La palabra "xes" significa algo al revés en inglés, si lo entendéis pues ¡bravo! Xdxdxd.
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Nathalie estaba acostada en la sala viendo la TV y acurrucada entre las sábanas, las cuales su novio había puesto encima de esta. Ella estaba más que cómoda entre esas calientes sábanas, tanto que no presto tanto atención a la película que miraba y su mirada se poso en la chimenea, se iba quedando dormida mientras que el ruido de la TV se iba bajando lentamente, y esta caía en los brazos de Morfeo.
Gabriel estaba boceteando un poco en su recámara, el sabía que su novia estaba abajo en la sala viendo algo que no sea perturbador en su opinión. Cuando termino de bocetear se levantó y se fue al baño donde hizo sus necesidades.
Salió de este y se fue a ver que hacia su novia, aunque este sabía que estaba viendo algo, quería saber si no se había dormido o si se había aburrido de ver sea lo que veía y se había ido a otra parte de la casa.
Al bajar las escaleras se abrazo a si mismo por el frío infernal que hacía por esa parte de la casa, agradecía que le había puesto la chimenea a Nathalie para que no cogiera un resfriado, aunque le gustaría cuidar de ella.
Llegó a la sala y abrió la puerta con cuidado y se encontró a una Nathalie dormida pacíficamente con ella la TV aún encendida. Este se acercó a la azabache y tomó el control remoto para apagar la TV y cuando lo había hecho este poso el control en la mesita de vidrio que tenía al frente del sofá de donde estaba Nathalie.
Este se agacho un poco y le tocó la mejilla con su dedo índice esta solo gimoteo e hizo la cara hacia otro lado para que la dejaran de molestar, el sonrió, se veía nada más que hermosa cuando dormía.
—Nathalie...— dijo este, no es que no la quería cargar, pero quería saber si se le era permitido cargarla, el sabe que ella manda en la relación...¿o no?
—Umm..— gruño esta y frunció su ceño, pero no se levantó.
Este suspiro y le quito las sábanas, revelando que esta solo llevaba una sudadera de él larga la cual llegaba por las rodillas de esta y por lo que noto nada debajo, solo un...short? Enserio? En estas temporadas no se lleva eso, su novia estaba loca, de verdad.
Este la tomó entre sus brazos y ella puso su cabeza en el pecho de este durmiéndose más profundamente, este sonrió, la llevó hasta la habitación de 'ambos' y la recostó ahí, está se estremeció al sentir las sábanas heladas. Este se dio cuenta de eso y por inercia se acostó al lado de ella y la abrazo, ella puso su cabeza en el pecho de este y el la abrazo más fuerte, así ambos debajo de las sábanas se iban calentando poco a poco por el calor corporal que estos irradiaban.
Adrien estaba con Marinette en su casa, estaban haciendo un trabajo, ellos padres de la chica solo dijeron que 'estaba bien, solo no hagan algo inapropiado'. Si tan solo Sabine y Tom conocieran lo que un Agreste puede hacer...
Incluso, los dotes de Adrien se asemejan a los de su padre, por alguna razón son Agreste, sin más las azabaches de estos eran más como sus 'musas' o más como sus 'compañeras de juego' pero en el fondo se sabía que se amaban y que en estas relaciones no se separarían nunca. Según lo esperado.
—¿Jugamos un poco Marinette?— dijo el chico con una sonrisa inocente, si bien su ahora novia no le conocería del todo, diría que estaría diciendo jugar un juego y no en otro sentido, pero le conocía demasiado bien.
—Adrien...sabes lo que dijo mi madre.— dijo frunciendo el ceño, este arqueo una ceja y se acercó a ella, tanto que Marinette se puso roja ante tal acercamiento.
—¿Acaso he dicho que jugaríamos aquí?—
Vaya par de hormonas alborotadas tenían estos dos, ¿pero quien se queja? Son tal cual padre e hijo los dos.
—¿Qué insinúa Agreste?—dijo esta al ver que su chico tenía un plan; del cual esta desconocía.
Este sonrió maliciosamente, solo espera y él no se de cuenta de eso o sí no le tocaría...la charla.
