se dirigió hacia ellos.
—Hola, Harry—dijo sonriendo, luego se percató de la presencia de Draco—Malfoy—dijo secamente en forma de saludo.
—Comadreja—dijo de la misma forma. Harry lo fulminó con la mirada. Draco rodó los ojos—Chica Weasley.
—¿Qué sucede, Ginny?—pregunta Harry.
—Queria hablar contigo.
—Amm...—dijo volteando a ver a Draco.
—Ya lárgate, estúpido, tú presencia me enferma—dijo sonriendo levemente. Harry también sonrió.
—Esta bien—dijo volviendo a ver a Ginny—adios, Draco—dijo alejándose junto a Ginny.
—Adios—suspiro.
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Ginny se quedó perpleja ante lo que le habían dicho sus dos amigos.
—A ver, a ver, a ver. ¿Tuvieron una cita en el bosque prohibido?—pregunto incrédula. Luna asintió, sonriente.
—Y la verdad es que fue muy divertida—afirmo—Neville es bueno en Herbologia y me enseñó algunas plantas exóticas que habían, eran muy interesantes. Luego alimentamos a algunas criaturas, quise enseñarle a los Thestrals pero no los podía ver, así que empezamos a charlar.
—Ustedes son tan lindos, de una manera tan extraña—dijo sonriendo. Luego Ginny volteó y vio a Harry pasando por allí—hay está Harry, los veo después—dijo alejándose.
—¿A ti te pareció que nuestra cita fue extraña?—pregunto Neville.
—Neville—dijo agarrándole la mano—esa fue la mejor cita que he tenido—dijo mirándolo, sonriendo—¿Y para ti fue extraña?
—Fue la mejor que he tenido—dijo sonriendo también. Entrelazó su mano con la de ella y siguieron caminando.
. . .
—¿Y bien?—pregunta Harry.
—¿Harry tú y yo estamos bien?—Harry se extraño ante la pregunta.
—Pues, deberías decirme eso tú, ¿No? Porque al parecer sigues afectada por lo que pasó con Neville.
—Es que me duele que no confíes en mí, Harry.
—Y lo entiendo, pero ya hablamos de esto y pensé que había quedado en el pasado. Yo confío en ti Ginny, y no quiero que lo nuestro se acabe por un malentendido.
—Si confías en mí, ¿Por qué no hablaste conmigo antes?
—Yo...no lo sé, es que, con lo que está pasando con Draco...
—¿Draco?¿¡Malfoy es más importante que yo?!—exclama incrédula.
—Yo nunca dije eso, Ginny—dijo serio.
—¡Pues parece que si, Harry! Por qué cada vez que quiero hablar contigo, o estás con Malfoy o sacas a Malfoy en el tema. ¡Cinco años llevan odiandose, y ahora qué se vuelven amigos de la noche a la mañana. Parece que te preocupas más por él que por mí!
—¡Eso no es cierto!¡Claro que me preocupo por ti, Ginny, pero Draco es mi amigo también!
—Mira, que por si no lo notaste, Harry Potter, ¡él es Draco Malfoy, yo soy tu novia!
—¿¡Y por eso no me puedo preocupar por él?!—exclama, ya perdiendo la paciencia—mira, Ginevra, no puedo creer que vaya a decir esto, ¡Pero llevo más tiempo conociendolo a él que a tí!
—¡Qué lo conocieras en una maldita tienda de túnicas, no significa que me tengas que hacer a un lado! ¿Ok? Te recuerdo que pasaste más tiempo con nosotros que con él.
Y yo decía que Draco era dramático.
—¡Jamás te hice a un lado, Ginevra!
—Entonces explícame, ¿¡Porque últimamente de lo único que hablas es de él?!
Harry se quedó callado, ni él sabía la razón.
—Yo...no lo sé...
Ginny asintió, y se fue de aquel lugar. Harry se quedó allí, sin saber que pensar.
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—¡Harry!—escucho decir a Hermione, al entrar en su dormitorio—Ginny nos conto lo que paso, o al menos nos dijo que discutieron—dijo abrazándolo.
—Hermano, soy tu amigo a pesar de que ya no estés con mi hermana, admito que al principio me moleste, pero se que puede ser muy irritante, ahora, ¿Qué diablos pasó?—dijo Ron.
Harry les empezó a contar todo lo que pasó.
Ron y Hermione se quedaron callados un momento. Hasta que Hermione decidió hablar.
—Harry, ¿Tú piensas que pasas mucho tiempo con Malfoy?
—No, si es cierto que puede que se vea raro que seamos amigos ahora, pero Ginny está exagerando, sin ofender, Ron—Ron hizo un gesto restándole importancia.
—No importa, la conozco, honestamente no sé cómo puedes soportarla.
—No lo sé, dice que me la pasó hablando de Draco, cuando Hermione tiene que hasta espiarme en la biblioteca—Hermione se ruborizó—no te preocupes, Herms, se que tu intención no era mala, pero tampoco estaba bien.
—Lo hize porque estaba preocupada—dijo rápidamente.
—Lo sé, y créanme, aunque estén preocupados por mí, puedo confiar en Draco.
Ron y Hermione intercambiaron miradas.
—Esta bien, Harry—dijo Hermione.
—Pero que quede claro, no confío idiota y si está planeando algo, yo...
—Relajate, Ron—dijo poniendo una mano reconfortadora en su hombro—haremos el intento de...no sospechar de Malfoy—dijo con una sonrisa. Harry asintió.
—Gracias, chicos. ¿Ron?
—Esta bien—dijo de mala gana—lo intentaré.
. . .
—Es que no lo entiendo, ¡Él no confía en mí!
—Bueno, Ginny, más bien parece que tú no confías en él—le dijo Luna.
—¡Bueno, yo no pensé que me estuviera siendo infiel!
—¿Y te pusiste a pensar desde su perspectiva?
—¿Eh?—dice confundida.
—Si, arreglo la enemistad que tuvo por años, con la que ahora se lleva muy bien, y le estás diciendo que hizo mal—Ginny se quedó callada.
—Es que...siento que me está haciendo a un lado. Hoy pude notar como le incómodo que le tomará de la mano. ¿Qué pasa si...qué pasa si ya no le gusto?
—¿Sabes? Neville me contó que su primer amor fue Hermione.
—¿Qué?¿En serio?
—Si, fue de las primeras personas que lo trato bien y que lo ayudaba, pero que sin embargo, con el tiempo ese amor se fue convirtiendo en una amistad. Luego, me dijo que yo le gustaba.
—Luna, si me estás hablando de ese dicho de «el primer amor no es siempre el indicado» ya he salido con chicos antes de Harry.
—Si, pero, que diga que el primer amor no es siempre el indicado, no confirma que el segundo lo sea.