—¡Plagg! ¡Garras fuera!— gritó este y el Kwami negro se adentró al anillo de su portador, vaya que el chico era muy decidido, ni le dejó terminar el queso al pobre plagg, y peor aún, no lo dejo terminar de hablar con Tikki. —¿Lista prrrrrincesa?—
Esta solo estaba atónita, no sabía que hacer ahora mismo, si su madre subía y no la encontraban ahí sería un desastre y sería culpa de su novio. Este la agarro de los muslos y la parte baja de la espalda.
—Adrien ¿que haces?— este sonrió y salió por la ventana con Marinette entre brazos, agradecían que ya era casi de noche y nadie les vería andar de tejado en tejado.
Cuando llegaron a la mansión Agreste, este entró por su ventana, la cual siempre permanece abierta. Se adentró y se destranformo, saliendo un Plagg muy enojado y de encima de Marinette una Tikki un poco desconcertada, vaya que ella desconocía lo que un Agreste podría llegar a hacer.
—Vamos, espero que mi padre no esté, o haya salido a cenar con Nathalie como hace ahora.— Dijo un poco confundidos, la azabache noto algo en esas palabras ¿acaso...?
Se cruzó de brazos, este cerró su puerta con seguro y se acercó a su novia pero paró a mitad al ver que esta levantaba una ceja.
—Oye Adrien...— dijo está viéndolo, este trago en seco.
—Mande.—
—¿Crees que tu padre y Nathalie Sean...pareja?—
Este se puso a pensar, sí, podría ser que solo fueran...pero meh, no lo eran, de eso él estaba segurísimo.
—No, no pueden ser, padre ha dicho que no se enamoraría de nadie.— dijo este sonriendo, la azabache se dio una palmada en la cara y rodó los ojos. A veces su novio podía llegar a ser...un ciego.
—Como tú digas cielo.—
Este sonrió y la atrapó de su cintura besándola apasionadamente mientras esta estaba atónita.
Adrien se separó un poco de los labios de su chica, pero aún así rozaban.
—Hoy tu serás mía, amor.—
Ella se estremeció ante las palabras de su rubio, y pasó los brazos por alrededor de su cuello mientras se volvían a besar. Los dos Kwamis se fueron hacia el cuarto de baño para darles privacidad a sus portadores. Estos habían tomado un rumbo hacia la cama...
No irían a parar, nunca lo harían, sus pieles rozaban, chocaban y sus labios no podían separarse del todo por la necesidad que ambos adolescentes llevaban.
Gabriel estaba despierto y por inercia pasó su mano por la mejilla de su novia, esta se movió un poco apegando su cabeza al pecho de este y agarrando un poco la sudadera de este. Él por inercia se acercó más a ella y se durmió con ella.
Ellos estaban besándose, ella le estaba montando, sus gemidos se escuchaban por toda la casa, vaya allí que se llevarían los adultos si escuchan esos ruidos felices.
Al final y al cabo Gabriel se despertó por esos 'ruidos de felicidad'. Este gruño, no eran los gemidos de Nathalie, ni los suyos menos está claro, ¿de quien serían esos gemidos?
—Umm..— dijo su novia al lado, dándole la espalda a este, bueno, ese si era un pequeño gemido de su novia. Este río un poco ante sus pensamientos. —Gabriel...no toques ahí.— dijo esta aún dormida, este frunció su ceño, ¿que estaba soñando ahora su Nathalie?
Este se acostó al lado de ella jugando con el cabello suelto de su novia esparcido por la almohada. Luego de segundos su novia dejó escapar un gemido ¿acaso...? Podría llegar a pensar que su novia soñaba cosas muy raras.
—Nathalie..— dijo este tocándole la espalda, esta gruño y lentamente se volteó a ver a su novio, con sus ojos entre abiertos; seguir somnolienta.
—Mande..—
—¿Qué soñabas?—
El levantó una ceja y ella se puso como tomate, no le diría que es lo que soñaba, no ni de loca se lo diría.
—Yo...n-nada.— Dino poniéndose más roja, se tapo la cara con las sábanas y este solo río y se metió debajo de las sábanas donde encontró la cara de Nathalie y la tomó entre sus manos para depositarle un beso en esos labios tan adictivos.
—Dime...quiero saber porqué dijiste "Gabriel...no toques ahí"— este sonrió entre el beso y ella dejo de corresponder el beso y solo se quedó atónita.
—No te lo diré jamás.— dijo maliciosa, este se separó de ella y sacó la cara de entre las sábanas, al igual que ella.
—Vamos cariño, quiero saber, sabes que soy muy curioso.—
Otra vez se escucharon esos gemidos, Nathalie esta vez los escucho y frunció su ceño.
—¿Escuchaste eso Gabe?—
—Sí...por eso me levante.— este se quito las sábanas, pero Nathalie le agarro del brazo y lo apego a ella depositándoles un beso en los labios, estos se separó por la falta de aire, ambos se miraron y sonrieron.—Mi querida novia, ¿desearía que descubramos de quiénes son esos gemidos?—
Ella rio por lo bajo.
—Está bien gabrinkins.— dijo riendo porque ese era el apodo que Audrey le tenía, este gruño y frunció su ceño.
—¡No me llames así!— dijo este haciendo puchero, mientras que ella reía. —Con que así vamos eh Nathy...—
Este se separó un poco de ella y se subió encima de esta y le empezó a hacer cosquillas por todo su cuerpo, mientras que esta intentaba quitarlo de encima y quitar las manos de su diseñador de encima de su cuerpo.
—¡Gabriel para ya!—
Este paro y se quito de encima de su novia, así sus pies si entiendo el contacto del suelo helado.
—Veras lo que te vendrá esta noche mi amor.— Dijo este extendiéndole la mano y ella la agarro y se paro quedando muy junta a Gabriel.
—Umm...ayer me quede dormida, no dominé nada...pero créeme que hoy no dominarás tu.—
—Eso estará por verse cari.—
Esta se puso de puntillas y le dio un beso a su diseñador, mientras este pasaba sus manos por alrededor de la cintura de esta.
Este se separó por falta de aire y empezó a besarle el cuello, besando los chupetones que él le dejaba, y haciendo nuevos en su piel, la tenía jadeando.
—Gabriel...para— este hizo por primera vez en su vida, Caso.
—¿Como quieres que me resista si andas nada más con un short debajo de esa sudadera larga?— dijo sin más hacia la azabache la cual enarcó una ceja.
—¿Acaso me levantaste la sudadera para ver si andaba algo puesto debajo o no?—
Este se rasco la nuca.
—pueda...— dijo entre risas, esta rodo los ojos y le dio un beso rápido, se separó y se dirigió al armario de su novio; el cual solo tenía aun las prendas de este.
Saco un buzo, se quito el short y se puso la dicha prenda que sacó. Este solo miraba lo que hacía, enserio que la quería poseer ya mismo.
Otro gemido se escucho.
—Enserio...quien está gimiendo.— Dijo la azabache, mientras se acercaba con los brazos cruzados hacia Gabriel. Este se encogió de hombro, la tomó de la mano y salieron de la recámara.
—Por eso he dicho que averiguaremos.— esta sonrió y apretó un poco la mano de su novio.
Estos siguieron los gemidos y llegaron hacia la puerta de Adrien.
—No...no puede ser.— Dijo Nathalie. ¿Su 'pequeño' haciendo cosas inapropiadas? No, no se lo creía, no aún.
—Enserio...y sin recibir la charla.—
Nathalie solo asintió, vio que Gabriel iba a abrir la puerta pero está le detuvo.
—No Gabriel, seguro está con alguien, a ti no te gustaría que te interrumpan cuando lo estés haciendo, ¿verdad?
Este se quedó pensativo, en si, le gustaría así poder presumir a su novia. Pero a la vez no, porque sabe que Nathalie le daría una cachetada.
—No...Por que no me gustaría que alguien más viera tu cuerpo, porque eso es algo que solo me pertenece a mi y a nadie más.
Esta rio por lo bajo, se separó de su novio y se dirigió hacia la recámara de 'los dos'. Gabriel miró eso y la tomó de la cintura apegándola a la pared, está soltó un jadeo de dolor por la fuerza con la cual la había apegado.
—¿Qué haces Gabriel?—
Este sonrió y empezó a besar es cuello una vez más, tomó las manos de su novia entre las suyas y la supuso a los lados de la cabeza de esta.
—Tomar lo que me pertenece.— dijo mordiendo el labio inferior de su azabache, está sonrió.
—Toma lo que quieras, soy toda tuya.—
—Oh...créeme que te haré muchas cosas Nathalie, es más, creo que tú serás mi cena.—
—Y tú la mía.— dijo con una sonrisa pícara, este soltó las manos de su azabache y la cargó del trasero, esta enrollo sus tonificadas piernas por alrededor de su novio y puso las manos por su alrededor de su cuello mientras se besaban. —Gabriel....aquí no...—
—P...porque.— dijo este besando el lóbulo de la oreja de esta, ella se estremeció y soltó un pequeño gemido después de haber sentido como este estrujaba su trasero y mordía el lóbulo.
—P-porque..ahh...no desearía que Adrien saliera...y nos encontrará aquí así..—
Este paro en seco, eso era verdad, más que nadie debía de ver a su novia desnuda, no, nadie más que él la podía ver así.
—Tienes razón amor, pero también porque no quiero que vea tu cuerpo, esto es solo mío, mío, mío, mío...— Dijo este dejando besos por la cara de la mujer y cuello de esta.
Ella rio.
—Umjum...solo tuyo, eres muy posesivo..— Dijo está riendo un poco más, este río junto con ella y la carga o hasta la recámara de ellos donde se encerraron y empezó el juego de estos dos adultos.
Con Adrien y Marinette el juego ya había acabado, después de haber escuchado lo que su padre y Nathalie decían, este estaba más que sorprendido, así que era Nathalie la que hacía sonreír a su padre y ese cambio repentino en el.
—Te lo dije.— dijo una agitada Marinette, esta estaba recostada en el pecho de su novio, este mientras le daba mimos en la cabeza.
—Vale...soy un ciego, pero espero y me lo digan, no desearía decirle "hey padre y Nathalie, se que ustedes son pareja y que por las noches juegan." No, no me gustaría para nada. —
Ella rio.
—Ok tontito.
Después de eso se vistieron y bajaron a la cocina a prepararse algo de cenar y dejarles a los adultos, si es que de verdad tenían hambre de comida..
Pero estos dos estaba más que sí vertiéndose.
Adrien y su novia estaban en la sala comiendo y viendo películas, agradecían que hasta ahí no se escuchaba nada.
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—Ga-Gabriel...no pares.— dijo una Nathalie muy agitada mientras la cama se movía bruscamente porque Gabriel la estaba embistiendo demasiado rápido y fuerte. Aunque a esta le dolía mucho; quería seguir con el jueguito.
—Nathalie....joder....te amo.—
Nathalie no podía articular palabras en estos momentos. Esta mordía su labio inferior para no soltar un gemido fuerte y que lo escuche Adrien, era lo que menos quería en esos momentos.
Gabriel iba más rápido y fuerte a cada segundo que pasaba, está soltó su labio, agarro las sábanas muy fuertes y soltó un gemido, el cual no quería soltar ya que fue uno muy fuerte por haber llegado al orgasmo. Pero su pareja aún no había llegado al suyo.
—Ahh...gabriel...para un...poco..— este hizo caso omiso, quería correrse dentro de ella, quería que ella sintiera sus fluidos dentro de su cavidad. —Gabriel...p-por favor.—
Esta echaba un par de lágrimas, la estaba lastimando.
Este llegó a su climax y paro con las embestidas, Nathalie dejó escapar otro gemido de placer/dolor en este al sentir los fluidos de su novio bajar por su muslo y por la entrada suya. Gabriel salió despacio de la entrada de su amada y se bajo hacia la parte de ella, lamiendo aquellos fluidos de él y los de su novia revueltos.
—umm...— dijo este cuando lambió todos los fluidos restantes, se acercó a la cara de su azabache y le dio un tierno beso en los labios, del cual fue correspondido. —Lo siento si te lastime querida...pero deberías de saber que cuando lo hago contigo no me puedo controlar.— Musito este algo irónico; pues era verdad, no podía controlarse cuando la estaba haciendo suya.
Esta se limpió las lágrimas y se separó del beso, lo miró a los ojos, esos que tanto la traían enamorada desde hace años. Ambos sonrieron, en una sonrisa cálida y suave para ambos.
Este agarro a Nathalie de las caderas, y la beso suavemente, mientras él movía las manos de arriba abajo por esas pronunciadas curvas que su mujer poseía.
—¿Q-qué intentas hacer...ahora?— dijo este cuando su novio poso la mano por encima de su intimidad, este sonrió en el beso, quito su mano y la volvió a posar encima de la cadera de ella.
—¿Crees que esto ha terminado aquí?— dijo malicioso. Ella solo abrió los ojos y asintió, debería prepararse para lo que este tenía preparado ahora... —Ven...— este hizo que ella se sentara en su pecho, y cuando estaba en su pecho la tomó de las caderas y la fue acercando más a su cara. —Siéntate...cariño.—
—¿en tu... boca?— dijo algo asombrada, si, ya había sentido la lengua de su novio en su intimidad, pero no de esta forma, y se sentía...¿raro?
—Sí, vamos, quiero probarte más.— sonrió pícaramente, ella asintió, lentamente y temblando se sentó en la boca de su novio, quien no dudó nada en lamer y mordisquear esa zona. —umm..— murmuró esté agarrando entre sus dientes el clitoris de esta.
Esta arqueó su espalda y cerró los ojos para sentir todo el placer que este le daba. Se agarro de las manos de su novio; las cuales estaban en sus caderas, poseyéndoles firmemente. Esta estaba gimiendo, mientras que Gabriel llevó una de sus manos hacia el seno de la mujer y lo estrujó, haciendo sobresaltar a Nathalie y jadear.
—Gabriel... — está al menos articulo esa palabra, Gabriel la tenía en el mismísimo infierno o cielo. Este aumento su asalto en la cavidad de la mujer metiendo la lengua en su centro. —M-más...siusplau—
Este separó un poco su lengua y boca. Para así bajar su mano de donde estrujaba el seno y empezó a meter un dedo dentro de su cavidad, está soltó un gemido desgarrador ¿era lo que quería, verdad? Volvió a chupar y lamber aquel clitoris y jugaba con este entre sus dientes, mientras que succionaba también ella intimidad. Al final de todo, Nathalie novia sus caderas de arriba abajo y también su intimidad en la boca de su novio para llegar mas profundo, el cual logro y llegó a su climax, un fuerte climax que dejó exhausta a la mujer. Mientras que Gabriel no quería separarse de esa cavidad y seguía degustando aquellos fluidos que su mujer dejaba escapar.
—S-siusplau...para...— dijo esta entre jadeos, Gabriel no hizo caso y siguió degustando de aquellos líquidos, eso era la obsesión de este y la cena...sí se podía decir de esa manera. —Gabriel...— volvió a decir, y esta vez Gabriel dejó esa intimidad, se relamió los labios y sonrió pícaramente.
Nathalie se puso al lado de este, temblorosa se acercó hacia él. Tenía los labios entre abiertos buscando el aire, cual le faltaba, este sonreía ante el trabajo que le había hecho a su amada.
—¿Vols sopar?— Vaya pregunta mes tonta, està clar que ella volia sopar, però...¿no que aquest era el seu sopar?
Ella levantó una ceja. Gabriel noto ese gesto de su novia, y se abalanzó a besarla, ella se sorprendió al principio no sabía con certeza que eso iría a pasar, pero le correspondió el beso.
—¿No que aquest era el nostre sopar?—
El rio, si lo era, pero empezaba a tener hambre, pero no de ella esta vez. Se separó del beso y la miró a los ojos, ella tenía una mini sonrisa en sus labios, estos dos si que estaban enamorados. Y pensar que el Gabriel Agreste no quería admitir sus sentimientos por esa mujer, él pensaba que solo iría a existir una mujer cuando había alguien más que le amaba y él iría amándola de vuelta. Son...cosas del destino. Nunca se sabe lo que te preparará, pero sabes con certeza que no solo puedes amar a una persona, siempre hay otra persona, no importa si dices que no.
—Era... alhora, ven, que tinc moltes ganes de sopar. I diria jo, que tu també tens moltes ganes de sopar, inclus amb mi! El rei dels Agreste!—
Ella se echó a reír por las locuras e incoherencias que este decía, él se le unió a las risas.
—¡uy sí! ¡Me'n vaig a sopar amb el rei dels Agreste! ¡Sóc molt suertuda de sopar amb el rei dels Agreste! —Va cridar la Nathalie.
Gabriel bufo ante el sarcasmo en la voz de su novia, si bien sabían lo que decían, sabían Catalán, bueno un poco.
—¿podem deixar de parlar en Catalan?—
Nathalie paro de reír y se acercó hacia su hombre.
—Está bien, pero en primera...¿porque empezamos a hablar en Catalán? No sabemos mucho...—
—No se, solo se me vino a la mente que el Catalán es igual al francés, nuestra lengua materna.— dijo estrujando sus hombros, ella mofó.
—Si...ahora, vamos a cenar, tengo mucha hambre.— Dijo remarcando la 'e' en hambre.
—No piensas salir desnuda o sí?— sonrió maliciosamente mientras veía aquella cavidad, este se tapó con las manos y fulminó a Gabriel con la mirada, este sonrió. —Vale, vamos a cambiarnos y a comer...comida.—
—Si, señor.—
Ambos se levantaron de la cama y se vistieron en las mismas prendas. Mientras que estos hacían un par de bromas, seguían hablando en diferentes idiomas, solo por diversión.
Estos habían bajado a cenar, se habían encontrado con Adrien y con Marinette, preguntaron un par de cosas los adultos hacia los adolescentes mientras que Gabriel le dio ahí mismo la charla a su su hijo, y Nathalie le dio la charla a Marinette que según creía era no se la había dado su madre, pero si que se la había dado.
Ambos adolescentes se fueron a la recámara de Adrien, con la condición de que no hicieran nada inapropiado aún. Adrien fue a dejar a Marinette a su casa, mientras que se iría a quedar la noche con ella, no quería escuchar a sus 'padres' jugar y que esos ruidos felices llegaran hasta sus oídos. Si de por si Nathalie le parecía una mujer muy atractiva y muy...seductora, no desearía tener que hacerse algo con su amiguito, cual era solo de Marinette, pero esque para él adolescente pensar en que la 'asistente' de su padre jugará con el...era nada más que una imagen muy erotica para el muchacho.
Mientras tanto con los adultos, estaban acostados en la recámara de Nathalie, ya que la de Gabriel era un solo desastre de tantos juegos que hacían allí. Ambos se quedaron dormidos, abrazados. Se miraban tal cual pareja de enamorados que se conocían desde pequeños.
Tal vez y solo tal vez estos dos llegarían a ser esposo y esposa. Pero sol o el tiempo lo diría, mientras tanto deberían disfrutar de los días de noviazgo, y mientras tanto un Agreste no meta la pata en la relación, todo estaría bien.
Nathalie se acurruco en el pecho de Gabriel, mientras que este posaba su mentón en la cabeza de su mujer, ella sin embargo puso por inercia una pierna en la de Gabriel. Este tenía su mano izquierda por encima de la cintura de Nathalie, y la otra atrás de la espalda de esta. Nathalie por lo tanto tenía su mano diestra debajo del peso de Gabriel y la izquierda en el abdomen de Gabriel.
Por cierto gracia por [300/400] lectures :3.
Espero esto sea de su agrado, lo escribí saliéndome del contexto, ya que lo escribía una hora por día. Pues se me iban los escenarios y las ideas, pero aquí esta[mas o menos].
Por cierto, creo que ya publicaré en el otro libro, solo que sigo sin internet[mas bien ahorita mismo me comparten xD] pero, quería decirles que; en ambos libros me estoy saliendo del contexto, no se si ustedes le encontraran sentido alguno, ya que mi mente en un solo revoltijo. Pero bueno.